LLEVAR EL CAOS A EUROPA
¿Cuán desesperados están los supremacistas en Tel Aviv para sostener a
toda la costa la viabilidad de un estado colonialista y genocida? Los chacales
acechan desde la oscuridad
Por
Yossi Tevi
Solo los médicos y el personal de ayuda humanitaria que no han sido asesinados por las FDI saben de primera vista y con todos sus sentidos lo que sucede en la Franja de Gaza y en particular hoy por hoy en Rafah, bajo el asedio impiadoso de las bombas israelíes y la falta de comida. Si bien es cierto que algunas imágenes lograron colarse a la férrea censura sionista que opera subrepticiamente incluso en los medios occidentales, no llegan a representar en su real magnitud la realidad de lo que sufre la población palestina.
El brutal
asesinato -no fallecimiento como citan los medios angloestadounidenses- de
siete voluntarios humanitarios extranjeros (entre ellos un australiano, un británico
y un polaco) en Deir Al Balah[1]
por un bombardeo israelí cuando repartían comida a los refugiados palestinos
refuerza éste descarnado e inhumano escenario.
Nunca como
en estas circunstancias Israel ha demostrado qué es y quiénes son sus líderes y
partidarios llevando incluso a que varios de sus más acérrimos militantes en
occidente, tengan que criticar la magnitud de los crímenes que impunemente
comente a la luz del día. La maquinaria de propaganda que acostumbradamente
sirve para tapar todo esto no da abasto. Incluso ha resquebrajado esa estrecha
relación existente entre el liberalismo estadounidense y el sionismo tan bien
representado con los demócratas y en particular con la actual administración
Biden-Harris. Tal como lo señalan algunos israelíes cansados de las
hostilidades y de sus consecuencias, “Netanyahu ha empujado a Israel al
abismo”.
Los
jerarcas en Tel Aviv representativos del extremismo judío con Netanyahu a la
cabeza además de estar más preocupados por su sobrevivencia política, están
ciertamente desesperados por esta situación y es posible que hayan ideado un
plan para tratar de revertir la pésima imagen y el creciente repudio mundial
por el genocidio que se lleva adelante en Gaza y que tiene como propósito
apoderarse de toda la Franja. Nunca como antes a los sionistas les vendría muy
conveniente un “11/S” para victimizarse ante la opinión pública, pero la
pregunta sería ¿Quién pondrá las víctimas?
Así quedó la camioneta en la que viajaban los siete voluntarios humanitarios que fue atacada por la aviación israelí. Las evidencias revelan un ataque deliberado quedando a la vista el agujero en parte superior de la camioneta por donde ingreso un proyectil guiado seguramente de los que EEUU le provee a Israel.
Tratar de desacreditar
a los palestinos, a los gobiernos árabes que les apoyan y en especial a la
resistencia árabe-islámica ha sido una de las tareas más continuadas y
perseverantes de la inteligencia israelí y de sus socios occidentales. Para
lograr este objetivo una de las estrategias más elaboradas ha sido -junto a
los activos de la CIA como Al Qaeda y Daesh- la orquestación de operaciones
de falsa bandera (atentados terroristas y asesinatos) plantando pistas falsas
con la intensión de incriminar a la república Islámica de Irán y a la
organización chiita libanesa Hezbollah.
La actual
situación en la Franja de Gaza y que se está espiralizando en toda la región ha
estado perjudicando las relaciones políticas y públicas de occidente con Israel
afectando entre otras cuestiones, el surtido de armamento y municiones por
efecto de embargos. Esto ha planteado un grave problema para las FDI. Pero el
problema central radica en que el estado ha perdido el apoyo y las simpatías
que existían en sectores de la población occidental que nunca había visto (o no
interesaba verlo) lo que Israel hace para sustentar su estado de cosas.
El
genocidio y la limpieza étnica que está perpetrando contra la población
árabe-palestina es innegable y a la vez, imposible de justificar. Aquí no se
trata de ser calificado de “antisemita” por criticar semejantes acciones porque
las cometen judíos israelíes (como tan seguidamente claman los sionistas), es
una cuestión de humanidad, aún cuando los sionistas se crean superiores al
resto.
Esa
artificiosa forma de ver las cosas funcionó durante décadas, callando a voces
disidentes y al periodismo establecido tanto dentro de Israel como en Occidente. Hoy además de estos sectores quienes se
levantan contra estas aberraciones son muchos judíos de a pie que simplemente
exponen su postura de no sentirse parte de un estado que no los representa.
Pero
también se han expresado funcionarios israelíes sobre lo que representa la
ocupación sobre la población palestina y sus consecuencias, tal como lo expreso
el general israelí Yizack Barik en una entrevista para “Al Jazeera” y que Hassan
Hamade comenta en un interesante artículo para Red Voltaire[2].
En tanto,
mientras las FDI masacran a los civiles palestinos que no pueden huir, muchos otros
están huyendo a Egipto y de allí continuarían su periplo a Europa buscando la
seguridad que perdieron con la actual situación. Sin dudas que es factible que
miembros de Hamas se estén colando entre los refugiados y los servicios de
inteligencia israelíes estén al tanto de ello despertando varias interrogantes
por esto. Aquí es donde comienzan las especulaciones sobre como los servicios
de inteligencia israelíes con el apoyo de sus redes y colegas occidentales,
pueden aprovechar esta oleada migratoria a suelo europeo para beneficio
político de Israel.
El Mossad
podría instigar y facilitar los recursos para que se lleven adelante ataques de
gran espectacularidad y daño y las olimpiadas que se llevaran a cabo en julio en
Francia propiciaría la oportunidad para ello. Este artificio no sería el
primero ni el último en la historia.
Hace unos
meses atrás una red del Mossad fue desmantelada en Turquía que buscaba llevar a
cabo asesinatos, atentados y secuestros contra partidarios de “Hamas”. Pero para
las autoridades turcas y en especial el MIT esta red pretendía algo más y eso
sería, crear la sensación de que los palestinos llevaban el terrorismo al país,
algo que habría servido para distraer la atención de lo que sucedería en Gaza.
El desbaratamiento de esta operación fue un duro golpe para Tel Aviv y con el
objetivo de alinear a todos los miembros de la UE tras su posición, una ola de
atentados podría ser suficientemente convincente como para criminalizar a los
palestinos y victimizarse al mismo tiempo.
La
posibilidad de esto se verifica con lo ocurrido en Moscú el 22 de marzo pasado
y en donde fuimos testigos de cómo el terrorismo, como un arma más controlada
por las agencias de inteligencia, puede ser direccionado de forma discrecional y
conveniente usando máscaras que encubren a los verdaderos autores intelectuales.
De ser así. estará en manos de las autoridades europeas (y en particular sus
agencias de inteligencia) no cooperar con estos planes oscuros.