INTERNACIONAL
“CABEZA DE TURCO”
Qué fue lo que realmente ocurrió en Estambul en la primera hora del nuevo año y quiénes son los posibles autores?
Por
Charles H. Slim
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El último ataque
terrorista que sacudió a Turquía justo a comienzo del año nuevo, vino a
despertar más sospechas de que todo lo que se ha venido discursando sobre el
terrorismo y su dinámica, es más bien una gran charada dirigida desde un lugar muy
distinto al que la corporación mediática sionista ha tratado de instalar en el imaginario
colectivo mundial. Pasadas la 1:18 de la madrugada hora de Estambul, un sujeto
disfrazado presuntamente como “Santa Claus” entro a un elegante y exclusivo
night club “Reina de Estambul” concurrido por la selecta clase rica turca y por
los turistas adinerados que suelen llegar de Europa.
El
ataque fue tan sorpresivo como shockeante. Armado con un fusil de asalto
“AK-47”, aquel hombre enmascarado comenzó su raid de muerte disparando desde la
calle, matando a varias personas que se hallaban en la entrada. Tras penetrar a
fuego limpio en el interior y recambiar los cargadores de su arma, terminó
fríamente con la vida de 39 personas y más de sesenta heridas entre las que se
hallaban ciudadanos turcos y muchos turistas extranjeros. Culminada su faena se
acomodo la ropa y salió raudo de allí
para perderse en la lluviosa noche de año nuevo.
Un
detalle que se debe señalar, es el comportamiento y los movimientos de este
sujeto y que fueron tomados por una
cámara de vigilancia de la entrada de la discoteca.
Claramente calmado,
caminando apuntaba y abría fuego en ráfagas cortas contra sus blancos de
oportunidad; eso no lo haría un demente o un loco improvisado. La versión oficial difundida por los medios
“había sido ISIS”, “el Estado Islámico” o publicaban titulares tales como “El
Estado Islámico reivindico el ataque en Estambul”.
secuencia de la cam de la entrada |
Toda
esta psicosis innegable ante tanta locura, pretendía ser explicada con el
gastado argumento de que “había sido ISIS” y hasta allí llegaría la noticia. Los movimientos ejecutados y su forma de
emplear el arma delatan una profesionalidad que escaparía a un supuesto loco
aislado fanatizado por la dialéctica del “Daesh”. Otro detalle era la misma arma y las
municiones empleadas, que desde que aquella franquicia comenzó a ser la
supuesta autora de ataques en suelo europeo, los controles para detectar armas
de contrabando habrían hecho muy difícil pasearla por territorio turco. Pero las pasadas filtraciones informativas,
los documentos y testimonios recopilados en Siria e Iraq que revelaban la real
naturaleza de esa “franquicia” obligaba a que muchos comenzaran a profundizar
en quienes realmente pudieron haber sido los verdaderos orquestadores de estos
golpes como el llevado en Estambul.
Lo
visto no era nuevo. Si nos retrotraíamos a ocho años antes, aquel extraño
ataque de supuestos integristas islámicos de “Al Qaeda” –la vedette del
momento- en Bombay, India, dejó al descubierto varias pistas que
evidenciaron que los perpetradores no eran aficionados y además, sus mentores
estaban relacionados con agencias de inteligencia entre ellas la CIA.
Su
complejidad en la ejecución solo se comparaba con la de su planificación para
la cual debieron contar con un importante soporte de inteligencia y una clara
apoyatura de terceras agencias que tienen acostumbradas conexiones con grupos
radicales en Asia como el ISI pakistaní, un antiguo aliado de Washington en la
creación de “Brigadas Islámicas” y del mismo programa “Al Qaeda” (Globalresearch.ca. “Al Qaeda and the war on terrorism”.
http://www.globalresearch.ca/al-qaeda-and-the-war-on-terrorism/7718 )
Lo
orquestado en Bombay en aquel momento fue en el marco de las disputas que
existen entre la India y Pakistán por el territorio de Cachemira, un enclave
conflictivo que ha venido siendo foco de intrigas y manipulaciones por propios
y ajenos, especialmente de EEUU que trata de usufructuarlo para concretar sus
planes geoestratégicos que, usando a la India como un pivote regional, busca
como objetivos prioritarios rodear a
China y a la Federación Rusa.
Epilogo del ataque en Bombay |
Con
ese episodio de Bombay, Washington y la corporación de medios
angloestadounidenses, proyectaron el peligro de “Al Qaeda” sobre una nación
multiconfesional y con fuertes antagonismos étnicos religiosos que nunca fueron
saldados. Pero el tiempo demostró que ese peligro era tan falso como el Islam
de “Al Qaeda”.
Con
solo este antecedente, veremos que hay un pequeño salto en el relato mediático
–léase de Washington- y ese es,
el conveniente cambio de villano ante los ojos de la opinión pública. En esa
oportunidad “Al Qaeda” era el cuco y Bin Ladem era su cara visible, un embuste
que quedo comprobado con los pésimos videos elaborados por la CIA durante la
administración de Bush y que muy convenientemente en mayo del 2011, en medio de
fuertes controversias sobre la veracidad de la lucha contra esa franquicia, la administración Obama pretendió cerrar cualquier
cuestionamiento haciendo público la supuesta ejecución de Osama Bin Ladem en
una villa de Pakistán.
Para
tratar de entender que es lo que ocurre en Turquía, debemos considerar algunas
cuestiones. Primero, no caben dudas de que existen fanáticos islamistas que han
sido una constante fuente de problemas para los mismos partidos islamistas (AKP)
que tratan de ayornarse a las nuevas circunstancias, pero no son los únicos fanáticos que existen
en Turquía, esto a cuento de desmitificar algunos convenientes artículos que
tratan de volcar las culpas de lo ocurrido a y solo a los turcos (Foreing
Affair. https://www.foreignaffairs.com/articles/turkey/2015-10-28/turkeys-politics-terrorism. )
Hay una gran variedad de tendencias extremas que van desde
aquellos pasando por facciones kurdas marxistas (PKK), kurdos nacionalistas, turcos
marxistas, izquierdistas turcomanos, nacionalistas laicos (MHP) y podríamos
continuar. Una verdadera constelación
de grupos celulares extremistas que no vacilarían en poder acometer sus
acciones cuando la oportunidad lo hiciese posible. Y entonces es allí donde
comienzan las preguntas ¿Quién puede tirar de los hilos para utilizar a algunos
de estos grupos para concretar alguna operación sucia que cubra la verdadera
autoría intelectual? O también ¿Cuáles pueden ser los motivos para generar
estos brutales atentados que dañan a inocentes?
Respondiendo
con algún grado de laxitud, solo invitamos a los lectores a rever los sucesos violentos
más destacados acaecidos en el año que se había ido. Enumerar los atentados que se realizaron en
suelo turco solo sería una simple reedición de noticias pasadas; lo que aquí
importa es determinar quienes estaban en condiciones de ejecutar estos ataques
y sus motivaciones. Haciendo una breve reseña veremos que ya para el 2013
Washington ya no veía a Erdogan como un
aliado confiable en la región. En este
plan, la CIA comienza a operar con partidos minoritarios tratando de
contrarestar el poder de Erdogan e incluso organiza el movimiento de protesta
en el parque Taskim Gezi. Más tarde en junio del 2015, la agencia financia las operaciones del
partido de las minorías “HDP” para tratar de alterar las elecciones
legislativas, una maniobra que intentaría nuevamente por el mes de noviembre
del mismo año sin conseguir sus objetivos.
Las
operaciones blandas de la CIA habían fracasado por lo que pasaron a tomar
medidas más drásticas contra el gobierno de Erdogan. Según fuentes bien
informadas, en el 2016 trataron de asesinarlo cuatro veces fracasando en forma
definitiva tras el fallido golpe de estado apoyado por el sector
“Kemalista” de las Fuerzas Armadas que
desató una purga interna que ha generado ingentes condenas internacionales por
la brutalidad y la arbitrariedad con la que se conducen los partidarios de
Tiyip Erdogan (Red Voltaire.org. http://www.voltairenet.org/article194810.html )
Pero,
Erdogan tiene mucho que ver con lo que ha ocurrido en este comienzo de año.
Las
familias turcas y extranjeras que han visto perder a sus familiares no pueden
culpar solo a un atacante que ha salido de un programa financiado por los
países petroleros del golfo, que a su
vez fueron apoyados por la CIA –y colegas occidentales y regionales- que
prepararon con la venia de Erdogan y Cía a los grupos como “Al Qaeda” y el
“Daesh” que además de sembrar la muerte y la desolación en las poblaciones de
Siria e Iraq, se encargaron de abrirle el camino al zaqueo descarado que beneficio
a los bolsillos de toda su familia.
El
asesinato del embajador ruso Andrei Karlov es una clara señal de quienes se
hallan detrás de todo esto. El joven policía que supuestamente era un islamista
enojado por el asesinato de musulmanes, trató de justificar el hecho por “las
muertes que Rusia causaba en Alepo” pero, ¿Qué había de los millones que EEUU
ha masacrado desde hace dos décadas y media en la región?
Con
esto podemos ver que Erdogan no es un pobre mandatario asediado por la
injusticia; para nada. Es un mafioso que tras años de haberse congraciado con
los deseos de Washington y sacar partido a lo que ayudo a crear en Siria, tras
verse traicionado por sus amigos occidentales y sabiendo que no podría
sobrevivir a un quinto intento de sacarlo del poder, como primera medida se
paso al bando de Rusia y hoy clama con el fervor de un converso que tiene las
pruebas de que EEUU había venido apoyando a las bandas como el “Daesh” tanto en
Siria como en Iraq, algo que él mismo ya conocía desde que todo este circo se
puso en marcha y del cual, aprovecho para llenarse los bolsillos con activos y
dinero robado en Siria.
Sin
dudas, esta masacre en Estambul ha sido un mensaje a su persona y el mismo
parece recordarle que “ellos” está allí, agazapados y preparados para acabarlo
cuando la oportunidad lo amerite.