NACIONAL
DE SANTOS, TRANSAS Y OBSECUENTES
En cercanía de las elecciones nacionales, los argentinos se ven en una verdadera encrucijada ¿Votar o no votar?
LAS
elecciones presidenciales vienen asomando y las propuestas de lo diversos
sectores en competencia, no despiertan ninguna novedad para los obligados
votantes. En Argentina el sufragio es obligatorio, que lleva una carga
coercitiva de multa para el que no concurra sin justificaciones atendibles por
la justicia electoral.
Los doctrinarios del derecho constitucional lo denominan
un “derecho-deber”, una mutación artificiosa que caramente vulnera el principio
de “Libertad” al que cualquier ciudadano no representado con alguna de las
ofertas electorales, pueda optar por no votar.
Pero así son las cosas por esos
lares. Un gobierno eterno de una presidente muy peculiar y rodeada de los
funcionarios más impresentables que uno pueda imaginar, que vienen de un pasado
tan negro como la noche más cerrada, está preparando perpetuarse en el poder
mediante meros delegados. Lo mismo sucede a nivel provincial y en los
respectivos municipios y departamentos en cada una de las veinticuatro
provincias que componen a esta gran nación. Con aspirantes como Anibal Fernández que no se
le puede inquirir con firmeza su discutible pasado político porque lo considera una agresión; intolerante
y con duras acusaciones sobre si que refieren a nexos con violentos crímenes
cometidos en la provincia, fue uno de
los “menemistas de la primera hora” aunque
hoy día diga lo contrario.
Otro tanto se puede decir del
candidato “para los Oscar”, Jorge Massa, quien ahora se presenta actuando como
la alternativa a éste gobierno cuando él fue parte del mismo e incluso, mamo de
la misma fuente de la que los “K” se surtieron para consolidar su feudo en
Santa Cruz.
Pero en realidad, hay que ser
justos; ¿por qué ser tan severos con un subalterno cuando su jefa también fue
junto a su marido, “menemistas de la primera hora”? Con estos antecedentes, es
claro que la alaraca propagandística sobre un progresismo o supuestos
posicionamientos de un peronismo revolucionario que los pintan como luchadores
sociales, es un insulto para los verdaderos luchadores. Ante semejantes
inconsecuencias el tan usado –no invocado y menos aún practicado- Arturo
Jauretche los bajaría de las orejas de los pedestales que ellos mismos se
colocaron rodeados de petulancias artificiales. Para ellos y parafraseando a
este gran pensador nacional “los intelectuales argentinos suben al caballo por
la izquierda y se bajan por la derecha”; aunque, para mayor precisión habría
que decir “que los políticos argentinos gesticulan con la izquierda y cobran
con la derecha”.
Es también muy
atinada la frase de Jauretche que reza La
falsificación (de la historia) ha perseguido precisamente esta finalidad:
impedir, a través de la desfiguración del pasado, que los argentinos poseamos
la técnica, la aptitud para concebir y realizar una política nacional. Mucha
gente no entiende la necesidad del revisionismo porque no comprende que la
falsificación de la historia es una política de la historia, destinada a
privarnos de experiencia que es la sabiduría madre. Con
ello, el imaginario “Kirchnerista” no es más que una elaboración destinada a
distorsionar y perpetuar una historia ajustada a sus intereses partidarios que
además de ser sectarios, son falsos.
En la vereda de enfrente o,
presuntamente así actúan hacerlo, no hay nada nuevo bajo el sol. Autodenominados
“progresistas”, “socialistas”, “renovadores” y
en última instancia la esperanza de un cambio, no parecen dotados de
voluntad y menos aun fuerza para contra restar a la pléyade de estafadores que
ha instaurado esta administración que se puede caracterizar de ser una
verdadera tiranía impositiva, que sirve para solventar los aparatos políticos
que responden a sus propios intereses; o acaso alguien cree la CAMPORA es una
asociación civil sin fines de lucro?
Los llamados “renovadores”, no
renuevan nada y solo buscaran profundizar lo que ha establecido este gobierno.
Scioli y Massa son dos caras de los dados con que juega la presidente y nada
más. El primero de ellos, tengan por seguro de que ampliará las fuerzas
policiales con lo cual ajustará más las tasas y los impuestos provinciales; implementará
más sistemas de vigilancia electrónica con cámaras que solo vigilan al
ciudadano y estrechara aún más las conexiones con los carniceros
(norteamericanos e israelíes) que, expertos en suprimir a quienes consideran
enemigos, son quienes entrenan a esta “maravillosa policía”. Los señores y
señoras votantes deberían reflexionar con cuidado a quien les entregaran su
voluntad.
Y qué decir del más potable de
los representantes del liberalismo político y económico anglosajón como Mauricio Macri, que encolumna tras de
sí, a los simpatizantes del orden dirigido desde Washington y los torcidos
valores que sustentan una política exterior de pillaje a mano armada.
Que cambio puede haber con los
estafadores del FPV que entre otras hazañas, además de pagar religiosamente a
los acreedores extranjeros, pidieron al Banco Mundial en esta última semana un
nuevo préstamo. Esto no significa que el rejunte de “Cambiemos” traiga nuevos
enfoques. Al menos de este sector de neoliberales disfrazados de izquierdistas
intelectuales está en su naturaleza, el salir a pedir créditos al exterior para
cubrir los baches de la economía.
Lo que resulta una clara estafa,
son los llamados populares que, hablando de derechos y supuestas luchas, han
embolsado obscenas fortunas y que pretenden seguir haciéndolo –en especial
la señora Cristina- por medio de los títeres que juegan a ser oponentes.
En última instancia, no hay que
olvidar uno de los episodios que fue deliberadamente olvidado por la prensa y
esta justicia tan tuerta y coimera que tiene el país; y es el caso del “oro de
los Kirchner” –parte de él proveniente de una donación de Rockefeller en
2008- , la demostración más clara de cuánto el matrimonio K y sus fieles
cercanos, le han robado a la nación en nombre de una ideología que no se la
creen ni ellos.
Los testimonios sobre la
existencia de ese tesoro han hablado en su momento y las investigaciones como
siempre, han sido paralizadas convenientemente; pero pueden ser reabiertas en
cualquier momento (v. http://www.cronista.com/economiapolitica/La-ex-secretaria-de-Nestor-Kirchner-tambien-denuncio-la-existencia-de-bovedas-con-dinero-y-oro-20130506-0065.html
) Está claro que la donación de estos lingotes de oro no fueron sin esperar
alguna contraprestación.
Sobre esto mismo, ha quedado
claro que el matrimonio K estaba –y sigue estando- mucho más cerca de
intereses extranjeros como son las multinacionales MONSANTO, BARRICK GOLD Co y JP MORGAN, que de los
principios políticos que signaron al Peronismo verdadero y que no se contamino
con el aberrante “Menemismo” y que menos aún representa el “Kirchnerismo”.