martes, 13 de septiembre de 2016

INTERNACIONAL



“AFILANDO CUCHILLOS”

Que se esconde detrás de las pruebas misilisticas de Corea del norte y la presencia estadounidense en el mar de la China




Por Dany Smith
Las pruebas nucleares que realizó Pyong yiang en la última semana, han dado letra a las editoriales occidentales, ávidas de fabricar argumentos políticos que le den sustento a la Casa Blanca y al Pentágono para que se concentren más armas y efectivos en el sureste asiático. Pero lo peor de todo esto es que los últimos ensayos realizados en el polígono norcoreano de Punggyee-ri han sido más exitosos de lo esperado y es muy posible que Corea del Norte disponga de una capacidad nuclear tal, que podría contraatacar a EEUU en caso de ser agredida por lo que Washington llama “Ataques preventivos”.

Si bien es cierto que el gobierno comunista (el último que queda) de Pyong Yiang es abiertamente confrontativo y decidido a no dejarse influir por las continuas estrategias políticas y de sanciones económicas que impulsan  EEUU y de su vecino, la Corea del sur, su posición en la región es tomada con mucha cautela y no caben dudas de que tanto Pekín como Moscú consideran al gobierno de Kim Yom Un como una potente bomba de tiempo en la región.

En las actuales circunstancias y las que están por venir, Corea del norte puede llegar a ser usado como un fulminante para disparar una guerra en la región y eso lo saben muy bien China y Rusia. Es por ello que se mantiene la vista expectante en las próximas elecciones estadounidenses. Con la posible llegada de Hillary Clinton a la Casa Blanca, los tambores de guerra ya se hallan preparados para hacerlos sonar y los rusos como los chinos saben bien, que EEUU usando sus variadas artimañas en las cuales usa recurrentemente a terceros que realizan sus tareas sucias, puede causar una situación o una provocación que lleve a los norcoreanos a lanzarse contra el sur. En realidad una situación semejante no sería la primera nada más que en esta oportunidad, sería posible que uno de estos engaños se realicen con elementos radiactivos.

El problema no es que Corea del norte tenga ya armas nucleares sino que parece que tiene la capacidad para lanzarlas sobre Washington. Esto que suena sensacionalista y hasta como parte de los argumentos amarillos de los medios estadounidenses, es una realidad tecnológica lograda por los ingenieros norcoreanos quienes podrían en un par de años,  desarrollar su propio programa espacial que supere al satélite “Unha-3”

Pero el desarrollo aeroespacial de Corea ¿por qué debería interpretárselo como un peligro o una amenaza a la seguridad internacional como lo balbucean los recalcitrantes sectores belicistas en el Congreso estadounidense y lo reproducen sus medios pagos alrededor del globo?  Sin dudas no hay más peligro que el que representa el sistema de armas nucleares que los EEUU y la OTAN mantienen en órbita con sus satélites armados apuntando a la tierra o los arsenales israelíes en el desierto de Bersheeva. 

Lo cierto es que cualquier impulso bélico en la región dependerá de quien sea el que tome la Casa Blanca y ante las últimas noticias que llegan desde Washington, es posible que hayan más sorpresas que las hasta ahora vistas, máxime si consideramos el endeble estado de salud de la candidata Hillary Clinton a quien, tras desmallarse en el acto del 15º aniversario del 11 de septiembre, parece que podría ser reemplazada por alguno de sus correligionarios demócratas.

Igualmente y sin ánimos de implantar el pesimismo, si gana Donald Trump la política exterior de los EEUU cambiara poco o nada. Es que este tema es una materia de la cual,  los presidentes estadounidenses no tienen opciones para maniobrar.  No importa si es demócrata o republicano, cualquiera que sea, deberá seguir la agenda del estado profundo el cual está gobernado por intereses sin rostro pero con objetivos perceptibles. Ya no es un secreto para nadie de que las guerras son una caja de ingresos demasiado tentadora como para dejarla de lado por argumentos morales o incluso, tratados internacionales. De esta manera es cómo piensa el “halcón necon” promedio  y los sionistas que modelan las políticas exteriores de Washington; y es seguro que ello no cambie por un hombre como Trump. Con Clinton estos sectores tienen sin dudas sus expectativas cubiertas y saben que a ella no le temblara la mano de firmar cuantos decretos sean necesarios para seguir aumentado los presupuestos de defensa, ordenando la ampliación de intervenciones militares sobre otros países  y claro,  asegurando que se sigan girando las jugosas contribuciones dinerarias para sostener al estado de Israel.

Ahora como hemos venido viendo a lo largo de estos meses que van del 2016, los ojos de esos halcones y sus socios sionistas se han posado en el sureste asiático y han estado laborando sin pausa para buscar una causa, una justificación que les de argumentos a Washington para meter a su flota dentro de las aguas norcoreanas, sabiendo que existen seguras posibilidades de que serían repelidas a fuego limpio por las lanchas artilladas de Pyong Yiang.  Para peor,  en la mentalidad retorcida de estos sectores nefastos de la política anglosajona, los norcoreanos son “orientales”, es decir, no son caucásicos o incluso de piel blanca lo que les facilita con seguridad, usar toda la potencialidad destructiva sin la menor contemplación, solo por el hecho de esos rasgos disimiles.

Si acaso alguien cree que esto es una exageración o un juicio apresurado, solo basta ver lo que hicieron con una saña bestial y sádica sobre la población de Iraq, sobre Libia y lo que tratan de instalar en Siria; por supuesto, ni hablar de lo que hacen desde hace décadas sobre la población palestina que llega a grados de brutalidad tan extrema, que hace revolver el estomago a algunos de los generales israelíes más temibles. No debe perderse de vista este ingrediente racista en todo esto. Los norteamericanos en la guerra de Vietnam solían llamar a los vietnamitas “monos”; similares apreciaciones solían hacer los israelíes sobre algunos ciudadanos asiáticos con los que realizaban tratos para la venta de armas y como olvidar, la calificación de “ratas” a los palestinos.

Pero volviendo al extremo oriente y en particular al Mar Meridional de la China está claro que los ensayos de Pyong yiang son la excusa perfecta para que la flota norteamericana que pulula por dicho espacio marítimo, amplíe sus operaciones navales y hasta las incremente en número aprovechando toda la cobertura  mediática que ha recibido el evento.  Es muy posible que el Pentágono este evaluando seriamente en tratar de deshacerse militarmente de Pyong yiang, atendiendo a las peligrosas capacidades que ha desarrollado asombrosamente en los últimos cinco años.  A la par de ello, tanto Pekín como Moscú saben y están al tanto del peligro de su pequeño vecino comunista pero también están al corriente de que a Washington le sería muy funcional detonar un conflicto en la península coreana, mediante algún incidente prefabricado.

Para contrapesar estas maniobras, Rusia y China han puesto manos a la obra mediante la realización de sus propias maniobras militares conjuntas que sin dudas, es un mensaje para los navíos norteamericanos que se hallan operando.  Para que Washington no se inquiete por esta cooperación militar, ambos países dejaron en claro que estas maniobras no estaban dirigidas contra nadie en particular aunque sin lugar a dudas de que EEUU sabe que es un mensaje para ellos.

Más allá de cualquier aclaración, lo cierto es que esto para Washington y sus aliados representa una agresión aunque, curiosamente sean ellos quienes continuamente se están metiendo en lugares ajenos con nada buenas intensiones. Y si no veamos lo que ha sucedido últimamente sobre el espacio aéreo ruso, específicamente sobre aguas territoriales próximas a Crimea. El 7 de septiembre último, dos aviones de patrulla con equipo electrónico P8-Poseidón de la Armada estadounidense se adentraron en la zona próxima al espacio aéreo de la península de Crimea, lo que al ser detectados por los sistemas de alerta temprana de la base aérea rusa de Sebastopol, despacho una pareja de aviones SU-27 para interceptar a los intrusos.

Al ser advertidos de que debían cambiar de rumbo, los aviones espía norteamericanos giraron en dirección opuesta para dirigirse al oeste abandonando sus claras intensiones de espiar a las maniobras militares que se estaban desarrollando en el Cáucaso bajo la denominación “Cáucaso 2016”.  Ante esto, el Pentágono solo le quedo elevar una queja por una supuesta actuación poco profesional de los pilotos rusos que espantaron a sus aviones (v. https://actualidad.rt.com/actualidad/218176-cazas-rusos-alerta-acercamiento-aviones-eeuu-frontera-rusia )

Para algunos analistas, estás operaciones intrusivas son deliberadas acciones de provocación para medir las capacidades de guerra electrónica de Rusia. Para otros, una estrategia improvisada y peligrosa que busca un tropiezo en Moscú que dé lugar a incrementar la presencia de la OTAN en dicho teatro de operaciones.

Provocaciones como estas han sido recurrentes en lo que va del año y no son más, que la reedición de viejas tácticas ya vistas a lo largo de la historia. Para desgracia del Pentágono y pese a que la inteligencia militar norteamericana intento operar bajo el más estricto secreto, sus aviones más modernos que están dotados de sistemas de invisibilidad electrónica que pueden burlar radares de la mayoría de las fuerzas aéreas del globo, se han visto descubiertas in fraganti ante los avanzados e inesperados sistemas rusos que están demostrando que tienen muchas más sorpresas de las que Washington puede especular.

domingo, 11 de septiembre de 2016

EN LA MIRA



“RUSIA, 
ARGENTINA Y EL G20”

Cuáles serán los beneficios de la Argentina ante los nuevos delineamientos geoestratégicos para Eursasia encabezados por Rusia y China




Por Charles H. Slim
Hace tiempo que veníamos exponiendo con lujo de detalles, sobre la necesidad de que Argentina comience una política seria de reestructuración de sus Fuerzas Armadas visto el complicado contexto geopolítico en el que las naciones se ven actualmente inmersas, con nuevos peligros y amplios desafíos a sortear en campo militar y de los cuales no está exento el país.  Con esto revive  la importancia de reforzar las estructuras de los estados nación que han venido siendo agredidos desde el lanzamiento de aquel “Nuevo Orden Mundial”  inaugurado por el presidente George H Bush el 11 de septiembre de 1991. Quizá nunca y menos aún hoy, haya habido  lugar para la improvisación en lo que respecta a la defensa nacional y la planificación estratégica que debemos recordar, pudo verse condicionada a comienzos de año por Londres, tras el encuentro entre el entonces primer ministro David Cameron y el presidente Mauricio Macri en Davos.

Pero a pesar de que el gobierno de Macri se halla condicionado políticamente a no direccionar sus contactos externos con gobiernos que no agraden a Washington y Tel Aviv, la regla parece haberse flexibilizado por una cuestión temporal y obviamente bajo el más estricto control. Nos referimos al notable acercamiento que se ha venido dando entre Buenos Aires, Moscú y Pekín que antes de tomar el gobierno hubiera parecido impensado. Estos contactos que se han venido viendo y que se están profundizando en áreas comerciales de diversa índole,  parecen orientarse a entre otras cuestiones, reestructurar a las mal trechas Fuerzas Armadas y dotarlas de equipamiento tecnológico ruso de punta que muy seguramente no estará exento de quejas de Londres.  Habíamos analizado ya mucho antes de que Macri y su gobierno llegaran al poder, cuáles eran las posibles planificaciones para volver a levantar de los suelos a un ejército sin un armamento a la altura de la realidad actual, de una Armada sin buques y de una Fuerza aérea sin aviones de combate (v. http://pensamientoestraegico.blogspot.com.ar/2015/11/en-debate-justo-tiempo-se-frustra-la.html ).

En ésta última semana el viaje de Macri y su comitiva a la Cumbre del G-20 en Hangzu, China,  se ha visto circunscripta en un momento histórico de la realidad mundial en la cual se pudo comprobar que EEUU es un país más como cualquier otra en el concierto internacional, al menos así se lo hizo ver el gobierno chino a la llegada de la prepotentes comitiva norteamericana que vio con desagrado que no se le tendiera a Barak Obama una alfombra  roja para su recepción. Tal como su conocido modo de conducir sus políticas en el exterior, se puedo ver a una desaforada Susan Rice tratando de dar órdenes a los encargados chinos del manejo de la recepción quienes además de no darle lugar a sus gritos, recibió como contestación “Y este es nuestro país, okey!?”

Pese a que la importancia del G-20 ha sido relativizada en comparación a las que realiza el G-7, lo cierto es que para Argentina puede haber sido la entrada a una nueva realidad, luego de décadas de ostracismo y obsecuencia enfermiza hacia Washington y la Unión Europea.

En este marco, además de las tratativas referidas al comercio, la cooperación en varias áreas del desarrollo industrial y de intercambio de tecnologías, se dio lugar a tratar temas de preponderancia política, estratégica y de seguridad de alcance mundial como es sin dudas el terrorismo y los conflictos de Ucrania y Siria.  

Precisamente en estos temas, es que se hallan íntimamente enfrascados los tres grandes actores participes en la cumbre como son EEUU, Rusia y China, disputando tras las bambalinas de aquella despiadada guerra en Medio Oriente, el control de la ruta de la seda.

Sobre esto, luego de que fracasaran las negociaciones entre EEUU y Rusia para llegar a un plan de paz en Siria, ha quedado en claro que dicho fracaso fue deliberadamente buscado por la comitiva estadounidense. 

Las razones para ello, son que Washington pretende seguir manteniendo el caos en la región del Sham, que abarca el desierto entre Siria e Iraq que precisamente es la ruta de paso para restaurar las vías comerciales de Oriente a Europa mediante la recreación de aquella vieja ruta de la seda. Con un caos controlado, los estadounidenses con la colaboración de sus aliados, había logrado bloquear los planes de abrir extensas vías de comunicaciones que conecten Pekín con Berlín en particular y Europa en general. 

Pero luego de la intervención rusa que dio lugar a los notables progresos del gobierno sirio por empujar a los mercenarios fuera de gran parte de su territorio, La Casa Blanca debió comenzar a maniobrar diplomática y militarmente para no meter la pata, más de lo que lo había hecho ya. Recordemos sino el descalabro de sus programas de la CIA montados en el norte de Siria que –con la colaboración de Ankara- se avocaban a reclutar, armar y entrenar a varios grupos de mercenarios con el objetivo de derroca al gobierno sirio, no de combatir a ISIS. Al ser todo esto puesto en evidencia, continuar con la agenda tal como lo venía haciendo era inviable. Claramente, la intervención de Rusia y el acercamiento de China a Siria ha cambiado el panorama. 

Esto se está evidenciando con el liderazgo político y diplomático  indiscutible que Rusia encabeza desde los últimos cincos años en todo lo que respecta a encarar los desafíos orquestados desde occidente usando claro, a la OTAN y por supuesto al sector financiero que maneja prácticamente todo el mundo.

Es en medio de esta tensa disputa que la cándida delegación argentina ha ido buscando oportunidades para agregar al país, especialmente en cuanto haga a la posibilidad de abrir nuevos mercados entre Asia y el país. 
Corbeta rusa clase Gremiaschi

Y sin dudas de que las expectativas son muy alagüeñas dada las cordiales relaciones que, contrariamente esperaban muchos,  fructifican entre el presidente Vladimir Putin y su homologo argentino que han quedado ratificadas –para la sorpresa de muchos- tras el encuentro en China. Al parecer el gobierno argentino hubo autorizado a la delegación encabezada por el ministro de defensa Julio Martínez, ha gestionar posibles adquisiciones de equipos militares para la fuerza aérea y la Armada, con la opción de lograr transferencia de tecnología que de concretarse, marcara una distinción cualitativa  en toda la región.  De esta manera Argentina podría participar en un mercado novedoso para el Cono sur y de una amplia gama de variedades que en otros mercados se hallan fuera del alcance.

El momento no podía ser más propicio, dado que para Moscú las necesidades de Buenos Aires pueden ser cubiertas en su totalidad y sin los condicionamientos que acostumbradamente se prevén desde Washington y Londres a adquirir basura residual que además de costosa es material que manejan y conocen muy bien los enemigos históricos como son los británicos, quienes trabajan con paciencia y muy sigilosamente en horadar la integridad territorial del estado argentino.

Las posibilidades de un desarrollo en el campo de la defensa argentina, se ven ciertamente muy propiciadas a tener acceso a material tecnológico que puede resolver  los problemas de varios puntos estratégicos de los cuales el país adolece desde hace décadas, por claras políticas negligentes. Desde estas perspectivas, habrán grandes beneficios tanto para Argentina como para la Federación rusa que además de ofrecer un amplio abanico de posibilidades en sistemas modernos de defensa, promoverá el desarrollo de las industrias militares rusas con un alto grado de cooperación en base a la confianza y las ganancias mutuas (.https://actualidad.rt.com/actualidad/218215-shoigu-rusia-argentina-estar-listos-cooperacion-militar )

La sorpresiva decisión de Macri no sería otra cosa, que la natural reacción a las costumbristas promesas sin cumplir de los centros de poder occidentales quienes tras trazarle la agenda política bajo condiciones tales como “habrá inversiones financieras si no se tocan las Fuerzas Armadas y otras cuestiones como Malvinas” entre otras más,  opto por tomar el toro por las astas y romper con esta vieja situación.

Según han precisado algunas fuentes en Moscú, la comitiva argentina habría sido informada detalladamente de los catalogos de armas que se estaban exponiendo en la feria ARMY 2016 de Moscú, especialmente sobre las que cubrirán las necesidades que  actualmente preocupan al gobierno argentino.  Entre las posibles adquisiciones que darán mucho que hablar están los aviones de combate SU-25 o posiblemente un lote de aviones MIG-29 remodelados con electrónica de última generación. Para la Armada se habría planteado como sugerencia la adquisición de lanchas rápidas tipo “Escorpión”  e incluso alguna corbeta tipo “Gremiaschi” que podría  cubrir con éxito el actual y desprotegido litoral marítimo argentino.

Precisamente se prevé que las ganancias provenientes de la industria militar rusa aspiran a llegar en lo que queda de este año a unos 15 mil millones de dólares según han señalado expertos norteamericanos basándose en un artículo del diario ruso Pradva  (http://www.veteranstoday.com/2016/09/08/russias-arms-exports-to-reach-15-billion-in-2016/)  


En este marco, el mismo ministro de defensa ruso Serguei Shoigú calificó las negociaciones como muy positivas y consideró a la Argentina un “socio importante”, lo que además de romper el mito de que el anterior gobierno seudo-Nacional y Popular de Cristina Fernández era revolucionario por establecer unos timoratos lazos con Rusia,  demuestra que más allá de discursos sin contenidos, son los intereses más que los ideologismos los que pesan en la real politik

jueves, 8 de septiembre de 2016


NACIONAL



“EXPIONAJE VARIADO Y SALVAJE”

Como décadas de descalabro y corrupción de la inteligencia argentina ha propiciado la inseguridad actual.




Por Braulio Vergamo
A pesar de que los políticos argentinos no lo hayan notado, la Argentina se encuentra inmersa en una realidad que Europa vivía hace ya cuarenta años antes, en la cual las agencias de inteligencia convirtieron a dicho espacio geográfico, como el campo de batalla por excelencia de las disputas entre los gobiernos de las dos superpotencias de aquel entonces, agencias de inteligencia y grupos armados clandestinos. Eran los años de la guerra fría y el negocio del espionaje abarcaba casi todos los negocios ilícitos que cualquiera pudiera imaginarse.  Recientemente parece que la administración de Mauricio Macri parece haber advertido que su país se halla en una situación de anarquía en el campo de la inteligencia, llevando a que lo que fue la SIDE (hoy AFI) y muchos de sus elementos se hallen dispersos trabajando para el mejor postor, aplicando sus conocimientos –que en muchos casos son amplísimos- que además de ser dirigidos a negocios ilegales, vulneran el derecho a la intimidad de los ciudadanos.

Lejos de las opiniones de los charlatanes y opinologos que saturan las pantallas de televisión, el tema del espionaje en el país tiene diferentes escalas y es tan complejo que muy bien de resucitar el novelista y periodista británico Ian Fleming, de visitar la Argentina podría escribir varios volúmenes de historias con diferentes “Bonds gauchescos”.  Y es que como dice aquella letra de la canción….”aunque no lo veamos, el espía siempre está” obviamente refiriéndonos a los ojos y oídos indiscretos que diariamente –y especialmente desde hace 16 años hasta hoy- escudriñan nuestras vidas y comunicaciones personales.

Pero el mundo del espionaje carece de ese romanticismo y aquel glamour que las novelas de Fleming destilaban; por el contrario, es una dimensión oscura de la realidad que vive en el bajo fondo de los estados, entremezclados en todos los estratos de la sociedad y sin los límites claros de lo legal o ilegal. En la Argentina el tema de la “inteligencia” más conocido como los “servicios”, es de larga data. Casi siempre ha sido pintado como una cuestión exclusivamente de las Fuerzas Armadas, tratando engañosamente de vincularlo a los gobiernos militares como origen y fin de los mismos servicios, pero ello es una falacia. Los gobiernos “democráticos en adelante han sido prolíficos en usar a los “servicios” para los fines más alejados de sus propósitos operativos para los cuales fueron creados.

Pese a la estructurada y puntillosa diagramación legal de la rama de la inteligencia nacional (ley 25520) las pésimas administraciones pasatistas y los escarceos políticos a la que se le sometió de continuo, la convirtieron como han señalado algunos viejos personajes de ese mundo, en  las cloacas del estado.  Y ello no significa que antes no lo fueran solo que, antes estaban al servicio de los intereses nacionales.

Casi nunca escucharan que los radicales se hagan cargo de su desastrosa administración en el área de la SIDE durante el gobierno de Alfonsín en la década de los ochentas, entregándola a agencias extranjeras para su supuesta remodelación, una decisión estratégica y política horrible.  Peor aún, no escucharan autocriticas de los menemistas que además de colaborar aun más para su inorganicidad, la entregaron en bandeja a las agencias como la CIA, el Mossad israelí y a los de la DGSE francesa quienes la volvieron un colador que vertía más información al enemigo que al gobierno que la requería.

Igualmente los noventas están lejos como sus caducos funcionarios, que como el caso del ex jefe de la SIDE del gobierno de Menem,  Miguel Ángel Toma tratan hoy de explicar lo inexplicable en torno a las explosiones en la Embajada de Israel y la AMIA, cuando al momento de estar a cargo de dar respuestas, jamás dieron alguna coherente. Pero muchos jóvenes con mentalidad renovada y razonamiento criterioso han comenzado a preguntarse ¿Pero de que pueden hablar estos dinosaurios de la política cuando en su momento, no supieron resolver los problemas que acuciaron a la seguridad y defensa del país? Y la respuesta sería que, nunca estuvo en sus funciones velar por la seguridad y la defensa del país. Recordemos sino al mismo Miguel Ángel Toma cuando expresaba muy suelto de cuerpo que “el país debía dejar de tener Fuerzas Armadas”, como parte de una aspiración –obviamente política externa- de colocar a la Argentina bajo la tutela militar de la OTAN.

A tal grado de descalabro se llevo a esta vital área del estado, que no es posible de creer que se hayan podido llevar a cabo dos episodios como los de la embajada de Israel y la AMIA, o la voladura de Río Tercero en Córdoba o el asesinato del hijo del presidente, sin que lo supieran sus servicios de inteligencia.

De esta manera y con una progresiva degradación del campo de la inteligencia nacional, llegamos a nuestros días con escándalos como fue el insólito asesinato de un fiscal federal supuestamente protegido en un piso alto en medio de la capital, la revelación de la identidad del jefe de operaciones de la SI (Jaime Stiusso), las presuntas operaciones de la inteligencia militar sobre periodistas y políticos ordenadas por el general César Milani, la progresiva filtración de droga por los canales aduaneros que albergan mafias señeras que se vinculan con otros negocios negros del contrabando internacional que no pasan inadvertidos para la inteligencia lo que demuestra una gran impunidad política.

La era del gobierno Kirchnerismo dejó abierta la puerta a la creación de grandes cuadros de buchones e informadores rentados que entremezclados entre militantes de la Campora y organismos del estado, llevó a que lo que quedaba de la SIDE (SI) pasara a ser prácticamente un órgano partidario más del FPV dejando en claro que ello no significó devolverle la independencia operativa que cortaría con la influencias y el enquiste operativo de agencias extranjeras. Y si no baste recordar el escándalo del masivo espionaje que, usando la plataforma de la embajada británica en Buenos Aire, venía realizando el MI-6 en las narices del gobierno.

Precisamente y sobre la operatividad de las agencias de inteligencia externas en el país, el  año pasado tras el escandaloso caso del fiscal Nisman y toda la misteriosa circunstancialidad que lo acompaño –entre ellos, la aparición y huida del agente israelí Patcher-, ha quedado muy en claro cómo, además de los diversos sectores de colaboradores locales con intereses extranjeros en el país,  la CIA, el Mossad y el MI-6 se mueven con total comodidad no solo en el ámbito territorial sino dentro de la misma estructura gubernamental.

Pero todo este caldo de intriga hoy se ha desparramado en todo el espectro de la vida política no solo nacional sino también la provincial y la municipal.  El negocio de los “buchones” hace tiempo que ha superado las fronteras de los servicios para tareas gubernamentales.  Solo recordemos como en el mismo salón de gobierno en la Casa Rosada,  a comienzos del mes de marzo se habían descubierto micrófonos instalados en dos despachos, que habían sido colocados por manos anónimas lo que preanunciaba el operar de terceros actores  tras bambalinas.

Como no citar a los falsos equipos de trabajo de servicios públicos, los técnicos de empresas telefónicas e internet que enmascarados como simples empleados, se cuelgan de postes telefónicos o abren cajas terminales para interceptar líneas determinadas para obtener información en forma subrepticia. Pese a que la tecnología ha evolucionado al grado de que ya no se requiere de interceptar físicamente un cable telefónico o incluso hacerlo desde la central de telefonía –y más allá de que haya o no orden judicial-,  es un método que se sigue empleando.

Pero la intriga y las confabulaciones también tienen desarrollo en el  escenario provincial, especialmente la de Buenos Aires, donde con un ramillete de mafias que se interconectan a todos los niveles de la sociedad, hallan involucrados a sectores policiales bonaerenses, de la justicia, sectores ministeriales que a su vez se conectan con los escalones del submundo del narcotráfico, trata de blancas, armas y muchos asuntos sucios más. Es por eso que no debería sorprender a nadie, que la misma gobernadora María Eugenia Vidal haya sido amenazada tan íntima e impunemente como se pudo ver en el pasado mes de agosto.

De esta manera se articulan ingeniosos mecanismos que tienden a generar estereotipos y posibles causantes de ese caos controlado, que achacado al problema de la inseguridad local, sirven a propósitos políticos y estratégicos externos como acostumbradamente viene sucediendo con los llamados “terroristas” , que con mucha soltura los medios y algunos insignes periodistas, gustan difundir con notorio agrado cuando aquellos son de origen árabe, musulmán o libanés.

Obviamente que cuando al país ingresan elementos de las agencias como la CIA o el Mossad israelí o militares de esas nacionalidades, archi comprometidos en todo tipo de crímenes de lesa humanidad como son las torturas, las violaciones, asesinatos de civiles y las limpiezas étnicas, que son los revelados orquestadores del “ISIS” y todo el descalabro montado en Siria, no hay comentarios por aquellos periodistas y sus medios que suelen acusar a sus propios paisanos como “malos”  (v. http://www.radiojai.com.ar/online/notiDetalle.asp?id_Noticia=71737 ) .

En uno de estos claros ejemplos del operar xenófobo, pudo verse en Bahía Blanca cuando tres funcionarios egipcios que habían llegado con el buque cerealero Sea Biscuit al puerto de Ingeniero White en agosto pasado, fueron presentados por los medios como “terroristas árabes” que estaban siendo seguidos en forma encubierta por la Policía Federal y los servicios, denotando las claras connotaciones arabofobas y antisemitas que dejan al descubierto a los recurrentes autores intelectuales detrás de esos “informes de inteligencia” elaborados en Washington y Tel Aviv (v. http://www.lanueva.com/la-ciudad/875923/hablaron-los-egipcios-que-son-investigados-por-terrorismo-en-bahia-blanca.html ).

En el mismo sentido y como parte de la misma estrategia de generar la desconfianza y el caos, no se debe perder de vista el incremento de la violencia delictiva que, además de ser inflada mediáticamente, causalmente estos mismos sectores del periodismo con orientación ideológica muy clara, forma parte de una táctica de desestabilización de baja intensidad con claros fines políticos que puede evolucionar peligrosamente a otros niveles.


Hay una atmosfera de desconfianza en todos los niveles del gobierno y ella se ha extendido a la sociedad toda, donde nadie está seguro de quien tiene a su lado o si a quien le esta confiando un secreto, luego será sorprendido con que esa conversación había sido grabada con increíble nitidez. Para colmo de males, la seguridad interior está en manos de  personajes funcionales a Washington. Ni que hablar de los llamados “corrillos” o chismes de pasillos que abundan e intoxican la vida política de los municipios bonaerenses más importantes.  Se tratan de “operadores” de la más baja calaña, pero operadores al fin que tienen en la mayoría de los casos, una recompensa económica o favores de aquellos (adquisición de terrenos, ventajas locativas, automotores etc) que les mandan a cumplir con esas tareas.

domingo, 4 de septiembre de 2016


EN DEBATE



“ASIA SOCIA”

Cómo Asia en general y China en particular, son la esperanza para las relaciones estratégicas de Argentina




Por Charles H. Slim
Actualmente el mundo pasa por una galopante recesión económica que no discrimina entre potencias y economías emergentes, lo que ha quedado en claro luego de la crisis desatada por la súbita salida del reino Unido de Gran Bretaña de la Unión Europea intentando entre otras cuestiones, reflotar a la Libra esterlina como la moneda de cambio comercial en Europa y el mercado asiático. Pero para varios analistas esta decisión que fue impulsada por los ultra-nacionalistas británicos y apoyada en secreto por los conservadores de la alta sociedad londinense,  fue un arrebato afiebrado y no muy bien calculado que puede traer peores consecuencias que el haberse quedado en la Unión Europea.

Y Argentina no escapa a esta crisis que no tiene pausa. Pese a que su abúlica clase política no ha variado mucho pese al cambio de gobierno,  las promesas de Mauricio Macri para reactivar la economía de su país parecen no cuajar y es muy posible que en las actuales circunstancias en que se halla el mundo, tenga que hacer mucho más de lo prometido para conseguir compromisos contantes y sonantes de inversores extranjeros.

Aun pareciera que el colectivo de los argentinos en general pero quizá más importante, sus políticos en particular, no han entendido que su país (Argentina) ha dejado de ser aquella coqueta quince añera pretensiosa –y pretendida- que solo baila con el más lindo y adinerado de la fiesta. Para ellos habría que colgarles un cartel que diga: “NOTICIAS DE ÚLTIMO MOMENTO…ni tú eres aquella joven pretensiosa ni quedan candidatos lindos en este baile”.

En esta metáfora, podemos personalizar a los candidatos a EEUU, la Unión europea en crisis, Rusia y China. Acostumbradamente, la pretensiosa Argentina gusto de bailar junto a EEUU quien le hizo todo tipo de promesas pero ninguna duro más de una noche. Igualmente a ella (Argentina) solo le interesaban los dólares de ese galán sin dar nada a cambio. Ello no fue así y Argentina debió dar mucho más de lo que aquel le  dio a ella. Pero con el paso de los años, el maquillaje político de EEUU fue cayéndose hasta dejar a la vista, ese matón psicópata que matara a cuantos se le crucen para enriquecer a la economía doméstica.  Hoy EEUU se encuentra con una economía inmóvil atacada de una grave recesión que solo obtiene utilidades, de la guerra.

Si aquello fuera grave, aun falta considerar el factor más importante en todo esto y es nada menos que, la desangrada economía norteamericana que tal como lo sostienen varios analistas, se halla sustentada en meros bancos de datos electrónicos, simples cifras digitalizadas que en realidad, no cuentan con respaldo físico para sostener el valor del dólar. No hay dinero en las bodegas de la Reserva Federal que respalden los números que dibujan en la banca de Wall Street. En este sentido, cabe recordar que los EEUU ha venido desde el 2008 en una espiral recesiva que aunque algunos han vaticinado que a finales del 2015 había comenzado a repuntar, lo cierto es que para lo que va del 2016, la realidad de la producción netamente estadounidense y de su PBI ponen en evidencia que no solo la recesión no acabo sino que peor aún, se ha agravado.

Por su parte la UE se halla jaqueada no solo por la salida del Reino Unido y la misma recesión mundial sino también por una galopante corrupción que escandalosamente puede comprobarse en las más diversas áreas económicas, financieras y políticas del bloque (v. http://www.globalresearch.ca/corruption-in-the-european-union-scandals-in-banking-fraud-and-secretive-ttip-negotiations/5543935 )

De esta manera, las sociedades anglosajonas ( y las de países como Argentina) han dejado prácticamente de consumir y el gasto promedio de los ciudadanos con ingresos medios, provenientes de empleos bien remunerados, ha venido cayendo desde comienzos del 2016.  Lo único que produce EEUU es conflictos bélicos y crisis regionales lo que a la altura de las circunstancias queda claro de que no es casual. Su industria armamentística es prolífica en ganancias que solo beneficia a un minúsculo sector empresarial. 
Como la plaga de langostas que ha arrasado regiones enteras, EEUU busca nuevas plazas para saciar sus necesidades.

En ese sentido se ha venido viendo como los ojos de los “Think Tanks” se han posado en forma sostenida sobre la realidad político-económico y social de los países asiáticos, especialmente en los que bordean a la gran China Popular, buscando horadar su estabilidad. De este modo mediante las consabidas argucias de políticas de ayuda a los países necesitados,  apoyo humanitario y supuestas larguezas pinatadas de buena voluntad,  Washington ha venido operando en forma de ONGs con intensiones mucho más interesadas que las que promueven.

Pero lo que ha movido a Washington a las fronteras más extremas de Asia, es sin lugar a dudas, el miedo a que  China se convierta en la potencia económica emergente que logre imponer su moneda de cambio para el comercio en el continente asiático, su extensión al Medio Oriente, al África y muy posiblemente a Latinoamérica.  Las maniobras militares que ha venido desarrollando la marina estadounidense en las aguas del Mar Meridional de la China no son casuales y apuntan a ese respecto. Aprovechando las diputas marítimas históricas que tiene China con sus vecinos, especialmente con Filipinas y Vietnam, le dieron el pie a EEUU para moverse agresivamente en la región tratando de entablar con estos países, relaciones políticas apoyadas en preconceptos orientados a una desconfianza con el gigante asiático.  Precisamente con estas expectativas es que Obama realizó una gira por Laos, para tratar de revivir la propuesta comercial que trate de absorber a los países que bordean a China (v. “La recarga de la batería de Asia”. https://www.foreignaffairs.com/articles/laos/2016-09-01/recharging-asia-s-battery )

Lo que nos informa todo esto, es una clara esquizofrenia en la política norteamericana que demuestra un nerviosismo imposible de ocultar y que claramente se vio potenciado por el acercamiento de Pekín a Damasco lo que obstaculiza aún más los planes por derrocar a Bashar Al Assad. Torpe y desesperadamente trata de condicionar la política exterior de Pekín acudiendo al uso del garrote; eso es un claro error que puede tener efectos contra producentes para Washington y quienes  aún le secundan.

Sobre esto último, el gobierno de Buenos Aires debería preguntarse ¿Cómo podemos seguir siendo tan obsecuentes con Washington cuando sus políticas agresivas, además de ser repudiables, perjudican a nuestras relaciones con países amistosos como el de China?  Obviamente que para que alguien en el gobierno de Macri o más bien el mismo Mauricio Macri pudiera responder este cuestionamiento, debería tener la suficiente independencia política para poder responderla sin consecuencias.  Igualmente hay que remarcar la inteligente agenda del presidente Macri, que partió rumbo a China para participar de la cumbre del G-20 para gestionar una mayor inserción de capitales chinos en Argentina.

Claro que muchos señalaran que EEUU ha tendido su mano a la Argentina, tras la última visita de John Kerry quien trasmitió a Mauricio Macri la intensión de su país de que empresas norteamericanas llegaran a la Argentina para invertir y hacerse cargo de varias áreas de la prestación de servicios públicos o la de ofrecer una ayuda a la reestructuración de las Fuerzas Armadas, pero aún son promesas sin muchas expectativas. 

Igualmente sería importante y un avance en el criterio de visión estratégica de Buenos Aires, si va más allá de las acostumbradas y abusivas relaciones con los intereses anglosajones que cada gobierno ha maquillado bajo los tintes de relaciones bilaterales o de gobierno a gobierno.  Se requiere claramente una política firme y sostenida que ponga por delante los intereses nacionales por los que desde el norte se señalan.

Y ello no está dirigido a una política agresiva o descortés con los estadounidenses, sino a plantear que hay situaciones, políticas y propuestas que no convienen al país, simplemente eso; a practicar una real politik

Muchos podrán decir, ello es muy fácil de decir pero muy difícil de hacer ya que es ahí donde para algunos surge la pregunta ¿Cómo lo tomará Washington? o ¿No se enojarán en La Casa Blanca? , recordando aquel señero y anglófilo politólogo argentino Carlos Escude convertido últimamente al judaísmo.

Sin dudas Argentina tiene muchos argumentos históricos para mantenerse a una distancia prudente de EEUU pero si hay una principal que deba preocupar a los sectores de la producción y el consumo argentinos, esa es la búsqueda de imponer el TTP “Tratado TransPacífico que pondría en mano privadas a los mecanismos  de control del estado, dejando al arbitrio de las mega corporaciones y empresas, condicionar al estado a que garantice sus ganancias y su ajenidad a los reclamos que realicen los usuarios y consumidores de dicho estado.  Brevemente, ello sería que si Argentina firmara este engendro, las empresas multinacionales que operan y operaran en el país, especialmente las prestadoras de servicios públicos –de lamentables prestaciones por cierto- no podrían ser “molestadas” por las quejas del llano poblacional sin que ello repercuta en consecuencias para el estado nacional; ello sería, que la empresa en cuestión podrá demandar al estado por esas molestias.

Hoy por hoy EEUU no está en posición de presionar a nadie. Y si no véase como fue la recepción de Obama en el G-20 en donde no faltaron cruces verbales y contratiempos (v. http://mundo.sputniknews.com/asia/20160904/1063244105/presidente-eeuu-dificil-visita-china.html )

China y Rusia se han opuesto a esta extensión del TTP dado que, ambos países han llegado a acuerdos bilaterales para el desarrollo del comercio regional, quitándole fuerza a la supuesta necesidad y ventajas que aquel tratado conlleva para los países adherentes.  Hasta ahora vemos que Argentina no ha pisado la trampa y su gobierno parece haberse dado cuenta que el mundo no se reduce a EEUU y la UE y de que tanto China como Rusia son dos plazas estratégicas para el comercio y socios muy interesantes para el desarrollo de varias áreas del estado nacional que aún no han sido atendidas.