sábado, 2 de diciembre de 2023

 

BIBI ¿LO SABIA?

¿Por qué lo sucedido el 7 de octubre no pudo suceder sin una buena ayuda interna? Netanyahu podrá hacerse el distraído sobre esto, pero ¿Hasta cuándo?

 

Por Yossi Tevi

Tal como muchos nos cuestionamos lo sucedido en la mañana del 7 de octubre en territorio adyacente a Gaza en la Palestina ocupada, hay muchos huecos inexplicables en el comportamiento omisivo del régimen de Tel Aviv y más puntualmente del silencio de Netanyahu y su gabinete tan pronto se conoció la situación.

Ha quedado claro que Hamas y las demás agrupaciones de la resistencia palestina que participaron en la operación “Inundación de Al Aqsa” no son unos improvisados ni mucho menos incapaces, pero eso aún no logra explicar la formidable mano que los militares del FDI, la inteligencia y la contrainteligencia le dieron a la concreción exitosa de esta acción.

El estado de Israel por su naturaleza y la forma en que se instauro se ve condenado a vivir en el sobresalto y dormir por las noches con un ojo abierto y eso no es un triunfo. Los elogios y la mitología mediática en rededor de su eficacia en el área de inteligencia podrá ser un material interesante para libros y libretos de películas en Hollywood pero no es motivo de algarabía para los israelíes ya que a medida que su estado comete más crímenes contra la población palestina, además de su debilidad deja en evidencia la necesidad de más vigilancia en prevención, llevándoles a donde están hoy, cercados dentro de un verdadero estado policial.

Parece una ironía ¿no? Considerarse una democracia pero obrar como los peores regímenes dictatoriales como lo fue el Apartheid sudafricano del cual, Tel Aviv fue amigo. Son las ironías del destino diría un amigo.

Pero en lo que respecta a lo sucedido el 7 de octubre pasado, los medios en occidente (como ya es una costumbre) se han mostrado remisos a profundizar sobre estas opacidades. Y es que desde que salieron a la luz muchas inconsecuencias en lo que sucedió y cómo sucedió, las preguntas molestan de forma caustica al establecimiento sionista. Cualquier cuestionamiento del mundo “goyin” ya trata de ser pintado como “antisemitismo” recordando que las masacres que las FDI ha llevado a cabo contra los civiles palestinos, son crímenes horribles contra un pueblo semita. Pero ¿Cómo acallar sus propios ciudadanos especialmente los familiares de los cautivos y paisanos alrededor del mundo que preguntan con sagaz puntualidad y persistencia sobre lo ocurrido?

Todos esos cuestionamientos están dirigidos a un solo hombre: Bibi Netanyahu. Sobre lo que podrían haber sabido sus funcionarios supremacistas poco importa porque todos saben que es “Bibi” quien tiene el acceso a las llaves de las fuentes más directas de la inteligencia ¿Qué el AMAN no sabía nada? No cuadra ¿Qué el Shin Bet no tenía idea? Menos cuadra ¿Qué el Mossad no tenía una sola información sobre lo que se estaba preparando y su inminencia? No es creíble.

Esta supuesta y generalizada ignorancia de lo que iba a pasar es lo que los medios occidentales tratan de instaurar para mantener el discurso tuerto, pero va quedando muy evidente que no es posible que esas intenciones prosperen. El informe que se elabore luego que las armas se callen (Como el informe Winograd de 2006), no sería creíble si es ejecutado bajo el régimen de Netanyahu. Simplemente no hay garantías de imparcialidad ni de que la verdad sea expuesta ¿Por qué? Porque nadie que es parte de un asunto puede ser juez a la vez. Si realmente los israelíes y en especial los familiares de quienes murieron a manos de Hamas o del fuego de las mismas FDI (por la implementación de la doctrina “Hannibal”) quieren saber la verdad deberán pelear por una comisión desintoxicada y aislada de las conexiones de Netanyahu y sus partidarios.

Un asunto que va paralelo a lo que ha sucedido tiene que ver con el negocio de las armas y que por el volumen del abastecimiento que EEUU y la UE les ha proporcionado, refleja un fabuloso negocio del que no solo se benefician las industrias militares occidentales (en especial la estadounidense) sino también, a los mismos empresarios de armas israelíes y claro también el señor Netanyahu sin dudas, el centro de los cuestionamientos sobre lo que ocurrió. Detrás de ellos, vienen frotándose las manos los dueños de emprendimientos inmobiliarios para crear nuevos asentamientos para colonos (si logran barrer la población gazatí) lo que se traduce en otro fabuloso negocio en el cual intervienen (y como podía ser de otro modo) empresas estadounidenses, británicas y de algún otro país satélite de estos.

Así es como funciona la economía de la democracia liberal angloestadounidense (de la cual Israel es uno de sus tentáculos), aunque eso ya se está acabando.

¿Pero eso sería suficiente dinero como para sacrificar a su propia gente? Los 1200 israelíes asesinados y los 240 capturados no fue solo responsabilidad de Hamas. Hay muchas cuestiones que no cierran y que aunque los medios occidentales las oculten (o quizá las ignoren), ya son conocidas para la opinión pública. Solo hay que mirar para atrás para ver lo que el sionismo puede hacer para lograr un objetivo. Solo para citar un ejemplo, solo recuerden el caso del buque “SS Exodus” repleto de refugiados judíos que intentaban entrar ilegalmente en Palestina tras llegar en 1948 al puerto de Haifa. Los atentados en edificios públicos británicos o el bombazo en 1946 contra el Hotel Rey David que los grupos sionistas trataron de hacer pasar como de autoría árabe, pone en relieve con quienes tratamos. En la llamada Operación “Yiftach” todo era válido. El lema muy bien conocido para los sionistas del Mossad es “por la vía del engaño harás la guerra” y en ello va matar a quien sea necesario.

En esta lógica entran por supuesto sus “aliados”. En 1967 en momentos que Israel pretendía extenderse al Sinaí, ataco al buque de inteligencia electrónica estadounidense “Liberty” sabiendo su procedencia. No hubo confusión o error de los pilotos, tenían órdenes de hundir al buque para que la información recopilada nunca llegara a Washington.

En la mañana del 7 de octubre pasado, la guardia israelí de todas las bases que cercan a la Franja de Gaza no solo estaba relajada sino con personal reducido compuesto especialmente por mujeres. “Bibi” había autorizado un día antes reducir el personal a pesar de que había sido avisado de que algo estaba por ocurrir. Como alguien diría, dejaron la puerta entreabierta para que Hamas pudiera entrar. Es posible que “Bibi” haya desoído la advertencia del jefe de la inteligencia egipcia Kamel Abbas por considerarlo un embuste, pero ¿Qué hay del Mossad, acaso no tenía la misma información de los egipcios? Y ¿Por qué el jefe de la inteligencia doméstica Shin Bet se hallaba reunido con todos los responsables de la seguridad justo en esa misma mañana?

La lista de incongruencias sigue y muchos israelíes con sentido común y de a pie se preguntan ¿Tampoco funcionaron los sensores del perímetro ni las detonaciones que abrieron las brechas fueron escuchadas por las brigadas que estaban estacionadas en las inmediaciones? ¿Podría ser posible que Tel Aviv lo haya dejado pasar para precisamente, lograr barrer a los palestinos de Gaza y anexarla bajo el dominio de Israel? Preguntas que aún no tienen respuestas pero que Benjamín Netanyahu y sus principales lugartenientes deberían responder.

Por lo pronto, a Bibi no le conviene el alto al fuego y mucho menos una negociación de paz. Si pudiera lograr expulsar a los palestinos de Gaza y destruir a la resistencia podría silenciar cualquier investigación que se quiera iniciar.

 

 

 

viernes, 1 de diciembre de 2023

 

SINKING CAUSES

After a tortuous and tortuous investigation into the causes of the sinking of the submarine ARA San Juan and the spying on the families of its crew members, the question is: Who is the enemy?

 

By Sir Charlattam

The surprising news that the Argentine federal justice system has decided to acquit former president Mauricio Macri and all his military and intelligence staff in the matter of spying on the relatives of the submarine “ARA San Juan” only confirmed the rumours that we already had in our possession barely a month and a half earlier, which had foreshadowed this possible outcome.

It comes as no surprise to those in this country who know how the rails of politics and federal justice move in parallel, making it clear once again that “power is still a sign of impunity”.

It can be said that silence is assured and no one will try to bring this matter up again, although that will have to be seen with the passage of time.

Those who are also breathing a sigh of relief are those in the Foreign Office and, of course, HM Royal Naval Staff who are involved in one way or another in the control of these waters. While MI6 was carefully and quietly following the course of this court case, relying on its internal sources within the state and whistleblowers in the media, there was little concern about any last-minute hiccups or hiccups. One of the concerns that was being taken into account was the witnesses proposed by one of the accused, Captain Claudio Villamide, who shortly after Javier Milei's election victory was announced, more precisely on 22 November last, withdrew this evidence and the proceedings were closed. Very curious, don't you think?

While it is true that these witnesses were going to talk about a hypothesis of “casualty” due to alleged technical issues of the submarine itself, a euphemism that was used to cover up what really happened, which was nothing more than an external attack involving a naval unit of the Royal Navy that was on that date in joint operations with the Chilean Navy and assistance from the US Navy at a time when a series of practices of new classified weapons systems were being carried out.

The Argentine Navy search party arrived at the exact spot where the submarine collapsed and clearly saw the remains of the vessel, such as the characteristic oil slick from the diesel engines and some floating debris adrift. Even the electronic intelligence station in Port Stanley monitored every operation of the Argentines and the communications that went out from that task force to their bases on the mainland. Of course, the Argentine admiralty, which translates into the government of the day, lied about not finding anything and did not lift a finger to ask London for reports on these activities.

This was a major headache for the Ministry of Defence of the then president Mauricio Macri, a friend of Britain who year after year endorses his presence at embassy cocktail parties and is trusted by the British establishment.

It was embarrassing that this inconvenience should arise at a time when there was a friendly government in Buenos Aires and auspicious moves to bring the issue of Falklands sovereignty under the table, but the material circumstances of the Argentine military's lack of with it the lack of electronic intelligence on their side that would have caught the moment of the coup and the lack of a political opposition equal to the circumstances that was not bought off, helped, on the advice of Naval Intelligence (DNS&ICP naval branch intelligence) or rather SIGINT and MI6, to disguise the affair as a maritime accident.

The families of those crew members did not buy this story and their lawyers began to scrutinise all the factual circumstances of that day. They did not just rely on what the navy was going to tell them. Moreover, they were not the dupes the government thought they were and realised themselves without the need for sophisticated electronic equipment that they were being spied on. Added to that, the already known collusions of the federal judiciary in this country with government agencies (especially intelligence) foreshadowed delays and several attempts to shut down the investigations. Hiding the truth from them would not be a problem unless other elements and unforeseen factors appeared that their reports could not explain with reasonable argumentation.

The communications and contacts that some of them had with the Russian naval attaché's office changed the perspective of the investigations and this made the Argentine military, who knew what had happened in reality, very nervous. But it made President Macri and his defence minister especially nervous, as they would see their image in the eyes of public opinion and, worst of all for him, with his friends in London, plummet.

For the Foering Office and the head of MI6, the most worrying aspect was Russia's involvement, which, contrary to what many bureaucrats in the Ministry of Defence (MoD) would have expected, could expose the truth of what had happened. Contrary to that prejudice, the Kremlin would attach importance to the relatives' requests to such an extent that they would send a special naval mission to help with the exploratory vessel “Yantar” ship.

For the British Admiralty and the Foreign Office, this threatened British interests.

Although the British intelligence community considers Argentina to be a low danger zone and without considerable risk to London's intelligence activities in the South Atlantic and on the continent, Moscow's meddling would for some translate into the FSB (Russian foreign intelligence) entering the garden of Anglo-American interests without the unwary Argentines realising it.

Macri was warned of this displeasure by London and on the advice of his security circle (close to MI6 and Mossad) he took the initiative to spy on the family members with human resources, interception of communications and especially of their private phones (with "Pegasus" software), despite the existing prohibition and the illegality of the method used for this purpose. To do so, he relied on the technology provided by Israel, even though he has continually denied it.

His advisors, especially those in charge of state intelligence, Silvia Majdalani and Gustavo Arribas, were the links that made this possible and for this they were prosecuted. Today, because of these things in this country, everything has come to nothing.

What happened with the submarine “ARA San Juan” was not an accident. It certainly had structural flaws as a result of the poor budget that the CFK government allocated for the maintenance of the fleet and in particular this vessel. In the “Whitehall” archives, there could be enlightening and very compromising documents of this event. It is likely that at the time of being pursued, failures in the underwater navigation systems prevented the immersion.

Even those failures would have forced it to surface and it was precisely at that time that it was attacked with an experimental plasma weapon system (microwave laser) which is nothing more than a variant of the existing land-based, aircraft-mounted ones. Perhaps this weapon only scorched the submarine's electronics or even its 44 crew members; or perhaps after disabling all seaworthiness they were finished off by surface torpedoes launched from a Chilean plane or from a British helicopter on board.

But however it happened, why was not a single body of the crew found?

 

 

martes, 28 de noviembre de 2023

 

PENDULARIDAD

¿Cómo evolucionará la geopolítica argentina ante su nueva realidad política doméstica?

 

Por Charles H. Slim

Tal como lo habíamos adelantado antes, el cambio de gobierno en Argentina representaría un repentino y descarado corrimiento geopolítico hacia una extrema derecha muy peculiar. Esta situación era tan previsible que solo bastaba con mirar unos años atrás y ver como se reacomodaban quienes hasta unas horas antes de saber que perderían las elecciones, habían sido fervientes antimperialistas.

Ese fue el caso tras la salida en 2015 del gobierno kirchnerista que (en lo geopolítico) supuestamente estaba en la vereda de enfrente de la agenda globalista encabezada por EEUU. Tan pronto perdieron la elección tanto Cristina Fernández como sus lugartenientes desaparecieron de escena no por una decisión planificada sino, porque no existía (como aún hoy) seriedad en sus posiciones.   

Es la historia de una nación que apenas puede reconocer una historia y una identidad común.

La situación socio-económica actual del país es peor de lo que se muestra en los medios y más allá de que Milei y su gente ya han pactado arreglos financieros con el estado de Israel y con los lobbies sionistas estadounidenses, eso no garantiza que esa ayuda sea suficiente y este destinada para beneficio de la población argentina.

Pero en lo que a la geopolítica refiere, el giro que tomará el país a partir de la asunción del presidente Milei el 10 de diciembre próximo, ya prevé un posicionamiento cuando menos, muy crítico y discutible.

Tal como lo prometió en su campaña, el presidente Milei y su gobierno se alineará con EEUU e Israel, lo que no es poco, máxime si tenemos en consideración las circunstancias geopolíticas actuales en las que ambos actores se hallan involucrados y las consecuencias humanitarias de las que son principales creadores y responsables. Para Washington esto es una excelente noticia que redundará en una ampliación del mapa geo-estratégico dentro del marco de guerra que mediante la OTAN está llevando adelante contra Rusia y pretende ampliar a China.

Para Londres también es música para sus oídos ya que, más allá de que Milei fue puesto en evidencia en sus simpatías por Margaret Thatcher, sin dudas abrirá aún más la puerta de distención y olvido sobre el asunto de la soberanía por las islas del atlántico sur.

Para Tel Aviv, también representa una muy buena noticia ya que, además de los intereses que tiene sobre los vastos territorios desolados de la Patagonia, con un gobierno abiertamente pro-israelí podrá desarrollar y tender con mayor facilidad sus redes sionistas para proyectarlas sobre todo sud y centro América. El ya confirmado puesto de Patricia Bullrich en el Ministerio de seguridad de la nación y para CABA a Waldo Wolf y Diego Kravetz está informando la línea directa que habrá entre Tel Aviv y los organismos de seguridad e inteligencia argentinos. Es por ello que no es casual el constante apoyo y argumentación que desde medios capitalinos, los simpatizantes sionistas le dan a la brutal campaña israelí sobre la Franja de Gaza.

Como todo en Argentina, el sincretismo suele tomar formas grotescas. Eso es lo que se ve con esa mezcla de simpatías políticas sionistas expresadas por el mandatario entrante que se mezclan con su religiosidad adoptada, quien recordemos está en pleno proceso de conversión al judaísmo conllevando con ello, una confusión identitaria que no agrada a muchos judíos ya que sionismo como ideología política (partidarios del estado de Israel) no significa ser judío étnico.

Pero las preferencias internas de una persona no deberían influir en decisiones gubernamentales.

Esta particularidad nos recuerda mucho a otro mandatario. Carlos Menem era de familia siria y credo musulmán, pero para llegar a la presidencia en momentos que constitucionalmente se requería la pertenencia al catolicismo, no tuvo el menor escrúpulo en convertirse y poner al país bajo la égida de Washington. Tal como lo plantea hoy Milei, Menem se subordinó de forma incondicional a las políticas de La Casa Blanca y el país termino pagando por ello.

Javier Milei pareciera redoblar esa posición obsecuente y tal como Menem, no solo se alineará automáticamente a Washington, sino que incluso -bajo su máscara de converso al judaísmo- estaría determinado a respaldar sin condiciones las cruentas políticas y acciones de Israel contra la población palestina. En este último punto, la intensión de trasladar la embajada argentina a Jerusalem es una señal política provocativa y contraria al status internacional que tiene dicha ciudad que demuestra un reduccionismo simplista y una ominosa parcialidad sobre la naturaleza del conflicto.

Al mismo tiempo y en concordancia con sus aliados de “Juntos por el Cambio”, el mandatario tiene intenciones de poner a la Argentina dentro de los planes estratégicos de la OTAN en momentos que las tensiones con Rusia y China van en ascenso. Precisamente, la comunicación que tuvo Volodymyr Zelensky con Milei para felicitarlo por su triunfo, plantea una señal altamente preocupante y a la vez, una innecesaria provocación para la Federación de Rusia ya que, esta postura revela un alineamiento con las agresivas políticas atlantistas que dicho sea de paso, sabe que el régimen de Zelensky tiene los días contados.

Una de las promesas del libertario y sus aliados de JXC es sacar a la Argentina del BRICS que recordemos, llevo adelante una cumbre extraordinaria por el genocidio que se lleva a cabo en la Franja de Gaza en la cual se oficializó la denuncia de Sudáfrica contra las FDI israelíes ante la Corte Penal Internacional.

Así una vez más, podemos ver esa pendularidad en la política argentina que no se produce por el cambio de sectores ideológicamente antagónicos y/o verdaderamente convencidos de las posturas que asumen. Somos testigos de la misma y cancina maniobra oportunista y simplona que todos los gobiernos -civiles y militares- que han venido pasando desde la mitad del siglo XX hasta el presente creyendo que recostándose sobre EEUU se hallaran las soluciones para sus problemas domésticos. La última experiencia en ese sentido la vimos con Menem en los noventas cuando tratando de agradar a La Casa Blanca para resolver los crónicos problemas económicos del país, ofreció su ayuda en la crisis entre Iraq y Kuwait que terminó en la guerra de 1991 sin obtener al final ninguna ganancia geopolítica o económica sustancial.

Milei y quienes lo secundan no innovan en ello y al parecer, estarían dispuestos a saltar al barro geopolítico con las mismas esperanzas. Como sucedió con todos sus antecesores, ponen por delante sus preferencias y convicciones personales por encima de cualquier planificación de largo aliento que tenga en cuenta la situación geopolítica real del estado argentino y de las circunstancias globales, considerando el contexto regional donde se ubica y de allí considerar las posibilidades de conectarse con el mundo. Tirar por la borda las relaciones con China, provocar a la Federación de Rusia con posicionamientos basados en sus simpatías personales y que no hacen a la histórica geopolítica del país y alinearse a un estado como el de Israel que (desde hace 75 años) viene violando además de las resoluciones de Naciones Unidas, los derechos humanos de la población árabe-palestina no puede considerarse como muy auspiciosa, salvo claro, para la elite local que tiene intereses estrechos con ellos.

Aún no ha asumido el cargo y el tiempo dirá cómo evolucionará su gobierno rabiosamente atlantista.