sábado, 11 de marzo de 2023

 

OBSERVING

THE EPILOGUE

The situation on the Artemivsk front is really critical for Kiev but the Western media are lying through their teeth. Are they watching another film?

By Sidney Hey

What used to be a country road leading out of Artemivsk is now a field ploughed by Russian artillery shelling, with the half-buried remains of trucks, shattered armoured vehicles and many bodies of foreign mercenaries and Ukrainian soldiers trying to leave the last remaining squares of the city. It is a crucial moment in this war and the pro-NATO regime in Kiev knows it. But President Vladimir Putin himself knows it too, and although he does not show off in the media like the Ukrainian comedian, he is very much aware of what is going on.

According to unauthorised sources, Vladimir Putin is said to have made a secret trip to Donetsk where he learned first-hand about the course of military action around Artemivsk, leaving a strong impression of confidence among military commanders, PMC Wagner and Chechens. Moreover, he has taken further measures for Russia's internal security by issuing directives to the FSB and the SVR to redouble efforts against incursions by Western-backed attack cells.

There was no need for some media to disseminate an Israeli Mossad report showing the military catastrophe of the fundamentalist regime in Kiev. Other sources agree with these figures. The material magnitude of this situation represents the loss of two armies today. Just to say that a report of the Ukrainian Ministry of Defence itself as of March 2023 states that almost 3500 combat tanks and more than 6700 armoured vehicles have been lost is evidence of a disaster that is impossible to conceal.

But these numbers are also revealing a gigantic arms deal, for both sides but particularly for the West. The entire plutocratic emporium of bankers, politicians and arms corporations that interlock at NATO level is lobbying the Biden administration to keep the war going. The flow of money not only finances arms, equipment and hires mercenaries, it also pays for the great machine of lies and propaganda represented by the corporate media that in the last few hours has been trying to cover Washington's tracks in the sabotage of the Nord Stream pipelines by telling a hilarious hypothesis that obviously tries to take the responsibility for this attack away from it.

But there is bad news for them as even their allies are not swallowing the pill. The need to invent a supposed group of pro-Ukrainian activists as the ones responsible for the pipeline attack reveals the desperate attempt to get rid of the responsibility that is causing the energy shortages across Europe and the economic advantage that it very conveniently brings to US LNG companies to supply their liquefied gas at seven times the price.

That is why the battles taking place in Artemivsk are of crucial importance to the outcome of this war. Against the advice of his military commanders, Zelensky insists on continuing to send troops into the city even though this represents senseless carnage. For it is not the Ukrainian generals, let alone the Hollywood clown, who control field decisions and policy.

It has become clear that Zelensky is just Washington's sounding board and has no scruples about sacrificing a whole generation of Ukrainians to enshrine the plans of the Americans, but in particular NATO. It is not the Russians who are fleeing in masse from the levy as the Western media have been screaming from the rooftops of their repeaters. Ukrainian men who cannot flee because of the regime's tight police control of the streets of Kiev and the main cities to the west are in hiding.

Another point that is being devastated by Russia is the supply centres and weapons depots they receive from abroad. In addition to the loss of imported war materiel, there is the destruction of facilities, vehicles and, of course, the shock to the population. Added to this, the captures on the battlefield of intact stockpiles of NATO anti-tank and anti-aircraft missiles, plus the collections of portable weapons (AK-47; AK-74; AK-103; SA80; FAMAS and the list goes on) that Russian infantry and special groups find daily and in bulk in captured trenches reveal a multi-million dollar investment that would be very difficult to calculate accurately. This makes you wonder who is fuelling the war?

Zelensky has repeatedly rejected talks with Moscow in the belief that he could turn the situation around. But let us not forget that this is not of his own making. Those pushing him are sitting in the State Department and the Pentagon demonstrating that they don't give a damn about the lives of Ukrainians and also, why not, about CIA reports on the real situation. Far from the Western media farce about Putin's failure, the evidence is quite the reverse, to the extent that Zelensky's hysteria and desperation was so evident when (emulating the Israeli Zionists) he declared that it will be the sons and daughters of the USA who will have to die for Ukraine.

There is no better way to describe what is now happening on the front line than the title of this article and it is Vladimir Putin who, with his field binoculars and wearing a uniform that really suits him for his extended experience, watches as the intricate lines of Ukrainian trenches, awash with melting snow and sticky mud, crumble and crumble, as demoralising as the Russian enemy.

 

 

viernes, 10 de marzo de 2023

 

“AFICIÓN POLÍTICA O ¿POLITICA DE AFICIONADOS?

Hacer política en Argentina es más un pasaje al enriquecimiento personal que una vocación para resolver asuntos críticos del país. Las consecuencias vistas en la última semana por la violencia narco en Rosario recién vienen a conmover a un gobierno federal apático y sin autoridad política ¿Quién está a la altura de las circunstancias?

 

Por Pepe Beru

Tras el anuncio del gobierno federal de involucrar al Ejército Argentino y a la Gendarmería en el combate al narcotráfico en la ciudad de Rosario una conclusión me vino inmediatamente a la mente: El desastre está a la vuelta de la esquina.

Esta forma de ver esta decisión no se dirige a las fuerzas intervinientes sino a los responsables políticos que la han ordenado ¿Por qué creen que el ministro de seguridad Aníbal Fernández está tan incomodo con esto?  Claramente es el producto de la improvisación, en función de dar un golpe de efecto ante una opinión pública absorta e indignada por la violencia narco y lo más importante para los políticos del gobierno, impostar algo de preocupación ante un año de elecciones presidenciales. Como siempre sucede por aquí, hizo falta un levantamiento de los vecinos que cubierto por los medios y ante sus repercusiones internacionales, obligo al gobierno a hacer algo, aunque ello sea una verdadera idiotez. 

¿Qué seriedad puede tener este despliegue? Los medios capitalinos, grandes culpables en la degradación de la imagen de las instituciones de seguridad hoy dan su aval a estas medidas meramente efectistas y contingentes que solo buscan tapar una terrible realidad mediante grandes divagaciones semánticas que no hacen más que demostrar su propia incoherencia. Apenas unos días antes de la boca de muchos de estos mismos periodistas, las fuerzas de seguridad no servían para nada y la corrupción las han vuelto inservibles.

Tema aparte es el extendido vilipendio político y mediático contra el ejército argentino, que comenzó allá por 1983 con el regreso de los gobiernos civiles y que no se detuvo hasta hundirlo por falta de equipamiento y recursos -o más bien, no darles- en la más absoluta inoperancia.

Siguiendo con ello, al presente el ejército argentino es una fuerza esquilmada y sin recursos materiales para defender con eficacia los intereses de un país tan grande. Apenas pudo durante la pandemia cubrir con su ayuda a la jurisdicción del AMBA ¿Qué sucedería ante una contingencia que afectara su soberanía territorial? Y en lo que hace a su verdadero objetivo ¿Cuál es su real y actual capacidad de combate? Durante décadas se la ha degradado, desarmado y desfinanciado a niveles peligrosos y sin dudas hay grupos armados de criminales comunes (y ni digamos de guerrillas) que están mucho mejor armados que el ejército argentino ¿Quiénes estuvieron en esta tarea de destrucción institucional? Los mismos y actuales funcionarios gubernamentales (muchos de ellos, rezagos de las guerrillas setentistas) quienes con la connivencia de gran parte de la fuerza política opositora, demonizaron a las FFAA y todas las fuerzas policiales bajo un claro sesgo ideológico de la mano de funcionarios y organizaciones que hicieron mucho para poner al país donde hoy está.

Pero el combate al negocio del narcotráfico no se resolverá solo con balas. Incluso podríamos decir que faltan actores y estratos que no están siendo contemplados en este tema. Los grandes capitales financieros con nombres y apellidos involucrados en los beneficios que da este negocio nunca son rozados por alguna investigación. Tal vez ¿Complicidades políticas, intereses económicos y políticos que salen de un negocio que genera tan solo en un mes millones de pesos?, ¿Dónde están las investigaciones a los políticos, intendentes, gobernadores, empresas e incluso los negocios más pequeños por los cuales se lava dinero? El narcomenudeo de pistoleros y ajustes de cuentas que vemos en Rosario y también en el Gran Buenos Aires, también esta enquistado en la vida cotidiana de la sociedad bajo la inocente cubierta de kioscos, inmobiliarias y empleados con doble vida.

Pero en el caso de Rosario el poder político durante décadas ha hecho la vista gorda a las puertas de entrada y salida de la droga, en especial en las aduanas portuarias no solo de Rosario sino de todo el país. Sin dudas que la destrucción de los organismos de inteligencia y seguridad no fue casual, mucho menos cuando hay funcionarios sospechados de participar en este negocio.

Durante décadas se advirtió del problema del narcotráfico y su complejidad pero como sucede aquí, no hay planificaciones, mucho menos previsiones estratégicas ni se toman enserio las evaluaciones de temas tan sensibles como este. Para la clase política y los medios establecidos, “eso no podía pasar en la Argentina” y los dineros públicos que podrían haberse invertido en inteligencia y una reforma seria de los organismos tendientes a producirla terminaron financiando a los partidos políticos que han pasado por el poder, a organizaciones sociales, a ministerios inútiles y para pagar los sueldos de los tan inútiles burócratas que los ocupan.

Esto responde a una mera dinámica de corrupción estructural, que se fue desparramando como una metástasis y hoy forma parte de la degradación no solo del estado como ente político en todos los niveles (nación, provincia y municipio) sino también de toda su base ciudadana. Y sino pregúntense ¿Quiénes forman parte de la sociedad argentina que elige a los políticos que les gobiernan y luego se enriquecen con los impuestos que les graban?

Cuando gobernó el Frente para la Victoria (FPV) bajo la presidencia de CFK, las fórmulas para combatir la inseguridad y el narcotráfico fueron tan pueriles como inservibles. La creación de las policías municipales en la provincia de Buenos Aires (bajo la gobernación de Daniel Scioli) represento un dispendio de recursos mediante el reclutamiento de efectivos mal entrenados, sin doctrina y sin vocación que solo buscaban un sueldo fijo y una obra social. Hoy ese mismo funcionario reciclado seguramente buscara la presidencia.

Tampoco la estrategia de involucrar a agencias y tácticas extranjeras como las implementada por la “piba” Bullrich (una montonera reciclada) con los israelíes y los estadounidenses fueron atinadas a solucionar este tema dado que a ellos poco les importa eso.

Lo que se está viendo en la provincia de Santa Fe es solo un síntoma de un sistema político institucional corrupto que baja desde los más altos estratos de la nación y que (como no podía ser de otra manera) se replica en todas las provincias y municipios del país. Los charlatanes de los partidos políticos establecidos (de izquierda a derecha) no son quienes resolverán este problema y aún cuando exista algún sector político con verdadero sentido de servicio, la solución no estará exenta de momentos duros y medidas que ninguno de los burócratas que hoy ocupan puestos políticos se atreverían a tomar.

miércoles, 8 de marzo de 2023

 

“EL LADO EQUIVOCADO”

Pelear una guerra ajena es parte de la vida de los mercenarios. En el bando ucraniano hay mercenarios argentinos que sin saberlo están sirviendo a la OTAN ¿Cuánto sale vender tu alma al diablo?


Por Javier B. Dal

No hay peor cosa en la vida que aquellos que desprecian sus orígenes y olvidan a sus enemigos. Este breve introito que no pretende ser un principio filosófico está dedicado a esa parte de los argentinos que hablan ligeramente de lo que ocurren en Ucrania como una verdad consagrada.

Sabemos bien quienes son los medios que dan una versión pro-Zelensky y que lo único que están haciendo es refrendar el lineamiento político de Washington y la OTAN. Ello no representa una sorpresa dado que son sectores de la intelectualidad, la política partidaria y los medios históricamente cercanos y simpatizantes del universo angloestadounidense. Son los mismos patéticos aduladores y justificadores de la idea de ingreso a ese “primer mundo” de la era menemista que bajo la cándida creencia de que (por apoyar bélicamente) participarían en el fabuloso negocio de la “reconstrucción” de Kuwait, metieron al país en la Coalición Aliada de 34 países contra Iraq.

Son los más fervorosos seguidores de esa maniquea y artificiosa antinomia “civilización y barbarie” que no es otra cosa que un canto al occidentalismo anglosajón que levanto su progreso y prosperidad económica a punta de cañón contra aquellos pueblos de tez morena y costumbres ajenas a la cultura europea. Son los europeos berretas, que viven preconizando las (para ellos) grandezas del mundo europeo occidental metiendo a cada instante su ascendencia y raíces de ese mundo “perfecto” que les considera de segunda o “sudacas”.

Para estos estropajos Rusia, toda el Asia (con especial desprecio a China) y ni hablemos del mundo árabe-islámico, son lugares extraños, nebulosos y por ende, peligrosos para una cultura autoproclamada “judeo-cristiana”, faltando decir que son demasiado puros y blancos para tener relación con los seres humanos de aquellos remotos y extraños lugares. Los mismos que como los sionistas más revulsivos -que a veces ni siquiera son judíos- califican despectivamente a los árabes palestinos de “negros” y “ratas” que pueden matarse sin culpa alguna.

Con esto surge evidente, un prejuicio determinante de los puntos de vista de una situación y una ignorancia supina sobre lo que hoy sacude a Eurasia y en este sentido podemos preguntarles ¿Qué carajos saben de la historia y la etnografía del Donbass y la lucha de sus habitantes para sobrevivir a manos de un régimen integrista?

Vemos como desde los medios conservadores se habla religiosamente de la “invasión rusa” relegando del discurso todos los antecedentes y la evolución política de Ucrania bajo el influjo de Washington y Bruselas.

Para estos charlatanes autoproclamados como “liberales republicanos” y cruzados por la democracia, su fidelidad a este discurso va más allá del fetiche democrático con el que se reconocen con EEUU; su lealtad paga sus impuestos y sus estilos de vida. Son como los simples y utilizables mercenarios que sin cesar el Pentágono, la CIA y el Ministerio de Defensa británico reclutan (especialmente extremistas de ultraderecha y neonazis europeos) y envían a la picadora de carne en el este de Ucrania ¿Van por la democracia, la libertad o la patria?

Cuando un equipo de la empresa de noticias TN viajo a Ucrania a finales del mes de diciembre pasado llegando al frente en una parte de la localidad de Zaporiye, pudieron descubrir que entre la tropa de soldados de las FAU había mercenarios extranjeros y entre ellos tres argentinos quienes manteniendo el anonimato mandaron saludos a sus familias en Argentina. Como era de esperar, estos tres retirados del ejército argentino compartían el bando con otros mercenarios extranjeros, muchos de ellos estadounidenses y británicos con lo cual muchos se preguntan ¿Qué haces peleando codo a codo con nuestros enemigos?

Para los desmemoriados es importante hacerles una breve pero puntual revisión histórica de dónde estuvimos en cierto momento de nuestra historia y a donde pretendemos ir. El 1982 Argentina lucho una guerra desigual contra Gran Bretaña y la OTAN y los efectos jurídicos de negociaciones humillantes pactadas a la sombra de la clandestinidad y muy lejos de que la población argentina supiera de que se trataba, el gobierno de Carlos S. Menem cedió su soberanía nacional en los Tratados de Madrid de 1989 y 1990 los cuales deben saber, aún siguen vigentes y marcando a fuego la situación del país.

Tal vez la decisión de cada uno de estos hombres no tercie en estos escrupulosos antecedentes históricos y mucho menos les importe que esos “casacas rojas” de alma (como John Harding y otros que ya no la pueden contar) con los cuales comparten armas muchos de ellos fueron parte de las fuerzas armadas de “Su majestad” imperial que mato a sus camaradas, dignos ciudadanos argentinos que derramaron su sangre para que la causa por la que pelearon no quede en el olvido.

La inconsecuencia es comparable como la de los mercenarios israelíes que cooperan en las sombras con estadounidenses, británicos y canadienses proveyéndoles equipo y entrenamiento a las milicias ultranacionalistas y nazi ucranianas como “Azov” y “Aidar” ¿Eso es una casualidad? Para nada, solo es un episodio más en las turbias relaciones de estos actores y de toda la catarata de basura que se cierne en lo que sucede en Ucrania y tal vez la más destacada en este escenario sea un judío askenazi como Zelensky que entronado como presidente, es protegido por bandas nazi ¿Alguna explicación para esto?

Solo se trata de relaciones que siempre estuvieron allí y que hoy salen a la luz por la velocidad, multiplicidad y masividad de los medios que una persona dispone para ventilarlos.

El gobierno estadounidense mediante la USAID y la Subsecretaría de Estado para Asuntos Europeos y Eurasiáticos presta públicamente su apoyo político a estos grupos integristas tal como se vio en el evento convocado el 25 de febrero por Samantha Power y Karen Donfried en el Monumento a Lincoln ¿Qué tienen en común Abraham Lincoln con el neonazi Stepan Bandera? Por qué deberíamos asombrarnos de estas cuestiones cuando Hillary Clinton en 2012 se reunía con los jefes yihadistas entre los cuales estaban los de “Al Qaeda” en Libia o contemporáneamente en 2013, el senador John Mc Cain se reunía con los cabecillas que asolaban Siria entre ellos quien sería conocido como el jefe del ISIS, “Abu Bakr Al Bagdadi”.  Aunque en occidente y en particular en Argentina escondan bajo la alfombra estas graves inconsecuencias, ya es un asunto conocido vergonzoso y molesto que muchos cuestionan a Tel Aviv por estas complicidades.

Como hemos estado viendo, el régimen de Zelensky se sustenta por el dinero que el occidente colectivo envía. Lo mismo sus mercenarios tanto los armados como los mediáticos, todos ellos prestan sus servicios por dinero no por la libertad ni la democracia y son pagados en efectivo con ese mismo dinero que sacan de los impuestos de sus ciudadanos a quienes les hacen pagar con la inflación y una crisis energética por este jueguito geopolítico ¿Qué tienen para decir los filósofos del artificio pro-angloestadounindese?

Para los mercenarios argentinos, una paga de 900 hasta 3000 dólares mensuales es un botín jugoso claro, si logran sobrevivir, pero igualmente no alcanza ni en lo más mínimo para justificar pelear del lado de quienes mantienen ocupadas las islas del atlántico sur. Pero considerando todas las opacidades del bando al que le prestan sus brazos y su aparente simpatía ideológica por aquellos, no hay duda de que ellos están bien donde están.

domingo, 5 de marzo de 2023

“DEMOCRACIA Y SUS CONTRADICCIONES”

¿Cuál es la real naturaleza de la democracia angloestadounidense? Aprovecharse de las necesidades y desventajas de los países en vías de desarrollo para obtener ventajas estratégicas y geopolíticas ¿Puede considerarse democrático?

 

Por Charles H. Slim

A medida que la crisis económica pos pandémica de alcance global se fue generalizando, con el crecimiento del descontento y la incredulidad ciudadana se fue gestando el rebrote de una ideología que muchos daban por muerta pero que los mismos “demócratas” en occidente parecen servirse para sus propios fines. El crecimiento de las extremas derechas, el conservadurismo político y las autocracias al amparo del occidente signado por la hegemonía angloestadounidense no es casual.

Se trata de una relación espuria que siempre estuvo allí (forjada en la Guerra fría), aunque oculta al público esa relación simbiótica es la que Washington necesita para sostener su hegemonía ¿Acaso ello sirve para mantener la paz?

Los ejemplos más extendidos de ello se ven con la monarquía Hachemita saudita, la autocracia turca, la teocracia israelí y los nacionalismos populistas de la Europa del este todos ellos alineados con Washington y la OTAN. Como cualquiera de ustedes podrá preguntarse ¿Qué vinculaciones “democráticas” pueden hallarse en todos estos ejemplos?

Para explicar este “fenómeno” se hace necesario ver como se ha desarrollado la historia contemporánea y así entender ante todo, que detrás de esto hay meras relaciones de conveniencia y negocios. La caída de la URSS en diciembre de 1991 es el hito desde donde se comienzan a advertir las primeras señales de la génesis de la actual realidad geopolítica. El comunismo había fracasado y el capitalismo consumista se perpetró en la cumbre del mundo y con ello, la imposición de reglas económico-financieras dirigidas desde Washington y ejecutadas por organismos como el FMI y el Banco Mundial, supuestamente salvarían a los países en crisis.

A la par de este despliegue económico-financiero la guerra del Golfo de enero de 1991entre una coalición aliada de 34 países liderada por EEUU contra Iraq dio lugar a la consolidación de un movimiento estratégico significativo de EEUU en Medio Oriente que redundara en profundas consecuencias en el devenir de la región. Casualmente, la conformación de esta coalición y el objetivo mismo de la guerra llevó implícito un interés económico para los países participes. Precisamente y en lo que respecta a la Argentina, su gobierno de entonces se plegó a esta campaña en búsqueda de un posicionamiento agradable ante la mirada de Washington que le diera ventajas a una economía en ruinas.

Como bien ha quedado claro, eso no ocurrió. Esos procesos de privatizaciones de empresas y áreas del estado era un “Caballo de Troya” destinado a penetrar en las estructuras políticas y la infraestructura crítica del estado para destruirlo desde adentro y en el mejor de los casos, cooptarlo mediante la colaboración de sectores corruptos como son las dirigencias políticas, los empresarios y el sindicalismo en Argentina o los llamados oligarcas en Rusia. A partir de allí se ira viendo cual era el tenor de la “democracia” angloestadounidense y el sentido particular que Washington le da a la palabra.

Desde entonces y pasando por todas las administraciones en Washington (indistintamente de republicanos o demócratas), el uso y abuso del doble rasero ha sido la característica de la democracia estadounidense por medio de la cual, desde La Casa Blanca y mediante ampulosas conferencias de prensa se habla de libertades, derechos humanos y respeto a las soberanías mientras que por detrás, se ejecutan las más aborrecibles, inconfesables y deleznables acciones contra esos mismo tópicos.  

Precisamente mediante esa dinámica discursiva y a los fines de activar esas componendas no son los sectores más nobles, transparentes y decentes los más útiles para ejecutar sus planes, sino todo lo contrario. Entre tanto y a la luz pública, mientras las promesas y los discursos fueron tomados como un compromiso de occidente para el inicio de una nueva era, al mismo tiempo afilaban los cuchillos para atacar desde la sombra. Apenas James Baker prometió en 1990 a Mihail Gorvachov “ni una pulgada al este”, de forma encubierta la CIA y sus colegas del MI6 hacían todo lo contrario poniéndose manos a la obra para reclutar a los sectores más reactivos y anti rusos que garantizaran un corte definitivo con Rusia. Y esa mentira fue replicada por el mismo Baker y en una charla separada a su par Eduard Shevardnadze con lo cual, la premeditación y la malicia quedan al desnudo.

El resultado de esa perfidia se vería potenciado por la crisis y guerra de los Balcanes desatada tras la implosión de la ex Yugoslavia en 1991 permitiendo -convenientemente- a EEUU y a la OTAN justificar su despliegue bajo el argumento de la ayuda humanitaria y más tarde de brazo armado de la ONU (tras los bombardeos a Belgrado en 1999). Casualmente y en ese mismo año (1999) la OTAN acepta por parte de gobiernos europeos conservadores y de derecha las membrecías de Polonia, Hungría y República Checa dejando comprobada las buenas migas con estos sectores en su plan de expansión hacia el este.

En esa misma circunstancialidad fue que comenzaron a operar en torno a Georgia y Ucrania mediante la vieja treta de las ONG que bajo la máscara de buscar desinteresadamente el desarrollo democrático con financiamiento supuestamente de origen privado, el gobierno estadounidense fue penetrando a todos los niveles en las estructuras sociales y políticas de cada uno de estos países logrando ubicar asuntos tan peligrosos como los laboratorios de guerra bacteriológicos entre otros.

Aprovechando una tóxica mezcla de necesidades, falta de escrúpulos y corrupción, las agencias occidentales tejieron redes de complicidades a los más altos niveles gubernamentales. Pero también sobre las bases políticas más reaccionarias y en particular, tomando especial interés en trabajar con los sectores nacionalistas más radicalizados, reclutaron grupos de tareas los cuales hoy tienen un protagonismo táctico. En Ucrania el foco de interés se centró en la extrema derecha “Banderista” de raíces nazi que terminó siendo la fuerza de choque para perpetrar el golpe de estado de febrero del 2014 y que pasaron a ser parte orgánica de las Fuerzas Armadas.

El mismo papel, pero mucho más encubierto y destinado a establecer contactos en la región, fue su injerencia en el Cáucaso, en particular por las agencias de inteligencia como el MI6 británico prestando en primera instancia ayuda a los independentistas chechenos y luego alimentando el extremismo islamista del Ichkeria.

Los nada claros ataques del 11/S como justificación para la llamada “lucha contra el terrorismo” que conllevó un cumulo de violaciones masivas a los derechos humanos es la muestra más clara de la opaca democracia occidental.

Cuando EEUU y Gran Bretaña invadieron Iraq en 2003 supuestamente -entre otras mendaces excusas- para implantar la democracia, Washington se apoyo en los sectores más brutales criminales y fanáticos del chiismo local y al mismo tiempo colocaba sobre el terreno el embuste de “Al Qaeda-Iraq” que había reclutado antes de la invasión para fastidiar a la resistencia iraquí. En Afganistán lo intentaron, pero fallaron en toda la línea pese al involucramiento de la OTAN. Así la tan promovida democracia no fue otra cosa que la instauración de un régimen ultra corrupto compuesto de funcionarios ricos vinculados al tráfico de opio y los señores de la guerra puestos a dedo por los “Straussianos” enquistados en el Departamento de Estado. 

Hoy, EEUU y sus socios del “occidente colectivo” pretenden seguir mostrándose como la vanguardia de la democracia global intentando presentar al actual régimen integrista y segregacionista de Kiev como una democracia. Pese a esas intenciones nadie que use un poco su razonamiento puede tragárselo.