sábado, 26 de noviembre de 2016

NACIONAL



“S.O.S. ARGENTINA!”

Confusión, desilusión y pesimismo son los elementos para que nuevos demagogos asciendan a la escena política




Por Pepe Beru
Como muchas veces hemos dicho,  Argentina no es una isla en el mundo y cada acontecimiento que lo sacude tarde o temprano le toca a ella, poniendo a sus habitantes a tono con la cruda realidad inmisericorde que les circunda.  Es un país con una situación geoestratégica central y pese a que sus dirigencias se han avocado a llenarse los bolsillos por el término que duran sus cargos, los recursos del país parecen inacabables. Es por ello que cuando se escucha a algunos “periodistas” decir que “este es el peor país del mundo”, hay que advertirles que simplemente se trata de una mentira injuriosa que tiene interesados fines para los cuales aquel sirve.

Es un país con mucho de bueno pero también con particularidades muy nocivas para sus propios intereses. Uno de sus principales problemas radica en su cíclica y nada renovada dirigencia política la cual a su vez, se entrelaza con una cadena de medios informativos empresariales que están al servicio de cualquiera que se halle en el poder de turno.  Sus partidos políticos son piezas de museo que más bien son mausoleos donde yacen no solo los restos de sus fundadores, sino también los ideales que aquellos impulsaron.  

De ese modo el PJ con todas sus ramas y rimbomantes escudos, no son más que un cartón mohoso  que ninguno de sus dirigentes –si es que queda alguno-  le interesa limpiar.  Lo mismo podríamos decir del “Partido Radical”  que en razón de verdad, ya había desaparecido con la presidencia “social demócrata” de Raúl Alfonsín y su seudo-bolchevique Coordinadora que pudo acceder al poder por las condiciones que externamente se digitaron.

La izquierda nacional no es mucho mejor. De los delirantes sectores Troskistas y Mahoistas pasando por los “Comunistas” más intelectuales hasta los camaleónicos “socialistas”, nunca han logrado conformar un frente común por sus infantiles mezquindades.   Incluso aún subsisten afiebrados cerebros que sueñan con establecer “soviets”  mediante la eliminación de la propiedad privada y a la clase burguesa sin haberse reparado a meditar, que además que eso fue un embuste fallido de la historia, no hay las condiciones socio-político y de idiosincrasia que propicie una movilización semejante, salvo y es obligación señalar, las “operaciones” que vienen realizando agrupaciones indigenistas que son sustentadas desde Londres por el Foreing Office .

En Argentina hay una crisis mucho más amplia y preocupante que la acostumbrada problemática económica que vuelve de cuando en cuando a recordar el karma que deben pagar por ser quienes son, “argentinos” con todo lo que ello conlleva.  La crisis de identidad lejos de haberse olvidado como lo dijeron en algún momento los “popes” de esa clase política corrupta,  está más presente y traumática que nunca.  Y han sido y siguen siendo los mismos argentinos quienes se hunden en esta realidad repleta de contradicciones e incongruencias que ellos mismos alimentan; al momento que suelen agarrarse la cabeza para preguntarse por qué me pasa esto o por qué los precios se han disparado a la nubes o, por qué han matado a mi hijo, a mi marido o a un ser querido o por qué no hay justicia; se olvidan que ellos mismos –o al menos la gran mayoría- le han “entregado su confianza a candidatos tan ineptos como corruptos” que han sido parte del gran problema que los aqueja sin solución de continuidad.

Los impresentables de ayer se hacen nuevamente presentes para apostar a una nueva estafa con la cual redoblar su propio asombro.  Y es que como dice el dicho “no es el chancho sino quien le da de comer”, así podemos describir a la idiosincrasia argenta que no parece reparar en sus tropiezos una y otra vez al momento de involucrarse en la realidad política que les rodea.  Militaristas liberales en la década de los setentas con el amparo de Washington y el cuco del “comunismo”, a “demócratas” en los ochentas con el amparo de aquellos mismos y de allí embelesados con un Menem  que alucinaban rubio y de ojos celestes se volvieron “neoliberales” en los noventas  siguiendo el guión que bajaba –nuevamente- del norte para volverse de la noche a la mañana en “revolucionarios” seudo-castristas que más bien se asemejaban a la película de Woody Allen “Bananas”.

A primera vista cualquiera podría decir que en Argentina no hay argentinos, pero eso es una falacia. Ante todo hay que discriminar –aunque ello no les guste a los progre de este país- entre habitantes de toda la nación y los denominados “porteños” o habitantes de la ciudad autónoma de Buenos Aires.  Los primeros han estado relegados de las decisiones políticas que hacen a las macro políticas de la nación. Los segundos, que han dado la espalda a esa realidad interior son los erróneos representantes de un país que ellos no representan. Esto es imprescindible para entender de donde sale esa mezcla de pro-europeismo sajón que más tarde se convirtió en el pro-norteamericanismo más chabacano y berreta que distingue a los argentinos que suelen caer en Miami.

Han sido décadas de degradación y de desintegración de los partidos políticos clásicos pero a su vez, la aparición de individualidades destacables que mediante sus propios puntos de vista,  han puesto en duda el Status Quo que la mayoría no quería cuestionar.  Como todos los adelantados de su época, ellos fueron vilipendiados y despreciados por los mismos medios y periodistas que unos años antes se mofaban sin pausa.

Y ese mismo chupamedismo se traslada a los medios y periodistas locales quienes se lanzan a los pies de sus colegas de medios como la CNN que visitan el país en búsqueda de alguna plaza. Pese a que éstos han sido servidores a sueldo de los embustes históricos más grandes de la época, los “periodistas argentinos” hacen gala de falta de memoria para no abochornar a sus colegas hispanos de dicha cadena estadounidense y menos aún comprometerse ideológicamente con la realidad geopolítica actual.

En medio de ese espectro de obsecuentes  y timoratos se van instalando viejos “jóvenes” referentes provenientes de aquellos años noventa  salidos de las alas del menemismo y del duhaldismo. Tal el caso de Sergio Massa, un muchachito liberal de la UCeDe que tras ser visto en las promiscuas reuniones entre “peronistas” y “liberales” liderados por María Julia Alsogaray capto la atención del menemismo. De una militancia liberal vio la oportunidad de oro para colgarse del tren neoliberal que ingresaba al país con la anuencia del Menemismo, una mezcla obscena de “peronismo”  político y “neoliberalismo”  económico.

Producto de esas mañas arribistas, Massa llegaría a la intendencia de Tigre y con políticas muy ligadas a sus orígenes neoliberales, cerrando contrataciones con empresas de seguridad británicas y norteamericanas para monitorear a toda la localidad bajo el argumento de la seguridad ciudadana.  Cuando llegó Néstor Kirchner al gobierno en 2003 Massa vio la nueva oportunidad para colgase al nuevo tren y así siguió colgado durante la mayor parte de la llamada “década ganada” hasta que, tras los tira y afloje con la afiebrada presidenta Fernández terminó su idilio “seudo-revolucionario”.

A pesar del cambio de rumbo político del país, siguen habiendo los mismo tabús que impiden a los nuevos gobernantes –y a los jueces federales- meter la mano en las áreas sensibles y estratégicas para  re estabilizar la situación. Incluso no hay que dejar pasar, que dentro del mismo gobierno hay gravísimos casos de corrupción que implican a la misma vicepresidente Gabriela Michetti y también al presidente Mauricio Macri.


Hoy el mismo Massa trata de reinventarse presentándose ante los medios como una “alternativa” entre el pasado Kirchnerista y la actualidad  de “Cambiemos” siendo a todas luces esa pretensión, una verdadera tomadura de pelo.  Un Massa que brindaba pleitesía a las políticas privatizadoras de Menem en los noventas, que aplaudió a Eduardo Duhalde en momentos de la “Poliarquía”  de comienzos del nuevo siglo y un supremo chupamedias en la “Era K” solo puede despertar risas en los ciudadanos pensantes que ya están hartos de estos simples muñecos de alta voz.  

miércoles, 23 de noviembre de 2016

EN DEBATE




“DESPUÉS DE MOSUL ¿QUÉ?

A pesar de las encarnizadas batallas que se llevan a cabo dentro de la segunda ciudad más importante de Iraq no hay señales de una fácil victoria y menos aún un punto final a las consecuencias de la ocupación




Por Charles H. Slim
Como siempre hemos sostenido, lo que sucede en Iraq no es lo mismo que sacude a Siria aunque las apariencias que coloridamente presentan los medios occidentales y sus colaboradores regionales digan lo contrario.  Lo que si podemos asegurar, es que los autores de ambas caóticas realidades son los mismos.  Sin dudas el “Daesh” es un embuste fabricado por las agencias de inteligencia norteamericanas en colaboración con sus socios israelíes eso ya no lo duda nadie, pero su responsabilidad por la miseria de Iraq y su pueblo es muy anterior a la implantación de este monigote seudo-islamista (v. http://www.presstv.us/Detail/2016/11/23/494815/Middle-East-Iran-Ayatollah-Seyyed-Ali-Khamenei-terrorism-Daesh-US-Israel ).

Iraq ha venido desde 1991 en adelante en una espiral de tragedia que no se ha detenido aún. No hay que olvidar que los poderosos lobbies sionistas y necon, catapultaron a la administración republicana de George H. Bush y Cía para que se diera el puntapié inicial de lo que sería la intervención masiva de EEUU en la región.  Solo los iraquíes saben lo que ha sido caer bajo la brutal bota de las inclementes políticas de Washington y sus aliados occidentales y soportar una de las ocupaciones más bizarras y siniestras del comienzo de siglo. Algunos iraquíes que deben mantener el anonimato para poder decir lo que piensan sin el riesgo de ser arrestados y/o asesinados, han dejado entrever que los intentos de borrar  la oposición al gobierno mafioso del partido “Dawa”  han sido tan amplios, que no existe lugar físico en las cárceles del país para encerrar a todos los ciudadanos que se han atrevido a resistirles tanto política como por la fuerza de las armas. Sobre ello, el tan promocionado cierre en 2014 de la prisión de Abu-Graib en Bagdad solo fue una mascarada para tapar la habilitación de diez campos de concentración dispersos tan solo en la provincia de Diyala. No hay que olvidar que el sistema de prisiones del país fue ampliado en forma monstruosa por los norteamericanos y pese a ello,  cada una de las celdas llega a ocupar hasta cuarenta reclusos incluyendo a mujeres y a todos sus hijos.

Las evidencias recopiladas de esa prisión dejaron muy mal parados a los norteamericanos quienes trataron de desligarse de las “tareas sucias”, tercerizando la administración con personal privado contratado y claro, carniceros locales leales al régimen de la mafia Dawa y de sectas como las bandas “Badr” (v. http://www.iraqsolidaridad.org/2004-2005/docs/ocup_20-12-05_2.html ).

Incluso comentan varios vecinos de la castigada urbe de Tikrit al norte de Bagdad y que hoy se halla re-ocupada por la fuerzas mafiosas del régimen que hoy lidera Haidar Al Abadi, que si alguien se atreviera a escavar un pozo para buscar agua, se encontraría con fosas comunes donde se hallan cientos o tal vez miles de iraquíes ejecutados por las purgas impulsadas por los primeros  títeres del régimen como Al Yafaari,  hasta llegar a Nouri Al Maliki quienes bajo la asistencia de las unidades especiales norteamericanas en plena ocupación, sembraron el terror contra los disidentes. Por supuesto el incremento de estas fosas se doblo tras el regreso de los esbirros de Bagdad quienes apoyados por Irán y EEUU, hicieron carnicerías despiadadas sobre los civiles. Las historias tétricas sobre lo que ha significado para los iraquíes la “democracia”  a la estadounidense, se agolpan en todos los rincones del país sin distinciones entre chiitas, sunitas o kurdos.

Antes de que llegara el “Daesh” recargado, los iraquíes luchaban su propia guerra por sacudirse a los colaboracionistas de Bagdad y sus amos con centro en la Zona Verde.  El régimen y sus matones no escatimaron en recursos –especialmente los proveídos por el Pentágono- para aplastar movilizaciones populares usando fuego de fusiles automáticos y ataques de metralla desde helicópteros como se vio en la masacre de Hawiya en 2013.  Ningún medio informativos estaba viendo para ese lugar y con ello la impunidad para Al Maliki y los comandantes norteamericanos que planificaron muchos de los operativos contra poblaciones civiles, estaba asegurada. El movimiento popular revolucionario que comenzó a tomar fuerza a nivel político en 2010 –curiosamente en momentos que se hablaba de la llamada Primavera árabe en la región- y que aunó a diversas ramas de la resistencia armada para conformar un Comando Militar Revolucionario que se estableció en todo el centro noroeste del país.

Con la llegada de “Daesh recargado”, los iraquíes pudieron comprobar que ese ejército y policía que había armado la ocupación norteamericana era tan inútil como corrupta.  Además que se desbando arrojando sus armas y uniformes mientras huían de sus puestos,  algunas fuentes de inteligencia revelaron que los operativos montados por el Daesh para capturar y ejecutar a los comandantes, gobernadores, jueces y políticos que pertenecían al gobierno de Al Maliki, habían sido informados con datos precisos provistos por la CIA como una forma de asegurar que no pudieran escapar a la limpieza que habían previsto para fastidiar a un gobierno que estaba entorpeciendo los objetivos de Washington. Incluso en varias de las operaciones nocturnas en las que se allanaron casa particulares, estaciones de policía y bases militares, ocultos bajo las máscaras de las fuerzas “antiterroristas” habían actuado asesores norteamericanos digitando las operaciones.


Al Maliki además de sentirse impune para saquear los fondos del país y apropiarse de riquezas de varias familias que sus fuerzas encarcelaron, asesinaron o simplemente los hicieron desaparecer, no tuvo el menor miramiento para que se aplastara como nadie había visto antes en el país, a los manifestantes contra su régimen. Y aunque EEUU había fomentado durante la ocupación, a esas alturas les estaba siendo contra producentes. Brutalidades semejantes quedaron documentadas por las cámaras de helicópteros “Apache” cuando ametrallaban alguna calle en Bagdad o, cuando los aviones registraban como unos cientos de manifestantes que se dirigían a protestar al centro de Bagdad, Naseriyah, Al Ramadi para nombrar algunas, eran pulverizados por una bomba de 500kg teledirigida por laser. Para peor y muchas veces este tipo hechos, estaban acompañados de las carcajadas de los pilotos o de los operadores de radio que como si se tratara de un video juego, festejaban la masacre.

Han pasado dos años de que esa agrupación minúscula formada en los campamentos secretos de entrenamiento norteamericanos de “Al Anbar”, Jordania y en el sur de Turquía, se aliaron a los grupos opositores iraquíes quienes aprovecharon la oportunidad para derrocar al régimen de Bagdad. Pero pese a las promesas, ese no era el objetivo del “Daesh” –entiéndase Washington- y fue allí donde los grupos de la resistencia iraquíes advirtieron que todo era un embuste.

A la cúpula de esa organización solo le interesaba adueñarse de Mosul no solo por su importancia histórica y religiosa para los sunitas; sino por su emplazamiento estratégico que corta el paso en una región rica en recursos energéticos y de suma importancia logística para conectar Oriente con Europa, un tema que ha movilizado a China  tras la extensa visita  a la región realizada por Xi Jiping a comienzos de año.

En lo que respecta a la llamada “liberación de Mosul”, para los aterrorizados habitantes que han logrado escapar a los impiadosos bombardeos de la fuerza aérea estadounidense y de sus colegas occidentales, poco hay de tal liberación.  Además de haber arrasado extensos sectores residenciales, del conourbano  y del centro mismo, las fuerzas “chiitas” a sueldo de la mafia que gobierna Bagdad  y los abominables grupos kurdos que son costeados por EEUU e Israel, han estado tomándose sus propias revanchas contra los pobladores que han caído en sus manos.  Seguramente cuando Mosul caiga definitivamente, no hallen al cuco de “Abu Bakr Al Bagdadi”  ni a sus lugar tenientes; menos aún a su  rehén-vocero británico John Cantlie quien supo aparecer en curiosos spots de propaganda del “Estado Islámico”, pero no se engañen, eso no significa que la lucha interna contra el gobierno termine (v. http://www.lavanguardia.com/internacional/20160713/403166656055/john-cantlie-secuestrado-video-estado-islamico-isis-mosul.html ).  Incluso hay que dejar bien en claro quiénes son las “fuerzas chiitas” que están apoyando a la “Coalición internacional” liderada por EEUU.  Lo que pretende ser un ejército iraquí solo es un rejunte improvisado de matones que ha sido rearmado por Washington, las milicias “Al Shaabi” que son una confederación de grupos chiitas que adhieren al partido “Dawa” y los llamados  “Peshmerga” kurdos que son la milicia del clan Barzani. Por el contrario, las fuerzas de las milicias “Kataib Hesbolla”, las “Asaib Alhe Alq” y los seguidores de Moqtadar Al Sadr  además de no compartir las políticas sectarias del régimen, se han negado a prestar colaboración a los estadounidenses y se han comprometido activamente a colaborar con sus hermanos sirios, con el “Hesbolla libanes”  y las milicias patrióticas  que apoyan a los esfuerzos por erradicar a las bandas mercenarias que asolan Siria.

La caída de Mosul será una repetición de la caída de Faluya en 2004. Pese a la bestialidad con que arremetieron contra la ciudad de las mezquitas y las interminables racias que llevaron adelante las brigadas de criminales del gobierno y las tropas norteamericanas para vengarse de las terribles bajas que les causaron los combatientes que les resistieron calle a calle,  la voluntad de resistir no murió y al poco tiempo las operaciones contra los ocupantes  resurgieron y fueron creciendo en cantidad e intensidad.


Tal vez la llegada planificada del “Daesh” –porque, que no quede ninguna duda de que Washington estuvo detrás- no fue tan dañina como se supondría que sería ese invento. Tal vez como dice el dicho “No hay mal que por bien no venga”  y es muy posible que ese embuste sirva para desemascarar en forma escandalosa y definitiva, los juegos sucios montados por intereses occidentales que le han costado la vida millones de seres humanos. 

domingo, 20 de noviembre de 2016

NACIONAL




“LA BULLRICH EN TEL AVIV”

Qué significara para el país la inserción de la brutal doctrina israelí en las fuerzas de seguridad bonaerense



Por Charles H. Slim
Apenas me estaba levantando de la cama cuando un viejo amigo que vive Jordania me llamó para darme la novedad de que “Patricia Bullrich” y una comitiva muy particular habían llegado a Israel en donde tendría una agitada agenda con los funcionarios del área de la defensa y los organismos de seguridad israelíes. Por poco caigo de bruces al costado de mi cama al solo venir  a mi mente como la camaleónica ministra de seguridad interior se reuniera con los peores exponentes de la represión y tortura del Medio Oriente como son la “Sabak” –Policía israelí- y el “Shin Bet” –Inteligencia interior- expertos en las más variadas mecánicas  y siniestras tácticas  para aterrorizar y condicionar a la población palestina  (v. http://www.hispantv.com/noticias/oriente-medio/314919/diputado-critica-limitar-llamada-oracion-tierras-palestinas )  La señal no puede ser más clara: Buenos Aires se halla alineada a Tel Aviv y eso no tiene nada de bueno para los que criticamos la ocupación y el expansionismo israelí y menos aún, para los simples ciudadanos argentinos que aún no llegan a entender los peligros que traerán el operar de estos “expertos en seguridad”.

Igualmente esta visita representa tan solo una profundización de los lazos institucionales entre Tel Aviv y Buenos Aires ya que desde el ascenso al poder de Mauricio Macri en Argentina operan moderadamente con algunos asesores israelíes y norteamericanos en el entrenamiento de los efectivos de la bonaerense. 

Tales programas se llevan adelante dentro de las instalaciones de la Vucetich de Berazategui a la altura de camino centenario entre La Plata y Berazategui, donde han montado una base de operaciones donde elementos de las llamadas “fuerzas especiales” que cotidianamente asesinan palestinos, darán muestra de cómo eliminar a la oposición que pueda amenazar la autoridad.

Según algunas fuentes, los asesores capacitaran a los argentinos en el uso de sus armas tácticas, contrainsurgencia, adiestramiento de perros y reducción de los sospechosos entre otras tácticas antiterroristas. Además se habría acordado entre el ministro de seguridad de Israel Gilan Erdan y su homologo bonaerenses Cristian Ritondo que se instalaría un software para la vigilancia virtual que estaría a cargo de la policía española.

Pero más allá de lo aparente y conociendo la historia de las fuerzas policiales y militares israelíes, hasta una gran parte de la comunidad judía argentina se agarra la cabeza ante estas señales. Y esto no significa que no se deba atender el preocupante flagelo de la inseguridad, pero parece que creer que en nuestro país no existen recursos humanos nativos capaces para delinear y formar a los cuerpos de seguridad con sus propios talentos, es poco menos que un error. En este sentido no caben lugar a dudas de que la gobernadora Vidal se ha equivocado muy feo al considerar que estos elementos foráneos, van a darle a la policía bonaerense algún grado de excelencia o una capacitación profesional que respete los Derechos Humanos ¿Es que acaso no ha visto lo que sucede en Palestina?  (v. http://www.ain.com.ar/nota.php?nota=14040 )  La brutalidad ilimitada demostrada en los últimos episodios en Jerusalén dejan a las claras quiénes y cómo piensan los jefes de las fuerzas policiales de Israel.

Asimismo y a tono con esta visita, algunos medios e insignes periodistas se están encargando de sembrar el terror mediático mediante el bombardeo de noticias sobre robos, secuestros, asesinatos y desgracias urbanas que con argumentos y tonos veladamente manipuladores, tratan de condicionar a la opinión pública para que acepten estas injerencias nefastas.

Al mismo tiempo la señora ministra Bullrich se pasea por aquellos parajes con la compañía de altos oficiales militares y políticos, muchos de los cuales tienen en su haber torturas, vejaciones y la muerte de muchos ciudadanos palestinos y que de viajar a otros países tendrían que lidiar con pedidos de captura por sus crímenes de guerra. Este es otro de esos pequeños detalles que parecen habérsele escapado al gobierno de Macri y que no se debe olvidar.

Aun pareciera que las gentes y en especial los funcionarios políticos argentinos no conocen el significado del dicho que reza  ”la calma precede a la tempestad” y que hoy más que nunca tiene una vigencia puntual y concreta luego del ungimiento de Donald Trump como presidente de los EEUU. Tras haberse desgañitado de la risa a costa del multimillonario, Macri y su gabinete parecen no haber caído en cuentas de que Trump podrá ser todo lo cómico y excéntrico que quiera pero, al darle una vista a los sujetos que compondrán su gabinete en su administración –entre ellos al general Michael Flynn-, las sonrisas se borran casi al instante. 

Y no es para menos, con solo algunos ejemplos, cualquiera se puede dar cuenta que –más allá del discurso aislacionista- ciertos temas no solo seguirán vigentes sino que aún más, se profundizaran hasta límites no imaginables.

Por favor no se engañe; si Hillary hubiera sido la triunfadora en las elecciones también llevaría adelante las mismas planificaciones y profundizaciones en las políticas como son la “guerra contra el terrorismo”, las “intervenciones en el exterior”  y el perfeccionamiento de los programas de inteligencia para tratar de hacer indetectables las operaciones de la CIA, NSA, DIA o cualquier equipo especial que lleve adelante las prerrogativas en suelo extranjero; menos aún, el apoyo irrestricto al estado de Israel.  Esos puntos en la agenda política norteamericana son innegociables. Viendo este marco y las consideraciones que en apariencia ha hecho Buenos Aires sobre asumir compromisos con Washington y Tel Aviv,  la visita poco mediática de Bullrich a Israel puede traer en un futuro inmediato consecuencias y sorpresas desagradables que el país ya ha experimentado.

La ministra Bullrich y su comitiva se pasearon por las zonas ocupadas palestinas y especialmente en la frontera con el Líbano desde donde las FDI fueron expulsadas por la resistencia chiita Hesbolla en 2000 tras décadas de ocupación.  Obviamente estos detalles no son de importancia para la variopinta política argentina  que hará todo lo posible para instalar a la doctrina israelí en las fuerzas de seguridad, de inteligencia y seguramente en las mismas FFAA argentinas. 

Con ello podría especularse que la visita de Bullrich tiene mucho más interés que solo ir a comprar equipos de comunicaciones, Drones y algunos implementos  cibernéticos. Tel Aviv no dejara pasar la oportunidad de oro para extender sus relaciones y su influencia en el Cono sur e incluso, hacer pie en Argentina para profundizar sus actividades de contrainteligencia contra los sectores que se oponen a las políticas de Israel o denuncian sus crímenes.

En este sentido parece que el gobierno de Macri no se ha dado cuenta –o no quiere darse- que Israel se halla en una trinchera permanente y mantiene con sus vecinos una política de continua hostilidad, intrusión y violación de su soberanía mediante diferentes medios de espionaje y que como la potencia militar colonialista que representa, se halla inmiscuida de continuo en todo tipo de complots contra la soberanía de otros países sin interesarle cuanta gente deba morir para concretar sus metas –tal como lo hace en Siria-.  Y con lo que hemos escuchado últimamente de boca del mismo Bibi Netanyahu y de su pandilla ultraderechista, la situación sin dudas se volverá insoportable. Esto en referencia a lo que el mandatario israelí dijo sobre que “Trump es un gran amigo de Israel”, créanme, eso no trae nada bueno para la región y menos aún para el mundo.

Sobre esto mismo, el régimen de Tel Aviv confía que la llegada de Trump a la Casa Blanca le dará cobertura política para que las “inversiones inmobiliarias”  de firmas estadounidenses e israelíes, puedan comenzar a construir unas 30.000 casas sobre territorios arrebatados a los pobladores árabes palestinos (v. http://www.ain.com.ar/nota.php?nota=14040 ) . Eso demuestra que Tel Aviv se sigue pasando las resoluciones de Naciones Unidas por el forro del culo poniendo en evidencia que es un estado fuera de la ley internacional.


Y es ciertamente una afrenta para los mismos palestinos que tras dos décadas de engañosas tratativas diplomáticas y según así lo han dejado entrever algunos políticos israelíes como Neftali Bennett del Partido Hogar Judío, con el ascenso de Trump se puede decir “la era del estado palestino ha terminado”. Sin dudas, es  un tema que no se puede ignorar aunque ese sea el deseo de Tel Aviv y de los sionistas alrededor del mundo –incluyendo a los argentinos- quienes últimamente han echado mano a nuevos subterfugios de tinte academicista que argumentarían que “el pueblo palestino no existe”.