EN LA MIRA
“EL ACUERDO”
Según lo dejó trascender el diario israelí Haaretz, hubo una reunión secreta entre los actores más influyentes en el asunto de Siria ¿Qué se acordó en aquel encuentro?
Por
Dany Smith
Tal cual se
viene viendo, la conjura contra a república árabe Siria se encuentra en los
últimos capítulos, sino el último y definitivo. Mientras en los diversos
frentes las fuerzas árabes sirias y sus aliados regionales, con el inestimable
apoyo de la Federación rusa se imponen sobre las bandas armadas “Wahabi”
(pro-Arabia Saudita) y el espantajo del “Daesh”(creado por la CIA), en los
círculos políticos y diplomáticos ya se están llevando a cabo intensas
gestiones para que los principales actores en todo esto, definan sus
posiciones.
Las
exitosas operaciones de Hesbollah en Ersal lanzadas el 20 de julio último que
terminaron con el dominio de “Jabbat Al Nusra” y de sus centros de operaciones
en campos de refugiados palestinos, han sido alguno de los incentivos para que
especialmente Israel, acordara un encuentro ultrasecreto con los más
influyentes actores de esta tragedia. Y es que con ello, se ha perdido el
equilibrio de fuerzas en su favor.
Lejos
de los prolegómenos de supuestas rencillas históricas y de enemistades
irreconciliables, Israel, EEUU, Rusia se reunieron en secreto a principios del
mes de julio en la ciudad de Aman, Jordania, donde debatieron el definitivo
cese al fuego y el establecimiento de zonas distención. Según trascendió por el
medio israelí “Haaretz” altos representantes de las partes se reunieron para
discutir cómo se desplegaran dichas zonas y cuáles serán las determinaciones de
cada gobierno con respecto a Siria desde que se llegue a un acuerdo.
Y la
elección de Aman como sitio para el encuentro no solo pareció muy conveniente para
despistar a los enemigos de estos contactos, sino también muy peligroso en
vistas de las tensiones existentes entre Tel Aviv y el gobierno jordano por el
asunto de las embajadas (Haaretz. http://www.haaretz.com/israel-news/1.803117
)
Sin
dudas que este encuentro ha sido por la determinación y el repentino cambio de
política de la Casa Blanca con respecto a lo que venía sucediendo en el Medio
Oriente por lo cual, es a Trump a quien habría que darle los méritos para que
esto se produzca.
Por ello, desde los sectores más agresivos del
conservadurismo estadounidense, los lobbies sionistas del Congreso hasta los
ultranacionalistas ortodoxos israelíes, están sufriendo fuertes retorcijones
que no hará más que, aumentar la animosidad que se venía imprimiendo desde que
aquél empresario subió a la presidencia.
Sobre
esto último, cabe señalar que algunos funcionarios cercanos a Trump, han
revelad que existen algunos elementos de la Administración que no trabajan
precisamente para los intereses del presidente (POLITICO.com. “Scaramucci
amenaza con despedir a todo el mundo para detener la fugas de la Casa Blanca”. http://www.politico.com/story/2017/07/25/anthony-scaramucci-changes-white-house-communications-office-240928
)
Por
lo pronto, desde Tel Aviv no hay muchas ganas de ponerse a juzgar a la Casa
Blanca por las decisiones de Trump, menos aún en momentos en arrecian los
escándalos internos de corrupción y malversación de dineros públicos que
vinculan a Benjamin Netanyahu y a su mujer, Sara Netanyahu que según algunas
encuestas de medios israelíes, reflejan que el primer ministro debería ser
suspendido hasta tanto se aclare su situación.
Acorde
con el delicado momento que vive la región y los variados factores que no
comulgan con este tipo de encuentros y menos aún con algunos de sus participes,
se tomaron todas las medidas extremas de seguridad sin levantar la más mínima
sospecha de que allí, en un edificio del centro de la capital, llegarían en
forma separada y lo más discretamente posible, los más altos funcionarios del
área política y militar de estos actores.
De
ese modo Aman fue ocupada unos días antes por los servicios secretos israelíes,
estadounidenses y rusos quienes coordinaron con la mukjabarat jordana,
las rutas y las posibles contingencias que pudieran surgir. Igualmente y en
forma paralela ante posibles filtraciones, células de estas agencias operaron
extraoficial y paralelamente para dar mayor cobertura.
Para
ello, se hicieron presentes en la más absoluta discreción los representantes
del Ministerio de Defensa israelí, del Mossad y de las fuerzas armadas. Por su
parte, los norteamericanos enviaron al secretario y asistente del Departamento
de Estado para Siria, Michael Ratney y el representante del presidente de EEUU
de la “Coalición anti Daesh” Bret Mc Gurk, mientras que por la parte rusa
acudió el enviado especial de Rusia para Siria, Alexander Lavrentiev (Sputnik. https://mundo.sputniknews.com/politica/201708091071430796-politica-oriente-proximo-damasco-washington-moscu-jerusalen/ ). Como parte de los auspiciantes y dueños de casa, participaron
altos representantes jordanos quienes seguramente y por separado reportaron
otros detalles a Washington.
Según
algunas infidencias, en la reunión se trataron las inquietudes de cada parte y
las posibles negociaciones para lograr conformar a todos al mismo tiempo. Para
Israel, la presencia de tropas iraníes en la frontera con las Alturas del Golán
representa un hecho intaceptable que el gobierno de Tel Aviv no está dispuesto
a tolerar. Si con Hesbollah ya tienen serios problemas para poder operar con
libertad sobre zonas del Líbano, con los iraníes y milicianos chiitas iraquíes
las cosas se podrían poner muy feas para sus intereses.
Por
su parte, EEUU parece no estar muy dispuesto a marcharse y pretendería
establecer una base permanente en el norte de Iraq –sin permiso de Damasco- algo
que no es compartido por Moscú aunque, es seguro que los estadounidenses no se
preocupen por ello hasta que se produzca algún evento inquietante.
Sin
lugar a dudas, esta cumbre demuestra que Siria ha logrado imponerse a los
planes para su destrucción y ahora, ante la ineludible victoria militar que se
extendió a la faz político-diplomática de Damasco con el apoyo de Rusia, ha
establecido las pautas para un alto al fuego sin posibilidades de que la
mayoría de las bandas armadas puedan recuperar terreno.