viernes, 19 de septiembre de 2025

 

                                            GAZA

¿Por qué el genocidio que aún se sigue ejecutando con total impunidad en la franja y que hoy se lleva a cabo milimétricamente en la ciudad de Gaza es el tiro de gracia para la legalidad internacional?

 

Por Charles H. Slim

Por estas horas solo los palestinos y los valientes trabajadores humanitarios que han decidido quedarse pese a las amenazas del carnicero de Tel Aviv, saben lo que es el infierno. Durante horas, días enteros los aviones, los obuses y los misiles israelíes han bombardeado cada sector de la ciudad de Gaza matando en el acto y por aplastamiento de los escombros a cientos de inocentes entre ellos a muchos más niños y mujeres.

El ultranacionalismo sionista da rienda suelta a su sed de sangre y como lo hicieron sus homónimos europeos del fascismo y el nazismo de la primera parte del siglo XX, van a la conquista de espacio vital ajeno en este caso, de los palestinos.

Ciento de miles de civiles tratan de huir a pie, con carros o incluso bicicletas, obligados por el fuego deliberado de los tanques y tiradores israelíes que en varias oportunidades han sido pillados sonriendo al ver el dolor de sus presas. Muchos gazatíes huyen como pueden y lo hacen en estado de debilidad tras meses sin comida y agua e incluso con heridas que no han podido ser tratadas por los constantes ataques (de sus colonos y mercenarios) israelíes a los camiones con medicinas y comida. Atrás dejan sus casas o incluso los restos de lo que quedaba de ellas y que los sionistas ambicionaran apoderarse tras el final de la limpieza. Una verdadera carnicería se esta llevando a cabo a plena luz del día y frente a cientos de dispositivos que captan en tiempo real como las bombas de las FDI van cayendo tras de sí como una forma de arrear a esa marea humana empujándola al sur.

No hace falta intuir que no hay un lugar seguro en Gaza y mucho menos cuando el agresor tiene la intención de buscar y matar cuantas personas se le crucen.

La impotencia es total y con ella la indignación por un organismo ciertamente inútil como Naciones Unidas que no ha hecho nada -más allá de sacrificar a muchos de sus empleados- por frenar este genocidio a cielo abierto. Las familias enteras asesinadas (como era la familia Zaqout de 43 miembros), las desaparecidas de quienes no sabemos nada y los lisiados incluyendo entre ellos a personal de la UWNRA ya no tienen remedio pese, a que este mismo organismo burocrático supo ser muy veloz y contundente para impulsar medidas tan discutibles como de dudosa imparcialidad como fueron las intervenciones sobre Iraq en 1991, 2003 y las reprobables acciones cohonestadas con la OTAN contra Yugoslavia en 1999.

Los extremistas judíos en su mayoría de origen askenazi (europeos) están envalentonados por la política del gabinete supremacista liderado por Netanyahu que se frotan las manos a la espera de arrasar Gaza para seguramente volverla en un gran negocio inmobiliario. Igualmente y aunque las FDI cuentan con un apoyo ilimitado de la logística y abastecimiento de material militar estadounidense ya saben que ni sus tanques “Merkaba” les aseguran salir indemnes de las emboscadas de la resistencia.

Entre tanto y ante las condenas de la mayoría de los gobiernos europeos (tardías y nada creíbles), Netanyahu y sus principales ministros acuden una vez más a la retórica del antisemitismo cuando en realidad son ellos, Netanyahu y Cia quienes con este horrendo genocidio y contra toda la legislación internacional, han cometido uno de los crímenes antisemitas más abominables precisamente, contra un pueblo semita como es el palestino (descendiente de Sem, hijo de Noe), que será recordado en la historia como una vergüenza en la historia del judaísmo.

Pero mientras esta tragedia humana se agudiza, los planes del gabinete sionista y de sus aliados en los gobiernos de occidente (en especial en EEUU y Gran Bretaña) se centran en ver cómo lograr en menor tiempo posible la captura de Gaza asegurándose de asesinar a cualquier sobreviviente.

El cuadro no solo es trágico sino francamente siniestro, tanto que no es posible disfrazarlo con nada. Es más, los medios en occidente, consecuentes y conocidos colaboradores del sionismo no han podido hacer el esperado control de daños que se esperaba de ellos. La imposibilidad de tapar los hechos y mucho menos explicarlos, rompe con una estrategia discursiva que desde 1948 ha estado basada en mentiras, encubrimientos y deformaciones deliberadas de la realidad. Las otroras jactanciosas excusas apelando a ser víctimas del mal y de ser perseguidos porque son “el pueblo elegido”, el “antisemitismo”. el “holocausto” y toda una variedad de argumentaciones tiznadas de falacias hoy ya no cuajan y solo les quedan el silencio o meras rumiaciones que les deja al desnudo en su propia inconsecuencia.

En EEUU los mismos estadounidenses de a pie y una parte importante de la intelectualidad judía ya son conscientes que tienen un gobierno o más bien un sistema político que se halla cooptado por el ideario sionista tanto en la política interna como en la exterior que -por el cabildeo directo e indirecto- brega por intereses propios del estado de Israel representado por grupos como AIPAC, ZOA, la LIGA ANTIDIFAMACIÓN o JSTREET  entre los más influyentes, que han terminado por convertir al estado de la unión en un operador automático, en especial de y solo por el interés geopolítico-estratégico-mesiánico de Israel.  Incluso se han incluido a estas filas los cristianos sionistas (como son los de CUFI) que más que verdaderos cristianos y practicantes de las enseñanzas de Cristo, son la representación de una versión retorcida y política del evangelio.

Pero a pesar de toda esta batería de organizaciones y redes que consumen y se sostienen con miles de millones de dólares provenientes de las donaciones (incluidas las de origen negro), no pueden tapar la sistemática criminalidad del estado de Israel. Tal vez Netanyahu y sus partidarios tanto en Israel como en este lado del hemisferio crean que lograrán su objetivo sin pagar costo alguno, entonces preguntemos ¿Realmente creen que no pagaran por semejante atrocidad?

No hay comentarios.:

Publicar un comentario