jueves, 1 de febrero de 2018

EN DEBATE




"I AM LORD, NOT LORD ... IF LORD"

Revelations and last-minute infidences would expose an attack on the Argentine submarine. Hustle in the Ministry of Defense




By Dany Smith
The tragedy of "ARA San Juan" seems to have entered a new chapter and it seems to venture into the stormy waters of international politics. It was inevitable. The malleable Argentine public opinion also senses that his government was lying to him in what had happened with his submarine and the fate of his 44 naval sailors. How long could one continue to hide a submarine of almost 76 yards? For those of us who know the sea and have been in naval accidents, we know that time is vital for the success of the rescue.
For the Argentine Navy it was a devastating blow but it has also meant a gymnastics of running and hiding, of simulating and pretending that they are not as bad as everyone suspects. This can be a lesson that Buenos Aires can take advantage of and exploit for their benefit and at the same time a very serious problem for London.

Actually there are several "friends" who must give explanations of what happened there in that area other than what the mass media indicate as close to the abyssal zone outside the 200 nautical miles of Argentine sovereignty. For years, the 4th Fleet of the US Navy has operated in the southern seas. Lately the number of nuclear submarines that are prowling the waters of the Argentine maritime coast has grown and some suspect that this is due to the unexpected Russian presence.

With the arrival of the Russian navy, the fears have climbed high in the naval high command of both the Americans and the British who see some degree of threat. Do you fear that the Russian naval explorers will discover something really not confessable? On that road, it seems to go no matter what else.

There seems to have been a clear disinformation campaign from the beginning of the media campaign, which sought to distract the eyes of the government and Argentine citizens. This was noticed almost immediately by the Russians when they arrived in the area and verified that they were looking in the wrong place. The American units and our colleagues from Mount Pleasant did not know it or are amateurs fresh out of the naval school? No, not at all!

Little by little the clues are leading to clarification that has happened and the concerns go from the Foreign Office to the offices of the Ministry of Defense that could have to start making explanations and publish to the Parliament memos classified on the naval activities of the Royal Armed in the South Atlantic on the date on which the incident occurred with the submarine. That, my friends, is really a much more serious problem than justifying what happened that November 15 between 1400 GMT.

For years now there has been a wave among those who criticize the military budget increase and the insane expenses for the Royal Navy especially to expand its endowments in sensitive destinations such as the Persian Gulf and the Falkland Islands in the South Atlantic. The issue of the costs of "1 Billon" British Pound vessels for maintenance of units that are falling apart in operations in warm waters is still an unresolved issue. These investigations have targeted the defense contractors and the Ministry for the large budgets.

In what it does to the situation of the surface and submarine fleet in the waters of the "South Atlantic" be very cloudy. Precisely much darker in moments that the incident was recorded that apparently sources within the Argentine Armada itself recorded accurately and (despite not expecting it) caught one of our own in a situation not only hostile but within Argentine territorial waters . All that masquerade of coming out in relief and rescue ordered by the London government was a way to cover what they had done.

It is also from the cabinet of May to discredit the Russian aid with the oceanographic ship "Yantar" and its equipment "Panther Plus" claiming that it is a "spy ship" that more than being in rescue tasks of the Argentine submarine have purposes to intercept and manipulate the fiber optic lines that pass through the ocean, in this particular case with concern for its facilities in the Falkland Islands, where a powerful NATO communications area is located. With this the concerns of Stuart Peach official of the British Ministry of Defense be a fairy tale for children.

Bad play. Not only because the Argentines once again with their few resources proved to be smarter than our high officials of the Royal Navy and politicians of the Foreign Office but because indiscreet eyes swept from the geostationary satellites the scene and that is recorded in the records not of a ministry, but of the most important of the globe. To think that the government of Theresa May is sure of not having been discovered and exposed to public questioning is absolute nonsense. This is not the twentieth century when the masses were manipulated like sheep to the slaughterhouse. Today a young adolescent of only fourteen years can with a modest domestic computer equipment impersonate the head of the CIA. Taking the subjects of the crown as stupid seems unlikely but less likely to the Argentines.

miércoles, 31 de enero de 2018

DEFENSA Y SEGURIDAD




“POROSIDAD MARITIMA”


La desaparición del submarino ARA San Juan y las revelaciones de documentos clasificados de la Armada dejan en evidencia la indefensión




Por Javier B. Dal
El miércoles 15 de noviembre de 2017 ha pasado a ser una fecha negra para la historia argentina y el comienzo de un largo debate sobre cuál debe ser el papel de las Fuerzas Armadas dentro de las actuales circunstancias internacionales y a que delineamiento geoestratégico de país deben responder. 

La inaceptable desaparición del submarino “ARA San Juan” a la altura de las circunstancias y en vista de varios hechos que no terminan de explicarse, debiera desatar en el gobierno un interés por reestructurar en forma cabal a la Armada.

Más allá de discurrir si el submarino fue atacado por navíos británicos o se hundió por un colapso estructural vinculado a los años de desidia política en el área, lo cierto es que ello ha servido para mostrar hasta donde ha llegado el desarme del sistema de defensa argentino que no puede ni siquiera auxiliar a sus propias unidades. Sin dudas, que algo fallo garrafalmente y no ha sido precisamente el submarino ni su tripulación.

En los países que se toma en serio la seguridad territorial para la custodia de sus intereses y su patrimonio nacional,  hay una variedad de dispositivos que se activan ante una amenaza, tanto al territorio como a cualquiera de sus unidades que se hallan en operaciones dentro de su jurisdicción. Pero en la Argentina desde hace 35 años hasta esta parte, el desguace de las tres armas ha sido metódico, paulatino y lo peor de todo, consentido.  En ese sentido, es tarde para lamentaciones y hoy han costado 44 vidas, pero de seguir con la misma inercia política y de vacilación en el tema de la defensa, al país puede costarle mucho más caro.

Los argumentos que corrientemente suelen escucharse de sectores que poco y nada saben –y menos aún les interesa- sobre las posibilidades de la estructuración de Fuerzas Armadas operativas y eficientes es que no hay dinero para ello. Falso. El país como un ente político dentro del concierto internacional, cuenta con un PBI por el cual se financian varios sectores estratégicos de sus funciones, y la defensa es uno de ellos. Esto es una obligación del estado, si quiere jugar el rol de tal. Pese a ello, no faltan ganas en un sector del actual gobierno, de prácticamente privatizar el área comenzando con las fabricaciones militares y que podría llegar a la implementación incluso, de empresas privadas de seguridad como “Xe” o “Constellis” (entre muchas otras) para que se hagan cargo de la defensa, algo inaceptable desde todo punto de vista.

Pero volviendo a lo que hace a la custodia de los espacios acuáticos y los mares territoriales argentinos, vemos que para emprender una tarea semejante, el país carece de equipo, naves y hombres para cubrir con verdadera efectividad todo lo que ocurre dentro de sus aguas y del espacio aéreo que lo cubre.  Si hacemos un pequeño ejercicio y nos imaginamos por un momento que el submarino “ARA San Juan” al momento de haber sufrido el “incidente” que lo condeno a muerte, de haber habido una planificación de defensa coordinada y de respuesta inmediata ante semejante evento,  no solo habría sido posible ubicar inmediatamente el lugar preciso del siniestro sino también, tomar por sorpresa a los agresores que tratarían de retirarse a aguas internacionales cuanto antes. Pero ¿Qué aviones tiene la Armada para un propósito semejante? O mejor pregúntense ¿Qué habría sucedido si Argentina hubiera tenido una pareja de aviones “MIG-31M” de guardia ante un evento semejante? La cuestión suena a ciencia ficción ¿no? Pues, de haber existido estos recursos operativos, es muy probable que el episodio hubiera tenido una inmediata represalia sobre los intrusos. Es más, si Argentina hubiera tenido esa mínima potencialidad, los británicos lo hubieran pensado dos veces y hubieran dejado pasar pacíficamente al “ARA San Juan”.

Pero incluso si la Armada hubiera estado actualizada con los sistemas de inteligencia electrónica contemporánea complementados con misiles costeros multipropósito  y vigilancia aérea pasiva, no hubiera ni siquiera sido necesario que dos interceptores hubieran tenido que salir al encuentro de buques agresores. Ni hablemos si contara con aviones de exploración e inteligencia electrónica avanzada. Obviamente hablamos de modernos aviones de guerra electrónica tipo “AWACS”  para tareas navales que obviamente superen a los dos viejos “P-38 Orión” entregados en 1997; incluso con una pareja de “EA-18G” de fabricación norteamericana hubiera sido suficiente para disuadir una amenaza naval.

Pero hay otras opciones. La sola operatividad de un avión ruso “II-60” de guerra electrónica que barriera la costa patagónica hasta desde Bahía Blanca hasta el cabo de Hornos habría bastado para alertar movimientos irregulares de cualquier barco sospechoso como los movimientos de la flota británica y chilena que merodean a gusto por los mares argentinos, aunque ello cabe señalarlo, representa una decisión política que éste gobierno no estaría en posición de tomar.
BASTION K300-P 

Un sistema en red de defensa costera como el que ofrece el sistema ruso “Bastion K300P”, es una muy buena opción para vigilar y prevenir incursiones navales tanto de superficie como sumergidas que actualmente se prueba con éxito en algunos escenarios bélicos reales (Armadni Noviny. http://www.armadninoviny.cz/syrie-uvedla-do-provozu-dve-baterie-protilodniho-systemu-bastion.html )

Otra opción  muy eficaz y accesible a los costos operativos, es una flota de Drones para observación y guerra electrónica, como parte de una guardia pasiva de los mares argentinos que incluso podrían ser operados desde unidades navales con helipuerto o artefactos navales adaptados a dichos propósitos.  En este sentido,  la variedad de modelos existentes para tales propósitos es extensa pero, sería estratégicamente recomendable que los aparatos de transporte fuesen de ingeniería nacional y los equipos de guerra electrónica ajenos a la tecnología de la OTAN ya que (y no es necesario decirlo), la misma opera en las islas Malvinas.  

La operatividad de Drones  marinos clase “Sea Hunter” podría ser una de esas opciones pero no para la Argentina.

Lo que Argentina no puede seguir postergando y menos aún a la vista de lo ocurrido, es la adquisición de material naval óptimo y de alta tecnología que haga presencia en el extenso litoral marítimo incluyendo sus aguas insulares. Recuperar una capacidad naval movible y disuasoria no solo es posible sino que se hace evidentemente necesaria  ante los hechos consumados (Pensamiento Estratégico y Político. “Alternativas para mejorar la defensa naval”. https://pensamientoestraegico.blogspot.com.ar/2016/01/defensa-y-seguridad-alternativas-para.html )

sábado, 27 de enero de 2018

EN DEBATE.



“UNA FLOJA IMPRESIÓN”

Claroscuros de la visita de Mauricio Macri a Rusia y las posibilidades que pueden dar un giro notable en la política exterior argentina




Por Charles H. Slim
Había llegado la noche anterior a la llegada del avión presidencial argentino a Moscú y tras acomodarme en mi habitación del hotel me prepare para tomar todas las impresiones que se presentaran con la llegada de Mauricio Macri y toda su comitiva presidencial. Había en el ambiente una buena expectativa. Los rusos aprecian con sinceridad a los argentinos, hay una especie de admiración por ese carácter tan voluble y encendido que nos caracteriza. Pero en lo que hace a la política, esas características no sientan y no se ven muy bien al momento de tomar decisiones de estado y mucho menos en lo que hace a la geopolítica.

Macri representaba una chance de tratar con algo nuevo en el país, una nueva visión política que pueda allanar una fluidez en las relaciones bilaterales que durante décadas se vieron condicionadas por el Departamento de Estado norteamericano y Londres. Muchos en Argentina siguen viendo a Rusia como un país comunista, algo que es una total falacia que surge por una clara ignorancia producto de la típica abulia y dejadez de una parte de la población, que  en vez de molestarse por indagar de qué se tratan las cosas, se cree lo que los grandes medios (Clarín; Nación; Radio Mitre etc) les venden.  Por otra parte, muchos de lo que así opinan, lo hacen adrede a sabiendas de que ello es falso ya que están inspirados por sus filiaciones o simplemente convicciones políticas que se basan en la ciega admiración al unilateralismo estadounidense.

Otros detestan a Vladimir Putin, porque ha sido el freno inesperado a lo que se había plantado en Siria y que a su vez, ha interrumpido en forma permanente y decidida, los planes para que ese odioso eje de la resistencia árabe-islámica que conforman precisamente Siria e Irán (y que el sionismo falsamente llama terrorista) y del cual Venezuela ha pasado a ser un miembro latino, sea finalmente aniquilado.  Dentro de esta franja se puede intuir que están los sectores sionistas argentinos, muy presentes dentro de los medios nacionales y que se han visto repotenciados con el ascenso del presidente Macri.

Y por último, están esos que ayer habían dicho una cosa y luego se dieron vuelta para decir otra. Estos personajes vienen desde épocas remotas y que en plena dictadura militar, no tuvieron ningún problema para desempeñar sus labores en los medios. Son esos que en la década de los noventas se habían apegado lealmente al neoliberalismo político y económico de la era menemista, luego a principios del dos mil  se hicieron los populistas “pro-setentistas” con el gobierno de los Kirchner y hoy desde los medios de comunicación (donde laboran algunos de estos especímenes) se disfrazan de moralistas políticos vociferando con estridencia argumentos socialistas demodé que en realidad esconden sus verdaderas intensiones.

La pretendida aspiración a ser o más bien de mostrarse como un referente regional, llevó a Macri a hacer comentarios inconducentes y claramente fuera de lugar, tal como el señalar que en Venezuela no hay democracia y hacer señalamientos indebidos que se parecen más a los que surgen del Departamento de Estado Norteamericano que los que el mismo presidente pudo haber pergeñado. Fue por ello que cuando realizo tales comentarios, no encontró reacción alguna en Putin, que sabe muy bien cómo manejar los tiempos de una conversación y el lenguaje gestual.

Pero estas niñedades no son de la importancia ni menos aún de una mínima atención por parte del Kremlin, menos aún para el presidente Vladimir Putin quién como estadista,  lidia con problemas realmente importantes.  Es por ello, que en lo que respectaba  a la visita del mandatario argentino, más allá de su ideología o de sus orientaciones pro-estadounidenses, Putin esperaba encontrar un sujeto político pragmático y realista que volviera a ilusionar a Rusia, luego del soporífero y desilusionante gobierno de humo de Cristina Fernández que se presentaba como una alternativa multilateral más dentro de la región.

Y sobre éste último comentario, no podemos dejar pasar las oportunidades que tuvo el gobierno de  dicha mandataria, para concretar una relación bilateral mucho más osada y ligada a objetivos geoestratégicos comunes y determinante que Argentina viene postergando desde el final de la guerra de 1982. Pese a la oportunidad de pasar a la historia y realizar una verdadera revolución en la política exterior como lo hizo el presidente venezolano Hugo César Chávez, a “Cristina” simplemente le falto valor o tal vez, la sustancia política suficiente para pararse al lado de Rusia.  En resumen, el gobierno de Fernández y su partido FPV eran un simple petardo y para peor, con pólvora mojada.

He ahí una de las claras señales de la falacia política de ese gobierno, que se pintaba como independiente, de izquierdas y revolucionario y termino haciendo todo lo que los poderes centrales, en especial Londres, le pedían que tenía que hacer. Fueron un claro embuste político y ello era bien sabido por Putin, al menos así lo pudo advertir cuando a pesar de que le ofreció la posibilidad de adquirir material bélico de importancia para reequipar sus maltrechas fuerzas armadas, Buenos Aires lo rechazo, no porque tuvieran aspiraciones pacifistas –lo que de por sí, es un terrible estupidez- o blandieran las banderas de los derechos humanos que les impidiera moralmente un rearme, sino más bien para ajustarse a lo que autorizaría el Foreign Office británico.
Familiares del submarino con la bandera rusa

Pero Putin también sabe que su visitante se encuentra bajo los mismos condicionamientos aunque, también da la chance de que éste pueda saber maniobrar con ese problema y tal vez pueda llegar a saber resolver dichos inconvenientes, allí donde sus predecesores no supieron o no se atrevieron hacerlo. El incidente del submarino “ARA San Juan” ha sido una muestra real de la buena voluntad rusa por asistir a la Argentina para obtener resultados positivos en el hallazgo de la nave y sus tripulantes, algo que parte de los familiares han agradecido públicamente.

Argentina puede ofrecer mucho a Rusia y a la región euroasiática y viceversa. Rusia puede darle a la Argentina varias soluciones a los serios problemas de infraestructura del país en especial, a lo referente a la defensa y el reequipamiento de sistemas de armas poniendo al país a la altura de las necesidades actuales y salir de ese modo, del circulo vicioso de los condicionamientos externos (Londres) que bregan desde 1982 por mantener el actual Status Quo de completa indefensión, maquillada con la adquisición de algún que otro cargamento de chatarra que solo sirve para decorar.


Hay una complementariedad entre ambos países que los “neocon” nacionales quieren de todas formas obviar y que los medios actuales comulgan en tapar. Igualmente, aunque solo haya sido una visita protocolar, el gesto ha sido bastante importante y vemos en esto, una movida inteligente del presidente argentino que ya ha caído duramente en cuentas que los que él creía como los “aliados” naturales de la Argentina, no están dispuestos a dar nada sin –y como ha sido su larga costumbre- recibir todo lo que ellos quieran. 

viernes, 26 de enero de 2018


VETERANOS DE AYER




“LA BATALLA DE AMERIA”

La historia de un veterano iraquí tras la invasión de 2003 contada en primera persona




Por Horace Husseini
Cuando los americanos y los británicos cayeron sobre Iraq en marzo del 2003, el soldado Ali Kadra H. tenía solo 22 años de edad y se había criado bajo el cruento embargo anglo estadounidense que había matado a varios de sus pequeños hermanos, primos y vecinos. “Cualquier cosa antes que permitir que los enemigos invadan el país” era su lema, cuando pequeño jugaba a la guerra con sus amigos en las polvorientas calles de su barrio. Un año antes de que la guerra volviera a asomar por el horizonte, había ingresado al ejército como voluntario y a pesar del dolor de su madre y de sus hermanas, Ali dejo su natal Naserillah para ir a Bagdad.

Tras ingresar al ejército demostró tener una excelente puntería y muy buen pulso para usar el lanza cohetes autopropulsado incluso contra blancos móviles. Con una muy buena conducta y con esas capacidades innatas, sus jefes lo destinaron al 2º Regimiento de Combate de la Guardia Republicana y unos meses más tarde terminaría sirviendo para las Fuerzas Especiales “Al Saiqa”, todo un logro que no era para muchos.  

Cuando los angloestadounidenses lanzaron el 20 de marzo de 2002 su llamada “Operación Libertad Iraquí”, fue movilizado junto a una pequeña unidad de su comando a la zona del Aeropuerto de Bagdad donde debían establecer varios puntos de referencia y colocar minas y trampas explosivas en la carretera de ingreso y accesos secundarios. El aeropuerto era un punto estratégico controlar la ciudad. Sabían muy bien que los agresores necesitaban un acceso en condiciones para ingresar y para salir en caso de que el sector cayera en sus manos, por lo cual había que dejar plantadas muchas sorpresas que quedarían activas si debían retroceder. “Cuando llegamos el ánimo de la tropa regular era muy optimista y las posiciones defensivas se veían muy solidas para resistir una embestida de blindados”, comenta Ali mientras enciende un cigarrillo.

Tras dar una profunda pitada y lanzar una espesa bocanada de humo y un sorbo de café, nos comenta la llegada de las primeras bombas enemigas diciendo: “Recuerdo que estábamos a punto de subirnos a nuestra pick up artillada para volver a nuestra posición inicial en el distrito de Amiriyah, cuando escuchamos el primer estampido sobre nuestros pies y luego vimos como se iluminó a nuestras espaldas el cielo a la altura del centro de la capital…fue una inyección de adrenalina y una mezcla de emociones que no se pueden explicar”, comento enfervorizado. “En ese momento habíamos terminado de minar el cruce de la ruta 1 y 92 en “Abu Graib” así que cuanto vimos lo que sucedía nuestro comandante el capitán Sajid, ordenó subirnos al vehículo y marcha rápida al aeropuerto. Moviéndonos con miras de noche (NigthScope) y sin luces para evitar ser el blanco de alguna bomba inteligente, comenzamos a escuchar entre medio del fuego de los cañones antiaéreos el sonido de los aviones enemigos que volaban muy alto pero podías escuchar el zumbido de sus turbinas”.

Los estadounidenses tardarían unos diez días en cruzar el desierto por donde creían que no encontrarían obstáculos, algo de lo cual se equivocaron garrafalmente.  Las vicisitudes a las que se vieron inmersos fueron de toda índole nos comenta Ali. No solo hubo resistencia de las tropas regulares y de los comités del Fedayín de Saddam sino también de las tribus nómadas que salieron al cruce de los invasores.  Pero también hubo claros oscuros en la entrada de los invasores, nos comenta con rabia Ali. “Cuando llegaron los primeros reportes de inteligencia a mediados de finales de marzo que nos decía que los americanos estaban en las orillas de Bagdad, no podía creerlo, pero si nuestro comandante quien además de ser un hombre valeroso, era muy inteligente y tenía mucha experiencia en esas cosas de la política”.

Cuando algunos de nosotros nos dijimos ¿Cómo pudieron pasar varios cercos que estaban a cargo de la Guardia Republicana? Aquel viejo guerrero que había peleado en 1991 y que tenía contactos con el Partido Baath nos miró y nos dijo con esos ojos fulminantes…los dejaron pasar, eso es lo que ha sucedido!” Esas palabras calaron hondo en Ali y sus compañeros quienes encontraron mayor inspiración para luchar y de ser necesario, hasta morir antes de entregarse a los invasores y a esos traidores que habían sido comprados por la CIA como una forma de aliviar el ingreso de las tropas.

“No sé cuántos de esos perros nos traicionaron, traicionaron al pueblo y a Iraq, pero los que vi y estuvieron conmigo en Ameria lucharon como leones”, señalaba con énfasis mientras señalaba con su mano hacia el Tigris.  Según él, habían pasado el aeropuerto en la noche del 2 de abril cuando los norteamericanos lanzaron un feroz bombardeo en toda el área e incluso nos aseguró que una de las bombas usadas había sido algún tipo de ojiva táctica de carácter nuclear que tras detonar por encima del complejo aeroportuario, creo una especie de relámpago que luego se transformo en un hongo gigante que sacudió el pavimento de las calles en donde nos hallábamos apostados. “Las tripas se me sacudieron y parecía que se te iban a salir”, comentó.  
“Sostuvimos la posición cuanto pudimos”, comenta Ali, mientras me mostraba unas fotografías en las que podía verse unos tanques norteamericanos incinerados en las callejuelas del barrio de Ameria.

“Para el 4 de abril en momentos que estábamos patrullando al sureste de Ameria chocamos con las primeras tropas norteamericanas que venían por la autopista que venía desde el aeropuerto al centro. Las unidades eran parte de la III División de Infantería de marina con unos trescientos marines que venía montados en sus carros anfibios con algunos tanques Abrahams y Bradley en su columna. Una de las trampas explosivas que habían colocado los zapadores bajo una plancha de concreto de la carretera detono al paso de uno de esos BMP arrojándolo fuera de la carretera y matando casi en el acto a unos quince marines. Comenzamos a abrir fuego y a tirarles con todo lo que teníamos. Vimos la desesperación de los americanos que no sabían para donde correr y solo pudieron reponerse y abrirse camino cuando en unos minutos llegaron sus helicópteros artillados que barrieron con todo lo que vieron, entre ellos a muchos civiles que estaban en sus casas”.

Según continuo comentando Ali, los estadounidenses trataron de rodear el aeropuerto pasando por el barrio de Ameria, donde se hallaban unos cuarenta vehículos artillados, setecientos hombres del ejército y varios grupos de combate del Fedayín de Saddam. “Nosotros –comenta Ali- éramos diez y nuestra unidad de comando se encontraba en el Aeropuerto. Como teníamos libertad de movimiento pudimos realizar varias maniobras contra los tanques que intentaron pasar por las calles. Las minas lapa fueron útiles y logramos aniquilar un blindado que bloqueo una calle impidiendo el paso a la columna que lo seguía. Los RPG-7 funcionaron muy bien contra los transportes de tropas y sus `Hummer` pero eran inútiles contra los “Abrahams”. No teníamos tanques allí, pero si muchos morteros y ametralladoras pesadas con los cuales golpeamos duro a los americanos y se lo hicimos sentir”.  


Tras rechazar varios intentos de colarse por el barrio y dejar varios muertos y heridos entre los enemigos, los aviones artillados A-10 lanzaron una lluvia sobre nosotros y tuvimos muchas bajas. Solo pudimos soportar unas horas y cuando anocheció los que quedábamos, muerto nuestro comandante fuimos liberados a nuestra suerte y quienes pudimos retirarnos lo primero que hicimos fue sacarnos los uniformes y todo tipo de insignias. Desde ese día, la lucha contra los invasores paso a la clandestinidad bajo una resistencia celular y los únicos chalecos para protegernos fueron nuestros pechos”, recordó. Ali formo parte de varios grupos de la resistencia y cuando algunos transaron con el gobierno que colaboraba con los invasores decidió unirse a una de las unidades especiales del “Ejército Al Mahdi” y recién tras la retirada de los estadounidenses y tras haberse casado y con tres hijos volvió a Naserillah para reencontrar a lo que le quedaba de su familia.