EN LA MIRA
“CORTINAS DE HUMO EN MEDIO DE LA OSCURIDAD”
Cómo los éxitos militares de Damasco
están siendo como los clavos para el ataúd del proyecto estadounidense en el
Medio oriente
Por Dany Smith
No caben dudas de que las últimas 48 horas, han sido un calvario
para la administración de la Casa Blanca.
Sumido entre la presión de la creciente opinión pública que ha comprobado
el fraude combate al “Estado Islámico” y las continuas operaciones internas del
neocon y sus socios sionistas por derrocar a Bashar Al Assad, Obama no da
abasto con lo que está sucediendo en Siria y que da por tierra, con las
ambiciones de éstos últimos sectores que en conjunto con Tel Aviv buscaban lisa
y llanamente destruir a cualquier precio a la república árabe de Siria.
El
éxito de las fuerzas terrestres sirias y el apoyo aéreo ruso, han puesto en
fuga a los más importantes líderes de las franquicias como “Al Nusra”, el
“Frente Islámico” y al mismo “Daesh” que misteriosamente, está sufriendo el
asesinato de sus principales lugartenientes en Libia. Esto último y aunque los medios anglosajones y
sus monigotes alrededor del mundo lo coloquen bajo un halo de misterio, lo
cierto es varias fuentes internas lo enmarcan en una operación de limpieza de
la CIA para borrar los rastros de algo que ha fracasado. No sería nada extraño
que en el mismo Washington, se comiencen a registrar extraños suicidios o
accidentes lamentables que por supuesto, no tendrán ningún lugar en el
noticiero de las 21, mucho menos en el “The Washington post”.
Y es
que, alguien debe pagar por estos errores. Desde los conspicuos medios y
editoriales necon como el renombrado Foreing Policy, han comenzado las
arengas para que quede claro, que el único culpable de todo esto es el
presidente Barack Obama. Bajo este engañoso subterfugio, el poder real
estadounidense, había venido escapando al escarnio público y a la justicia
internacional por sus más variados y múltiples delitos de lesa humanidad y
crímenes de guerra que, dicho sea de paso, siguen siendo una noticia de
actualidad (v. www.aclu.org/other/aclu-v-dod-198-photos-previously-certified-under-protected-national-security-documents-act ). Igualmente y con respecto a esto último, la desclasificación de
estas 198 fotografías de torturas inferidas por los norteamericanos en Iraq y
Afganistán, son tan anodinas como ridículas, si las comparamos con las cifras
de torturados, asesinados y desaparecidos.
Solo
para recordar el grado de criminalidad de las acciones cometidas tanto en
Afganistán como en Iraq, valga refrescar la memoria sobre como la inteligencia
militar –estadounidense y británica- como sus colegas civiles de la CIA
y el Mossad, montaron una estructura de terror para secuestrar, torturar y
asesinar a quienes representaban una amenaza a su presencia. Y precisamente,
una de las formas con las que pudieron operar con total impunidad fue
insertando aquel fraude denominado “Al Qaeda-Iraq” que vale recordar hasta el hartazgo, fue una
creación de los funcionarios norteamericanos John Negro Ponte y el Gral David
Petraeus.
De
esta manera todo parece caerle a Obama. Tal como le sucedió a su predecesor,
quieren volverlo la personificación de todos los males estadounidenses. Todo parece
señalar su incompetencia y hasta su traición que, dependiendo de quienes son
los que lo acusan de semejante cargo al mandatario de color, pueda ser
considerada como real o una mera treta mediática para ensuciarle. Si es seguro,
de que son los sectores sionistas estadounidenses quienes encabezan el ranking
de éste tipo de acusaciones insidiosas, especialmente por verse desilucionados y frustrados por no haber logrado el sueño de
apartar del camino de Israel, a Siria y al Hesbolla libanés.
En
ese sentido, se ha comprobado hasta donde son capaces de llegar para concretar
sus siniestros planes.
Tras el luctuoso y estruendoso atentado que mato al ex
primer ministro libanes Rafiq Hariri en 2005, los gobiernos occidentales con el
acompañamiento de los medios masivos, se le endilgo sin ton ni son, al Hesbolla
la autoría de este crimen. Bastó el paso del tiempo para comprobar que los
verdaderos autores intelectuales no solo no eran libaneses, ni chiitas ni menos
aún árabes (v. http://www.voltairenet.org/article167579.html ). Por el contrario, la instauración de un supuesto tribunal
imparcial internacional, erigido a la palestra de este hecho, fue una argucia
montada e impulsada desde Washington para que, con la colaboración de think
tanks alemanes, se fabricara
mediáticamente las pistas necesarias que
apuntaran a Hesbolla.
Para
otras editoriales de la misma ideología necon, era el punto sin retorno hacia
la bajada, al descenso sin freno del poder imperial estadounidense y que muy
formalmente algunos llamaban el final de la Pax Americana (v. https://www.foreignaffairs.com/articles/middle-east/end-pax-americana ) Con ello, se estaba dejando en claro que el poder militar que
supo aplastar a los países y a los ciudadanos que se negaban a su intervención,
estaba en retroceso. Y es que ha sido el
mismo EEUU que había logrado los meritos para que la mayoría de las poblaciones
–no sus gobiernos- los repudien histéricamente. Mientras se escriben
estás líneas algún Dron está lanzando misiles “Hell-Fire” que masacra a una
villa entera en algún lugar de Pakistán o Afganistán. Los únicos “amigos” que le
quedan a Washington son los ricos y corruptos emires del golfo y los sionistas
del cada vez más inviable estado de Israel.
Visto
de esta manera, podría interpretarse que todo está acabado para Washington y la
administración Obama o, muy astutamente y desde las sombras, aquellos sectores
oscurantistas del neocon y sionistas, han estado llevando a Obama a los
extremos para encontrar en él, una reacción contundente y definitiva que lleve
a los EEUU a una intervención terrestre masiva en la región. No olvidemos las internas que ha habido dentro
de la Casa Blanca y que se traslado al Pentágono, que terminó en
renuncias y acusaciones de varios
funcionarios.
Y es
que la situación para los llamados “rebeldes moderados”, es apremiante. Según
algunos analistas en el terreno, con cada kilometro de territorio recuperado,
sirios como iraquíes van encontrando pruebas contundentes de la implicancia
estadounidense e israelí. En realidad esas pruebas ya constan en las manos de
Damasco desde hace bastante tiempo solo que, los que han organizado todo esto,
esperaban que causando el colapso como
lo hicieron en Iraq y Libia, una vez dentro de Siria implementarían los mismos
métodos para borrar toda prueba.
Al
parecer la situación en los frentes de batalla sirios, la suerte está echada.
Las desesperadas operaciones militares de las fuerzas especiales
estadounidenses en el norte de Siria, no han logrado su propósito y los grupos
opositores laicos han preferido alinearse a las fuerzas rusas causando una
ruptura crítica para los planes de Washington.
Consecuencia de ello se ha frenado a los avances de los Peshmerga iraquíes
que, mediante agrupaciones de kurdos comprados por Washington y Tel Aviv, tratan por todos los medios de limpiar el
norte sirio para crear una zona de “seguridad” bajo el control del clan Barzani
con la somera y muy discreta colaboración de Ankara. Precisamente, ante los avaneces aplastantes de
las fuerzas árabes sirias y los letales bombardeos de la aviación rusa, estaría
llevando a que Erdogan tome la peligrosa iniciativa de lanzar una invasión a
territorio sirio obviamente con la complicidad de la OTAN.
Sobre
el papel de la Alianza Atlántica, cabe recordar que por casi tres años y pese a
estar advirtiendo los movimientos irregulares de mercenarios, armas y
actualmente con el tráfico del petróleo sirio a través de Turquía, no hizo nada
y solo se dedicó a simular que combatía al terrorismo. Es allí donde radica el “coraje” de Ankara y no
solamente en la confianza de sus propias fuerzas.
Pese
a que el ejército turco podría realizar una movida semejante –por tener el
ejército más potente después de Israel-, es una parte importante para el
éxito de semejante operación, la cobertura aérea algo, que se vería seriamente comprometida
ante la presencia de los sistemas de misiles S-400 y la flotilla de aviones
caza bombarderos SU-35 rusos que
llegaron apenas hace una semana para, precisamente, proteger a los bombarderos.
La pregunta que todos se hacen es ¿Estará tan decidido Erdogan como para hundir
a Turquía en un desastre militar sin precedentes? O también ¿Hasta dónde llega
la lealtad de Erdogan a las directivas de Washington?
Hasta
el momento La Casa Blanca lo hizo todo por derrocar a Al Assad y pese a que
trató de condicionar a Moscú con sanciones económicas para sacarlo del medio,
el presidente Vladimir Putin se mantuvo firme lo que y para el parecer de
varios de los “Halcones” en el Pentágono, al presidente Barack Obama le queda
una carta más bajo la manga y es el botón nuclear.