sábado, 14 de octubre de 2017

VETERANOS DE AYER



“NUCLEAR NUKES”

Otras pruebas que han salido a la luz recientemente avalan la presencia y uso de armamento nuclear táctico en el Golfo Pérsico durante la Tormenta del Desierto  y no precisamente en manos de Saddam.



Por Dany Smith         
Según la versión oficial la crisis del Golfo de 1990 se produjo por un entuerto entre Iraq y Kuwait y ahí se termino la historia. Para los medios estadounidenses liderados en ese entonces por el conglomerado Turner de la CNN, “Saddam Hussein era un loco” y todo lo que alegara su gobierno o viniera de Iraq, “eran mentiras y fabulaciones de un dictador maligno”. Pero como ya lo habíamos dicho antes, en realidad lo que sucedió allí fue algo que no solo conocía la Casa Blanca y el Cuartel general de la CIA en Langley, sino que ellos mismos habían sido parte en todo aquel entuerto (Pensamiento Estratégico y Político. “Las casusas ocultas de la guerra del golfo”. https://pensamientoestraegico.blogspot.com.ar/2016/01/veteranos-de-ayer-las-causas-ocultas-de.html )

Mientras nosotros nos movilizábamos a nuestra base naval en Dubai, la cara de George H. Bush aparecía en todos los malditos televisores que te cruzabas mostrando una supuesta  sorpresa en su rostro por la que llamaba “agresión de Saddam”. A pesar que la mayoría en los EEUU y del mundo se oponía a que se enviaran estas fuerzas, Bush no supo dar una explicación creíble para justificar la campaña bélica.  En ese momento todos éramos relativamente jóvenes y nos creímos hasta algún punto la propaganda de los medios aunque si debo decirlo, yo con mis 32 años de ese entonces tenía una experiencia suficiente sobre lo que realmente venía detrás de todo ese teatro actuado.

Recuerdo que cuando fui comisionado a Falklands Islands en 1982, en el camino nos cruzamos con el “HMS Sheffield” una de las joyas más caras de la Real Armada de su Majestad y me decía en esos momentos “estaremos bien respaldados” y apenas un mes después esa realeza fue mandada a pique por los “argies”. Fue allí cuando corrían los rumores de que las bodegas de recarga del buque llevaban ojivas nucleares de la NATO y me dije “Diablos!, las habrían usado y si lo hacían como lo explicarían al mundo?”  (RT.com. “US nuked Iraq during gulf war”.  https://www.rt.com/news/us-nuked-iraq-during-gulf-war-report/  )

Luego de aquello “Charly” un piloto de los helicópteros que realizaron la evacuación de parte de la tripulación del “HMS Sheffield”  cuando ardía poco a poco, me confesó al final de la guerra que uno de los oficiales que subieron a bordo  les ordenó a él y a su copiloto salir rápidamente del área ante una posible fuga de radiación o una explosión.

Pero en el Golfo según nos decían nuestros gobiernos y nuestros comandantes “Saddam es la amenaza y puede llegar a tener la bomba (nuclear) y nosotros debemos impedírselo” como una arenga que se parecía más dirigida a los cruzados de la Edad Media que a comandos de grupo de tareas en una charla táctica. En ese entonces no tuve noticias de que nuestros buques de la Armada Real llevaran este tipo de ojivas simplemente, porque en esos momentos estábamos económicamente bastante mal, pero si comencé a oír que los norteamericanos sí mantenían en uno de sus buques comando, ojivas para montar en sus misiles crucero.

De ese modo y en medio de la numerosa flota que ocupaba las aguas del Golfo, había un buque de grandes dimensiones que llevaba en sus bodegas y listas para emplear, cabezas nucleares para dar un golpe decisivo si las cosas se salían de control. No olvido el choque se sensaciones cruzadas en las que no sabía si temerle más a los iraquíes que a nuestros jefes quienes asustados podrían apretar un maldito botón y mientras estábamos adentrándonos en territorio enemigos no cocinaban en la arena. Oh si!, fue algo psicológicamente duro de vencer para poder concentrarte en tus tareas y al mismo tiempo cuidarte el culo. No es lo mismo saber que vas contra un enemigo externo que tener de enemigo a tus propios comandantes tras tus espaldas; es una maldita basura!

En esos momentos quienes si tenían armas nucleares en la región y presumían de ellas era Israel que intentaría justificar su uso si “Saddam lanzaba un ataque químico contra ellos”; algo que también especulaban nuestros cerebros militares y en especial los estadounidenses que no estaban seguros de que Saddam pudiera cumplir con sus amenazas (FAS.org. “Amenazas nucleares durante la Guerra del Golfo”.  Por John Pike. https://fas.org/irp/eprint/ds-threats.htm ) En ese sentido no podía pasarse por alto que en algún momento la Coalición estuvo a punto de resquebrajarse (fastidiando el “Plan de Operaciones 90-1002”) cuando Egipto y Siria limitaron su participación a las operaciones en Kuwait sin consentir las arengas israelíes de literalmente pulverizar a Iraq.

Por ello como un seguro contra esa posibilidad, la armada norteamericana tuvo a su disposición y presuntamente a bordo del “US-Midway” una decena de ojivas nucleares tácticas para emplear contra blancos duros si el ejército de Saddam arrollaba a nuestros muchachos, posibilidad muy considerada por varios estrategas de ese momento en base a un solo factor: La veteranía de los iraquíes en la lucha en un terreno tan hostil.  El temor de los comandantes de la Coalición Aliada era patente. Si las brigadas mecanizadas de la “Guardia Republicana” se lanzaban contra los marinos estadounidenses y británicos sin cobertura aérea, podría haber sido una catástrofe.

Justamente uno de los puntos más duros para nuestros colegas en la campaña terrestre fue la zona sur de Iraq, donde los iraquíes frenaron todos los intentos de avance de los marinos reales y de los “Seals” estadounidenses que querían penetrar al territorio iraquí. Fue en esa región y más precisamente en la provincia de Basora, donde los iraquíes y muchos efectivos estadounidenses que se hallaban en las cercanías fueron testigos el día 27 de febrero de 1991 de una detonación de un artefacto nuclear de unos 5 kilotones dirigido contra un centro de mando que no había podido ser neutralizado por los bombardeos convencionales.  El veterano estadounidense Jim Brown describió aquella explosión como “un hongo que hizo temblar a tierra” y señalo que en esa área tras la guerra, los cánceres se incrementaron exponencialmente entre la población. Incluso esa explosión causo una nube tóxica radiactiva que por efecto de los vientos salió por la desembocadura de “Al Fao” hacia el espacio marítimo del golfo exponiendo a la flota aliada.

También casualmente, muchos de los marinos y de los comandos que operaban en la zona presentaron tiempo después problemas varios como cáncer, leucemia que para peor se lo trasmitieron a sus hijos que muchos nacieron con malformaciones y problemas congénitos irreversibles.

Aunque como era de esperar, desde el Departamento de Estado en Washington negó todo esto y los medios lo taparon muy bien, los estudios realizados un par de años después de aquella guerra en la región de los pantanos de Basora no solo mostraban las estadísticas de cánceres entre la población local sino también, mediciones irregulares de radiación sobre el terreno que se podían comprobar en los tumores en los frutos de las plantaciones de tomates, comunes en la región.

Como siempre y cuando ello salió a la luz, el gobierno norteamericano trato de ridiculizar al veterano Brown pero cuando éste agregó más evidencias sobre lo ocurrido y que fue ratificado por médicos iraquies, los militares solo se avocaron a dar la típica respuesta que solemos escuchar por Inglaterra que es “No hay comentarios”.   

martes, 10 de octubre de 2017

EN LA MIRA



“FRONTERAS MOVIBLES”

Cómo está evolucionando la situación en el Medio Oriente tras las intensiones separatistas de los kurdos y las continuas injerencias occidentales en estos planes


Por Charles H. Slim
No caben dudas de que entender como ocurren los hechos y cuáles son las relaciones que existen y se tejen entre los diversos actores en el Medio Oriente, solo pueden entenderlas aquellos que vive allí o tienen un extenso conocimiento adquirido de la experiencia propia o de un contacto con las fuentes directas en la región.

El prefacio viene a colación de los últimos acontecimientos que se han registrado en el norte de Iraq y que inciden en Siria, que enmarcados en un marasmo caótico que ya lleva tres años y del cual solo algunos actores se han visto muy beneficiados, lleva a cuestionar a quiénes realmente sirvió el establecimiento del mal llamado “Califato” declarado por una organización armada como el “ISIS” que nada tiene de islámica.

Con la llegada de esta franquicia que fue elaborada e insertada en 2006  por la inteligencia estadounidense durante la ocupación de Iraq, los límites entre Iraq y Siria fueron prácticamente borrados y puestos bajo la jurisdicción de la bandera negra de un “Estado Islámico” que se sabía inviable pero que serviría estratégicamente para obstruir la  llamada ruta de la seda que conecta el comercio de Asia (en especial de China y Rusia) con occidente. Desde el punto de vista táctico, solo se trató una maniobra temporaria para respaldar las operaciones contra Siria.
Frontera turco-iraquí

Mientras el estado sirio –con el apoyo ruso- ha logrado sobreponerse a la conjura tramada entre Washington, Riad y Tel Aviv –secundados por Jordania, Qatar y EAU- empujando a los remanentes del “Daesh” y del “Frente Al Nusra” hacia el este, Turquía quien paso de ser un aliado incondicional de los planes occidentales en todo esto, a un estrecho colaborador de Rusia, tras el referéndum kurdo realizado en el Kurdistán iraquí parece haber reforzado su posición  pro-rusa con la finalidad de blindar su frontera para impedir que estos mismos planes que son instigados por Washington y Tel Aviv, terminen por proyectarse sobre su territorio.

Recordemos que Ankara había violado en reiteradas oportunidades la soberanía siria, atacando con fuego de artillería ciudades fronterizas e incluso ingresando tropas bajo la excusa de combatir a los kurdos sirios que hasta ese momento eran leales a la república árabe siria, todo esto con la autorización de Washington.

Tampoco tuvo inconvenientes en cruzar la frontera iraquí y también con la complicidad de los Peshmerga iraquíes –y también de EEUU- ocupar parte del territorio en Bashika sin que el corrupto e inepto gobierno de Bagdad pudiera hacer nada para impedirlo.

Incluso no hay que olvidar que hasta apenas hacía un año, Ankara colaboraba entusiastamente con Erbil y más precisamente con el gobierno kurdo del Clan Barzani traficando el petróleo iraquí que robaba el “Daesh” de los campos petroleros de Kirkuk y que lo mismos kurdos dejaban pasar por la frontera estableciendo un eje negocial entre Kirkuk y Ceyhan que quiso replicarse con el petróleo sirio que robado del campos de Deir Ezzor también era traficado impunemente por las fronteras turcas y que fue cortado de un gajo por la intervención de la aviación rusa en 2015. (Red Voltaire.org. “Las cosas se complican para el Kurdistán iraquí”. http://www.voltairenet.org/article198193.html)
Mapa del Gran Medio Oriente

Cuando la aviación turca con la complicidad de un avión E-3 Sentry AWACS estadounidense derribo al SU-24 ruso dentro del espacio aéreo sirio, las cosas fueron demasiado lejos y Vladimir Putin dejó en claro que eso no  sería pasado por alto, llevando a que las relaciones entre Moscú y Ankara se tensaran críticamente. Ese incidente le dio a Moscú mayor decisión de terminar definitivamente con las rutas de tráfico de petróleo que además de probar el escandaloso contubernio entre “ISIS” y Ankara, evidencio como los aviones de la Coalición internacional curiosamente no tocaban esos cientos de camiones que pasaban bajo sus ojos.

De allí en más la situación fue evolucionando a tal punto que Erdogan debió pedir públicamente disculpas al Kremlin llegando a romper con varios de los puntos de cooperación que tenía con EEUU y sus socios en todo lo que estaba sucediendo en Siria. La contrición del mandatario turco fue tan profunda que comenzó a replegar su cooperación, algo que no estuvo exento de consecuencias tanto políticas como de seguridad. Atentados en pleno Estambul, intrigas y asesinatos se volvieron una plaga, poniendo al gobierno turco al borde del colapso.

Más allá de la impopularidad de Erdogan y su partido, un sector de las FFAA y de la inteligencia,  pertenecientes al laicismo ideológico de Kemal Ataturk que a su vez históricamente se alinean a los intereses norteamericanos en la región, trataron infructuosamente de dar un golpe de estado en julio del 2016 que llevó a una brutal purga masiva y al congelamiento de las relaciones entre Ankara y Washington. Según varias fuentes, el intento había estado orquestado por la CIA que entre otras cuestiones y en medio de la confusión, se encargaría de eliminar físicamente a Tiyip Erdogan. Esto llevo a que las relaciones se enturbiaran a tal punto que, Ankara desconocería el acuerdo tejido con Francia –con la venia de Washington- para solucionar el problema kurdo a costa de Siria.
tropas de EEUU en el norte sirio

A partir de allí, Turquía y Rusia tuvieron mayores acercamientos bilaterales que continúan progresando hasta el presente.  Pero esto, que alteró sensiblemente la estrategia y los planes de Washington pronto tendría una respuesta.

A plena luz del día y frente a las cámaras de televisión el asesinato en vivo y en directo del embajador ruso en Ankara Andrei Karlov  por parte de un militante que reivindicaba el intento de derrocar a Bashar Al Assad llenó el vaso y quedó claro que alguien buscaba embarrar ( y no precisamente el “Daesh) el incipiente y repentino giro de Erdogan hacía Moscú.

Otro que perdía con éste giro era el líder del gobierno del Kurdistán iraquí Masud Barzani, quien ya no contaría con el apoyo de Ankara y desde ese momento dependería de la ayuda de Washington –armas, mercenarios y dinero- para consolidar los territorios anexados en el norte iraquí.  Tras el referéndum de hace unas semanas, Erbil ha reafirmado su intensión de separarse de Iraq concretando parte del plan (llamado “Gran Medio Oriente”) esbozado por Washington para destruir los estados nación árabes para crear regiones confesionales (Kurdos, Sunitas y Chiitas) volviendo aún más inestable la región.

En este sentido las últimas cartas que tiene Barzani para lograr estos objetivos, son los grupos FDS y los del YPG que los estadounidenses y los israelíes apoyan en el terreno sirio, dándoles cobertura y protección contra las fuerzas árabes sirias que avanzan velozmente sobre el terreno.

Igualmente ello ha dificultado concretar su máxima aspiración que se enmarca en lograr establecer el Gran Kurdistán anexando los territorios del norte de Siria para lo cual, EEUU, Israel y Gran Bretaña hacen esfuerzos ingentes para frenar los avances del ejército árabe sirio. Con ello se puede ver que Barzani y su gente trata de establecer su propio estado, con fronteras arbitrarias, tal como lo pretendió hacer Al Bagdadi con un “Califato” que no fue más que un artilugio –entre otras cosas- para manipular la desesperación de los iraquíes  oprimidos por un régimen sectario instaurado en Bagdad.

Con todo esto y a la vista de tantas violaciones a la legislación internacional referida al respeto a las soberanías y las fronteras de los países, a las preceptivas de la Carta de Naciones Unidas  sobre la agresión y de todos los protocolos y convenciones internacionales sobre la protección a los derechos humanos, las convenciones sobre refugiados, queda claro que hay una notoria responsabilidad internacional en toda esta tragedia que sienta otro pésimo precedente institucional que de no rectificarse pronto, acorta la vida de organizaciones como la ONU y la Corte Penal Internacional, claramente serviles a los polos de poder mundial. Solo con un triunfo contundente de la república árabe siria detendrá este juego ilegal de correr los hitos fronterizos para crear regiones arbitrarias sean la “Rojava” kurda como el “Califato” de Al Bagdadi