domingo, 27 de mayo de 2018

OPINION



“CARACAS STUMBLE”

Buscando la caída de un hermano, ante la obsecuencia de gobiernos regionales


Por Sir Charlattam
Que dudas quedar en lo que sucedió en Venezuela en la semana que se ha ido. Las elecciones que fueron realizadas en Venezuela y que gano ampliamente Nicolás Maduro lo dicen todo. Así me dije a mi mismo cuando leía esto en un pequeño articulo del “Daily Mail” que mi vecina me paso por debajo de mi puerta cuando no tenía servicio de cable ¿Puedes creerlo en pleno siglo XXI que tu maldita compañía de cable te deje sin servicio por obras en la vía pública? Bueno, como sea. Fue así que me entere de este acontecimiento en las tierras del libertador Bolivar.

Por la tarde me encontré con viejo amigo y un contacto fiable dentro de los asuntos externos que me soplo algunas novedades sobre lo que viene ocurriendo en el mundo y en particular en Latinoamérica. Como siempre y como dos viejos zorros del desierto, nos acostumbramos a reunir en un nuestro centro de charlas secretas, que sabemos bien, no estaremos acompañados de chismosos o alcahuetes del MI-5, aunque no podemos eludir el sistema de vigilancia omnipresente que todo lo ve y escucha en Londres. Igualmente tenemos nuestro método para eludir esas intrusiones.

Sin dudas que además de los resultados electorales en Venezuela, fue importante la noticia de Colombia dentro de la OTAN. Cuando Alfie me lo dijo tuve que volverle a preguntar ¿Qué cosa? A lo que me repuso con su acostumbrado y monocorde tono “lo que te acabo de decir…los colombianos son parte de la Alianza Atlántica”; y ello quería decir que también pasaban a ser aliados de Gran Bretaña.  Como estaban las cosas, se podía decir que el continente latino estaba de cabeza y pensar que tan solo en un par de años paso de gobiernos pro-independentistas a volver a ser lacayos de los poderes centrales, vaya eso si es un retroceso.

Con este anuncio de Juan Manuel Santos, ahora entiendo que significan los últimos movimientos de tropas y equipos que vimos en Argentina, Chile y el Paraguay. Todo es parte de una red, lo que significa que la OTAN no solo llega a Colombia sino que se extenderá operativamente a todo el Cono sur.

Ahora bien, ¿Qué implicaría esto con la Venezuela de Maduro? El mensaje estaba muy claro. El secretariado de Bruselas le habría dado su membrecía Colombia por una cuestión eminentemente estratégica y con ello pretendía dar mayor apoyo a las presiones que se están imprimiendo sobre Caracas. En esta tarea colaboran muy entusiastamente Argentina, Brasil y Paraguay, lo que no ha dejado de ser un punto de discordia con otros vecinos de la región. Creo que todo esto, y me refiero a la implicancia de la OTAN en la región tiene un propósito que los mismos latinos no advierten; están tratando de balcanizar la región.

Así es me asintió Alfie. Los sabotajes, el corte de los cargamentos de alimentos y medicamentos que llegan por tierra y por embarcaciones están digitados por la CIA y otras agencias aliadas quienes han llegado a sobornar a capitanes de varios buques cargueros para que desvíen sus trayectorias a otros puertos o simplemente dejen sus cargas al mejor postor en el mercado negro en las Antillas.

El desabastecimiento que agobia al país está causado por una continua cadena de sabotajes y desvíos de los centros de abastecimiento del país. Son típicas maniobras subversivas, tal vez una de las más inocentes en lo que hace a las incontables tácticas sucias que pueden llegara a implementar las agencias de inteligencia y sus redes tendidas dentro de Latinoamérica.

Están haciendo todo lo imaginablemente posible para que Caracas se hunda y destruir para siempre a la revolución Bolivariana, que el Departamento de Estado norteamericano y sus colegas de la CIA saben que sigue siendo un polo de influencia ideológica regional.

Pero existen otros intereses para destruir a Venezuela. Las relaciones bilaterales que ha cosechado Caracas a través de los años y en especial durante la prolífica vida política del mismo Hugo César Chávez, son el motivo por excelencia de preocupación para los centros de poder. Tienes por un lado a los norteamericanos que al ver como Rusia y China establecían relaciones comerciales, militares y culturales en la región, fueron extendiéndose a todo el resto del continente llegando a ser tema de debate en los centros Tanques de Cerebros de Washington y claro, aquí en Londres.

Con respecto a esto último el mismo Vladimir Putin ha advertido a la OTAN que no se pasen de astutos, como un mensaje a los gobiernos occidentales dentro de la organización atlántica que como el caso de Ucrania, han estado llevando adelante maniobras provocativas contra Moscú.  Sobre esto, Putin denunció públicamente la participación de gobiernos occidentales –Estados Unidos al frente- del golpe de estado en febrero de 2014 contra el legítimo gobierno de Kiev. Con esta lógica, ¿Por qué no podría llegar a adoptar una posición similar con Venezuela?

Por otra parte, tienes a Tel Aviv, que ve y recuerda con rencor como Hugo Chávez además de apoyar a la causa palestina,  estableció lazos con los países árabes como Iraq, Libia, Siria y en especial con Irán lo que causó mucho malestar a los gobernantes en Tel Aviv y en especial al núcleo duro del sionismo ultraderechista. No habría sido nada extraño que hayan sido ellos los instigadores de la prematura muerte del líder caribeño.

Es por ello que todos estos amigos ya han tendido sus cables para que el gobierno venezolano y toda su infraestructura se tropiece convirtiendo al país caribeño en un Iraq sudamericano.

jueves, 24 de mayo de 2018


EN DEBATE



“PUNTO DE EQUILIBRIO”

Cómo Rusia y en particular el presidente Putin han logrado frenar la expansión del caos



Por Charles H. Slim
Sin lugar a dudas que el mundo no fue el mismo desde la caída de la URSS en 1991 y mucho menos desde aquellos extraños atentados del 11 de septiembre de 2001, cuando EEUU aprovechando estas muy convenientes circunstancias se arrogó a base de golpes y guerras, el liderazgo de un mundo que comenzaba a ser impredecible. Desde aquellos momentos todo podía pasar y lo peor de todo, era que así sucedió. Las agresiones a otros estados, las descalificaciones a los mandatarios, las mentiras, las causas armadas para fabricar casus belli contra los selectos enemigos de la elite que manejaban Washington, fue solo el inicio de lo que vendría.

Fue un festival de la arbitrariedad. El mundo se dio vuelta patas para arriba y los crápulas más impresentables de los estamentos políticos dirigían las naciones más poderosas del momento, especialmente a los EEUU, donde los más infames representantes de la colectividad política –tanto republicanos como demócratas- pusieron su grano de arena para volver al mundo un lugar mucho más inseguro. Fue una conjunción maléfica en la que los ignorantes, los criminales oportunistas y los sádicos tuvieron su momento de gloria en los más altos puestos de la política internacional. Sin dudas, la era de los Bush y en especial del “orate” George W. Bush y Cia, fue providencial para crear todo ese siniestro ambiente de terror.

El mundo vio con asombro y estupor como la “democracia más importante del mundo”, llevaba adelante invasiones arbitrarias, masacres colectivas y la práctica comprobada de torturas, vejámenes y ejecuciones extrajudiciales para hacer desaparecer a miles de sus opositores en nombre de la democracia.  Iraq y Afganistán aún dan testimonio de todo esto.  Nadie podía sin riesgo de ser enviado a los campos de torturas secretos de la CIA o al mismo campo de concentración de “Guantánamo”, criticar todo este sórdido proceder sin ser tildado de ser “amigo de los terroristas”. Tan lejos llegaron con esto, que el mundo parecía ir camino a sumirse bajo ese unilateralismo cínico y brutal que adornado con formalidades legales y bajo la vergonzante pasividad de los gobiernos del hemisferio –salvo las honrosas excepciones de Venezuela y Bolivia- ya tenía preparada la sentencia.

La llegada de Obama no cambio nada, solo maquillo las intensiones de EEUU y de la OTAN, las cuales quedaron reveladas en la última de las aventuras registradas contra la soberanía de un estado como fue en Libia en 2010. Sin dudas que aquello fue demasiado bizarro para que aún a la distancia, pueda tratar de justificárselo con algún tipo de argumento político medianamente creíble. Sin lugar a dudas que todo aquello fue el producto de esa ebriedad de impunidad con la que contaban hasta ese momento, los EEUU y sus aliados regionales y de la alianza atlántica, tanta era, que allí se comenzó a ver como todo el tema del “terrorismo islamista de Al Qaeda” había sido una farsa montada por ellos mismos ¿Acaso alguien podrá olvidar el oscuro papel de la secretario de estado Hillary Clinton en todo esto y en particular, con el asesinato del embajador en Bengasi?

A pesar de lograr destruir a Libia, las cosas comenzaban a cambiar y ello se vería inmediatamente cuando estos mismos cerebros trasladaron sus planes a Siria y a Iraq con aquel embuste de las agrupaciones mercenarias disfrazadas de “yihadistas” y en especial con aquel monigote llamado “Daesh” puesto en escena en 2014, con el fin último de remodelar geopolíticamente la región. Y fue allí que reacciono Rusia, comenzando a tomar un papel paulatino y firme en toda la situación. O tal vez debamos decir, fue Vladimir Putin quien reaccionó con prudencia y una notable inteligencia ante un contexto altamente peligroso para su propia estabilidad y la de la misma Rusia. En ese último sentido no podemos dejar de poner en evidencia, la gran ventaja con la que cuenta el país asiático ya que, su mandatario ha demostrado con creces que su liderazgo está sentado en algo más que el simple carisma de un político.
Si Vladimir Putin se hubiera quedado en las meras palabras y no hubiera ordenado la participación gradual de sus fuerzas en Siria, hoy estaríamos hablando de otro desastre como el iraquí o el libio.

Fue sin dudas la intervención de Moscú, lo que pudo frenar un resultado como el libio. Si hoy podemos ver como el gobierno legitimo de Bashar Al Assad sigue en pie y con él la misma república árabe, ha sido por la astuta e inteligente posición del gobierno de Putin que a la par de estos logros estratégicos, pudo darle impulso a sus propios intereses y los de su país. No por casualidad arraso en las últimas elecciones ni tiene una alta estima entre las filas de las Fuerzas Armadas. Ello, aunque para las mediocres mentes de políticos que solo ven hasta donde les llega la nariz (especialmente en Argentina), es fundamental para sostener la integridad y la estabilidad de un estado soberano.

Igualmente y por estos logros, los popes occidentales, especialmente Gran Bretaña trato de arruinar la estabilidad y la reputación rusa con operaciones sucias como fue sin lugar a dudas la montada con el caso “Skripal y su hija” a comienzos de año, un fiasco que mando al ostracismo al gobierno de Theresa May y a su gabinete.

A la par de esta combinación de sesudo liderazgo, olfato político y determinación para usar el musculo militar cuando la ocasión lo demande, ha reflotado a Rusia de su letargo y ha conseguido a su vez contrabalancear el poder regional que desde los años noventas estaba siendo infestado por las injerencias de EEUU en principio y de la OTAN en general, tratando de crear bolsones de insurrección independentista bajo los auspicios de programas de supuestas ONG que dicen bregar por la “igualdad y la democracia” pero que ya han quedado en evidencia, de que no son más que una extensión del Departamento de Estado y la CIA norteamericana.


Actualmente, Rusia tiene una voz potente tanto en la región euroasiática como a nivel internacional y gracias a ella, se puede decir que ha logrado establecer un punto de equilibrio ante tantas arbitrariedades cometidas a lo largo de estos últimos 25 años que para peor, fueron realizadas –y aun continúan algunas- cometiéndose a la luz de la ley internacional y de la Carta de Naciones Unidas.

lunes, 21 de mayo de 2018

EN  LA MIRA



“UNA COLONIA ARGENTA”

Lo que hoy muchos ignoran será una lamentable realidad en unos años ¿Están los ciudadanos argentinos enterados de lo que está haciendo este gobierno?


Por Charles H. Slim
Los problemas por los que está pasando la Argentina van mucho más allá que la simple situación de un endeudamiento endémico que vuelve a reeditarse con su regreso al FMI[1]. Si así es. Hace unas semanas las tropas norteamericanas desembarcaban con variado equipo y armas en el país austral sin que ello hubiera sido un motivo de análisis de sus medios informativos. Para quienes tienen una mirada mucho más negra de esto, lo resumen diciendo “la OTAN ya está aquí” sin necesidad de agregar que hace más de una década que el país esta cooptado por las agencias de inteligencia externas. El país más rico en recursos naturales, con todos los climas y una de las costas más extensas del cono sur ha dejado para siempre el club de los países soberanos ya que hace unos días, el gobierno de Macri ha confirmado que la soberanía nacional ha sido completamente entregada.

El 14 de mayo último a instancias del Foreign Office, el director del Instituto Antártico Argentino Rodolfo Sánchez firmó un acuerdo de cooperación –o más bien un memorándum de entendimiento- para el desarrollo científico y ambiental junto a la Dra. Jane Francis que es la Directora del British Antartic Survey que bajo los lineamientos de cooperación antártica y que sigue acuerdos previos firmados en 2016 (Pacto Fadori Duncan),  por el cual determinaron que ambos países desarrollaran tareas de cooperación en el continente antártico. Pero lo que parece un simple acuerdo bilateral no es más que la oficialización de la entrega del territorio antártico a la Corona británica, acto que fue testificado por nada menos que representantes del gobierno Kelper, que se recuerda, es un ente ocupante de las islas Malvinas.
A pesar de lo importante de este evento, el mismo no ha sido cubierto en forma masiva por los medios del establishment argentino que lucen claramente alineados a las políticas imperantes. La única vía para conocer esto ha sido por parte de fuentes independientes[2] que bregan constantemente por mantener informados a los simples ciudadanos y a quienes realmente se preocupan por la cosa pública.

Este acuerdo que con mucha pompa los partidarios del gobierno consideran como positivo, ya había sido suscripto entre Gran Bretaña y Chile en 2017 del cual (vale aclararlo) fue soslayada la Argentina.

Una vez más, Argentina o más bien, en este sentido hay que diferenciarlo bien, los gobernantes elitistas que residen y viven en la ciudad autónoma de Buenos Aires (única patria a la que le son leales), han sido burlados por las tretas británicas. Pero si esto les sirve de consuelo a los manoseados argentinos, sepan que no han sido los únicos estafados en todo esto. Lo mismo sucedió con los chilenos o más bien, con los elitistas y conservadores gobernantes de Santiago, quienes también pese a ser los colaboradores históricos por excelencia de los anglosajones, han cedido sus derechos antárticos a los “amigos británicos”.

Esta iniciativa claramente anti-soberana, tiene precedentes en este gobierno. Cuando Macri sube al poder, realizo todas las gestiones posibles para llegar a un entendimiento con Londres, fuera a costa de la misma soberanía de ser necesario. Recordemos la firma del tratado de cooperación “UK-frendly” por el cual Buenos Aires le reconoce a Gran Bretaña el acceso de flotas pesqueras propias o de otras banderas bajo contrato con Londres, para pescar en las aguas adyacentes del Mar argentino, un verdadero despropósito para los intereses económicos argentinos.

Esta ampliación concedida por el gobierno de Macri, ha resultado un error garrafal que ha tenido consecuencias y muy posiblemente relacionado con lo sucedido en noviembre pasado. Igualmente y pese a la gravedad de esto, la anglofilia local descarada y sin la menor preocupación por la soberanía política y territorial, da rienda suelta de su cipayaje  dando cobertura mediática a la boda de la realeza británica como si de un acontecimiento histórico[3] se tratara; simplemente revulsivo.

Esto a su vez significo el reconocimiento tácito de la presencia de autoridades británicas en Malvinas lo que resulta para la postura Argentina en pro de la soberanía, un gigantesco paso atrás, máxime si ponderamos que aún Buenos Aires no ha solicitado explicaciones oficiales a Londres por la aún vergonzosa y aún no investigada desaparición del submarino “ARA San Juan”[4].

Hay en esto una intima conexión que el gobierno ha eludido olímpicamente y que ha causado un temblor en los cimientos de los sectores nacionalistas republicanos y de la izquierda nacional. Esto viene a ser un clavo más en el ataúd de la soberanía nacional y una claudicación imperdonable que se suma a la consolidada en el terreno de la política económica. Por el contrario, esto ha sido visto como muy positivo por los Kelpers quienes cada vez más –y con la ayuda de Londres- avanzan a una posible autonomía que solo puede ser viable ante actitudes como las que está llevando adelante el gobierno macrista ¿Existe algún sector nacional que esté dispuesto a resistir en serio esto?.  



[1] LA NACION. “Lagarde dijo que el programa económico será concebido por el gobierno y no por el fondo”. Publicado el 19 de mayo de 2018. https://www.lanacion.com.ar/2136008-lagarde-dijo-que-el-programa-economico-sera-concebido-por-el-gobierno-y-no-por-el-fondo
[2] PAJARO ROJO. “MALVINAS-ANTARTIDA. No solo entregan a los británicos la pesca, también las islas y, todavía más grave, el continente blanco”. . Publicado el17 de mayo de 2018. http://pajarorojo.com.ar/?p=38707
[3] CLARIN. “Boda real: en videos, los momentos más importantes del casamiento del príncipe Harry y Meghan Markle”. Publicado e 19 de mayo de 2018. https://www.clarin.com/sociedad/boda-real-videos-momentos-importantes-casamiento-principe-harry-meghan-markle_0_Byt8Z9a0z.html 
[4] PENSAMIENTO ESTRATEGICO Y POLÍTICO. “No encuentren al ARA San Juan”. Publicado el  26 de diciembre de 2017. https://pensamientoestraegico.blogspot.com.ar/2017/12/veteranos-de-ayer-no-encuentren-al-ara.html

martes, 15 de mayo de 2018

EN  LA MIRA




“NADA NUEVO BAJO EL SOL”

Cómo se ve desde Argentina lo que el conglomerado de medios anglosajones condiciona a mostrar



Por Javier B. Dal
La escaramuza ocurrida entre el 9 y 10 de mayo último entre las fuerzas israelíes y las fuerzas armadas sirias han pasado olímpicamente desapercibidas por el espectro informativo argentino, que además de estar ampliamente cooptado por los intereses pro-sionistas que le financian, hoy se hallan en una severa crisis en la cual tiene mucho que ver el gobierno de Macri. Sobre el ataque israelí contra bases iraníes en suelo sirio y la sorpresiva respuesta lanzada contra la zona ocupada de los Altos del Golán han tenido una particular forma de interpretación desde éste lado del mundo.

A propósito de ello el gobierno argentino dio un lacónico e insulso comunicado que no dice nada y menos aún, se avocó a mirar lo que realmente allí había sucedido. Nada nuevo en la histórica postura de Buenos Aires sobre el tema. En ese mismo tono se comportaron los medios argentinos que poco o nada se atrevieron a discurrir sobre el incidente que pretendiendo actuar con prudencia revela más bien una política  para beneficiar a uno de los bandos.

En aquella concepción “informativa”, cualquier comentario hacia las acciones claramente ilegales y criminales que comete el estado de Israel pasan a ser reinterpretadas por presentadores y periodistas de estos medios que son más bien empresas de venta de novedades que informativos de la realidad. Cambiar el ángulo de la noticia y desviarla hacia el pantanoso terreno del acostumbrado “antisemitismo” ya aburre incluso a muchos de los propios miembros de la comunidad. En otros, despierta vergüenza ante las inconsecuencias en las que incurren sus líderes tanto locales como en Tel Aviv quienes representando a aquel estado, se arrogan impropiamente la representación de todos los judíos del mundo.

Durante todo el verano hasta el presente, se viene desarrollando una catastrófica campaña de bombardeos y bestiales represalias militares contra las poblaciones palestinas de Gaza y los territorios ocupados en Cizjordania, sin que los medios insignes argentinos de la cobertura nacional e internacional se hagan eco en una forma imparcial de lo que viene sucediendo y del papel deleznable de Israel en todo esto. Suena a burla que las masacres que Israel cometió el 14 de mayo último en la Franja de Gaza, asesinando a más de cincuenta palestinos e hiriendo a otros miles desarmados, haya sido comentado mediante algún sonido onomatopéyico de algún periodista que además de ser un recalcitrante sionista disfrazado de “socialista cubanero”, es un acostumbrado puntero político de la embajada israelí en Buenos Aires.  Mucho menos el gobierno de “Cambiemos” que cuenta entre sus filas nacionales como en la de la alcaldía de la capital, a una columna vertebral de la prosapia sionista argentina.
Bebé palestino asfixiado por los gases veneosos israelies-Gaza. 15 de Mayo

En cuanto a lo que viene ocurriendo en Siria, los comentarios y “análisis” no pueden ser menos tendenciosos. Con el uso recurrente de términos erróneos y otros deliberadamente ajenos a la realidad, se enmascara esa arabofobia e islamofobia que va de la mano de los intelectuales sionistas que desde hace décadas se rasgan las vestiduras cuando hablan de antisemitismo.  Durante décadas Tel Aviv conto con la impunidad para hacer cuantas acciones bestiales se le presento sin que hubiera formas de que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas pudiera –o más bien quisiera- aplicar una sanción efectiva ante tantas aberraciones. Fueron las épocas del unilateralismo estadounidense, que tuvo su apogeo con George W. Bush y que comenzó a declinar en forma irremisible con Obama hasta el presente lo que acentuó la estigmatización contra el Islam y lo árabe.

Cuando Iraq fue invadido y destruido, el ex ministro de defensa Ehud Barak confesó que ellos habían hecho mucho para desestabilizar a Iraq y ello abarcaba el asesinato, los atentados y la posterior participación encubierta durante la ocupación. En la opereta mediática llamada “Primavera árabe” también estuvieron presentes los dedos sionistas, apoyando desde todos los ángulos posibles, la creación del caos en el mundo árabe, especialmente en los países de gobierno laicos como el de Mohammar Al Gadafy lo cuales representaban un verdadero adversario para Israel. Pero ¿Qué sucedió con las monarquías petroleras del Golfo, que también son árabes? Como se vio, nada. Y la explicación para ello pudo ir develándose con el paso de los meses; Ryad y Doha, tenían mucho que ver en todo el embrollo algo de lo cual, los pueblos árabes e islámicos ya han tomado nota.

Pero los planes por arrasar Damasco y derrocar al presidente Bashar Al Assad y hacer una limpieza humana sobre los partidarios “Baasistas” como lo hicieron los escuadrones de la muerte  de la CIA en Iraq, se vieron frustrados por la no calculada participación de una Rusia “potenciada” que poco a poco y con progresivos actos políticos, fue tomando su lugar para sostener al legitimo gobierno sirio,  logrando frenar las continuas intensiones occidentales por causar el colapso interior usando como lo hicieron en el pasado en Iraq y Libia, al terrorismo de células reclutadas y financiadas por sus agencias de inteligencia.

Actualmente, cuando las fuerzas sirias logran recuperar zonas donde se habían instalado los mercenarios que impostan ser musulmanes “yihadistas”, hallan abundante material bélico que proviene tanto de la OTAN como de Israel y muchos exclaman ¿Pero cómo puede suceder algo así? Al parecer, siempre o más bien desde hace unas décadas hasta aquí, ciertas elites árabes son parte del sionismo y han traicionado continua y arteramente a sus hermanos y primos del mundo árabe. Su perfidia ha llegado a tal punto que han arrastrado al eje de la resistencia árabe islámica a que hoy se halle liderada por un país no árabe como Irán. En ese sentido, la llegada e instalación de bases militares iraníes en Siria no son para hostigar a terceros países (como acostumbradamente informan los medios occidentales), sino por el contrario, para garantizar la seguridad a su primo árabe sirio, cercado por fuerzas extranjeras hostiles entre las que se halla Israel.

En aquel sentido el continuo argumento al que Tel Aviv y Washington hablan de que Siria e Irán cruzaron una llamada “línea roja” que les traerá consecuencias inmediatas, solo son artificios discursivos y nada más ya que, han sido aquellos quienes desde hace tiempo han cruzado todas las líneas y de todos los colores que se grafican en los miles de muertos que tienen en su haber bajos las excusas tan variopintas como son la “derecho a la supervivencia”, la “seguridad nacional y la lucha contra el terrorismo”, esta última montada sobre una siniestra farsa ejecutada por elucubraciones como el “Daesh”, “Al Qaeda y “Al Nusra”, para citar a las principales patas de este programa de engaños.


A la par de todo esto, el actual presidente norteamericano Trump ha ido más lejos al complacer a los más recalcitrantes sectores de neocon y sionistas de su país, para que EEUU reconozca y abra su embajada en Jerusalén como capital del estado de Israel. Con todo esto y las continuas acciones agresivas que Israel lanza contra las poblaciones de Gaza y Cizjordania y que extiende a Siria bajo los argumentos del “peligro iraní”-y jamás por el terrorismo de Al Qaeda o Daesh-, no dejan lugar a la paz, pero lo peor de todo es que, todo esto se mantiene fuera del foco informativo de países como la Argentina que tiene mucho que cuidar, no solo por el descarado desembarco de las tropas estadounidenses sino también, ante las repetidas incursiones s de los “mochileros sin fronteras” que no son más que soldados israelíes vestidos de civil que pululan por la Patagonia. Entonces ¿Cuánto tiempo puede durar esta situación de jugar al avestruz?