sábado, 4 de febrero de 2017

VETERANOS DE AYER




“SE RECALIENTA EL GOLFO”

Tras los exitosos ensayos con misiles convencionales de medio alcance, La Casa Blanca ha ampliado las sanciones y estudia la posibilidad de otras acciones más agresivas contra Irán





Por Charles H. Slim
Hace tan solo unos días, Teherán en respuesta a la autorización de Donald Trump para usar la fuerza contra su país, realizó la prueba de unos misiles balísticos de alcance medio en su polígono no lejos de Teherán y al que su ministro de defensa el General Hussein Dehqan califico como exitosa desatando la ira de Tel Aviv y la consiguiente actuación de la Casa Blanca. Tras ser informado de esta prueba y sumado los reproches de sus aliados en el Medio Oriente Donald Trump dejo en claro que él no sería tan indulgente como lo había sido su predecesor por lo cual le advirtió a Teherán de que “estaban jugando con fuego y que no sería tan amable como Obama” (según rezaba su Twitt)

Para algunos esto significaría un movimiento arriesgado de los EEUU en el Golfo Pérsico en donde tiene ya desde hace más de veinte años, una presencia naval notable que no ha estado exenta de incidentes. Para colmo de las dificultades, los nuevos generales y los almirantes que ocupan sus puestos jerárquicos en el Pentágono a estas alturas deben haber caído en cuentas de que una campaña naval como la montada contra Iraq en 1991 hoy sería literalmente un desastre.

Precisamente y para muestra de ello, los incidentes en la península arábiga en aguas del Yemen a finales del año pasado, les han mostrado a los encargados del Pentágono que entablar una guerra “proxy” contra los aliados iraníes en esa zona, puede ser igualmente desastroso.

Para minimizar bajas propias y reducir el costo material que podría significar reeditar una operación semejante, existirían en marcha tratativas entre el Pentágono y varios estados mayores de otros países –incluyendo a la Argentina- para que pudieran aportar como elementos indispensables para una nueva “coalición”, personal calificado para integrar tripulaciones en buques estadounidenses e incluso británicos. Igualmente, EEUU posee el control sobre el gobierno de Iraq y con su cooperación podría penetrar sin aviso por tierra hacia suelo iraní.

Ahora bien ¿Qué podría significar esto analizando la situación y las circunstancias que actualmente se presentan en la región?  Primero que todo señor lector, no hay que asombrarse.  Donald Trump no se iba a salir del libreto que se halla escrito desde hace mucho contra Irán y en ese sentido el público norteamericano verá que la supuesta retracción en política exterior va a ser excepcionada en éste caso. Pero a su vez Trump parece no tomar en consideración los peligros que encierra su típica bravuconería para atender temas tan espinosos.

Es este sentido como nos acostumbran los medios anglosajones, discurren sobre los “peligros de que Irán tenga capacidad nuclear” o que desarrolle sus propios sistemas de defensa o de las inconveniencias del acuerdo nuclear que se firmo con ese país. Se trata de la misma situación de siempre. Si algún país árabe o islámico como en éste caso va más allá de lo que le conviene a Tel Aviv y al sionismo que maneja una potente influencia dentro del Congreso norteamericano, el mundo debe temblar ya que para estas editoriales –que comulgan con las visiones de Netanyahu y Cía- “ellos son terroristas” y deben ser destruidos.

Tras la exitosa prueba de un misil balístico Washington y Tel Aviv levantaron sus aireadas protestas clamando que Teherán había violado la resolución 2231 del Consejo de Seguridad de la ONU por la supuesta capacidad de albergar cabezas nucleares en dichos vectores, algo que fue desacreditado por varios expertos internacionales, dejando en evidencia su reiterada maliciosa acusación y una hipocresía sin igual cuando ellos mismos –y en especial Israel- no respeta desde hace décadas las resoluciones de dicho foro internacional y menos aún los Tratados de no Proliferación nuclear (Hispan TV. “Cinco potencias mundiales violan el Tratado de No Proliferación”. http://www.hispantv.com/noticias/energia-nuclear/37279/cinco-potencias-mundiales-violan-el-tratado-de-no-proliferacion )

Pese a ello, la continua muletilla mediática angloestadounidense ha sido de que “Irán es un peligro para la paz del mundo”; “Irán es un país terrorista” y un sin número de infundios e injurias que tratan de grabar la imagen de una demonización iraní en el subconsciente colectivo del hemisferio (INDYMEDIA. “Andre Vitchek: La prensa occidental ofrece una imagen distorsionada de Irán”.http://argentina.indymedia.org/news/2016/12/900686.php  

Pero la realidad histórica revela todo lo contrario. Los únicos que han demostrado ser una amenaza para la vida y a la paz mundial son estos sectores recalcitrantes que ahora y sentados cómodamente en sus despachos en Washington y Londres o sus mansiones,  están fregándose las manos a la espera de que Trump vaya más allá y convoque una coalición militar para lanzar la tan ansiada campaña bélica contra Irán. 

Son los mismos intereses que impulsaron la guerra de 1980 entre Iraq e Irán proveyendo entre los vastos recursos a favor de Iraq, la propaganda mediática “anti chiita” más execrable que se halla visto en lo que fue aquella época hasta estos días.

Fueron estos mismos sectores los que orquestaron la guerra e invasión contra Iraq y no se olviden que se usaron las mismas tácticas de propaganda, engaños  y desinformación contra dicho país árabe para fomentar esta vez, una pésima imagen sobre la comunidad sunita llegando a los extremos de remarcar las diferencias con notable malicia entre “árabes” y “persas”.

Centrándonos en Irán, solo basta recordar en épocas más cercanas la campaña de cruentos asesinatos y sabotajes ejecutados por  matones locales que montados y dirigidos por el Mossad israelí (obviamente pagados)  entre 2008 y 2011  estuvieron destinados a horadar el programa nuclear del país. Sin dudas, procederes nada diplomáticos y menos aún respetuosos de la ley internacional.

A diferencia de la situación de Iraq, la república Islámica de Irán cuenta con un potencial defensivo aún no conocido y según algunos expertos, lanzar un ataque convencional sería como chocar contra un muro.

Igualmente y aunque Trump haya lanzado una velada amenaza sobre la integridad territorial iraní, lo cierto es que orquestar alguna operación bélica contra la república islámica sería para varios expertos, el camino al infierno y un desastre asegurado. Es por ello que Tel Aviv siempre ha manipulado la política exterior de Washington poniendo a EEUU por delante para ejecutar un plan semejante ya que con sus propios recursos –aunque muy sofisticados y letales- no lograría soportar una reacción iraní sin pagar consecuencias terribles para sus fuerzas e incluso para la subsistencia del ente político Israel.  

Es en este sentido, que se vuelve muy posible el aumento de la presión desde Tel Aviv aunque, hay que ver que pese a las cercanías de Trump con la ideología sionista, los cambios que ha realizado en el área de inteligencia –pasando a la CIA bajo el control del Pentágono- dificultarían las maniobras de los sectores que trabajaban independientemente y más orientados a defender los intereses de Israel que los de la Unión.


Según lo señalo el ministro iraní Mohammad Zarif  el misil ensayado no puede llevar cabezas nucleares y que la prueba se enmarca en el legítimo derecho a la autodefensa, argumento que tiene mucho peso con los antecedentes de agresión que sus enemigos acumulan en su haber.

jueves, 2 de febrero de 2017

EN LA MIRA     




“LOS HUEVOS DE LA SERPIENTE”

Como algunos gobiernos están cooptando ideológicamente a las fuerzas de seguridad y militares argentinas con claras intensiones geopolíticas




Por Pepe Beru
Son casi incontables las veces que en los informativos y en las ruedas de opinologos que pueblan los programas de televisión que se trasmiten desde la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, se escucha como se debate histéricamente sin nunca llegar a nada sobre la “inseguridad” y en muchos casos se han invocado a los expertos en ese campo para que aporten soluciones o fórmulas que terminen con este flagelo.

Para colmo de males, en dichos circos mediáticos no se toca ni someramente las causas reales que están propiciando una avalancha de situaciones de inseguridad que sin lugar a dudas, están siendo explotadas por otros sectores que ven en éste florecimiento de la actividad criminal –de todos los niveles y grados- , un negocio rentable que puede llegar a mutar y a expander sus intereses más allá de lo meramente policial.  Resumiendo, lo que menos se toca es sobre seguridad.

Si vemos el enfoque del aumento de la violencia criminal a un nivel escalar, la misma revela tener un crecimiento sostenido en todo Latino América y que se marca muy claramente  en  la situación de Argentina que durante los últimos 20 años ha venido creciendo en forma sostenida y sin que ningún gobierno acertara con la solución, tal como lo dejan entrever algunos “papers” (http://www.pensamientopenal.com.ar/doctrina/44745-extension-del-sentimiento-inseguridad-america-latina )
israelies entrenando niños 

No hay que ser muy brillante para darse cuenta de que a situación económica del país ha empeorado ayudando a la proliferación de la inseguridad, aunque los macro números cierren redondos para los banqueros y los grandes empresarios. Hasta allí nada nuevo bajo el sol. Desde un cuarto de siglo para acá, la situación de la inseguridad ha ido a la par de la corrupción política que además fue descendiendo en forma asombrosa desde los altos pináculos del poder hasta llegar a instalarse en los más sombríos rincones de las administraciones públicas más olvidadas del país. Y si a ello le agregamos la costumbrista corrupción en amplias franjas de las fuerzas policiales –especialmente en las bonaerenses-, toleradas por todas las administraciones pasadas y raleadas por un sistema judicial cómplice y/o participe en este Status Quo, se puede intuir que a las mafias generadas con ésta enrarecida atmosfera, se fue sembrando el camino con la semilla de la violencia inspirada tanto en la impunidad como en la incredulidad  en el funcionamiento de una justicia recta.

Algunos deliberadamente pusieron el ojo sobre y solo sobre las fuerzas policiales –dejando de lado a responsables políticos-, que mediante purgas, exoneraciones y todo tipo de limpiezas  administrativas con trasfondo político, solo diezmaron la capacidad investigativa de la fuerza, dejando impolutos a los más peligroso e importantes sectores judiciales que usaban (y siguen usando) a la policía como herramienta de sus asuntos espurios.  Ante esta descomposición institucional, los sectores pudientes hace tiempo que han optado por contratar “agencias de seguridad privadas” que van desde las de meros vigiladores con linterna hasta aquellas más sofisticadas que como “Kroll Group” –que a los nexos con la CIA y la SIDE, tenía algún vínculo con el fiscal Nisman- proveen servicios especiales.

De este modo, las fuerzas de seguridad públicas pasaron a ser superadas por éste tipo de agencias que además de manejar una amplia variedad de recursos, e influencias políticas, cuentan con el más importante de todos: el dinero.

Los doce años de la “década ganada” solo acentúo este descalabro. Fuerzas policiales sin autoridad, sin apoyo político y con fracasadas intensiones de politizarlas bajo la égida de la “Campora”  logro que el delito pudiera ascender rápidamente a un sitial que obviamente el gobierno negaría hablando de “sensaciones”.  Para colmo de males, crearon más cuerpos policiales –policías comunales- que más que paliar la situación de inseguridad, sirvió para cubrir la creciente desocupación del anterior gobierno provincial de Daniel Scioli.

Pero desde que el gobierno del “globo amarillo” llego al poder, el tema de la seguridad y  la lucha contra la corrupción pareció  rodar con bastante rapidez aunque,  se fueron viendo con seria preocupación cómo, bajo esta excusa, se estrechaban los lazos con peligrosos socios de algunos gobiernos extranjeros, que aprovechando los nuevos aires políticos tras la desastrosa gestión de Fernández y con la excusa de brindar “asesoramiento y servicios en seguridad” decidieron desembarcar masivamente en el país.

Y cuando hablamos de esos “peligrosos socios” no nos referimos a los sindicados como los tan vilipendiados “sostenedores del terrorismo” –a quienes les gusta señalar a Irán- o del populismo bolivariano con la firma de Chávez que a tan mal traer trajo a las administraciones neocon estadounidenses y sus colegas sionistas alrededor del mundo –entre ellos a los argentinos-.  Estos eran los mismos que continuamente instalaban en los medios, la falsa idea de que “Hesbollah” había montado bases de entrenamiento en Venezuela  (http://www.infobae.com/america/mundo/2016/10/15/la-alianza-venezuela-iran-y-sus-lazos-con-el-narcoterrorismo/)  y en la Triple Frontera con el siniestro objetivo de atentar en la región, argumentos supuestamente sostenidos por “informes de inteligencia”, proveídos por  las hoy muy discutidas agencias como la CIA y el Mossad, ambas con negros y extensos antecedentes sobre violaciones a los derechos humanos en la región (http://www.veteranstoday.com/2017/01/28/israels-shadowy-role-in-guatemalas-dirty-war/ ).

Luego se pudo conocer que estos infundios, acompañados por comentarios de intelectuales, análisis de periodistas y medios argentinos,  buscaban la intervención directa de Washington en la región con el consabido pretexto de la “guerra preventiva” contra el terrorismo, instalando además esa odiosa tendencia  islamofoba que tanto campea por Europa y EEUU. Como vemos, la política foránea se mezcla muy peligrosamente con la criminalidad doméstica algo que además de ser malicioso, no debería de asombrar a nadie.

Hoy ellos ya están dentro y han puesto en marcha sus planes políticos para que el gobierno de Macri encare, bajo un argumento real, la lucha contra el narcotráfico con todos sus recursos, entre ellos, a las FFAA algo que es desaconsejable por la triste historia del país. A la par de estos esfuerzos “oficiales”, se están multiplicando los ex policías, soldados y oficiales en retiro que están siendo reclutados por agencias de “servicios de seguridad privada” que casualmente, se hallan en la misma línea política de quienes buscan insertar a las FFAA en roles de seguridad interior.
mercenarios latinos en Bagdad 

De esta manera tenemos por un lado a las gestiones de Washington que trata por intermedio de su embajada en Buenos Aires, que Argentina se una a las estrategias operativas del “Comando sur” y de ese modo, reciba los beneficios del equipamiento, asesoramiento y capacitación de las fuerzas militares regulares. Por otro lado, tenemos a las agencias de seguridad privadas israelíes como la “Security and Intelligence Advising”  (SIA) que fue introducida por el gobernador tucumano José Alperovich para entrenar a su policía o la “O.F.I. KAPAP” (http://www.kapapcombatives.com.ar/  ) que con la autorización del Ministerio de seguridad de la pcia de Buenos Aires y con el argumento de que instruyen lo que se conoce como “SISTEMAS ISRAELIES” , han montado sus programas de reclutamiento y entrenamiento en suelo argentino y que con su sede central en La Plata, que está captando gran cantidad de personal capacitado para  prepararlos y entrenarlos en tácticas similares a las utilizadas por los “contratistas civiles” de la infame empresa de seguridad privada BLACKWATER en Iraq y que hoy siguen operando en Yemen.

Por último no hay que olvidar que fueron agencias de este tipo y por contrato con el gobierno estadounidense, las que llevaron adelante –y seguramente continúan haciéndolo- todo tipo de tareas sucias como secuestros, torturas, asesinatos encubiertos y atentados disfrazándolos como si lo hubiesen ejecutado grupos locales tanto en Iraq como en Afganistán siendo siempre sus blancos predilectos, la población civil. Entonces habrá que preguntarse ¿Qué preparan estos grupos de “servicios de seguridad” en la Argentina? ¿Se hallan acaso en sintonía con los planes oficiales de Washington para el país?




lunes, 30 de enero de 2017

INTERNACIONAL







“ISLAM WAR II”

Las primeras medidas de la Casa Blanca parecen orientadas a la separación de comunidades, la segregación de naciones por confesión siendo los principales blancos los musulmanes ¿Prepara Trump una nueva cruzada contra el Islam?




Por Charles H. Slim
La primera gran guerra lanzada por el ala necon y sus aliados sionistas en 1991 contra el mundo islámico y contra todos los musulmanes llegó a su apoteosis con la invasión de Afganistán en 2001 y de Iraq en 2003 que solo cambio en su intensidad pero no se detuvo con la llegada de Barak Obama a la Casa Blanca en 2008 que además de extender sus acciones contra poblaciones en Libia, Pakistán y Yemen,  podría decirse que a partir del 2012 quedo empantanado en Siria con sus frustrados planes de “balcanizar” al país árabe y a la península arábiga entera.

Ahora con la llegada a la presidencia de Donald Trump, parece que irá cumpliendo con cada una de sus promesas, en especial con aquellas que –curiosa y contradictoriamente- llenan las expectativas del denominado Stablishment político de EEUU, de Gran Bretaña y por supuesto de Tel Aviv.

Según algunas encuestas dentro de los EEUU, un tercio de la población apoya las políticas segregacionistas contra los musulmanes y prácticamente todo el arco político de los republicanos lo apoyan entusiastamente, entonces ¿Qué diablos ha cambiado con la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca?  

Por lo pronto, las primeras acciones de su administración ya esbozan como será la situación con los musulmanes. Más de cuarenta personas fueron asesinadas en Yemen por un “exitoso”  ataque –según el mismo Trump- contra supuestos militantes de “Al Qaeda”, algo que jamás se comprobara. En Quebec, Canadá, un conveniente ataque en el Centro Cultural Islámico de la ciudad era escenario de un supuesto ataque “islamista” que se produjo casualmente un día después que el primer ministro Justin Trudeau le respondiera a Trump que “aquellos que huían de la persecución el terror y la guerra…serían bienvenidos a Canadá”.

Para los algunos analistas de la CIA, se había tratado de una casualidad y que ello era parte de la llamada “guerra civil entre chiitas y sunitas”, un embuste que en el mundo árabe-islámico además de no ser creíble es inexistente y que fue implantado por los norteamericanos y muy bien matizado por los medios anglosajones tras la invasión a Iraq.

Los musulmanes volverán a ser el centro de las sospechas pero esta vez, no habrá distinciones entre sunitas o chiitas ya que en la realidad el acendrado odio que existe en las elites políticas anglosajonas a los árabes en particular y los musulmanes en general es tan antiguo como la fundación del estado de Israel. No hay que olvidar que la violencia que occidente llevó al Medio Oriente y al centro de Asia  beneficia ampliamente a los intereses israelíes quienes ven como muy conveniente que las poblaciones árabes migren para despejar vastos espacios territoriales que Tel Aviv sin dudas ambiciona ocupar.

Estas renovadas políticas segregacionistas que han venido siendo alimentadas por los medios anglosajones, han sido aplaudidas de pie por las organizaciones sionistas y ampliamente apoyadas por los lobbies pro-israelies que gravitan en los asuntos de política exterior de la Casa Blanca.

Pero si hay una medida que desata la algarabía de Tel Aviv es sin dudas el decreto firmado por el presidente Donald Trump de “prohibir el ingreso a los ciudadanos iraníes a los EEUU”, algo que a los ojos del sionismo es una señal de que habrá seguras oportunidades de lanzar el tan ansiado ataque contra Irán.

Una clara señal del regreso de una política agresiva y peligrosa para los derechos humanos de los musulmanes alrededor del mundo se complementa  con la designación del nuevo jefe de la CIA, Mike Pompeo, un ultra conservador perteneciente al nada menos que el “Tea Party” cuya ideología racista comulga armónicamente con sionistas recalcitrantes como Ashton Sheldon,  Avigdor Lieberman y el mismo Benjamín Netanyahu.

Ello no quiere significar que la era Obama haya estado limpia de violaciones a los derechos humanos y en especial contra los de musulmanes de Afganistán, Pakistán, Iraq, Yemen y Siria. El hasta hace poco director de la CIA John Brennan no tuvo ningún escrúpulo en ordenar en dichos países, operaciones de asesinato utilizando Drones armados controlados a distancia, articular ayudas encubiertas a los embustes “yihadistas” como “Al Qaeda” y el “Daesh” en Siria o la de continuar –pese a la orden ejecutiva 13491- con las torturas y las ejecuciones usando mano de obra tercerizada (http://www.principiamarsupia.com/2014/12/10/12-salvajadas-de-la-cia-en-el-informe-sobre-torturas/).
prisionero iraqui en sesión de interrogación

En ese sentido no hay que olvidar que el entonces candidato Trump había afirmado su apoyo al uso de la tortura coincidiendo con una encuesta realizada por la ABC NEWS que mostraba que una buena franja de la población estadounidense era partidaria de estas abominables prácticas. Y qué decir del informe del Senado producido por el Comité de Inteligencia reflejado en una pobre investigación sobre Torturas y abusos de unas 5000 páginas que a pesar del número de  documentos citados, muchas fuentes aseguraron que los más importantes y graves habían sido obviados.

Sin lugar a dudas todo eso solo había sido una gran charada, con la cual el gobierno de Obama y sus comités del senado tratarían lavarse las manos ante una oleada de acusaciones y de descredito que llegaban desde los cuatro puntos cardinales. Incluso actualmente si se buscan los documentos que “presuntamente” se habían hecho públicos en aquella ocasión, hoy no pueden ser hallados en el servidor oficial del Congreso de los EEUU (Cfr. Intelligence senate. Gov. https://www.intelligence.senate.gov/study2014/sscistudy1.pdf )

A todo esto y como corolario, la administración Obama se va dejando un nefasto record en gasto militar, más cabezas nucleares puestas en servicio, provocación de miles de muertes y países destruidos por sus intervenciones ¿Cómo pueden explicarse todas estas crasas contrariedades con aquellas empalagosas promesas de campaña? Simplemente no se pueden explicar.

Dentro de este marco social y de la idiosincrasia de los EEUU, no hay que asombrarse de los políticos que tienen ni menos aún de sus funcionarios de inteligencia y militares que se han criado  bajo una venenosa educación racista y repleta de engaños.  La designación de Trump como presidente y el gabinete que lo acompaña es la continuidad de una política de odio que nada bueno puede traer para la paz del mundo.

En este sentido un jefe de la CIA como Mike Pompeo es el preludio de muchas arbitrariedades y del incremento de la inseguridad contra los derechos de las personas no solo estadounidenses, sino también contra cualquiera que además de no ser cristiana, se manifieste en contra de las repugnantes políticas y sus criminales resultados.

Calificado como un “extremista radical cristiano” que considera al Islam como una amenaza y que es necesaria la guerra entre el Islam y el Cristianismo, ha dejado entrever que es partidario de prácticas de torturas como el “submarino” tan usada desde el 2001 por las agencias de inteligencia como los militares contra sujetos acusados de terrorismo, preferentemente musulmanes.

La designación de este funcionario con claras tendencias fanáticas, coloca a los EEUU en el sendero del cual supuestamente Trump había criticado en campaña, pudiendo desatar una nueva y  mucho más cruenta espiral de violencia, persecución y muerte que opaque las masacres colectivas que EEUU llevo adelante contra Iraq, Somalia, Afganistán, Libia, Yemen y Pakistán.

Tal como suponían muchos, tanto Trump como Pompeo parecen que seguirán el libreto de la “lucha contra el terrorismo” ignorando el embuste que representa tanto “Al Qaeda” como el “ISIS” que son, tal como el mismo Trump lo dejo claro en campaña, dos activos de la CIA para justificar la supuesta amenaza a la seguridad y permitir las intervenciones en el exterior.

Asimismo, viendo este panorama, queda en claro que la designación del general James “perro loco” Mattis no es para nada casual. Con un amplio record de crímenes contra civiles en Iraq, Mattis es también un empedernido islamofobo que considera a los musulmanes como un peligro a erradicar.

En este mismo contexto y de acuerdo a las políticas de ingreso restrictivo a la Unión, los musulmanes, árabes de países como Libia, Iraq, Somalia o Siria, por su condición de tales verán prohibida su entrada y solo ser permitiría el ingreso a aquellos ciudadanos de esos países que acrediten ser cristianos  y por supuesto “amen a América” (Globalresearch.ca. http://www.globalresearch.ca/trump-bans-muslims-from-entering-the-united-states-launches-holy-war-against-radical-islam/5570770 )