“POR QUÉ IRÁN ES UN PROBLEMA?”
Cuál ha sido la
razón por la cual EEUU e Israel no han podido y no podrían agredir
gratuitamente a Irán
Por Charles H. Slim
Todos parecen estar conscientes y acuerdan que la
próxima guerra en el Golfo será eminentemente naval y es por ello que Irán no
ha estado perdiendo el tiempo. EEUU ha dado muestras en Iraq de lo que puede
hacer contra una población civil y los iraníes no van a permitir que eso les
pase a ellos. Durante años (y podríamos decir desde 1979) la población iraní ha
tenido que soportar la presión estadounidense que con sus ilegales sanciones económicas
y comerciales ha tratado de privar de
todo tipo de materias primas, bienes y servicios con la obvia intensión de
crear la agitación política interna contra el gobierno revolucionario de
Teherán.
Hasta el momento, los esfuerzos ilegales de
Washington y sus socios ocultos en Israel han fracasado. Los iraníes han
demostrado que no caerán en las dinámicas engañosas de los juegos sucios de
EEUU y mucho menos se dejaran presionar por medio de medidas abiertamente
ilegales que vale recalcarlo, no tienen respaldo en la ley internacional.
La propaganda mediática occidental con especial
apoyo de Tel Aviv y sus influyentes grupos de presión alrededor del globo
(Lobbie sionista), buscan todos los argumentos a su alcance y gestionan grandes
sumas de dinero para ir preparando el terreno para escenificar un repentino
ataque.
Durante décadas Irán estuvo bajo la presión
asfixiante de una guerra terrible con sus vecinos iraquíes quienes manipulados
por EEUU y éste por los Lobbies por-israelíes en el Congreso, terminaron siendo
devorados por los mismos que los usaron por casi una década para ir a la guerra
contra ellos. Los iraquíes aprendieron –muy
tarde- con sangre esta dura lección y los iraníes se han determinado a no
tener que pasar por semejante situación y para ello se preparan con tesón y
conscientes del peligro ante una amenaza inminente.
Los últimos acontecimientos en rededor del estrecho
de Ormuz, han puesto en alerta máxima al país persa. Desde comienzos de año los
Drones estadounidenses estuvieron fisgoneando el territorio iraní tratando de obtener información sensible de
este sector, en franca violación de la soberanía de un estado independiente.
Sumado a ello, las continuas incursiones navales británicas intentando
desarrollar actividades de espionaje y meras provocaciones han recalentado las
cosas a niveles altamente peligrosos. Teherán
estaba seguro de que algo podría suceder en breve y fue así que en el mes de
mayo se produjeron los misteriosos sabotajes contra buques tanque de terceros
países (que insistentemente Washington trato de endilgar a Teherán).
Aquellos extraños hechos resultaron ser tan prolijamente
ejecutados que muchos detectaron hacia donde iban orientados y quienes eran los
principales interesados en causar controversia. Ello y a contrario de lo
pretendido por estos instigadores hizo que los gobiernos vecinos de Irán se
acercaran a Teherán y comenzaran a desarrollar tareas de seguridad marítima conjuntas
para evitar nuevos incidentes como los registrados.
Y es que en el Golfo Pérsico nadie quiere una nueva
guerra y al mismo tiempo todos saben que los únicos que están interesados en
causar estas circunstancias son las fuerzas angloestadounidenses y sus
sigilosos aliados israelíes. Sin dudas de que este ha sido un factor importante
para frenar los reiterados intentos de iniciar un conflicto mediante la
ejecución de operaciones especiales conocidas como de “Falsa bandera”.
El 20 de junio un sofisticado Dron “MQ-4C Triton” de la Marina estadounidense tras
introducirse ilegalmente en el espacio aéreo iraní (sobre sus aguas costeras) fue
derribado por las defensas aéreas emplazadas en cercanías de la ciudad iraní de
Garuk.
Muchos aseguraban que aquel Dron derribado en Junio último había sido colocado en forma
deliberada por la Naval estadounidense con la intensión de crear el Casus Belli para justificar una
arremetida. La inteligencia militar iraní presumía que esto traería un
contragolpe y fue por ello que todas las fuerzas estuvieron en estado de alerta
roja. Pero pese a ello, La Casa Blanca y el Pentágono se mantuvieron demasiado
equilibrados ante los hechos y no respondieron ¿Por qué?
Si Irán no tuviera bajo la manga un As, Washington
no habría dudado en replicar acompañando las acciones con todo tipo de argucias
e incluso como de costumbre, lanzar una
campaña desinformativa a nivel global que justificara el inicio de las
hostilidades.
Incluso la primera respuesta del bravucón Donald
Trump, avizoraba una posible e inmediata respuesta como la usada contra Siria
en 2017 y 2018.
Pero vimos más que sorprendidos como el Pentágono suspendía a
último momento los ataques previstos (con antelación al incidente) argumentando
excusas tan inverosímiles que despertaron risas entre los mismos representantes
dentro del Congreso estadounidense.
Los motivos de no dar un paso en falso parecen ser
varios y muy importantes. Como se ha sabido los intentos de las agencias de
inteligencia como la CIA y el Mossad israelí por degradar la situación social y
de seguridad interior iraní con la generación de agitaciones callejeras, sabotaje
a la economía, asesinatos y atentados terroristas contra objetivos
gubernamentales han fracasado en forma continua y bochornosa. Y aquí una vez
más debemos preguntar ¿Dónde ha estado Naciones Unidas en su papel de bregar
por hacer cumplir la Carta orgánica?
A la par, los amagues militares en las aguas del
Golfo no han hecho retroceder ni mucho menos inmovilizar a los iraníes. Según
un interesante artículo de Jim W. Dean del sitio “VeteransToday” (https://www.veteranstoday.com ) el desarrollo tecnológico militar iraní ha
progresado en lograr avances en sistemas defensivos de alerta temprana.
Este es
el caso del sistema de radar “Falaq” que tiene una capacidad operativa de más
de 400 kilómetros que puede detectar misiles balísticos, aviones furtivos y
Drones. Lo más novedoso de este es su origen estrictamente de la industria
nacional sin la necesidad por depender de implementos y repuestos extranjeros.
Pero este solo es uno de los tantos productos de su
propia industria que, por su desconocimiento, los estadounidenses e israelíes no
se arriesgan a conocerlos fatalmente.
Irán a diferencia de otros estados que se hallan
sometidos a embargos o restricciones para la adquisición de armamento, ha
impulsado con seriedad y constancia un desarrollo propio para mejorar las
capacidades de sus sistemas defensivos que además de antiguos son muchos de
ellos de origen estadounidense o europeo.
En este sentido Teherán ha comprendido el valor estratégico
de su propio desarrollo defensivo, incluso más allá de las recientes adquisiciones
a Rusia, para no caer en la trampa en la que muchos han caído en el pasado como
ser el caso de la Argentina en 1982, cuando tras emprender una guerra para
recuperar sus islas Malvinas, los británicos conocían las dimensiones, alcance
y rango de gran parte de sus armas dado que, la mayoría de ellas habían sido
adquiridas a Gran Bretaña, EEUU y Francia.