jueves, 4 de abril de 2024

 

LLEVAR EL CAOS A EUROPA

¿Cuán desesperados están los supremacistas en Tel Aviv para sostener a toda la costa la viabilidad de un estado colonialista y genocida? Los chacales acechan desde la oscuridad

 

Por Yossi Tevi

Solo los médicos y el personal de ayuda humanitaria que no han sido asesinados por las FDI saben de primera vista y con todos sus sentidos lo que sucede en la Franja de Gaza y en particular hoy por hoy en Rafah, bajo el asedio impiadoso de las bombas israelíes y la falta de comida. Si bien es cierto que algunas imágenes lograron colarse a la férrea censura sionista que opera subrepticiamente incluso en los medios occidentales, no llegan a representar en su real magnitud la realidad de lo que sufre la población palestina.

El brutal asesinato -no fallecimiento como citan los medios angloestadounidenses- de siete voluntarios humanitarios extranjeros (entre ellos un australiano, un británico y un polaco) en Deir Al Balah[1] por un bombardeo israelí cuando repartían comida a los refugiados palestinos refuerza éste descarnado e inhumano escenario.

Nunca como en estas circunstancias Israel ha demostrado qué es y quiénes son sus líderes y partidarios llevando incluso a que varios de sus más acérrimos militantes en occidente, tengan que criticar la magnitud de los crímenes que impunemente comente a la luz del día. La maquinaria de propaganda que acostumbradamente sirve para tapar todo esto no da abasto. Incluso ha resquebrajado esa estrecha relación existente entre el liberalismo estadounidense y el sionismo tan bien representado con los demócratas y en particular con la actual administración Biden-Harris. Tal como lo señalan algunos israelíes cansados de las hostilidades y de sus consecuencias, “Netanyahu ha empujado a Israel al abismo”.

Los jerarcas en Tel Aviv representativos del extremismo judío con Netanyahu a la cabeza además de estar más preocupados por su sobrevivencia política, están ciertamente desesperados por esta situación y es posible que hayan ideado un plan para tratar de revertir la pésima imagen y el creciente repudio mundial por el genocidio que se lleva adelante en Gaza y que tiene como propósito apoderarse de toda la Franja. Nunca como antes a los sionistas les vendría muy conveniente un “11/S” para victimizarse ante la opinión pública, pero la pregunta sería ¿Quién pondrá las víctimas?

Así quedó la camioneta en la que viajaban los siete voluntarios humanitarios que fue atacada por la aviación israelí. Las evidencias revelan un ataque deliberado quedando a la vista el agujero en parte superior de la camioneta por donde ingreso un proyectil guiado seguramente de los que EEUU le provee a Israel.

Tratar de desacreditar a los palestinos, a los gobiernos árabes que les apoyan y en especial a la resistencia árabe-islámica ha sido una de las tareas más continuadas y perseverantes de la inteligencia israelí y de sus socios occidentales. Para lograr este objetivo una de las estrategias más elaboradas ha sido -junto a los activos de la CIA como Al Qaeda y Daesh- la orquestación de operaciones de falsa bandera (atentados terroristas y asesinatos) plantando pistas falsas con la intensión de incriminar a la república Islámica de Irán y a la organización chiita libanesa Hezbollah.

La actual situación en la Franja de Gaza y que se está espiralizando en toda la región ha estado perjudicando las relaciones políticas y públicas de occidente con Israel afectando entre otras cuestiones, el surtido de armamento y municiones por efecto de embargos. Esto ha planteado un grave problema para las FDI. Pero el problema central radica en que el estado ha perdido el apoyo y las simpatías que existían en sectores de la población occidental que nunca había visto (o no interesaba verlo) lo que Israel hace para sustentar su estado de cosas.

El genocidio y la limpieza étnica que está perpetrando contra la población árabe-palestina es innegable y a la vez, imposible de justificar. Aquí no se trata de ser calificado de “antisemita” por criticar semejantes acciones porque las cometen judíos israelíes (como tan seguidamente claman los sionistas), es una cuestión de humanidad, aún cuando los sionistas se crean superiores al resto.

Esa artificiosa forma de ver las cosas funcionó durante décadas, callando a voces disidentes y al periodismo establecido tanto dentro de Israel como en Occidente.  Hoy además de estos sectores quienes se levantan contra estas aberraciones son muchos judíos de a pie que simplemente exponen su postura de no sentirse parte de un estado que no los representa.

Pero también se han expresado funcionarios israelíes sobre lo que representa la ocupación sobre la población palestina y sus consecuencias, tal como lo expreso el general israelí Yizack Barik en una entrevista para “Al Jazeera” y que Hassan Hamade comenta en un interesante artículo para Red Voltaire[2].

En tanto, mientras las FDI masacran a los civiles palestinos que no pueden huir, muchos otros están huyendo a Egipto y de allí continuarían su periplo a Europa buscando la seguridad que perdieron con la actual situación. Sin dudas que es factible que miembros de Hamas se estén colando entre los refugiados y los servicios de inteligencia israelíes estén al tanto de ello despertando varias interrogantes por esto. Aquí es donde comienzan las especulaciones sobre como los servicios de inteligencia israelíes con el apoyo de sus redes y colegas occidentales, pueden aprovechar esta oleada migratoria a suelo europeo para beneficio político de Israel.

El Mossad podría instigar y facilitar los recursos para que se lleven adelante ataques de gran espectacularidad y daño y las olimpiadas que se llevaran a cabo en julio en Francia propiciaría la oportunidad para ello. Este artificio no sería el primero ni el último en la historia.

Hace unos meses atrás una red del Mossad fue desmantelada en Turquía que buscaba llevar a cabo asesinatos, atentados y secuestros contra partidarios de “Hamas”. Pero para las autoridades turcas y en especial el MIT esta red pretendía algo más y eso sería, crear la sensación de que los palestinos llevaban el terrorismo al país, algo que habría servido para distraer la atención de lo que sucedería en Gaza. El desbaratamiento de esta operación fue un duro golpe para Tel Aviv y con el objetivo de alinear a todos los miembros de la UE tras su posición, una ola de atentados podría ser suficientemente convincente como para criminalizar a los palestinos y victimizarse al mismo tiempo.

La posibilidad de esto se verifica con lo ocurrido en Moscú el 22 de marzo pasado y en donde fuimos testigos de cómo el terrorismo, como un arma más controlada por las agencias de inteligencia, puede ser direccionado de forma discrecional y conveniente usando máscaras que encubren a los verdaderos autores intelectuales. De ser así. estará en manos de las autoridades europeas (y en particular sus agencias de inteligencia) no cooperar con estos planes oscuros.

 

 

miércoles, 3 de abril de 2024

 

CONOCIENDO LA GEOPOLITICA DEL TERRORISMO

¿Cómo fue posible y por qué los atacantes en CROCUS HALL no actuaron respondiendo a la fábula seudo-islamista de ISIS?

 

Por Charles H. Slim

El horroroso crimen perpetrado el viernes 22 de marzo en el CROCUS CITY HALL en las afueras de Moscú, aunque suene chocante, puede servir para desenmascarar de una buena vez cómo, quiénes y por qué se valen del terrorismo para desplegar planes con fines geopolíticos y o estratégicos.

Desde aquel ataque del 11/S en EEUU se instaló de forma indiscriminada pero muy bien pensada, la idea de que el terrorismo era una ideología militada y llevada a cabo solo por los musulmanes. Aquella maléfica elucubración de los cerebros del neocon y sus aliados sionistas estadounidenses prendió con éxito y le sirvió a la entonces administración republicana de George W. Bush y Dick Cheney para poner ruedo los planes que habían sido trazados menos de diez años antes y que dieron como resultado, un millones y medio de iraquíes asesinados, otro tanto de afganos y otros tantos miles de ciudadanos musulmanes secuestrados y torturados.

El pasado viernes 22 de marzo, Rusia fue blanco de un ataque terrorista que se enmarca en la estrategia de una guerra asimétrica planificada por mentes occidentales y no en una provocación del islamismo radical encabezado por la nada creíble organización ISIS. Las filmaciones de como operaron esos atacantes puso en evidencia una destreza, entrenamiento y buen manejo del armamento que descarta la tan acusada vía meramente extremista.  El FSB logro capturar a cuatro de los atacantes que quisieron huir por un corredor fronterizo a Ucrania, logrando determinar sus orígenes tayikos y también que fueron contratados por 5 mil Euros cada uno pagados con criptomonedas provenientes de Ucrania.

En resumen de cuentas, se trato de una operación táctica fríamente ejecutada por profesionales y no por simples militantes extremistas, un embuste muy similar al montado allá por 2015 en Francia con “Charle Hebdo”.

No es un secreto la conocida estrategia de la “guerra interminable contra el terror” creada por los neoconservadores y entusiastamente apoyada por Gran Bretaña e Israel y cuyo fin es la crear ese caos controlado que haga de ciertos sectores del mundo, una inseguridad favorable a Washington ¿Cómo se logran estas metas sucias? Allí es donde entran los activos de las agencias de inteligencia para crear las condiciones materiales sobre el terreno de la realidad allí donde sus planes lo requieran.

Si bien “Al Qaeda” surgió (tras la invasión soviética de Afganistán en 1979) de un programa secreto de la CIA a comienzos de los ochenta, como herramienta operativa para ejecutar las maquinaciones del entonces Consejero de seguridad Nacional Zbigniew Brzezinski, el principal y más antiguo proveedor de estos recursos provienen del MI6 y su cofradía denominada “Hermandad musulmana”, protagonista estelar durante el embuste montado en el norte de África llamado “Primavera Árabe”.

En Iraq, tras el fracaso de la fábula “Al Qaeda-Iraq”, el por ese entonces encargado de la inteligencia militar estadounidense el General David Petraeus puso en 2007 a rodar un embuste denominado “Estado Islámico de Iraq”, el mismo que más tarde en 2014 los iraquíes y el mundo conocerían como el “Daesh” y que hoy los medios están tratando de instalar como el único culpable.

Ucrania es el actual centro de operaciones para el despliegue de estos recursos contra Rusia y con los cuales los neoconservadores estadounidenses con Victoria Nuland (quien había prometido sorpresas desagradables para Rusia) a la cabeza se han visto profundamente involucrados algo de lo cual, el FSB, el GRU militar y el mismo presidente Putin saben muy bien.

Los ultranacionalistas de “Pradvy Sektor” liderados por Dimitro Yarosh y otras agrupaciones para-militares que participaron en el golpe de estado en Kiev de febrero de 2014, hoy no solo son parte medular del GUR (Dirección Principal de Inteligencia) y de las SBU en Ucrania, además tienen una larga historia de relaciones clandestinas con los islamistas del Cáucaso (Chechenia y Daguestán) quienes a su vez, han sido y siguen siendo activos utilizados tanto por la CIA como el MI6 y el MI5. Los escenarios en los que se emplearon estos recursos son Libia, Siria, Iraq, Afganistán y actualmente con una presencia latente en el Cáucaso. Como hemos visto en Moscú, estos activos caucásicos han sido activados en varias ocasiones para emplearlos dentro de la Federación.

Pero estas relaciones en apariencia contranatura y que nadie podría imaginar, ya venían existiendo mucho antes de que EEUU en 2001 declamara su guerra contra el terrorismo y lo más importante, Washington estaba bien al tanto de ello. Considerando estos elementos se puede entender la persistencia histérica de La Casa Blanca por endilgarle este ataque terrorista al bulo “ISIS”.

Pero como bien ya ha dejado claro el presidente Vladimir Putin, el principal responsable de esto ha sido Kiev y en función de ello, las represalias se dirigen hacia las estructuras de su gobierno. Esto no significa quitar merito ni olvidar el papel de los patrocinadores occidentales en esta masacre, solo se trata de ir directo contra quienes se beneficiaron con ello.

Si hay alguien que conoce muy bien como el MI6 cooperaba y proporcionaba ayuda a los rebeldes chechenos y alimentaba las expectativas del emirato de “Ichkeria”, ese es Vladimir Putin. Producto de esa cooperación los chechenos pudieron ejecutar varios ataques terroristas en territorio ruso siendo la escuela de Beslán y el Teatro de Dubrovka los más conocidos.

Mientras los medios en occidente trataban el tema como un fenómeno surgido de la nada, detrás del telón las agencias de inteligencia anglosajonas coordinaban los contactos y las vías para proveer el apoyo financiero y de armas. Quien haya creado al monstruo, se haga cargo de sus obras. 

lunes, 1 de abril de 2024

 

DE LA GESTA DE 1982 A HOY ¿INVOLUCIÓN?

¿Por qué la Argentina está cada vez más lejos de sus reivindicaciones sobre las islas del atlántico sur?


Por Charles H. Slim

Ya han pasado 42 años de aquella gesta lanzada por la Argentina en pos de recuperar un archipiélago de islas en el Atlántico sur que habían sido usurpadas por el imperio británico allá por 1833 y que por el transcurso del tiempo estaban por quedar jurídicamente legitimadas al poder de Gran Bretaña.

Sacando las chicanas y la politiquería que ha tratado de menospreciar esta empresa nacional, la acción argentina corto ese plazo y arruinó las expectativas de que Londres se volviera por así decirlo, el legítimo propietario de las islas Malvinas, Sandwiches y Georgias del sur y todas las aguas que las circundan. Con solo eso, se puede decir que los argentinos no vertieron en vano la sangre de sus hombres ni fue como varios impresentables de la vida política y mediática denominan, una guerra inútil.

Pero aquella gesta, apenas llegó el gobierno radical de Raúl Alfonsín en 1983 fue prontamente defenestrada e insidiosamente vituperada por una clase política gris y mediocre que desapareció en los días que los soldados argentinos combatían en las islas.

Como bien digo, fue una gesta, palabra que significa “conjunto de hechos memorables” que por tales, pasaron a estar en la memoria colectiva para todos los tiempos. Tal vez fue eso lo que desató la ira de estos pequeños y mezquinos actores de la política argentina que (por sus miserables intereses partidarios) estaban más dispuestos a colaborar con los enemigos británicos que honrar a sus propios héroes.

Argentina, una vez más como en aquellas incursiones inglesas de 1806 y 1807 en la joven Buenos Aires bajo la tutela del Reino de España, hizo frente como pocos en la historia contemporánea al imperio británico con la adición de que en la guerra de 1982, recibió -además de la confesada cobertura en inteligencia- el apoyo de la OTAN ¿Les suenan esas siglas?

Desde el cese al fuego en junio de 1982 la Argentina a contrario de lo que predican los democratologos de la vida, el país se fue hundiendo cada vez más en la desazón, la degradación y la incertidumbre para llegar a un presente que nadie quiere pero que todos tejieron con sus votos. La selectiva y tramposa memoria de los argentinos vuelve al ataque impidiendo aceptar las responsabilidades que a cada uno les cabe.

Todas aquellas jornadas de incansables y heladas batallas de hombres (no niños) enfervorizados en defender los irrenunciables derechos e intereses del país, fueron arrojados al abismo del desprecio y el simplonismo de falsos pacifistas (que hoy se llaman progresistas) que no hicieron otra cosa que cooperar con la estrategia psicológica británica de pisar la moral de los argentinos y quitarles el espíritu de trabajar para levantarse en un próximo mañana.

Así batallas épicas como las de “Monte Two Sisters”, “Longdon”, “Tumbledown”, “Top Malo House”, “Goose Green” y el arrojo de los pilotos de la Fuerza aérea en la Bahía de “San Carlos” y sus camaradas de la aeronaval en sus antiguos aviones “A-4Q” atacando a la sofisticada flota enemiga ¿A dónde estaban todos aquellos politiquillos de mesa de café en esos momentos? Radicales, peronistas y todo resto de yerbas de la misma calaña seguían planificando como aprovechar la situación para sus miserables posiciones cuando todo terminara.

Y cuando todo termino, el saco les quedó muy grande para sus pequeñas existencias y tal como suelen hacer, se escondieron detrás de los acontecimientos.  

En vez de haber tomado la posta para continuar una política de sostenimiento de la reivindicación territorial, aquel gobierno obtuso y ciertamente traidor de la UCR liderado por Raúl Alfonsín que fue continuado por un verdadero gobierno cipayo y prostibulario como fue el pro-estadounidense de Carlos Menem y Cía, llegando al populismo falsamente nacional del Kirchnerismo, el anglófilo gobierno de Mauricio Macri hasta llegar al presente de reeditada tendencia, se fue debilitando la base del poder real de un estado para poder hacer frente a un enemigo con el cual hay más que una simple hipotesis de conflicto, hay un conflicto inconcluso y del cual los desinformadores de los medios capitalinos siempre han tratado de tapar.

La realidad actual pilla a la Argentina en este 42º aniversario ciertamente en su peor momento, no solo por la fenomenal crisis económico-financiera y social devenida de todo este linaje de ratas escudados tras sus trajes de representantes han saqueado al país, sino por hallarse en un mundo altamente complejo (en medio de una tercera gran guerra en progreso) en el cual la clase política jamás se interesó en prever y planificar para atender a los problemas que hoy hunden al país ¿Y por qué? Porque en sus estrechas mentes jamás aceptaron que una realidad como la que actualmente viven podría llegar.

Esta clase política corrupta no solo se robo las arcas del estado, permitió que intereses foráneos puedan saquear sus riquezas naturales.

Precisamente, parte y muy sustancial consecuencia de esta inercia política es, la pérdida de cientos de millones de dólares al año en productos del mar y en potencialidades en la exploración mineral sobre la plataforma marítima controlada por la Real Armada británica. Pero ese no el único motivo. Desde 1983 la depredación en todo el litoral marítimo se fue ampliando por el desguace de la fuerza naval, tanto de Prefectura como de la Armada llevándolas (como al resto de las FFAA) a ser una mera cáscara vacía sin objetivos ni propósito y por ello, incapacitadas de hacer valer la ley nacional sobre las flotas pesqueras foráneas.

Hoy, los mismos que arengaron y apoyaron esta situación, claman de la pérdida económica que significa al país que buques chinos y de otra docena de naciones, saqueen impunemente los mares argentinos ¿Cuál ha sido gatillo de estas tardías preocupaciones? El dinero y solo el dinero en momentos que sus propios culos penden de un hilo por las políticas de “motosierra” del actual gobierno anglófilo-sionista de Milei. Y aunque ahora se llenen la boca hablando de soberanía, constitucionalismo y hasta de una supuesta preocupación por los daños que se producen en los ecosistemas de esas zonas, la gente pensante conoce su falsedad.

Y a la altura de las actuales circunstancias y con un gobierno encabezado por un títere de los poderes económicos angloestadounidenses y secundado por funcionarios obsecuentes y funcionales a Washington ¿Cómo ven los argentinos esta nueva conmemoración por la gesta de Malvinas?  Si lo vemos desde el pueblo sin dudas perdura el sentimiento, pero con eso no basta. Si lo hacemos desde sus instituciones políticas está muy claro que no les interesa ya que (como ya han demostrado antes) por un puñado de dólares, pueden sentarse a la mesa con el mismo diablo y vender el alma de los suyos sin que se les conmueva la cara.

Por último y desde el punto de vista de la situación militar de la Argentina, el abandono y la desinversión de cuatro décadas a la que fue sometida el área sigue garantizándole a Londres que retendrá la ocupación de dichas islas e incluso, dejando de lado cualquier preocupación de alguna nueva operación militar argentina. Por el contrario, para Londres son más preocupantes las aspiraciones autonomistas de los “Kelpers” que una posible amenaza del continente con vetustos aviones F-16 dinamarqueses que además de obsoletos, son de fabricación estadounidense…es decir, aliados de Gran Bretaña.