INTERNACIONAL
“JIHAD S.A.”
Cómo poco a poco se buscan chivos expiatorios para poder explicar en los libros de historia el surgimiento de ISIS, los escandalosos nexos con Al Qaeda y la necesidad de mantener la presencia militar de EEUU en el Medio Oriente
Por
Charles H. Slim
Hace ya más de cinco años que Washington y la OTAN desplegaron sigilosamente
sus operaciones sobre el norte de África en un ambicioso plan geoestratégico
que con el apoyo de la Corporación mediática occidental, dieron inicio a sus
planes de rediseño del Medio Oriente y que por intermedio de la denominada como
Primavera Árabe, instalaron las primeras bases para fomentar la estrategia
basada en el denominado “Caos
controlado” por el cual, se crea la inestabilidad político-social desatando
controversias, intrigas internas y actos
violentos que lleven al incremento de la confrontación a niveles como los
vistos en Iraq o en Libia intervenida por la OTAN en 2011.
Casualmente
fue tras el derrocamiento de Ghadafy que se vio flamear en Trípoli la bandera
del “Estado Islámico de Iraq” que en ingles sus siglas son “ISI”, que era el
precedente del “ISIS”, pero al parecer nadie se percato de ello. Y fue desde
allí que descaradamente comenzaron a llevar tropas de mercenarios para operar
en Siria con el único objetivo de derrocar al gobierno de Bashar Al Assad.
Hoy
ISIS es una fuerza militar en retirada y los medios occidentales no publican una
sola línea sobre lo que realmente ocurre en Iraq y en Siria, tal vez porque no
quieran fomentar la idea de que esa franquicia no pueda ser derrotada o tal vez
lo que allí se está viendo pueda ser muy embarazoso para Washington y sus
aliados en todo este enjuague.
Será
muy difícil esconder la basura acumulada durante estos últimos cinco años; al
menos así lo será para distinguidos personajes de la política estadounidense
como John Mc Cain quien tras haber sido pillado con las manos en la masa
reuniéndose con nada menos que los comandantes de bandas armadas como “Jabbat
Al Nusra”, “Al Qaeda” y quien jugaría el papel del líder del “ISIS” allá por el
2013, viene a presentarse como uno de los críticos a las declaraciones del
presidente Trump.
Esos
grupos de mercenarios que la Casa Blanca y los medios (Fake News) presentaban
con recurrencia como “rebeldes sirios”, ya no le cabe dudas a nadie de quienes
son realmente y de donde han venido. En ese sentido el cúmulo de pruebas
recopiladas en Siria e Iraq sobre los apoyos de EEUU a estos grupos y de las
contradicciones que el mismo Barak Obama llego a exponer ante el público han
llevado a convencer a un amplio espectro de las poblaciones de la región que
sin lugar a dudas, todo lo que se vincula con la farsa del “Estado Islámico” ha
estado manejado por los norteamericanos y sus aliados.
ISIS operando con tácticas urbanas |
El
humo de las batallas se está disipando y cuando ello ocurra en forma definitiva
vendrán las pesquisas y las investigaciones para que se plasme en los libros de
historia lo que realmente ha ocurrido en este tiempo. Es por ello que los
cerebros que han creado todo esto, han puesto en marcha el borrado de rastros
de dónde salió “ISIS” y la planificación del “Estado Islámico”. Ante ello
¿Quiénes creen que se encargaran de fabricar una historia que tape lo que
realmente ha sucedido? Así es. Los medios y las editoriales con grandes
financiaciones que responden al arco del denominado “liberalismo global” y que
como hemos visto comulgan con los recalcitrantes sectores Neocon y el sionismo
lobista anglosajón.
Algunos
artículos muy curiosos tratan de argumentar que la aparición del “Daesh” y de
la subsidiaria siria de “Al Qaeda”, son el producto de una “empresa privada”
llamada “Malhama Tactical” de origen uzbeco y que sería dirigida por un muchachito
musulmán de tan solo 24 años de edad, intentando ligar dicha organización con la
inteligencia rusa (https://foreignpolicy.com/2017/02/10/the-world-first-jihadi-private-military-contractor-syria-russia-malhama-tactical/). Si el tema no fuera tan serio, este argumento que dibuja este panorama
tan descabellado, desataría las carcajadas de cualquier experto militar que
conozca de entrenamientos tácticos, equipos y armas.
Tal
como se puede leer en dicha publicación, la misma se encarga ante todo de
separar las semejanzas existentes con empresas occidentales como la detestable BLACKWATER hoy ACADEMY, que cabe recordar
estuvo ligadas a operaciones sucias en Iraq, Yemen, Libia y seguramente muy
activa actualmente en Siria. De este
modo “Malhama Tactical” vendría a ser algo así como una empresa de seguridad
islámica que adiestra combatientes musulmanes para que puedan operar para la
“Jihad” en escenarios tan variados como Siria o incluso en Afganistán. Algo que
es cierto y deja en claro que dicha empresa no salió de la nada. Nadie e
incluso un grupo de personas con los conocimientos militares y experiencia como
sin dudas tienen veteranos chechenos, iraquíes, afganos o incluso de otros
países, basta para montar un campamento con todos los implementos necesarios
para que ello se convierta en una empresa.
reclutas de "Malhama Tactical". La diferencia de equipo con ISIS es notable |
Por
más que haya voluntad en un grupo de hombres con amplia experiencia en el campo
militar, su entusiasmo empresarial no les bastara para concretar un proyecto
como sería el de una “empresa de seguridad”
de estas características tan particulares.
El
factor dinero, es ineludible y para ello se requiere de una extensa red de
financiamiento –que operara con bancos, lavadores, etc- que se mantenga
ininterrumpidamente y tenga como base sustentable, un cierto grado de impunidad
para no ser detectada; y ¿Quiénes tienen dicha impunidad en el área financiera
mundial? Si, así es, las agencias de inteligencia que manejan fondos negros que
jamás reportan origen ni destino son los más recurrentes inversores para dichas
empresas. En ese sentido, como negocio, lo que económicamente implica capacitar
físicamente y entrenar a un hombre en tácticas de combate, deberá ser una
inversión productiva, aclarando que el costo por día de entrenamiento para los
combatientes que dicha empresa prepara no es gratuito.
El
lector debe entender que, a pesar de la crisis económico y financiera que
abarca a todo el globo, los negocios como estos prosperan aceleradamente por
una simple cuestión: mucho dinero involucrado en estas empresas que como se ha
visto desde hace unos años para acá, involucran a las agencias de inteligencia
occidentales involucradas en crear la desestabilización en el mundo árabe tal
como los casos de Iraq, Siria y Yemen. Ello a su vez nos lleva a tener que
deducir que solo será alcanzable para unos pocos, involucrando a sujetos,
empresas privadas y organismos de gobiernos que complementaran en la
culminación de un proyecto semejante.
Con
ello se puede ver que son contadas con los dedos de una mano las agencias de
inteligencia que pueden montar proyectos semejantes con algún grado de
impunidad y complicidad de terceros, algo que hoy por hoy –y gracias a las
filtraciones informativas- se está terminando.
A la
vez no hay que olvidar cuales han sido los nexos existentes que se han puesto
en evidencia entre la CIA y los dos
grandes fraudes seudo islamistas como son “ISIS” y “Al Qaeda”, salidos de elaboraciones
de mentes tales como la de Zbigniew Brzezinski, John Negroponte y David
Petreaus (para nombrar solo a los más conocidos) embustes reconocidos como tales en su momento
por la misma ex Secretaria de estado Hillary Clinton y refregado en su propia cara durante la campaña por el actual
presidente Trump.
Pero
no hay necesidad de tantas aclaraciones. Solo basta ir a Iraq y preguntarles a
los mismos iraquíes quienes sustentan al “Daesh” y a coro cualquiera de ellos –salvo
que sea parte del gobierno títere- les dirán quienes son, aunque los medios
aquí no digan nada.
Hay
detrás de este tipo de editoriales un claro intento de borrar esos rastros, de
maquillarlos para contaminar y/o intoxicar la memoria de la opinión pública que
a pesar del gran espectro de fuentes informativas que hoy existen, pueden
seguir siendo manipulada. Por más que se trate de un intento por desviar las
verdaderas implicancias de EEUU y sus colegas en todo el asunto del “terrorismo
islámico”, el juicio analítico e independiente de los cada vez mejores e
informados investigadores que van creciendo alrededor del mundo, no podrán
sostener esta charada por mucho más tiempo.