sábado, 29 de julio de 2017

EN LA MIRA




“IMPREVISTA SALIDA”

Contra las expectativas de un Congreso copado por los intereses Neocon y de sus aliados sionistas, Donald Trump ordena la inmediata salida de sus asesores militares y de inteligencia de Siria ¿Cuáles serán las consecuencias de ello?




Por Dany Smith

En la última semana una de las noticias que fueron el centro de atención de los círculos de la comunidad de inteligencia anglosajona e internacional fue la firma de la orden para que la CIA abandonara su asistencia y cooperación con los grupos armados que operaban en Siria. Un detalle en este documento es que en apariencias la orden no especifica nada sobre las células que vienen operando tanto en el norte con los kurdos como en el interior de Iraq, especialmente en Bagdad.

Esto podría sugerir que lo único que se ha visto ha sido una mudanza parcial, un cambio de lugar de las bases de la CIA ubicadas en lo que fue el llamado “Califato”. 

Los éxitos del ejército árabe sirio y la impertinente y molesta asistencia de la inteligencia rusa han fregado sus planes contra Damasco. Operar con bases en suelo sirio se volvió dificultoso y peligroso, tal como quedo en evidencia a mediados del año pasado cuando dos misiles crucero “Kalibir” disparados desde el Mediterráneo  borraron a una base secreta en la que operaban  asesores norteamericanos e israelíes que se hallaba en una cueva del Monte Salomón, la cual entre otras tareas, prestaba asistencia de comando y control de los grupos armados más organizados.

Con la caída de Alepo y la reconquista de Raqqa, las tropas sirias lograron ir recabando abundantes pruebas de la presencia foránea, e incluso tras la captura de Mosul en Iraq, el hallazgo de bunkers abandonados repletos de documentos que señalan la presencia de la CIA, han sido sin lugar a dudas algunos de los argumentos para ordenar la inmediata salida de la agencia y de todos sus asesores.

Pero no solamente los norteamericanos se han visto conminados a salir presurosos de Siria. Los agentes británicos que secundaban todas estas operaciones han ido abandonando el terreno. Según algunas informaciones, los instigadores británicos de la llamada Primavera árabe que destruyó a Libia en 2011 y que se proyecto para Siria, tras migrar al Kurdistán también han debido hacer sus maletas para volver inmediatamente a Londres (Red Voltaire.org. “El MI6 repliega su dispositivo organizador de Primaveras árabes”. http://www.voltairenet.org/article197278.html )

Sin lugar a dudas que ello se debe al efecto de la firma de la orden ejecutiva de Trump que detuvo la asistencia a los grupos armados y Londres no se quedaría a pagar los platos rotos.

A todo esto, el gasto que implico el adiestramiento por parte de la CIA a grupos “opositores”, revelan el doble fracaso en lo que respecta a la magnífica inversión que hubiera significado eliminar a Bashar Al Assad y hacerse con el control de las regiones de Deir Ezzor ricas en petróleo y gas. Mil Millones de dólares al año, gasto la CIA para solventar los gastos de reclutamiento, adiestramiento, armas y manejo de misiles antitanque guiados TOW (entre otros), han sido tirados a la basura. 

Tal como lo han analizado varios investigadores norteamericanos, EEUU hacía tiempo había perdido su guerra secreta contra Siria, solo que ahora era oficial (The Century Fundation.  https://tcf.org/content/commentary/america-already-lost-covert-war-syria-now-official/)  
Mapa de operaciones en Ersal

La situación en el terreno se hizo insostenible y se puede decir que la salida de las células de estas agencias de inteligencia era una cuestión de tiempo. Una cuestión de supervivencia y de proteger la poca clandestinidad que quedaba de las operaciones, hacía inevitable abandonar la región a costa de caer prisioneros de las fuerzas regulares tanto sirias como iraquíes.  Igualmente y pese a que muchas de esas bases secretas fueron súbitamente evacuadas, otras no corrieron la misma suerte e incluso en algunos casos, sus equipos y personal fueron atrapados en momentos que intentaban fugarse a países limítrofes.

Para peor, lo realmente malo para estos “agentes” era que aún no empezaba lo peor para ellos. Sin dudas, que el peso de años de dolor instigado por sus elucubraciones que desangraron a la región, serán cobrados con una dolorosa persistencia sobre sus humanidades. Para peor y como parte de la política de los gobiernos a los que sirven y de sus agencias, ellos simplemente no existirán y la suerte de sus vidas quedará olvidada con suerte en algún archivo oscuro de algún sótano gubernamental.

Era una cuestión de hecho y aunque los jefes de estos grupos que respondían de las directivas de su cuartel general en Langley, Virginia, hubieran recibido la orden de permanecer en sus lugares, ello hubiera significado un suicidio y la entrega en bandeja de plata, de todos los planes y equipos que se habían visto involucrados durante estos cinco largos años, destinados a tratar de conseguir el derrocamiento de Bashar Al Assad y el desmoronamiento de la República árabe.

Además no solo la CIA y el MI-6 estaban involucrados en todo esto. Como se ha podido comprobar en otras situaciones especialmente dentro de Siria, las agencias de inteligencia de los países petroleros como Arabia Saudita, Emiratos Árabes  y Qatar, de Turquía, Jordania y por supuesto Israel, se verían expuestas al escarnio público y político ante una recuperación masiva de los territorios ocupados por las bandas mercenarias.

Ahora las bandas armadas y las mismas organizaciones como “Al Qaeda”, “Al Nusra” y el “Daesh” están en jaque. El último golpe a sus aspiraciones se vio en el Ersal donde la resistencia chiita Hesbola capturo más del 70% de las montañas de la región haciéndose con varios escondites subterráneos donde se ocultaban centros de mando.

Lo que viene de ahora en mas es el juego de quién tuvo la culpa de que todo eso fracasara. Alguien deberá pagar las culpas en los libros de historia. Los puntillosos planes de engaño y muerte por los cuales Washington con la ayuda de la mano de obra saudita, trataron de recrear un yihadismo “antinatural” –desde la visión islámica- falso y carente de cualquier sesgo moral, hoy solo son cenizas humeantes.  








jueves, 27 de julio de 2017


EN LA MIRA



“BREAKOUT IT”

Más que un giro en la política de Washington, la última orden ejecutiva que deshace la colaboración de la CIA con los grupos mercenarios en Siria se parece a un cambio de estrategia ¿Qué truco se esconde detrás de esto?





Por Charles H. Slim
Justo unos días antes de que terminara el año 2016, la ofensiva del ejército árabe sirio y de sus unidades especiales “Tigre”, con el apoyo de  unidades de “Hesbola” y cobertura de la aviación rusa lograban rodear el último bastión de las bandas armadas que quedaban en el este de Alepo. La batalla fue feroz y la embestida de las fuerzas árabes fue certera saltando las últimas vallas para recuperar toda la localidad, la más importante para el comercio de Siria.

La prensa estadounidense y en especial los medios como The Washington post denunciaban masacres de civiles por parte del ejército de Bashar Al Assad y de la aviación rusa con la clara intensión de detener el avance y la reconquista de la ciudad.

En ese mismo momento en un muy bien equipado bunker escondido entre el vecindario que controlaba el “Jabbat Al Nusra” y el “Jaysh Al Islam” quedaron atrapados una docena de sujetos que aturdidos por el tronar de las bombas y la irrespirable atmosfera saturada de polvillo y olor a pólvora, azorados y aún aturdidos por el sorpresivo asalto de las tropas sirias se preguntaban entre ellos ¿Qué sucedió?

Para cuando entraron los soldados sirios y comandos rusos, la sorpresa sería mutua. 

Al parecer estos pretendían irse y para ello habían preparado algunos pequeños equipajes con variada documentación, pero se vieron atrapados por el fuego del asalto y no pudieron ni siquiera asomarse a la calle.  Equipos de comunicaciones sofisticados, celulares de última generación, línea de internet y un arsenal que pudo haber abastecido por un tiempo más a mercenarios que ya no tenían,  fue el escenario con que se encontraron los agotados combatientes sirios que habían logrado cumplir una de las misiones más complejas de toda esta guerra.

En la cara de estos sujetos con rasgos extraños, la sorpresa y el estupor lo decía todo. 

Mientras los altos oficiales del ejército y de la inteligencia siria se hacían presentes para tomar conocimiento del lugar y la situación, fueron obteniendo las identificaciones de algunos de los presentes y de otros que pese a no estar, habían dejado sus ID en esa base. Se trataban de agentes de servicios de inteligencia extranjeros que habían venido siendo los asesores tras bambalinas y el nexo de los grupos mercenarios con el exterior. En este episodio, agentes de la CIA, Mossad, MI-6, MIT y los Mukjabarat saudita, jordano y qatarí componían el sequito de estos valiosos prisioneros y que tras confirmarse su captura, representarían un dolor de cabeza para sus respectivos gobiernos (Al Manar. “Agentes de inteligencia extranjeros capturados en Alepo”. Publicación del 20 de diciembre de 2016. http://spanish.almanar.com.lb/39961 )

En realidad esto no era nuevo. Años antes (en 2015) los mismos iraquíes habían logrado capturar a elementos norteamericanos e israelíes en el desierto de “Tal Abta” al norte de Mosul, que estaban en misión de proporcionar ayuda nada menos que  al “Daesh”. Obviamente nada de esto se ventilaría por los medios hegemónicos que como el conservador “The Washington Post”, solo publicaba editoriales con historias dirigidas a culpar al gobierno sirio y por supuesto, a Rusia  (DiarioSirioLibanes. “Capturan asesores militares de EEUU e Israel colaborando con E.I.”. http://www.diariosiriolibanes.com.ar/Actualidad/Irak/Capturan-asesores-militares-de-EE.UU.-e-Israel-colaborando-con-E.I )

A ello se agregarían las continuas denuncias de los milicianos sirios, iraquíes y de asesores de inteligencia iraníes que reportaban vuelos de aprovisionamiento destinados al “Daesh” e incluso, el rescate de miembros de éste grupo ante los ojos atónitos de las fuerzas regulares iraquíes, quienes en algunos casos lograron derribar aparatos de la Real Fuerza Aérea británica con su cargamento intacto. Todo ello, en el marco de una política de apoyo a la “Hermandad musulmana” destinada a destruir a los estados árabes laicos de la región y que  fu impulsada desde la Casa Blanca por la administración de Barak Obama y secundada activamente por la entonces Secretario de estado Hillary Clinton.

En apariencias esta política esquizofrénica y cínica de hablar por un lado de combate al terrorismo y de fomentarlo clandestinamente por el otro, habría llegado a su fin. 

Nuevamente, el presidente norteamericano Donald Trump vuelve a causar estupor con sus decisiones de estado que parecen retomar su discurso pre electoral cuando allá por mediados de 2016, clamaba a bocajarro que “Obama apoyaba al ISIS” y que había que “terminar con los intervencionismos en otros estados”. Pues al parecer tomo la decisión definitiva y ha firmado los decretos y órdenes ejecutivas  correspondientes para que se oficialice detener las ayudas de la CIA a estos grupos. El terrorismo como arma geopolítica habría terminado.

Bajo el pretexto de apoyar a la oposición “moderada siria”,  algunos señalan que en 2013 la CIA comenzó con los asesoramientos y prestación de ayuda a grupos armados como el ESL y otras unidades con elementos no sirios, algo que incurrió en una intervención ilegitima contraria a la legislación internacional. Aunque ese era el argumento para justificar dicha intervención, lo cierto era que las armas, equipos y dinero llegaban a “Al Qaeda”, “Jabbat Al Nusra” y al “Daesh” lo que, al ser filtrado a la opinión pública,  terminó siendo una contradicción que la administración Obama trato de explicar con retorcidos argumentos aunque sin suerte.

Pero en realidad las injerencias de la CIA y de actores privados en todo esto (en lo que hace a Siria), viene al menos de un año antes allá por el 2012 cuando bajo la dirección del entonces jefe el Gral David Petraeus la agencia, junto al apoyo de Tel Aviv y del gobierno de Azerbaiyán,  se encargo de gestionar la adquisición y transporte de armas desde Bulgaria, una operación que seguiría siendo dirigida por Petraeus desde su oficina en la firma privada “KKR” y que fue encubierta desde Naciones Unidas por el Secretario General adjunto el estadounidense Jeffrey Feltman (Red Voltaire.org. “Surgimiento de una nueva alianza en el Gran Medio Oriente”. http://www.voltairenet.org/article197247.html ).

Tras la recuperación de amplias zonas que habían estado en manos de los grupos mercenarios, las evidencias materiales de este tráfico se cuentan a toneladas en zulos y depósitos hallados por la investigación de una reportera búlgara y que hoy se hallan a consideración como material probatorio en un futuro proceso judicial.


Con la nueva disposición de Trump, los mercenarios que fueron reclutados por EEUU en la era Obama y que trataron de destruir a la república árabe Siria quedaron abandonados por su cuenta y a la retirada de los equipos de la CIA y asesores militares norteamericanos sin lugar a dudas, deben haber dejado varios cadáveres en el camino, especialmente de los que podrían comprometer –aún más- todo éste bochornoso episodio de la historia de la cual los EEUU y sus socios algún día deberán responder. 

lunes, 24 de julio de 2017

ILM-MIDDLE EAST






“GUERRA PSICOLOGICA”

Cuáles serían algunos de los argumentos y los interesados para revivir el personaje llamado “Abu Bakr Al Bagdadi” en toda la tragedia del Medio Oriente?





Por Charles H. Slim & Ali Al Najafi
A medida que avanzan las tropas sirias en su recaptura de la ciudad de Raqqa y en medio de las aberraciones que se han testimoniado en la recaptura de Mosul, han comenzado a correr algunos extraños rumores que se han diseminado por algunas fuentes de dudosa credibilidad, o al menos, de sospechosa imparcialidad. “Al Bagdadi está vivo” clamaba un reporte de la inteligencia de las Peshmerga kurdas, rebatiendo las afirmaciones del estado Mayor ruso que en junio pasado había confirmado haber eliminado a Abu Bakr Al Bagdadi y a una docena más de sus comandantes en una reunión secreta que se llevaba a cabo en una locación en los suburbios de Raqqa.

De esta forma Lahur Talabani, jefe de la inteligencia kurda –Zanyari- muy ligada a la CIA y al Mossad israelí, algo que le da un aroma muy enrarecido a la supuesta afirmación, volvía a poner en el centro de la escena el tema del líder de esta franquicia. 

Algunas fuentes no oficiales han dejado entrever que la mukjabarat del régimen de Bagdad comparte esto algo que no asombra ya que la misma está controlada por la CIA. En ese sentido el jefe del Ministerio del Interior iraquí Abu Alí Al Basri se puso a tono con los anuncios de Talabani y Washington, desmintiendo que Bagdadi haya muerto en los ataques realizados por la aviación rusa. Ahora bien ¿Qué se busca con este anuncio?  Aunque cueste creerlo, es seguir con la guerra y que la misma se extienda por mucho tiempo más.  

El gobierno autónomo kurdo iraquí y los grupos armados  kurdos sirios apoyados por EEUU e Israel tienen mucho que perder con un cese al fuego y mucho más con una victoria de las fuerzas de Damasco, es por ello que hay que mantener la inestabilidad a como dé lugar.

Pero también aquí hay intereses que están más allá de las ganancias siderales que han venido usufructuando los vendedores internacionales de armas y los mismos gobiernos que están involucrados en todo esto. Los interese privados y de agencias como la CIA tomaron la posta para mantener la agresión en la región  (Red Voltaire. “Armamento por miles de millones de dólares utilizado contra Siria”. http://www.voltairenet.org/article197141.html ) Intereses geopolíticos de relevancia y que chocan entre sí, se están jugando en todo esto.
Kurdos sionistas

Para los kurdos, la violencia en la región es el ámbito propicio para continuar sus despliegues sobre los territorios árabes iraquíes y sirios con la intensión de anexarlos a su ideario de un “Gran Kurdistán” y con ello, los recursos petrolíferos y gasíferos de los estados árabes. En ese plan y bajo la excusa del “Daesh” han venido confiscando territorios del norte de Mosul en Iraq y Deir Ezzor en Siria, causando entre otras consecuencias, el exilio forzado de pobladores árabes sean sunitas, chiitas, cristianos o alawitas.

Más allá que a los kurdos le conviene continuar con la situación de caos, es a EEUU e Israel a quienes les interesa mantener este Status Quo y si necesitan inventar un pretexto más para ello, por qué no revivir a un fantasma como Abu Bakr Al Bagdadi? La lacónica afirmación del Secretario de la Defensa de los Estados Unidos Jim “Perro Loco” Mattis que no ofrece argumentos sustanciales para ello, confirma esta postura que sin dudas rodea de más sospechas la veracidad del anuncio.

Otro funcionario estadounidense como Nicolas Rasmussen, a cargo del “Centro Nacional de Lucha contra el Terrorismo”, avalo la postura de Mattis y dijo que “no tiene claro que el líder del EI esté muerto”, entre otros señalamientos carentes de argumentos. Las conclusiones de estos funcionarios estadounidenses, no solo chocaban con los anuncios del Ministerio de Defensa de Rusia sino también con el anuncio del “Observatorio Sirio para los Derechos Humanos” que además de operar para la desinformación contra el gobierno de Bashar Al Assad, está manejado por el MI-6 británico. 

Entonces muchos se preguntarán ¿Pero que se gana con anunciar que Bagdadi está vivo; de qué sirve ello? Se trata de mantener vivo un mito funcional, de retroalimentarlo. 

Su figura sin dudas –y tras pocas expectativas de sus mentores- sirvió a los propósitos de focalizar, atraer y aglutinar seguidores tanto en la región como de todo el mundo. Si se lo revive, sus seguidores mantendrían la esperanza de que la “lucha por el Califato” no estaría perdida y de ese modo la agitación y el proselitismo del “ISIS” no se detendrá.

Si nos ponemos a ver qué significa todo esto, nadie negaría de que se trata de una abierta forma de patrocinio del terrorismo, algo que curiosamente pareciera no haber sido advertido por Naciones Unidas.

Hoy se puede ver la devastación que EEUU y sus colaboracionistas han causado sobre Mosul y otras localidades cercanas.  A los inclementes bombardeos sobe la ciudad que mato a miles de civiles y redujo a polvo a la infraestructura de la ciudad, hay que agregar la instauración de una atmosfera de terror, esta vez, de los cuerpos de seguridad de Bagdad quienes están cometiendo cuantas atrocidades se les viene en gana con el pretexto de sospechar que han sido colaboradores o simpatizantes del “Daesh”.

Sin dudas que los asesores estadounidenses y británicos que acompañan a estos cuerpos armados y que supervisan estas torturas, ven con beneplácito que ello continue ya que ello esta retroalimentando el odio de la población y justificado la existencia de un “Príncipe e los Creyentes” como Al Bagdadi sin preguntarse cada ciudadano iraquí si es real o ha sido una invención de las agencias de inteligencia occidentales.

Por supuesto y sin lugar a dudas de que para que todo este engaño funcione bien aceitado, se requiere de la colaboración de elementos locales que como ya se venía sospechando, vincula a varios ex funcionarios de inteligencia de Saddam Hussein.

Otra finalidad posible es, la necesidad de mantener cubierto el cupo de liderazgo extremo dentro del descontento y humillado sector sunita de la región, especialmente en Iraq, evitando que pueda ser ocupado por verdaderos líderes árabes quienes realmente se hallan y movilizan al servicio de la causa por sacar a su pueblo de la miseria, la corrupción y la persecución que tan funcionalmente ejecuta el régimen de Bagdad y que a EEUU le conviene mantener.