sábado, 4 de abril de 2020


"COVID-19 ¿UNA PANTALLA GEOPOLITICA?"
Queda claro que la actual pandemia destrozara la economía global que hemos conocido, pero ello ¿Esta siendo usufructuado por los poderes centrales para profundizar sus planes geopolíticos?


Por Charles H. Slim

El título de éste articulo no quiere decir que el virus no sea una alarmante realidad aunque, pareciera haber esfuerzos para desviar la atención de su verdadero origen. Pero la puesta en marcha de algunos acontencimientos en torno a ciertos países orquestados casualmente por EEUU, aprovechando la psicosis creada por la Corporación de medios y sus repetidoras alrededor del globo, pareciera reflejar que se está utilizando la crisis pandémica para cubrir el desarrollo de varias operaciones militares que tienen un notorio fin geopolítico y estratégico.

Cuando la mayoría de la gente en el hemisferio occidental esta siendo bombardeada dia y noche con noticias e informes catastrofistas –ampliamente exagerados- sobre el incremento de victimas del COVID-19, otros están sufriendo además de esta pandemia, planes de agresión inminente y otros ya vienen sufriendo la agresión directa y brutal sin cuartel que no puede ser visualizada masivamente por el acaparamiento deliberado del espectro informativo.

No hay nada de “conspiranoia” como Washington y sus adeptos de los medios y sus periodistas alrededor del globo tratan de alegar cada vez que la elite anglosajona quiere tapar la realidad. Esa táctica fue la usada por George W. Bush y sus funcionarios cuando fueron enfrentados con sus falsedades y mentiras lanzadas desde 2002 sobre las supuestas armas de destrucción masiva de Iraq y las pruebas irrefutables de que sus fuerzas (en 2004) estaban llevando a cabo torturas, violaciones y ejecuciones en Abu-Graib y otra veintena de campos de concentración y torturas ocultos en Iraq y muchos otros más alrededor del mundo.   

Hay varios factores que están jugando para movilizar estos planes y uno de ellos es el peligro que corre “la reelección de Trump”. Y es que la actual situación de la Pandemia ha sido como un tiro por la culata para su administración. El pilar fuerte de su plataforma electoral la economía y el empleo pleno que logro mantener por 113 meses consecutivos, producto de esta crisis se ido al garete, tras el duro golpe a la productividad de la nación.

Mientras la bolsa de Wall Street reacciona con alternadas caídas espasmódicas producto de la especulación y la caída del precio del petróleo, el desempleo se ha disparado a niveles críticos registrando solo en el mes de marzo más  de 700.000  empleos perdidos y unos 10 millones de solicitudes para el cobro del seguro por desempleo (un cheque de 1200 dolares).

Aun falta que se elaboren los informes sobre sobre hasta donde llegara el desempleo en el mes de abril, lo que ya esta dando pautas aproximativas del impacto sobre el mercado laboral norteamericano. Se calcula que en este mes del abril llegara a los 15 millones algo  que se publicara recién en el mes de mayo.

Para colmo del desastre, el Departamento del Tesoro ha comenzado a imprimir billetes hasta alcanzar dos billones dólares con la intensión de financiar a los mismos bancos que en parte, fueron parte del actual ecatombe financiera.

Sumado a esto, tras el menosprecio de Trump a la peligrosidad de la pandemia  que causo una avalancha de infectados por el COVID-19 dentro de los EEUU, incrementada en forma apocalíptica en ciudades populosas como New York y San Francisco que ha causado hasta hoy 8000 muertos, ha desatado una lluvia de críticas que obviamente son capitalizadas por la oposición. Al parecer algo no fue bien calculado o tal vez, fue orquestado deliberadamente para que Trump fuera el “cabeza de turco” para desterrar a tan odiado inquilino de la Casa Blanca y al mismo tiempo tapar a los verdaderos beneficiarios de esta calamidad. Nadie se olvide lo que esto esta causando a la economía global.

¿Quién es el gran culpable de este desastre económico y sanitario estadounidense? Todos obviamente gritan al unisono “Donald Trump” ya que fue el presidente norteamericano quien desde un primer momento desprecio el riesgo de mantener a la población sin un control epidemiológico responsable ¿Pero por qué creen que tomo esta peligrosa determinación? Las respuestas podrían ser dos: Una se rumbea por lado de que el chivo expiatorio para culpar de este brote era China y cuanta mayor cantidad de infectados se produjera, mejor para Washington, La otra es simplemente: “un gasto innecesario”.

En apoyo a la primera respuesta, se lanzaron a rodar todo tipo de argumentaciones provenientes de diversos sectores de la política y los medios. Las que echo a rodar el Secretario de Estado Mike Pompeo refieren a una culpabilidad exclusiva de China afirmando que la actual situación se debe  al “virus de o la infección china”. Otros son tan delirantes que nacidos de su obsecuencia suenan poco creibles. Uno de ellos es el difundido por el conductor televisivo peruano de Jaime Bayly –muy aplaudido por los liberaloides argentinos- quien con su acostumbrada verborragia afirmo que China era responsable de todo esto y que alli los muertos se contaban por millones y sus cuerpos estaban siendo incinerados para hacerlos desaparecer. La descripción es la de un verdadero holocausto chino, acusando al gobierno de Pekin de ser inhumano y criminal pero ¿Hay pruebas de ello?

Lo habíamos dicho antes, cuando Trump puso a su vice  el fanático sionista Mike Pence al frente del Comité de Emergencia por el Coronavirus quien con el apoyo del Lobbie sionista estadounidense, sus activos de las iglesias evangelistas y otras corrientes cristianas neosionistas, comenzaron a predicar que este virus era “un castigo divino”.  De ser cierta esta última tesis, EEUU parece haber incurrido en las preferencias de las iras del “señor” ya que los últimos números de infectados en New York solamente, hacen palidecer las contabilizadas en China. Por supuesto que los medios argentinos nada van a comentar estos entretelones mesiánicos de la realidad política estadounidense que tiene un alcance global.

Pero todo éste circo de “aislamiento” tiene otro propósito que en los últimos días ha venido quedando expuesto.

Los hechos son evidentes. Mientras EEUU y sus aliados británicos e israelies elaboran y llevan adelante planes para generar nuevas guerras que fastidiaran a miles de personas, Cuba ofrece su colaboración a los países que se ven azotados por este virus dándole un valor agregado a su política externa y a la comunidad internacional. Cuando se dio a conocer que Cuba le había proporcionado a China un medicamento (Interferon) que demostró ser eficaz para combatir la infección elaborado por sus propios virólogos, no faltaron los ninguneos y las descalificaciones de los medios y periodistas anglófilos y sionistas que operan desde Argentina.    

Asimismo estos mismos sectores hacen la vista gorda a las acciones que en forma paralela EEUU y sus aliados, llevan adelante contra la soberanía y las poblaciones de otros países. El anuncio del Departamento de Justicia de EEUU de poner una recompensa a la cabeza del presidente venezolano Nicolás Maduro y los inmediatos movimientos militares que se están llevando a cabo en torno a Venezuela son la prueba de ello.  Las acusaciones fueron respaldadas por informes de inteligencia y avaladas por los prejuiciosos comentarios el Secretario de Estado Mike Pompeo del Departamento de Estado y por Mark Spert del Departamento de Defensa dejando en evidencia, la clara tendencia política que sustenta aquellas acusaciones.

Bajo la excusa de la supuesta lucha contra las drogas y anunciando que para ello cuenta con el apoyo de 22 naciones, Trump y su administración ordeno duplicar la presencia militar en el Caribe y centrando sus objetivos en torno a Venezuela. Recordemos que Colombia es la base de operaciones de las tropas norteamericanas en la región y sede de la OTAN para el hemisferio. Todo apunta a un posible intento de invasión.

Por otra parte y en la misma sintonía, sus aliados británicos también aportan sus propios esfuerzos a la campaña estadounidense en el Caribe remitiendo unidades navales mientras al mismo tiempo, comienzan a tomar las riendas en el Medio Oriente con la finalidad de –además de continuar con la agresión contra Yemen- conducir los esfuerzos por consolidar el “caos controlado” que EEUU ha instalado en la región.

Otros que continúan y profundizan sus ya acostumbradas y brutales operaciones son los israelíes. Por supuesto que esto tampoco es mostrado por los medios convencionales argentinos y mucho menos debatido por sus insipidos “periodistas” e “investigadores”. Aprovechando la masiva cobertura mediatica que silencia todo lo inconveniente, Tel Aviv lanzo varios ataques aéreos sobre Gaza agravando aún más la desesperante situación de los palestinos que allí sobreviven quienes también sufren en medio de las privaciones que les causa el aislamiento militar, la posibilidad del contagio del COVID-19. Al mismo tiempo continúan las arbitrariedades sobre la población árabe de Cizjordania y Jerusalem donde las apropiaciones y las demoliciones de casas palestinas se llevan a cabo con la complacencia de los colonos judíos quienes traídos por Israel desde varias regiones del mundo, se apropiaran de los terrenos palestinos.

Con esto podemos ver que más allá de los beneficiarios financieros y económicos que se ocultan detrás de esta pandemia, estos actores internacionales no se quedan atrás y aprovechan la ocasión para concretar sus planes. Tal vez sean meros oportunistas o tal vez, sean parte de esta tragedia ¿Qué es lo que cree usted?

martes, 31 de marzo de 2020



“ESTADO DE INCERTIDUMBRE”
Cuáles serán a partir de ahora los lineamientos del gobierno y de toda la clase política argentina para sacar al país de la crítica situación socio-económica en la que se encuentra


Por Javier B. Dal
Buenos Aires vacía y bajo control policial
 El anuncio realizado por el presidente Alberto Fernández de extender la cuarentena por quince días más, ha puesto en discusión varios temás que exceden el interés general orientado a proteger la salud pública. Cabe señalar que en el gobierno nacional nadie aún sabe bien qué es lo que hay detrás de esta Pandemia aunque en realidad es seguro que nadie quiere averiguarlo.  Apelando a un tono calmado y con un lenguaje llano, el presidente argentino además de alegar una supuesta satisfacción por el éxito del aislamiento impuesto, trato de justificarlo con la mención de cifras de presuntos infectados, el castigo inferido a los trasgresores de la cuarentena impuesta y felicitando el esfuerzo de los funcionarios del estado.

Entre los “esfuerzos” de su gobierno –cabe mencionarlo- esta la gestión para la adquisición de equipos de respiradores y camas poniendo al frente de la empresa a nada menos que a su actual pareja Fabiola Yañez (quien esta al frente de la Fundación Banco de la Nación)  quien para tal fin, administraría un cuantioso fondo con el cual financiará estas compras pero habría que preguntarse  ¿Quién controlara lo que se recaude y lo que realmente se gaste?

Con el objetivo de planchar la curva de infectados y refiriendo al “modelo argentino” sobre las medidas de prevención adoptadas, Fernández  trató de justificar el estado de quietud productiva al que se ha sometido a un país económicamente arruinado y el cual una vez terminado el aislamiento, se verá inmerso en un mundo que además de haber cambiado superlativamente, ha entrado en recesión, tal como lo anunció la Directora del FMI Kristalina Georgieva.

En este sentido, las soluciones para tratar de paliar las necesidades económicas de cada uno de los ciudadanos que se hallan parados merecen  un cuestionamiento ¿Qué clase de solución habrá más allá de subvenciones dinerarias para un sector determinado de la población?  El otorgamiento de 10.000 pesos para un número no determinado de trabajadores informales de las categorías más bajas del tributo plantea al mismo tiempo varios interrogantes a saber: ¿Cómo se financiara esto y cómo se determinaran la realidad de las situaciones de cada uno de esos solicitantes y qué ocurrirá con los profesionales liberales quienes sometidos a la misma situación no pueden facturar? En el trasfondo de esta medida no hay más que pura demagogia y conveniencia política para evitar que explote una bomba social de los sectores más comprometidos del conourbano bonaerense.

A nivel nacional las demandas que circulan por las redes sociales (Twitter y Whatsupp) para que la clase política –en la que se incluye al mismo presidente- sacrifiquen parte de sus abultadas ganancias como lo hace el resto de la población han desatado serias preocupaciones en el gobierno donde hay funcionarios municipales que descaradamente llegan a ganar 500.000 pesos al mes.

Para muchos estas medidas de aislamiento además de exageradas e irrazonables son un ensayo de arresto domiciliario masivo que responde a los intereses globales que han creado este brote.

Si consideramos el dato planteado por la directora del FMI y le agregamos el anunciado impacto que generará en la Unión Europea al cual el economista danés Poul Thomsen[1] calificó como “muy severo” ¿Qué puede esperarle a la ya critica situación económica de Argentina?

Paralelo al discurso, la realidad demuestra la catastrófica situación adqusitiva de la población que además de verse sometida a este aislamiento que le impide obtener el sustento, se ve condicionada por la manipulación de los precios de los alimentos que inmediatamente después de los anuncios subieron más de un 10%. Así la carne y las verduras, alimentos de consumo básicos de la población han sufrido alzas que hacen más difícil la situación.

Más allá del descontracturado discurso de Fernández y de los mensajes velados enviados a los empresarios para que no despidan a sus trabajadores, su gobierno no ha podido convencer en cuanto hace a la capacidad de reactivación de la economía. En ningún momento se hablo de la suspensión del pago de los impuestos y obligaciones que deberán ser afrontados por todos los ciudadanos que no han estado percibiendo ganancias por la instauración de la cuarentena. Este punto ha sido un hueco negro en su discurso que no tiene una respuesta fácil.

Queda en claro que el estado argentino no funciona como debiera o si lo esta haciendo, lo hace en forma bastante reducida. Si el país ya venía con una extensa –y muy conocida- crisis de infraestructra  para atender en una situación de normalidad ¿Puede ser creíble que pueda controlar una situación extraordinaria como la que actualmente tiene que vivir el país? La respuesta no puede ser otra que una gran duda sobre esa posibilidad salvo que se estén utilizando recursos extraordinarios para sostener la situación pero, ¿De dónde el gobierno está sacando esos recursos? Este planteo surge y se ahonda entre otras cosas ante la imposibilidad de una gran parte de la población por pagar sus impuestos ¿Acaso el presidente hizo referencia este inconveniente?

¿Hasta cuando podrá el gobierno sostener esta situación sin consecuencias sociales y tal vez de estallidos insurrecionales?

Pese a los controles polciales, al terror infundido desde los medios que entre otras cuestiones creo una red de delatores sociales que ya lleva 30.000 ciudadanos entre procesados y detenidos por violar el aislamiento, ello no sería suficiente. Algunas fuentes han revelado que el gobierno estaría preparando un control masivo de todos sus ciudadanos mediante la implementación  de softwares informaticos de espionaje para rastrear la geolocalización de cada uno de los celulares operativos en CABA como en las principales ciudades del país. La viabilidad de esta medida es cierta ya que más allá de que Fernández comparta gobierno con una alianza “progresista” eso no afectará las actividades de este tipo. Aunque los medios locales plantean el asunto como una novedad que solo ha implementado el gobierno “totalitario de China”, esta tecnología invasiva ya venía siendo utilizada por EEUU e Israel.

Estos mismos medios y periodistas que difaman de continuo y hasta el escarnio a países como China, Rusia y obviamente a los gobiernos árabes-islamicos acusándoles de practicas autoritarias y otras falacias de la propaganda hollywoodense, últimamente están sugiriendo las ventajas y beneficios de un control semejante haciéndose los desentendidos del espionaje electrónico británico e israelí que durante años se ha llevado sobre las comunicaciones de todas las reparticiones estatales y sobre la población argentina que durante el gobierno de Macri, se asentaron cómodamente en el país.

Igualmente y más allá del control y el terror informativo que el gobierno necesita para demostrar que juega bien el juego ¿Hasta cuando cree que podrá mantener éste estado de incertidumbre?


[1] Sitio oficial del economista Poul Thomsen https://blogs.imf.org/bloggers/poul-m-thomsen/