“MOVIMIENTOS PELIGROSOS”
¿Por qué Washington está echando leña al fuego
y busca la escalada con Rusia? Mientras halla guerra mejor para la OTAN
Por Charles
H. Slim
Entre tanto la guerra en Ucrania va quedando más escondida de las editoriales de los medios occidentales y Naciones Unidas brilla por su ausencia, cosas muy interesantes y de forma discreta se están llevando a cabo en suelo europeo. Hace casi diez días atrás de publicado este artículo un viejo amigo que se hallaba vacacionando por el Adriático vio con asombro unos “pájaros” muy curiosos volando con dirección a Italia. Como un sobreviviente de los años ochentas en los finales de la guerra fría, tiene un olfato agudo para detectar movimientos inusuales.
Cuando este colega me llamó y con su acostumbrado carácter entusiasta
me adelanto que había visto algo muy preocupante pero antes vería si podía
confirmar su observación yendo a consultar a unos amigos en Roma. La intriga me
iba consumiendo con el paso de las horas hasta que dos días después mi colega
me llama para decirme que la Fuerza Aérea de EEUU estaba moviendo ojivas
nucleares y reemplazándolas por nuevos diseños en sus instalaciones de la UE.
Esto es algo muy serio y a la vez altamente amenazante no ya para la
paz mundial sino para la subsistencia de la humanidad. Dentro del marco de la
guerra que se está llevando a cabo la opinión pública no está al tanto de todo lo
que realmente está pasando y mucho menos de lo más importante de lo que sucede.
Según parece Washington a desplegado sus gigantescos aviones “GlobeMaster” C-17
en los cuales transporta las nuevas ojivas nucleares B61-12 que se montan en
aviones y otras reemplazando a las existentes en los misiles que reposan en los
silos de Europa. Esto no puede ser más tétrico y alarmante para la población
europea que a su vez deja expuesta la demostración de que EEUU a través de la
OTAN está usando al viejo continente como su campo de juegos estratégicos para
su guerra contra Rusia.
Mucho antes de que Rusia diera inicio a la Operación Especial Z, Washington
ya evidenciaba su intención de reforzar su poder estratégico nuclear en Europa,
tal como se vio en octubre del 2015 con el envío de las primeras nuevas bombas
B61-12 a las bases de la Fuerza Aérea de Aviano y Ghedi Torre ubicadas en
Italia y a las ubicadas en Alemania, Bélgica y Turquía. Esto constituyó una
abierta violación al Tratado de No Proliferación Nuclear tanto de EEUU como de
cada uno de los estados europeos que receptaron el cargamento.
Más cerca en el tiempo, los ejercicios “Steadfast Noon” llevados a cabo
por la OTAN en octubre del 2022, terminaron por justificar con creces las
preocupaciones de Moscú. Tan solo unas semanas atrás los C-17 de la Fuerza
Aérea de EEUU fueron detectados trayendo las nuevas y más destructivas ojivas para
reemplazar a todo el stock de misiles con base en Europa ¿Cómo puede
interpretarse estos movimientos sino un cómo una provocación?
Agregado a esto, las especificaciones técnicas de las nuevas ojivas que
ya deben estar montadas en aviones y en los misiles estratégicos, poseen un
selector de cuatro niveles de destrucción que puede ser seleccionado a voluntad
de sus operadores dependiendo el objetivo a destruir. Esto no hace más que
reforzar las continuas preocupaciones de Moscú y justifica los persistentes pedidos
de garantías sobre las amenazas que la OTAN instala alrededor de las fronteras
de la Federación rusa.
Más allá de la peligrosidad de las ojivas nucleares que se están
armando en las bases italianas y seguramente de Francia, Alemania y Turquía, no
solo refuerza de hecho la amenaza de la OTAN esgrimida durante años por
Vladimir Putin en los foros internacionales sino también el peligro de la tan
mencionada posible escalada nuclear que los medios occidentales han tratado de
endilgarle unilateralmente a Moscú ¿Razón principal para sospechar esto? El uso
táctico que de las B61-12 puede llegar a hacerse.
Desde lo político, esto supone una provocación innecesaria pero que
Washington utiliza para tratar de que Rusia caiga en una celada. La advertencia
de estos aviones tan peculiares bien podría ser parte de un engaño, otro más de
los que Washington ha montado en todo lo que va de los últimos treinta años. A
estas alturas y viendo a la distancia ha quedado bien claro que desde que cayó
la URSS en 1991, occidente (EEUU, UE y Gran Bretaña) ha jugado al gato y al
ratón e incluso, de forma descarada bajo las narices de Moscú, operando contra
la estabilidad política de una Rusia debilitada por un caos económico-social y
político prestando entre otras cuestiones, apoyo clandestino y financiamiento a
los independentismos nacionalistas e integristas islámicos en el Cáucaso.
Para ser breves, EEUU (la CIA) nunca desactivo sus activos dentro de
Rusia y tras llevar adelante el golpe en Kiev en febrero de 2014 comenzó a
reforzar aquellas células durmientes con nuevos agentes con pantallas y
documentos falsos quienes se abocarían a prepararse para reaccionar cuando se
les ordenase. Queda claro que Washington además de actuar con premeditación y
con décadas de preparación, jamás buscó la paz ni mucho menos.
En cada movimiento de EEUU en Europa se escondió un ardid y en los que
se han visto con estos gigantescos transportes de ojivas nucleares no sería la
excepción. En el Pentágono saben muy bien que hacer frente al sistema de
misiles intercontinentales de última generación SARMAT y AVANGARD de alcance
ilimitado y que pueden evadir sus sistemas anti misiles, se hace necesario una
ventaja superlativa pero todavía no logran establecer la medida de esa ventaja.
Como se ha venido viendo, células de saboteadores subcontratados y
dirigidos por la CIA han -entre otras acciones- atacado con Drones bases
aéreas en territorio ruso y en particular la de Saratov, donde se hallan los
bombarderos estratégicos nucleares ¿Casualidad o elección al azar? Ninguna de las
dos alternativas es creíble. Si bien esos UAV causaron daños en las
instalaciones y la muerte de algunos efectivos de la base, el propósito no era
destruir la base. Hay un claro objetivo psicológico y propagandístico pero
también de tanteo táctico para ver como reacciona Moscú.
Si bien Washington se desentiende de esto negando su involucramiento y
si algún medio lo trata aceptando la injerencia de la CIA, habla de sabotaje
tratando de evitar nombrar lo que en realidad son esas acciones, verdaderos
actos terroristas contra la soberanía de Rusia.
Lo que queda por dilucidar es ¿Hasta dónde irá EEUU en sus acciones
provocativas?, ¿Acaso Washington esta tratando de obtener una reacción
desproporcionada de Moscú? Es muy posible que Moscú ya estaba preparado para
esto y hace tiempo que sabotajes similares se hayan venido llevando a cabo en
suelo estadounidense como retaliación, entonces ¿Vuelve la lucha secreta entre
agencias como la ocurrida en épocas de la guerra fría?