EN LA MIRA

¿HAY EN CURSO UNA “PRIMAVERA LATINA” EN EL CONTINENTE?

Con el fracaso de Washington y sus aliados en Siria, se están escuchando alertas sobre el inicio de planes de desestabilización para América Latina

A la altura de las circunstancias la situación en Siria y el Levante ha quedado esclarecida, al menos en quienes han sido los precursores políticos y militares  para que hiciera aparición el “Estado Islámico”.  Por supuesto que esto ha representado un grave inconveniente para La Casa Blanca y para todos los estamentos en Washington. Quizás el principal y más sacudido por el revés que los rusos le están dando a los grupos  de mercenarios en Siria, es la comunidad de inteligencia en especial la CIA.

En solo una semana, la aviación rusa ha puesto en fuga a un importante sector de estos grupos y ha causado duros golpes contra su infraestructura de comando y comunicaciones que vaticinan un estrepitoso final. Al mismo tiempo, se han caído las escenografías tras de las cuales, se escondían los titiriteros de estos grupos que además de proveerles del necesario financiamiento, les otorgaban las armas, el entrenamiento y la información para actuar.

Implicados tras estos planes del “caos controlado” diseñado por Washington (v. https://actualidad.rt.com/actualidad/view/103720-geopolitica-internacional-oriente-proximo-eeuu ),  están Arabia Saudita, sus aliados europeos y regionales, quienes a su vez son respaldados en las sombras por Tel Aviv y obviamente Washington.  Desde el 2011 fueron infiltrando elementos extremistas y armas que llegaban desde la Libia arrasada por la OTAN mientras tanto  la CIA y asesores militares preparaban otras agrupaciones en bases de entrenamiento en el desierto de Jordania, el sur de Turquía y coordinaban progresivas colaboraciones con las dispersas células de “Daesh” que se preparaban –a espaldas del régimen colaboracionista de Nouri Al Maliki- en el oeste de Iraq.

Claramente se puede ver que la infraestructura de este “terrorismo” creado para intereses propios de Washington además de ser descubierto y expuesto a la vista de la opinión pública, tiene las horas contadas en Siria. Con ello se ha podido comprobar que esto ha jugado y ha sido utilizado como una arma más, una táctica de guerra sucia levada a los extremos de la masividad que a pesar de  haber sido exitosa –bajo el velo de la Primavera Árabe- en Túnez, Libia y Egipto encontró su definitivo fracaso en Siria.

Pero hay que señalar, que de no ser por las investigaciones de sectores activistas dentro del mismo EEUU (ej. www.veteranstoday.com ), hubiera sido bastante difícil haber podido llegar al grado de conocimiento de hasta dónde el gobierno estadounidense por medio de sus agencias de inteligencia, está metido en la farsa sangrienta montada en Siria y toda la región.

A pesar de que se habla de un contexto ideológico que inspiraría a estos grupos, especialmente identificado en el “Wahabismo” de origen saudita, lo cierto es que tal como lo señaló el mandatario ruso Vladimir Putin en la conferencia de prensa en el balneario de Sochi en octubre del 2014, “los que estaban peleando en Siria eran mercenarios, que luchan por quien más les pague”.  Es cierto sí que Riad viene teniendo un papel central en todo esto –especialmente en la inyección de petrodólares para el financiamiento- y también es cierto, de que puede hacerlo con el permiso y hasta la colaboración de Washington y de Tel Aviv,  quienes han sido agarrados “in fraganti” en varios episodios tanto en Siria, Iraq y Yemen.

Ante el claro fracaso de sus planes, algunos expertos y sectores que realmente luchan contra estos grupos apoyados por las agencias de inteligencia occidentales e israelíes, están advirtiendo que existen planes de que la misma dinámica –adaptada a las circunstancias políticas y de idiosincrasia locales- pueda ser extendida a países de Latinoamérica con la evidente intensión de desestabilizar la región. El principal blanco para desarrollar las mismas tácticas que serían financiadas por Arabia Saudita y obviamente con la colaboración operativa de EEUU e Israel, sería Venezuela,  según señaló el secretario general del Partido de Dios “Hesbolla” reproducido en el medio árabe Al Akbar (v. http://www.al-akhbar.com/node/243437 ) dejando en claro, que el mundo ha quedado pequeño y que los peligros como el que representan estos siniestros enjuagues, están a la vuelta de la esquina.

No caben dudas de que estos mismos sectores puedan montar un plan similar en América Latina, dado que existen suficientes elementos que confirman la operatividad de las agencias como la CIA, el MI-6 y el Mossad en la región, especialmente en el sur, que han sido  puestas sobre el tapete en Argentina tras el asesinato de uno de los enlaces de Tel Aviv con  Buenos Aires como era el fiscal federal Alberto Nisman. Y si a ello le agregamos la inyección de millones de dólares para el financiamiento de planes semejantes, con los gobiernos corruptos que encabezan varios de estos países, los intereses detrás de estos planes tendrán la seguridad de que no habrá seguridad que pueda estorbar al desarrollo de sus operaciones.

La advertencia fue difundida por el mismo Hassan Nasralla en Beirut y que fue inmediatamente reproducido por medios iraníes y latinos como Hispan Tv (http://www.hispantv.com/newsdetail/El-Libano/60064/hezbola-advierte-amenaza-terrorista-saudi-latinoamerica ) dejando en claro que el “wahabismo” y el terrorismo saudí busca extenderse incluso a países de Latinoamérica.

Las advertencias del líder libanes vienen a tratar de estar alertas  de una nueva charada que usando nuevamente al Islam como fachada violenta y a costa de la dignidad de los musulmanes, los mismos que habían venido impulsando el fenómeno de “ISIS”  y demás franquicias operando en Siria, pretendería implementar una nueva crisis regional y con ella, desatar  un conflicto que justificaría la intervención militar exterior.

Como dato final para sustentar estas advertencias, se han conocido en esta última semana que algunos cables filtrados por Wikileaks, revelan que Washington, más precisamente el Departamento de Estado tiene  planificado en los próximos meses, llevar adelante golpes de estado y hasta magnicidios contra figuras importantes del Cono sur. Similar a lo que se orquestó en el Medio Oriente, el desarrollo de estas planificaciones serían ejecutadas en forma secuencial y acudiendo a las retóricas dl doble rasero de Washington en la cual,  mientras La Casa Blanca dice una cosa, el Departamento de Estado y las agencias de inteligencia que trabajan en las sombras, hacen otra cosa. Una de las fuentes proviene de la publicación compilatoria de Wikileaks, escrito por Julian Assange (v. http://www.versobooks.com/books/1931-the-wikileaks-files ) y de  documentos  estudiados por Alexander Main y Dan Beeton del Centro para Investigación Económica y Política con sede en Washington.

Lo apuntado por el secretario Hassan Nasralla puede ser extendido a países como Nicaragua, Ecuador, Bolivia  y posiblemente Argentina, dado que son los países que han venido molestando a las políticas del Departamento de Estado y que, por la situación interna en cada uno de ellos, se presentarían bastante prometedores para el desarrollo de planes semejantes a los que  desplegaron con “Al Qaeda”,  el fantasmagórico “Ejército Sirio Libre” y el “ISIS”.