lunes, 27 de enero de 2020



“BADLY ADVISES”
Cuáles pueden ser las consecuencias de más consejos equivocados al presidente? ¿Acaso han sido deliberadamente prestados para perjudicarlo?


Por Dany Smith y Lynda O´Rubens
Aún no terminan las repercusiones sobre las consecuencias de las represalias iraníes lanzadas contra las bases estadounidenses en Iraq. Las mentiras vertidas por Donald Trump en su rueda de prensa del 8 de enero no tardaron en quedar rápidamente expuestas y fue allí que tras revelaciones internas del mismo Departamento de Defensa y del Pentágono, quedo en claro que había que “esconder la basura bajo la alformbra” como diera lugar. Pero Trump no es el único culpable de esto. Todos sus predecesores y en especial los últimos, fueron pioneros en el encubrimiento de sus crímenes de estado. Esto, ante las veladas intensiones de usar este episodio para agregarlo al Impeachment que ya ha comenzado a procesarse en su contra.

Para los agitadores de la prensa gráfica y la Corporación de medios anglosajona que reverbera la ideología neoconservadora, se trato de una torpeza que acerca a Trump a un destino similar al ocurrido a Jimy Carter tras la crisis de los rehenes en 1979 que valga la aclaración, fue comentada a medias y tendenciosamente por los historiadores en Washington.

Para la prensa iraní, la respuesta denominada “Operación Martir Soleimani” fue un duro y contundente escarmiento a las acostumbradas políticas criminales de Washington. Fue un golpe simbólico y vindicativo para los incontables mártires causados durante décadas por la impunidad que le da su mero estatus de potencia militar y política. Más allá de las contradictorias versiones que últimamente han salido de la misma administración en Washington, todo demuestra que han habido consecuencias (y muy luctuososas) para los EEUU que involucraron la muerte de varios de sus efectivos militares.

En síntesis, Teherán dejó en claro que de haber querido matar más soldados estadounidenses lo habría hecho y al mismo tiempo, demostró que tiene la capacidad convencional para escarmentar a quienes han venido presionando y conspirando contra su soberanía política y económica.

Al mismo tiempo, Washington ha perdido el poco apoyo político que le restaba en Bagdad dado que ya es oficial el reclamo político de la inmediata salida de todas las tropas del suelo árabe y el reinicio de las actividades de los diversos grupos de la resistencia armada en tiempos de la ocupación (2003-2011) que en realidad nunca se suspendieron. Sumado a ello, el repudio generalizado entre la población iraquí ponen más presión a los sectores de la política colaboracionista que trata de que ello no ocurra. En este sentido las últimas y masivas protestas populares en Bagdad encabezadas por el clérigo chiita Moqtadar Al Sadr pidiendo la salida de los estadounidenses de Iraq, despejan las dudas que puedan quedar sobre ello.


Pero el traspié de Trump y sus instigadores ha desatado un efecto domino en todo Eurasia ya que, no son pocos quienes ven detrás de este magnicidio (asesinato de Qassem Soleimani), un plan bien pergeniado y direccionado para que los EEUU desate una nueva guerra regional con objetivos predecibles y apetecibles para algunos de sus socios, en particular Israel que trata de formar su propia agenda para extender sus planes destinados a obstruir el desarrollo científico y técnico de los países islámicos del Centro sur de Asia. No hay que olvidar que Donald Trump es solo un “figurín”, el rostro visible pero pasajero del poder real que controla a los EEUU y para colmo, tiene la cara y personalidad perfecta para que todas las culpas le sean imputables. Como se diría en el vulgo “es el idiota perfecto”.

Algunas decisiones centrales parecen demostrar y confirmar este peligroso amateurismo. La repentina retirada del Tratado INF en agosto de 2019 pareció un acto provocativo poco inteligente hacia la Federación Rusa pero cabe preguntarse ¿Fue él quien tomo esta decisión estratégica? Y ¿Para qué la tomo? Se sabe que el empresario Donald Trump es un sujeto altamente maleable e influenciable si se usan las palabras correctas y quienes lo asesoran casualmente, tienen una larga experiencia gubernamental y son expertos en fabricar artificios y falsedades.

Sumado a estos, no hay que desdeñar a los lobistas pro-Israel que, además de ser vanagloriados por el mandatario norteamericano, tienen un extendido e importante papel en la política exterior de los EEUU y mucho más, cuando se busca ilegal e ilegítimamente degradar la situación política, social y económica –mediante interminables sanciones- de la república Islámica de Irán. Esto último ya viene siendo un tema muy discutido dentro del electorado y la ciudadanía en la misma Unión que se sintetizan con slogan tales como “No queremos pelear guerras ajenas” o “No más sangre estadounidense por Israel”.

Pero hay otra pata que no hay que descartar en todo esto. Ella es la vinculada al poderoso sector corporativo privado vinculado a la industria del armamento y la defensa que desde hace tiempo traban con el estado federal multimillonarios contratos para la investigación, desarrollo y provisión de armas. Para ellos las guerras son la sal de la vida (si así podemos decirlo) y no hay nada más imperioso para la ganancia y el sostenimiento de sus empresas que la desestabilización política, social y económica de países y regiones que luego serán campos de batalla y por supuesto, potenciales clientes de sus productos.  

firma de los Trtados INF entre Gorbachev y Reagan

En este sentido, tumbar los tratados que se habían firmado en épocas de la Guerra Fría con la URSS, trae aparejado el desmonte de una valla legal convencional que traba los negocios para el desarrollo abierto de armas de destrucción masiva. No hay que olvidar que las industrias Raytheon y Lockheed Martin han estado desarrollando misiles prohibidos por los tratados firmados con la entonces URSS y que siguieron vigentes con la Federación Rusa. En este marco ¿No es muy conveniente esta intempestiva salida del Tratado INF y del Acuerdo nuclear de 5+1 con Irán?

Si realmente EEUU buscara la estabilidad y la paz en lugares donde nadie lo ha llamado y en los cuales interviene en forma solapada, no borraría con el cojo lo que ha firmado con la mano. Con estas maniobras turbias queda muy claro cual es su política de estado para el exterior.

Crear la inestabilidad ha sido la única política productiva que Washington ha demostrado impulsar para insertarse en el mundo. Asesinar a un importante funcionario de una nación soberana como Irán –demonizado por la prensa occidental pro-sionista- no puede perseguir otra cosa que la reacción histérica y descontrolada de Teherán y del chiismo regional algo que por suerte –y a diferencia de otras oportunidades-, no han logrado. Y sin dudas el motivo del aplomo de Teherán ante este hecho criminal, un verdadero Casus Belli del derecho internacional es la posición estratégica de Rusia y China que saben y están preparadas para contrarestar las intensiones de EEUU por desembarcar en la región.

Actualmente, China es consciente de la amenaza militar y comercial que EEUU representa para sus intereses, en particular para los marítimos en el Pacifico y al mismo tiempo, Washington ha estado viendo con desconsuelo y preocupación como en forma sostenida las políticas marítimas chinas han ido tomando mayor influencia en este sector.

Pero la política exterior del chantaje y el apriete mafioso que utilizan los neoconservadores en Washington –y sus socios ocultos que operan mediante sus Lobies en el Congreso- no podrá prosperar en Eurasia, no al menos si el Kremlin y Pekin siguen cooperando e invirtiendo como la han venido haciendo, en el desarrollo de políticas regionales de estabilidad y cooperación en materias estratégicas que abarque a todas las naciones periféricas de ambos gigantes.

Sin lugar a dudas ello representa un serio obstáculo para los planes de Washington. Las políticas proactivas de cooperación bilateral en defensa y lucha contra el terrorismo que han establecido ambas naciones que hacen extensivas en su participación a Irán,  ayudará y en mucho, a desarticular grupos y células terroristas que son apoyadas desde la clandestinidad por las agencias de inteligencia occidentales que operando desde bases en Afganistán con la  pretensión de instalar el caos en el corazón euroasiático que le permita a los EEUU y a la OTAN inmiscuirse con esa vieja excusa que han usado para tratar de reconfigurar el Oriente Medio: La intervención para la lucha contra el terror.

Quedará esperar que Donald Trump no vuelva a cometer otra torpeza estratégica que pueda comprometer a los intereses estratégicos de EEUU dado que hacerlo, más que arriesgar su credibilidad (la cual ya no existe) podría desatar un conflicto de alcance global.

miércoles, 22 de enero de 2020



“EL PRECIO DE LA ESTUPIDEZ”
Ha quedado claro que el asesinato de Qassem Soleimani y de sus colegas iraquíes ha sido un hecho contraproducente para la política exterior de EEUU y otro desacierto político del presidente Trump ¿Cuál fue el saldo real de la venganza de Teherán?

Por Chrales H. Slim
Cuando el 2 enero último una operación conjunta de la CIA y el Mossad israelí asesino con dos misiles guiados al general  iraní Qassem Soleimani, al jefe de las milicias populares iraquíes Abu Madhi Al Muhandis y a ocho de sus miembros, Donald Trump y su séquito neoconservador que siguieron el evento de cerca, pensaron que causarían pavor en Teherán y en especial, en el gobierno de Rohani. Lo mismo especularon silenciosamente Netanyahu y su círculo de asesores en Tel Aviv quienes no esperaban reacciones. Fue todo lo contrario y la replica prometida por este cobarde crimen (uno más de los que estas agencias ejecutan alrededor del globo) no se hizo esperar. 

Los estadounidenses conjeturaron muy mal y los iraníes no se quedarían en la retorica. Obviamente y antes de tomar el curso de acción la cancillería iraní dejo claro que habría un desquite, pero el CENTCOM y sus unidades militares en Iraq creyeron que Teherán no se atrevería por lo cual no tomaron ninguna precaución extra a las que ya tomaban acostumbradamente para protegerse de los continuos ataques de cohetes y morteros de agrupaciones de la resistencia iraquí.

Pero quienes más se equivocaron fueron sus funcionarios políticos y militares en Washington dado que se tomaron muy a la ligera las consecuencias de este hecho y la capacidad real que tiene Irán para responder. Quienes también mantenían los dedos cruzados eran los israelíes, quienes como de costumbre, tenían –en forma encubierta obviamente- parte en el asunto. Pese a que no se hizo público, Israel estuvo en estado de alerta y sus Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) se mantuvieron a la espera de una posible retaliación de Hesbolla desde el sur del Líbano.

Pero no fue necesario de que el Hesbolla libanes vengara a uno de sus más prominentes héroes de la resistencia islámica. El 8 de enero en altas horas de la madrugada, la venganza se concreto en manera sorpresiva y letal. Una docena de misiles balísticos de corto alcance (300 kms) “Fateh -110” lanzados por la Guardia Revolucionaria  (CGRI) desde puntos estratégicos en el desierto iraní no revelados,  impactaron sobre dos objetivos estadounidenses en Iraq.

Foto aérea de algunos de los daños en Ain Al Assad

Las sirenas de alerta se escucharon sobre las bases estadounidenses destacadas en el aeropuerto de Irbil (bajo control del gobierno autonómico kurdo) y la base aérea “Ain Al Assad” en la provincia de “Al Anbar” y tan solo unos minutos después testigos del lugar sintieron y vieron los potentes impactos de los misiles provenientes del oriente.  Pese a que los informes de inteligencia iraquíes revelaron un gran daño en ambos objetivos, EEUU mantuvo un silencio sordo y desconcertante. Y  es que si en realidad no había sucedido nada ¿A qué se debió éste largo silencio de la Casa Blanca?  Al mismo tiempo la noticia disparo los precios del petróleo en el comercio internacional.

Luego del último impacto, las fuerzas colaboracionistas iraquíes, junto a los estadounidenses se avocaron a tratar de tapar el suceso pesquisando a los pobladores cercanos y empleados civiles de cada una de las bases para que entregasen sus teléfonos celulares y cualquier otro elemento que hubiera podido captar y grabar el momento del ataque. Pese al intento encubrir las consecuencias, no lo lograron.

La respuesta de Trump ante esta noticia fue tan confusa como incoherente: “Todo está bien!”. Pero solo se trato de una información engañosa que los encargados de monitorear la situación tras los ataques le dieron al presidente para no alarmar al público estadounidense.

En un primero momento el Pentágono negó bajas entre sus tropas y solo acuso pocos daños en las instalaciones de las bases aéreas de “Ain Al Assad” y la base que mantiene en “Irbil”. Teherán en base a sus fuentes de inteligencia calculo más de cien bajas en las tropas norteamericanas. Era la pulseada por ver quien convencía más a la opinión pública. EEUU debía mostrar fortaleza y seguridad, incluso inmdemidad pero cuando Donald Trump tardo en salir con su gabinete para informar públicamente lo que sucedió, ya se intuía que algo no había salido “tan bien” como lo había señalado en un comienzo. Incluso más. Las caras de quienes acompañaron su informe revelaban todo lo contrario a lo que Donald Trump estaba diciendo.

La cruda realidad fue que Teherán jamás le avisó a Bagdad de sus objetivos y mucho menos “arreglo” con Washington un golpe simbólico para que los iraníes salvaran el honor. Nada de eso. Tan pronto como ocurrió el asesinato las CGRI barajo las opciones para dar el golpe más duro posible y prepararse para una contra replica de EEUU. Los ataques tomaron por sorpresa al personal estadounidense en ambas posiciones y producto de ello no habían tomado contramedidas para proteger las aeronaves, equipos y a sus propios hombres.

En ningún momento Teherán dio aviso sobre esto. Incluso más, los objetivos elegidos para la venganza fueron considerados en cuanto a su importancia y proximidad. La alerta temprana que mencionó Trump para tratar de desmentir las aseveraciones iraníes sobre unas cien bajas, no pudo detectar estos vectores con el tiempo necesario para que se tomaran medidas.
memo del Pentágono FOIA

Fue un asunto para olvidar y en dicho sentido comenzaron a laborar la Corporación de Medios y sus repetidoras gráficas, televisivas y por internet alrededor del globo. Y no era para menos, ya que las consecuencias reales de lo sucedido dejaban pésimamente parados no solo a Donald Trump, sino también a los autores intelectuales –entre los que se hallan los israelíes- que habían planeado y ejecutado este asesinato en masa. Fue así que de aquella declaración que afirmó “no haberse producido bajas” tras los relevamientos realizados por el propio Departamento de Defensa norteamericano y el Comité de Seguridad Nacional los resultados demostraban todo lo contrario.

Un memo del Pentágono dirigido al congresista y presidente del Comité de Seguridad Nacional Bernie G. Thompson, se informó el resultado obtenido por  un Equipo Especial de Investigación remitido para dicho asunto a la base “Ain Al Assad”. Solo ahí se contabilizaron  285 bajas (146 heridos y 139 mortales). El memo continua detallando los daños materiales señalando “daños extensivos” a 15 helicópteros y Drones “MQ-1 Predator”. En las instalaciones los daños no fueron menores y los daños por los impactos afectaron gravemente el Comando Central, tres hangares, tres barracas y diez tiendas de campaña. Por último se informó de daños relativos en las instalaciones de la torre de control y tráfico aéreo de la base.

Las conclusiones del informe no podían ser más contundentes y dejaban en claro que los iraníes no solo tenían razón sino que incluso se habían quedado cortos en la evaluación de los daños ocasionados. El documento revela también que Donald Trump y todo su Staff (incluyendo a la CIA), una vez más, mintieron a su población y al mundo.

Aunque Washington trato de usar un argumento basado en la ley internacional para sugerir que Irán había violado la soberanía de Iraq al bombardear objetivos en su territorio, lo cierto es que las bases atacadas surgieron por una agresión e invasión que terminó en una ocupación ilegal. 
La alegación estadounidense de que sus tropas son “invitados por Bagdad para su permanencia” es una parodia tragicómica.

Por lo pronto estos argumentos y acusaciones contra Teherán no prosperaron y actualmente la Casa Blanca se ve seriamente cuestionada por el asesinato cometido contra un alto funcionario iraní en territorio iraquí. En último sentido, el Parlamento iraquí voto por la salida inmediata de todas las tropas estadounidense de su país algo que Washington no esta dispuesto a aceptar.

Pese a que el Secretario de la Defensa Mark Spert trato de argumentar un malentendido entre el Jefe del Comando Militar que tiene su cede en la Zona Verde en Bagdad y las autoridades iraquíes, lo cierto es que tanto a nivel de gobierno como en la opinión pública iraquí nadie más quiere a los estadounidenses en su territorio (militares y sus contratistas civiles).

domingo, 19 de enero de 2020



“GEOPOLITICA
ESPECULAR”
La visita de Alberto Fernández a Jerusalem ha despertado comentarios en favor y en contra ¿Se profundizara la injerencia de Tel Aviv en Argentina?

Por Charles H. Slim
Durante años, para no decir casi toda su existencia, la Argentina ha dependido de lo que viene de Europa y más tarde de los EEUU sin atender a otros horizontes. Hacer ahora una revisión de sus políticas de estado sobre esta relación simbiótica y poco productiva para la Argentina no tendría más utilidad que la de comprobar qué tanto ha perjudicado este posicionamiento al común de su población.

Contemporáneamente, los gobiernos de Buenos Aires, especialmente desde Carlos Menem en la década de los noventas, se han alineado sin amilanarse a las posiciones geopolíticas de Washington y de Tel Aviv. En realidad ello no es algo novedoso pero ha sido con el pasado gobierno de Mauricio Macri que Israel ha ampliado su presencia en la política local pasadando a tener una inocultable y directa injerencia en los asuntos internos y externos del país.  

Puede criticarse o estarse a favor de este punto de vista pero sea como sea, se trata de un posicionamiento geopolítico claro.  Pero en el caso de Argentina más que hablar de posicionamiento basado en cercanías ideológicas y de intereses comunes que ambas naciones puedan compartir, se trata de un “matrimonio por conveniencia” basado en una especie de chantaje culposo que uno materializa sobre el otro. Precisamente los atentados en Buenos Aires contra la embajada de Israel en 1992 y la AMIA en 1994 y la muerte del fiscal Nisman en 2015 han servido como excusas para esta continua intromisión.

El gobierno de CAMBIEMOS construido en torno a un núcleo de elementos sionistas agrupados en el PRO, con estrechas vinculaciones con organismos políticos de la comunidad judía local, pudo tirar esos cables de conexión que acercaron mucho más las relaciones políticas con el estado de Israel. A su vez, estos han sido los precursores intelectuales de la geopolítica israelí en la región y también los continuos operadores para buscar a como de lugar –y sin la existencia de pruebas- la culpabilidad de Irán en los atentados.

Incluso han ido más lejos al tratar en más de una ocasión y aprovechando la influencia con la que cuentan en los medios, orquestar nuevos embustes mediáticos como fueron la acusación de terrorismo –por su origen árabe y forma de pensar- a los hermanos Salomon y ni hablemos de aquel extraño –y jamás explicado- ingreso de dos supuestos ciudadanos iraníes con pasaportes de agentes israelíes que dicho sea de paso, no eran de ciudadanos comunes  ¿Acaso alguien sabe que paso con éstos personajes?

Pero como es de costumbre para cubrir todo esto, Tel Aviv y el sionismo local trata de cubrirse usando la “Shoa” (una catástrofe humanitaria histórica) como condicionante para no recibir críticas ni observaciones a las contemporáneas políticas del estado de Israel. La culpa y la conveniencia son quizá los más importantes factores que el sionismo manipula y utiliza para lograr esta posición.

La penetración en las áreas de inteligencia y la defensa son solo uno de los factores que inciden en esto, aunque no hay dejar de lado que han sido los mismos gobiernos argentinos los que han propiciado el descalabro de sus instituciones y organismos para que esto se facilite.
Otro dato para tener en cuenta es la gran demanda de argentinos que –tratando de huir de la decrepita economía- buscan radicarse en Israel ofreciéndose  como candidatos para vivir en los asentamientos israelíes que han sido levantados a costa de la usurpación y ocupación de los territorios palestinos. Es en este marco que actual presidente Alberto Fernández va a Jerusalem recibiendo los elogios de la DAIA.

niños palestinos detenidos por Israel

A la par de esto, en Argentina ha ido creciendo un sector de individuos que consciente de lo que implica alinearse con un estado colonialista como Israel (cercano a Londres), ha comenzado a ser más claro en sus posiciones y aquellas otroras épocas de silencios hipócritas de la Casa Rosada y también del ámbito académico intelectual ante los crímenes que el estado judío llevaba adelante contra la población de Palestina, han cambiado y han pasado a ser motivos de un profundo repudio y estudio para muchos argentinos, sin importar su credo o religión.

La situación en la que se mantiene el estado de Israel y las acciones segregacionistas del gobierno sionista contra la población nativa árabe-palestina, más allá de que por mucho tiempo han sido ocultadas o deformadas al público, son además de verdaderos actos antisemitas, un escándalo humanitario que hoy por hoy y ante las irrefutables evidencias, abochornan a un buen sector del judaísmo global. El plan de colonización israelí es amplio y es independiente del partido que transitoriamente ocupe el poder en Tel Aviv y en ese sentido Netanyahu es solo un político más que lleva adelante los planes mesiánicos de instalar el “Gran Israel”.

Se trata de un plan de estado. Para ello han trascendido al simple uso de la violencia militar, desarrollando complejos planes de control y eliminación basados en altos conocimientos de la medicina, la ciencia y la tecnología puestos al servicio de programas que abogan por reducir la  natalidad de las mujeres palestinas y la supresión de la voluntad del habitante palestino.

La implementación de estos planes han ido desde el ejercicio de la violencia estatal explicita, pasando por el diseño de una guerra demográfica mediante la inserción de colonos armados –los cuales están siendo un problema para Tel Aviv-, la usurpación y el zaqueo del patrimonio cultural, los asesinatos por “precio” que ejecutan los colonos, las arbitrarias detenciones administrativas, las torturas y las experimentaciones sobre los prisioneros hasta la destrucción del sistema administrativo de la ANP que en realidad, desde la muerte de Yasser Arafat poco representa a los palestinos. Un ejemplo de esto último puede verse con el ministerio de educación de Netanyahu pretendiendo “judeizar” la educación de los palestinos destruyendo sus escuelas primarias como forma de absorberlas e insertarlas (con programas de educación racistas y supremacistas) al sistema dirigido por Israel.
Un edificio en el centro de Gaza es destruido por el bombardeo israelí

La lista de crímenes de guerra y lesa humanidad es extensa y nada auspiciosa para que la Argentina que dice defender los derechos humanos, siga sosteniendo relaciones con un estado que los viola en todo tipo de formas.


Incluso hoy por hoy, ya se ha abierto una puerta para que la población palestina pueda hacer conocer ante las instancias judiciales de la Corte Penal Internacional (CPI) las incontables brutalidades y los más deleznables crímenes que la población palestina ha estado soportando de forma colectiva como individual a manos del estado de Israel y de sus colonos.

Esto ha desatado un debate interno en la comunidad entre quienes están enfurecidos por estas nuevas perspectivas y quienes se desligan de aquellas cuestiones. Ante esto el arco intelectual sionista que reverbera a travez de los medios corporativos nacionales trata de constante por deformar la realidad geopolítica del Oriente Medio, sosteniendo el victimismo insufrible que les caracteriza, mezclando cuestiones y  aludiendo al peligro del “expansionismo iraní” como velada excusa para propulsar las acusaciones sobre los atentados.

Mucho menos quieren hablar de la situación que viven los palestinos a manos de las FDI y sus brutales agencias de inteligencia “Shin Bet” y las “Shabak”. Y el descaro no termina allí. Muchos periodistas junto a ciertos economistas se atreven a plantear como modelo de economía y sociedad exitosa a la de Israel sin aclarar, que logro salir de su hiperinflación gracias a las millonarias contribuciones anuales que recibe de EEUU, a la fabricación y venta de armamento que desde siempre ensaya sobre los palestinos y el negocio sucio de las guerras regionales en las que, sin dudas, se haya directamente implicado (Siria y Yemen). Sobre esto último hay que remarcar que mientras Fernández se halle de visita en Jerusalem, las topadoras israelíes estarán demoliendo casas palestinas en Cizjordania y el lado árabe de Jerusalem, se estarán torturando con toda clase de métodos a prisoneros en las cárceles israelíes y las familias palestinas de Gaza sometidas a brutales bombardeos en la última semana estarán enterrando a sus muertos. La obsecuencia puede entenderse de mandatrios filosionistas como Bolsonaro o Piñera pero de ¿Alberto Fernández?

Suenan tan antisonantes como contradictorios, cuando algunos de estos sionistas informativos condenan con vehemencia a Venezuela y hacen del golpe de estado en Bolivia una cuestión “republicana” indiscutible.  
Curiosamente, la participación de Tel Aviv en este último episodio ha sido bastante sospechada dado que, Evo Morales fue un mandatario valiente y critico ante las brutalidades de Israel contra la población Gaza, llevando a tomar como medida la expulsión de toda la representación israelí la cual, tras el golpe, casualmente ha regresado a la Paz.

Los argentinos tienen el poder de optar entre tratar de reconstruir una entidad soberana alejada de intereses foráneos que buscan usar a la Argentina como una reserva para cubrirse de sus negociados y crímenes que cometen en otras latitudes o, aceptar que solo serán un colectivo sin identidad, servil a una estructura que adhiere y es leal a esos oscuros intereses.

martes, 14 de enero de 2020



“EMBUSTE: ISIS”
Con el paso de cada año va quedándo más evidente la naturaleza y objetivos del Estado Islámico. A la ailtura de las circunstancias ¿Qué tiene para decir Washington?

Por Charles H. Slim
Fue el presidente nortamericano Barak Obama quien en 2014, ordenó la formación e intervención de una Coalición “Anti-ISIS” para que supuestamente combatiera a esa extraña formación armada que a mediados de junio de 2014 había penetrado en Iraq desde Siria. Ante los medios y la prensa, un anuncio impresionante y lleno de expectativas; en la realidad, un fraude absoluto –uno que sucedía al de Al Qaeda- con ribetes dantescos sobre como Washington pretendió engañar a su población y al resto del mundo.

Este supuesto fenómeno no era otra cosa que la reestructuración del “ISI” Islamic State of Iraq, un grupo preparado e infiltrado por la inteligencia norteamericana (dirigida desde el USCENTCOM) en 2006 como parte del programa de contrainsurgencia del General Richard Petareus para degradar la resistencia armada iraquí contra la ocupación.

Según algunas fuentes su reactivación comenzó tras la eliminación de “Abu Omar Al Qurashi Bagdadi” en abril de 2010, un personaje que se comprobó inexistente y creado arbitrariamente por la inteligencia estadounidense.  
Pese  ello, para mediados de 2011 se verifico el incremento de las operaciones de estas células realizando especialmente, ataques a comisarías y puestos de vigilancia iraquíes con pistolas con silenciador. Incluso muchos de estas incursiones  se publicaban en videos de “Youtube” que estuvieron a la vista del público hasta que se masificó el “fenómeno” del nuevo “Estado Islámico”.

Para el 2012 las acciones de este grupo seguían en aumento pero algunos de sus tenientes aún estaban junto a jefes de “Al Qaeda” detenidos en cárceles iraquíes y norteamericanas. Justamente, en julio de 2013 se produjo un extraño y cinematográfico escape de la cárcel de Abu Graib desde donde y con el apoyo externo de un supuesto comando “yihadista”, huyeron unos quinientos prisioneros entre los cuales se hallaba, el supuesto sucesor de “Al Qurashi”, un tal Abu Bakr Al Bagdadi que a la postre quedaría en evidencia ser tan falso como el supuesto autor de los ataques del 11/S y su fingida persecución[1].

Esta operación fue más compleja de lo que los medios informativos y por supuesto los gobiernos occidentales han querido informar. El nivel de entrenamiento y armamento de los agresores que atacaron varios objetivos al mismo tiempo, puso en evidencia que se trato de una operación con una inteligencia sofisticada y muy buena logística que requirió una ayuda táctica extra.

Foto de France24- Mc Caine y atrás señalado con el circulo rojo Al Bagdadi

Nunca se explico como todos estos prófugos y sus “amigos armados” 
pudieron evadir los retenes militares y huir sin problemas de Bagdad. Lo cierto fue que este supuesto “Abu  Bakr Al Bagdadi” en esos momentos ya estaba en Siria, tal como lo graficaron las fotografías obtenidas por France 24y de las cuales más tarde quiso desmentir- en una reunión llevada a cabo en mayo de 2013 entre los jefes “rebeldes sirios” del Ejército Libre Sirio –reclutado y financiado por la CIA-  y el senador estadounidense John Mc Caine.

O “Al Baghdadi” podía bilocrase y estar en dos lugares a la vez o solo estaba en la imaginación de sus creadores. Decididamente, su persona era un embuste más. Esta inconsecuencia se agrandaría cuando éste misterioso líder yihadista, un año después hizo su aparición en la Mezquita de Mosul impostando la figura de verborrágico un Califa sunita. Sin lugar a dudas, algo no calzaba.

El USCENTCOM o Comando Central de Operaciones Militares que desde la base de “Al Udeid” en Qatar (actual aliado de Irán) monitorea y opera dentro del Oriente Medio y el Centro de Asia, sabe y ve todo lo que sucede en Iraq, Siria y por supuesto en Irán. El público estadounidense en particular y el público mundial que durante años desconoció la existencia e importancia de este emplazamiento, el más estratégico que los EEUU tiene alrededor del mundo, se tragaba las informaciones que le vendían los medios europeos y la prensa gráfica anglosajona que responden al Departamento de Estado y a sus aliados en la región.

Era por ello que el USCENTCOM no podía ignorar los movimientos de esta franquicia ni de ningún otro grupo que operaba con libertad en el desierto del “Sham”. La vigilancia satelital, de Drones y de vuelos de los AWACS saudides nunca se detiene y no había movimiento terrestre, aéreo o marítimo que se le escapara al comando. Con esto, era imposible que no advirtieran con detalle y precisión, los movimientos de las flotas de camionetas que desde 2013 comenzaron a poblar la zona fronteriza sirio-iraquí y que no eran de las autoridades de ambos países.

A la vista de esta inconsecuencia –la cual no es menor- debemos evaluar la consistencia y veracidad de la aparición del denominado “fenómeno” autoproclamado como el Estado Islámico el cual curiosamente, pese a proclamarse como una organización musulmana, asesino musulmanes con mucho ahínco.

Otro objetivo que han tenido los planificadores de esto fue la de crear un enemigo público de alcance global con la supuesta filiación “árabe islámica” que justifique la permanente movilización política y militar contra los países sospechados de simpatizar con ese espantajo. A la vista del común, debía plasmar la imagen de que los musulmanes son asesinos.

Más allá de la apariencia, el ISIS era una agrupación de combate con armamento ligero y con movilidad artillada en camionetas marca “Toyota” muchas de ellas recién sacadas de fábrica. Este “fenómeno” no comenzó en Iraq sino en Libia desde 2010 en postrimerías de la intervención de la OTAN. Muchos se preguntan aún ¿Quiénes las encargaron, las transaccionaron y las pagaron? Suena muy cómico (y nada creíble) que un representante de negocios de “Abu Bakr Al Bagdadi” hubiera ido a “Aichi” en Japón y hubiera encargado a cuenta y cargo de su agrupación un parque de unas 1000 unidades de la camioneta en sus modelos “SW4-Hilux”, “Tacoma” y “Land Cruiser” del  2014 sin que ello hubiera despertado sospechas de la gerencia.

Una caravana de Toyotas del ISIS entrando en Tikrit, Iraq

Un informe australiano dio cuenta que unas 800 camionetas de esta marca y modelo desaparcieron entre 2014 y 2015 de las calles y depósitos en Sideny[2]. Muy extraño, ¿no lo cree? Casualmente no hay que olvidar, Australia es uno de los aliados estratégicos de Washington en todas las aventuras que se han llevado a cabo en Iraq.

También suena descabellado y muy sospechoso que “alguien” usando una empresa fantasma (como las que usa la CIA) hubiera realizado el encargo de este parque de vehículos y su traslado, pagando en efectivo. Porque si las transacciones se hicieron electrónicamente ¿Desde dónde y Por qué no se detectaron por los organismos financieros internacionales dependientes del Departamento del Tesoro? Hubiera sido muy abultado e incomodo efectuar un pago en efectivo ¿Puede imaginarse usted cuantas valijas y bolsones hubiera sido necesarios para pagar esta compra? No nada de esto. Alguien con una influencia global y mucha experiencia en ejecutar estas operaciones negras llevo adelante todos estos preparativos.

Pero para que esto sucediera Ud debe preguntarse ¿Quién autorizó esto? Sin dudas que esto debió haber sido aprobado por Washington tras una sesión secreta del Congreso[3] en la cual entre otras cosas –y en el marco de su apoyo para derrocar a Bashar Al Assad-, se autorizo la entrega de armas para el Estado Islámico (ISIS).

Entonces ¿Qué propósito tuvo insertar este espantajo llamado ISIS? Primero que todo, no se debe olvidar las cirncunstancias en que se produce la aparición de este “fenómeno”. El complot de los mismos que derrocaron a Gadafy en Libia, habían fracasado en su intento por repetir la experiencia en Siria y fue alí que los EEUU bajo la administración de Barak Obama toma intervención comisionando a su Secretaria de Estado Hillary Clinton para desarrolle políticas tendientes a lograr los objetivos trazados.

Pese a ello, sus “esfuerzos” nunca produjeron resultados. Los aviones de la “Coalición anti ISIS” solo mataba civiles y bombardeaba edificios vacíos. Y así el fraude se extendió por casi un año hasta que Rusia toma la iniciativa de intervenir directamente en Siria y es allí que en solo una semana, los aviones rusos y los misiles crucero “Kalbir” degradan seriamente las operaciones de combate y financiación de “ISIS” (con el robo de petróleo en  asociación con Turquía) y sus colegas en Siria.

Desde ese momento la invisibilidad e invencibilidad del “ISIS” se desmitifico y con la entrada de las agrupaciones iraníes “Al Quds” y sus colegas iraquíes de las brigadas “Kataib Hesbolla” dirigidas por el general Qassem Soleimani (asesinado ilegalmente por EEUU), comenzó a ser degradado en el campo de batalla pese a las ayudas secretas de último momento que EEUU y Gran Bretaña lanzaban desde el aire. A la vista de estos hechos ¿Usted puede seguir creyendo en este embuste?


[1] CBSNEWS. “Trabajador del hospital: Vi a Osama”. Publicado el 28 de enero 2002. https://www.cbsnews.com/news/hospital-worker-i-saw-osama/; THE NEW YORK TIMES. “La muerte de Bin Ladem”. Publicado el 11 de julio de 2002.
[3] Ver el despacho de la agencia británica Reuters, “Congress secretly approves U.S. weapons flow to ’moderate’ Syrian rebels”, por Mark Hosenball, 27 de enero de 2014. https://www.reuters.com/article/us-usa-syria-rebels/congress-secretly-approves-u-s-weapons-flow-to-moderate-syrian-rebels-idUSBREA0Q1S320140127