miércoles, 15 de marzo de 2023

 

“CONTRAOFENSIVA DE COLOR”

La agitación interna en algunos países de la periferia de Ucrania tiene aroma a operación encubierta de la OTAN ¿Se amplían definitivamente las fronteras del Teatro de Operaciones?

Por Charles H. Slim


Antes de que se produjera la intervención mediante la Operación Militar Especial rusa en Ucrania, Washington y sus aliados europeos ya estaban operando para que Kiev emprendiera una guerra total contra la región del Donbass. También dejemos bien claro que la guerra no empezó el 24 de febrero del 2022 sino ocho años antes, tras el golpe de estado de 2014 momento desde el cual, el régimen ultranacionalista comenzó a perseguir y bombardear de forma cotidiana a los ucranianos de lengua rusa de esa región.

Pero como dijo Clausewitz “la guerra…es una continuación de las relaciones políticas, proseguidas con otros medios”. La Operación Especial rusa es la consecuencia de una larga batalla política en las que injerencias solapadas y operaciones sucias del occidente anglosajón llegaron en Ucrania a un punto de no retorno. La traición de Zelensky en bregar por una solución pacífica -como prometió en su plataforma electoral- para la situación conflictiva  en el Donbass, alineándose tras los planes de Washington de brindarle ayuda suficiente para erradicar a los gobiernos independentistas de Lugansk y Donetsk, fue más que suficiente para el Kremlin.  El gobierno de Vladimir Putin sabía que sus “socios” occidentales les estaban engañando y eso quedó rápidamente advertido tras hacerse con las detalladas planificaciones de una ofensiva masiva de Kiev sobre el Donbass y a posterior, el escandaloso reconocimiento de la ex canciller alemana Angela Merkel de que dilataron el acatamiento de los Acuerdos de Minsk a la espera de un fortalecimiento militar de las fuerzas ucranianas.

Pero al contrario de lo que informan en occidente, los objetivos de la Operación “Z” fue inicialmente cumplida y eso en referencia a la destrucción total de la infraestructura de las FFAA ucranianas que sin exagerar, a la semana del inicio ya no eran una amenaza para Rusia. La prolongación de las hostilidades precisamente se dio por la inyección ininterrumpida de recursos desde Washington y sus lacayos europeos. A pesar de esto, los ucranianos no han logrado ninguna de las quimeras de su régimen.

Hoy la OTAN libra una guerra hibrida en todo espectro que no es nueva y que ya reporta antecedentes. Por estas horas la inestabilidad política en torno a la Europa del este, el surgimiento de amenazas insurreccionales, atentados frustrados y súbitas protestas callejeras con una muy organizada cartelería lucen muy sugestivas. Así la región de Transnistria en Moldavia y Georgia se han convertido en centros de este tipo de agitaciones que claramente están alentadas y financiadas desde el exterior ¿Recuerdan las sangrientas protestas en Kazajistán en 2022? Detrás de las legítimas protestas de los trabajadores y la juventud hartos de un longevo gobernante, se escudaban células de criminales quienes además de amplificar los estragos, asesinaron a varios policías. Recién con el pedido de asistencia a Rusia, los desmanes fueron controlados y varios de los agitadores de origen extranjero fueron capturados. En Washington el silencio fue total y allí quedo todo.

Las protestas que se han estado dando en las calles de Tiblisi, presentan en los movilizados, señas particulares que indican una velada inspiración occidental. Para los georgianos más memoriosos esta situación les remonta al año 2003 cuando Eduard Shevardnadze (un viejo lobo soviético) tras la llamada “Revolución de las rosas” (ingenierizada por Washington) fue apartado del poder para que lo ocupara un gran colaborador de la CIA como era Mijeil Saakashvili. Es el mismo que confiándose en las promesas de Washington y alentado por el supuesto apoyo de Angela Merkel para una postulación de Georgia para ingresar a la OTAN, en 2008 lanzó un ataque sorpresa tratando de aplastar a Osetia del Sur ¿No se acuerdan de esto en Washington y Bruselas? Así banderías con los colores de Ucrania y la misma bandera de la UE enarbolada por algunos de los manifestantes con la mitad de sus caras cubiertas lo dejan en evidencia.

Pero a nivel gubernamental y diplomático, el involucramiento de elementos angloestadounidenses quedó más que comprobado con la intervención de embajadora estadounidense en Tiblisi Kelly Degnan opinando que la legislación que impulsa el gobierno georgiano esta influenciada por Moscú ¿Desde cuándo Washington se volvió una parte del poder legislativo de Georgia o de cualquier otro estado soberano? Como acostumbran, los principales argumentos para esto es que dicha legislación tiene tintes no democráticos, contrarios a la libertad o que es “inconsistente con los valores europeos”.

Como lo han hecho contra Iraq, contra Afganistán, Siria, Libia, Venezuela, Serbia (para que Kosovo entre en la OTAN) y por estas horas en Pakistán, la maquinaria de propaganda y desinformación trabaja sin descanso y a todo vapor para que las cosas se vean como al Departamento de Estado le convenga que se vean.

El desencadenamiento de cada uno de esos episodios, claramente invasivos y violatorios de la seguridad y soberanía de una nación tienen curiosamente la finalidad de oponerse a medidas gubernamentales que impedirán la funesta y desestabilizadora injerencia de Washington y sus aliados europeos quienes habitualmente y mediante ONG´s que tienen un financiamiento enmascarado como privado, penetran en los estados de la región con finalidades claramente subversivas disfrazadas de fines humanitarios y democráticos.   

La sanción de una “ley de agencia extranjera” por parte del gobierno georgiano pone un límite legal a estas injerencias y de ponerse en vigencia entorpecería las operaciones “especiales” de Washington y con ello, el impulso de sus “revoluciones de color”.  

 

domingo, 12 de marzo de 2023

ACUERDOS SIONISTAS

¿PARTE II?

¿Por qué Arabia Saudita tiene muchos reparos en adherirse a los acuerdos con Israel?

 

Por Ali Al Najafi

Mientras EEUU vuelca sus principales esfuerzos por sostener la guerra en Ucrania y reforzar sus alianzas regionales en el sudeste asiático (reforzando los componentes de AUKUS) contra China, su aliado en Oriente Medio, Israel, presiona a Riad para que su reino se una al llamado “Acuerdo Abrahámico” que tiene en vigencia con los emiratíes. Como ya lo habremos comentado anteriormente este acuerdo no es otra cosa que una aberración política, es meterse con una serpiente cascabel en tu cama, un error que los emiratíes terminaran pagando.

Los monarcas árabes y en especial los de Emiratos Árabes Unidos no parecen darse cuenta que Israel no busca socios y mucho menos, trabajar de igual a igual con ellos. Aquí priman los negocios financieros entre los jeques y personeros de un régimen islamófobo que vende espejos de colores. Afortunadamente los árabes de a pie (sunitas, chiitas y cristianos) y algunos gobiernos laicos desde el atlántico hasta Bahrein lo saben y desconfían de las intenciones sionistas no solo por la situación de los palestinos sino también por su extendido prontuario de traiciones y jugarretas sucias con las cuales sacan ventajas.

El príncipe heredero MBS parece estar al tanto de ese sentir colectivo y aunque muchas veces se mueve a gusto de los caprichos de Washington, también hay que señalar que (mediante sus propios caprichos) ha estado llevando adelante una política de diversificación en cuanto a sus relaciones comerciales en lo referente a rearmar sus FFAA realizando tratativas y promesas de compra de equipamiento ruso para reemplazar las existencias estadounidenses y mejorar las capacidades antiaéreas del reino. Salman no se olvida que los Drones yemeníes que exactamente un año atrás destruyeron una terminal petrolera en Jeddah y golpearon una semana antes al mismo aeropuerto de Riad, pasaron sospechosamente sin problemas por el espacio aéreo de la península arábiga sin que los aviones de vigilancia electrónica AWACS del USCENTCOM y los sistemas anti misiles PATRIOT advirtieran que estaban en camino.

Sumado a eso el príncipe heredero también fue informado de una posible intervención israelí (complotados con EEUU) en estos ataques simulando el accionar de la resistencia “Houtie”, lanzando estos UAV pintados con la escarapela roja y negra con leyendas en árabe desde puntos remotos de Yemen ¿Cuál fue la motivación? La discrecionalidad con la que MBS se estaba conduciendo con Irán y también con su vuelco hacia Moscú. Tanto los estadounidenses como los israelíes han estado cooperando activamente con la invasión saudita a Yemen, pero eso no es prueba de una alianza confiable y mucho menos durable. Solo prueba que ambos han estado alimentando el conflicto para que los árabes se maten entre ellos.

El reciente acercamiento que se ha oficializado entre Riad y Teherán, posibilitado por la intervención de Rabat, sella a fuego cuales son las prioridades de la monarquía saudita y resta posibilidades de que Tel Aviv pueda influenciar a un impredecible príncipe heredero.

Salman es un pragmático y ha dado prueba de ello. Es consciente que su reino tiene un papel muy importante para los planes de EEUU en la región, pero también sabe que lo es para todos los musulmanes del mundo ya que tiene a cargo la custodia de los santuarios de Medina y La Meca sin que ello lo desligue de su parquedad ante las profanaciones que el régimen sionista ha llevado y sigue llevando a cabo con total impunidad contra la Mezquita Al Aqsa y la Explanada de las Mezquitas en Jerusalem. Aunque sus fuerzas sean inferiores para rivalizar con las FDI o incluso débil para protegerse de las acciones encubiertas del Mossad, Bin Salman conoce los límites de la tolerancia ante un mundo árabe-islámico que mira con atención como un régimen etnocrático de Apartheid oprime a los palestinos.

A pesar de que Washington ha considerado a Riad como un aliado árabe estratégico en la región, Salman ha roto con los tabúes que esa relación imponía y ha llegado celebrar encuentros con sectores del chiismo que EEUU e Israel demonizan de forma continua por relacionarlo con Irán y el Hesbolá libanes. Un ejemplo de esto se vio cuando Bin Salman recibió en julio del 2017 a nada menos que al clérigo chiita Moqtadar Al Sadr, líder de la organización iraquí “Al Mahdi” que junto a la resistencia combatió a la ocupación angloestadounidense y que muchas de sus formaciones hoy pertenecen al movimiento popular iraquí “Hash Al Shaabi”, blanco de ataques terroristas israelíes y estadounidenses.

Los ejemplos históricos y las consecuencias que Israel causa en Medio Oriente le han convencido de obtener una potencialidad tal que proteja al reino de una traición israelí y su propuesta es que, continuando con las tratativas que se habían iniciado con Obama, Washington apoye el desarrollo de un programa nuclear saudita, algo de lo cual no le hace gracia a los israelíes y mucho menos a los sionistas estadounidenses que hacen Lobbie desde varios Think Tanks como el “Federalist Society” y sectores dentro del Congreso en Washington.

Pero los reparos de Riad a esto se potencian aún más si consideramos la actual evolución política interna del estado hebreo, hoy regido por una coalición de extremistas judíos y supremacistas que además de alentar la persecución, el asesinato y las usurpaciones contra los palestinos confiesan sin tapujos y a gritos su odio contra los musulmanes. En este actual marco y si consideramos como el estado sionista se ha conducido en el pasado y como continua haciéndolo con la población palestina, un estado de Israel bajo un régimen integrista y racista que profundice sus ambiciones expansionistas bajo el amparo (entre muchas otras) de reformas judiciales internas impulsadas por organizaciones con apoyo estadounidense como “Federalist Society” y “Law and Liberty Forum israelí” (artífices el “excepcionalismo estadounidense) que buscan normalizar una limpieza étnica -y sin consecuencias jurídicas internacionales- como lo revelan sus ataques y asesinatos contra las aldeas y ciudades (“Huwara”) en Cizjordania, haría inviable para Riad establecer cualquier tipo de relaciones.

Así, un estado disfrazado de democrático y laico como Israel, atrincherado desde 1948 ha causado mucho daño al mundo árabe-islámico ¿Imaginen una teocracia judía abierta en mano de estos locos y fanáticos que tienen un arsenal nuclear?

Los sauditas y en especial Salman no se van a abrir a los israelíes sin garantías. El problema es que no hay garantía que valga ya que ni siquiera Washington puede ofrecer garantías de que la serpiente sionista no les muerda en el momento menos esperado. A tal punto es la desconfianza entre estos íntimos aliados que algunos se preguntan si EEUU tiene realmente la influencia sobre Israel que cree. Los mismos estadounidenses han sido traicionados en varias oportunidades desde adentro por elementos judíos-sionistas que han puesto a Israel por encima del gobierno federal estadounidense.

Con esto a la vista ¿Por qué los monarcas saudíes y en particular MBS van a confiar en semejante tunante?

  

sábado, 11 de marzo de 2023

 

OBSERVING

THE EPILOGUE

The situation on the Artemivsk front is really critical for Kiev but the Western media are lying through their teeth. Are they watching another film?

By Sidney Hey

What used to be a country road leading out of Artemivsk is now a field ploughed by Russian artillery shelling, with the half-buried remains of trucks, shattered armoured vehicles and many bodies of foreign mercenaries and Ukrainian soldiers trying to leave the last remaining squares of the city. It is a crucial moment in this war and the pro-NATO regime in Kiev knows it. But President Vladimir Putin himself knows it too, and although he does not show off in the media like the Ukrainian comedian, he is very much aware of what is going on.

According to unauthorised sources, Vladimir Putin is said to have made a secret trip to Donetsk where he learned first-hand about the course of military action around Artemivsk, leaving a strong impression of confidence among military commanders, PMC Wagner and Chechens. Moreover, he has taken further measures for Russia's internal security by issuing directives to the FSB and the SVR to redouble efforts against incursions by Western-backed attack cells.

There was no need for some media to disseminate an Israeli Mossad report showing the military catastrophe of the fundamentalist regime in Kiev. Other sources agree with these figures. The material magnitude of this situation represents the loss of two armies today. Just to say that a report of the Ukrainian Ministry of Defence itself as of March 2023 states that almost 3500 combat tanks and more than 6700 armoured vehicles have been lost is evidence of a disaster that is impossible to conceal.

But these numbers are also revealing a gigantic arms deal, for both sides but particularly for the West. The entire plutocratic emporium of bankers, politicians and arms corporations that interlock at NATO level is lobbying the Biden administration to keep the war going. The flow of money not only finances arms, equipment and hires mercenaries, it also pays for the great machine of lies and propaganda represented by the corporate media that in the last few hours has been trying to cover Washington's tracks in the sabotage of the Nord Stream pipelines by telling a hilarious hypothesis that obviously tries to take the responsibility for this attack away from it.

But there is bad news for them as even their allies are not swallowing the pill. The need to invent a supposed group of pro-Ukrainian activists as the ones responsible for the pipeline attack reveals the desperate attempt to get rid of the responsibility that is causing the energy shortages across Europe and the economic advantage that it very conveniently brings to US LNG companies to supply their liquefied gas at seven times the price.

That is why the battles taking place in Artemivsk are of crucial importance to the outcome of this war. Against the advice of his military commanders, Zelensky insists on continuing to send troops into the city even though this represents senseless carnage. For it is not the Ukrainian generals, let alone the Hollywood clown, who control field decisions and policy.

It has become clear that Zelensky is just Washington's sounding board and has no scruples about sacrificing a whole generation of Ukrainians to enshrine the plans of the Americans, but in particular NATO. It is not the Russians who are fleeing in masse from the levy as the Western media have been screaming from the rooftops of their repeaters. Ukrainian men who cannot flee because of the regime's tight police control of the streets of Kiev and the main cities to the west are in hiding.

Another point that is being devastated by Russia is the supply centres and weapons depots they receive from abroad. In addition to the loss of imported war materiel, there is the destruction of facilities, vehicles and, of course, the shock to the population. Added to this, the captures on the battlefield of intact stockpiles of NATO anti-tank and anti-aircraft missiles, plus the collections of portable weapons (AK-47; AK-74; AK-103; SA80; FAMAS and the list goes on) that Russian infantry and special groups find daily and in bulk in captured trenches reveal a multi-million dollar investment that would be very difficult to calculate accurately. This makes you wonder who is fuelling the war?

Zelensky has repeatedly rejected talks with Moscow in the belief that he could turn the situation around. But let us not forget that this is not of his own making. Those pushing him are sitting in the State Department and the Pentagon demonstrating that they don't give a damn about the lives of Ukrainians and also, why not, about CIA reports on the real situation. Far from the Western media farce about Putin's failure, the evidence is quite the reverse, to the extent that Zelensky's hysteria and desperation was so evident when (emulating the Israeli Zionists) he declared that it will be the sons and daughters of the USA who will have to die for Ukraine.

There is no better way to describe what is now happening on the front line than the title of this article and it is Vladimir Putin who, with his field binoculars and wearing a uniform that really suits him for his extended experience, watches as the intricate lines of Ukrainian trenches, awash with melting snow and sticky mud, crumble and crumble, as demoralising as the Russian enemy.

 

 

viernes, 10 de marzo de 2023

 

“AFICIÓN POLÍTICA O ¿POLITICA DE AFICIONADOS?

Hacer política en Argentina es más un pasaje al enriquecimiento personal que una vocación para resolver asuntos críticos del país. Las consecuencias vistas en la última semana por la violencia narco en Rosario recién vienen a conmover a un gobierno federal apático y sin autoridad política ¿Quién está a la altura de las circunstancias?

 

Por Pepe Beru

Tras el anuncio del gobierno federal de involucrar al Ejército Argentino y a la Gendarmería en el combate al narcotráfico en la ciudad de Rosario una conclusión me vino inmediatamente a la mente: El desastre está a la vuelta de la esquina.

Esta forma de ver esta decisión no se dirige a las fuerzas intervinientes sino a los responsables políticos que la han ordenado ¿Por qué creen que el ministro de seguridad Aníbal Fernández está tan incomodo con esto?  Claramente es el producto de la improvisación, en función de dar un golpe de efecto ante una opinión pública absorta e indignada por la violencia narco y lo más importante para los políticos del gobierno, impostar algo de preocupación ante un año de elecciones presidenciales. Como siempre sucede por aquí, hizo falta un levantamiento de los vecinos que cubierto por los medios y ante sus repercusiones internacionales, obligo al gobierno a hacer algo, aunque ello sea una verdadera idiotez. 

¿Qué seriedad puede tener este despliegue? Los medios capitalinos, grandes culpables en la degradación de la imagen de las instituciones de seguridad hoy dan su aval a estas medidas meramente efectistas y contingentes que solo buscan tapar una terrible realidad mediante grandes divagaciones semánticas que no hacen más que demostrar su propia incoherencia. Apenas unos días antes de la boca de muchos de estos mismos periodistas, las fuerzas de seguridad no servían para nada y la corrupción las han vuelto inservibles.

Tema aparte es el extendido vilipendio político y mediático contra el ejército argentino, que comenzó allá por 1983 con el regreso de los gobiernos civiles y que no se detuvo hasta hundirlo por falta de equipamiento y recursos -o más bien, no darles- en la más absoluta inoperancia.

Siguiendo con ello, al presente el ejército argentino es una fuerza esquilmada y sin recursos materiales para defender con eficacia los intereses de un país tan grande. Apenas pudo durante la pandemia cubrir con su ayuda a la jurisdicción del AMBA ¿Qué sucedería ante una contingencia que afectara su soberanía territorial? Y en lo que hace a su verdadero objetivo ¿Cuál es su real y actual capacidad de combate? Durante décadas se la ha degradado, desarmado y desfinanciado a niveles peligrosos y sin dudas hay grupos armados de criminales comunes (y ni digamos de guerrillas) que están mucho mejor armados que el ejército argentino ¿Quiénes estuvieron en esta tarea de destrucción institucional? Los mismos y actuales funcionarios gubernamentales (muchos de ellos, rezagos de las guerrillas setentistas) quienes con la connivencia de gran parte de la fuerza política opositora, demonizaron a las FFAA y todas las fuerzas policiales bajo un claro sesgo ideológico de la mano de funcionarios y organizaciones que hicieron mucho para poner al país donde hoy está.

Pero el combate al negocio del narcotráfico no se resolverá solo con balas. Incluso podríamos decir que faltan actores y estratos que no están siendo contemplados en este tema. Los grandes capitales financieros con nombres y apellidos involucrados en los beneficios que da este negocio nunca son rozados por alguna investigación. Tal vez ¿Complicidades políticas, intereses económicos y políticos que salen de un negocio que genera tan solo en un mes millones de pesos?, ¿Dónde están las investigaciones a los políticos, intendentes, gobernadores, empresas e incluso los negocios más pequeños por los cuales se lava dinero? El narcomenudeo de pistoleros y ajustes de cuentas que vemos en Rosario y también en el Gran Buenos Aires, también esta enquistado en la vida cotidiana de la sociedad bajo la inocente cubierta de kioscos, inmobiliarias y empleados con doble vida.

Pero en el caso de Rosario el poder político durante décadas ha hecho la vista gorda a las puertas de entrada y salida de la droga, en especial en las aduanas portuarias no solo de Rosario sino de todo el país. Sin dudas que la destrucción de los organismos de inteligencia y seguridad no fue casual, mucho menos cuando hay funcionarios sospechados de participar en este negocio.

Durante décadas se advirtió del problema del narcotráfico y su complejidad pero como sucede aquí, no hay planificaciones, mucho menos previsiones estratégicas ni se toman enserio las evaluaciones de temas tan sensibles como este. Para la clase política y los medios establecidos, “eso no podía pasar en la Argentina” y los dineros públicos que podrían haberse invertido en inteligencia y una reforma seria de los organismos tendientes a producirla terminaron financiando a los partidos políticos que han pasado por el poder, a organizaciones sociales, a ministerios inútiles y para pagar los sueldos de los tan inútiles burócratas que los ocupan.

Esto responde a una mera dinámica de corrupción estructural, que se fue desparramando como una metástasis y hoy forma parte de la degradación no solo del estado como ente político en todos los niveles (nación, provincia y municipio) sino también de toda su base ciudadana. Y sino pregúntense ¿Quiénes forman parte de la sociedad argentina que elige a los políticos que les gobiernan y luego se enriquecen con los impuestos que les graban?

Cuando gobernó el Frente para la Victoria (FPV) bajo la presidencia de CFK, las fórmulas para combatir la inseguridad y el narcotráfico fueron tan pueriles como inservibles. La creación de las policías municipales en la provincia de Buenos Aires (bajo la gobernación de Daniel Scioli) represento un dispendio de recursos mediante el reclutamiento de efectivos mal entrenados, sin doctrina y sin vocación que solo buscaban un sueldo fijo y una obra social. Hoy ese mismo funcionario reciclado seguramente buscara la presidencia.

Tampoco la estrategia de involucrar a agencias y tácticas extranjeras como las implementada por la “piba” Bullrich (una montonera reciclada) con los israelíes y los estadounidenses fueron atinadas a solucionar este tema dado que a ellos poco les importa eso.

Lo que se está viendo en la provincia de Santa Fe es solo un síntoma de un sistema político institucional corrupto que baja desde los más altos estratos de la nación y que (como no podía ser de otra manera) se replica en todas las provincias y municipios del país. Los charlatanes de los partidos políticos establecidos (de izquierda a derecha) no son quienes resolverán este problema y aún cuando exista algún sector político con verdadero sentido de servicio, la solución no estará exenta de momentos duros y medidas que ninguno de los burócratas que hoy ocupan puestos políticos se atreverían a tomar.

miércoles, 8 de marzo de 2023

 

“EL LADO EQUIVOCADO”

Pelear una guerra ajena es parte de la vida de los mercenarios. En el bando ucraniano hay mercenarios argentinos que sin saberlo están sirviendo a la OTAN ¿Cuánto sale vender tu alma al diablo?


Por Javier B. Dal

No hay peor cosa en la vida que aquellos que desprecian sus orígenes y olvidan a sus enemigos. Este breve introito que no pretende ser un principio filosófico está dedicado a esa parte de los argentinos que hablan ligeramente de lo que ocurren en Ucrania como una verdad consagrada.

Sabemos bien quienes son los medios que dan una versión pro-Zelensky y que lo único que están haciendo es refrendar el lineamiento político de Washington y la OTAN. Ello no representa una sorpresa dado que son sectores de la intelectualidad, la política partidaria y los medios históricamente cercanos y simpatizantes del universo angloestadounidense. Son los mismos patéticos aduladores y justificadores de la idea de ingreso a ese “primer mundo” de la era menemista que bajo la cándida creencia de que (por apoyar bélicamente) participarían en el fabuloso negocio de la “reconstrucción” de Kuwait, metieron al país en la Coalición Aliada de 34 países contra Iraq.

Son los más fervorosos seguidores de esa maniquea y artificiosa antinomia “civilización y barbarie” que no es otra cosa que un canto al occidentalismo anglosajón que levanto su progreso y prosperidad económica a punta de cañón contra aquellos pueblos de tez morena y costumbres ajenas a la cultura europea. Son los europeos berretas, que viven preconizando las (para ellos) grandezas del mundo europeo occidental metiendo a cada instante su ascendencia y raíces de ese mundo “perfecto” que les considera de segunda o “sudacas”.

Para estos estropajos Rusia, toda el Asia (con especial desprecio a China) y ni hablemos del mundo árabe-islámico, son lugares extraños, nebulosos y por ende, peligrosos para una cultura autoproclamada “judeo-cristiana”, faltando decir que son demasiado puros y blancos para tener relación con los seres humanos de aquellos remotos y extraños lugares. Los mismos que como los sionistas más revulsivos -que a veces ni siquiera son judíos- califican despectivamente a los árabes palestinos de “negros” y “ratas” que pueden matarse sin culpa alguna.

Con esto surge evidente, un prejuicio determinante de los puntos de vista de una situación y una ignorancia supina sobre lo que hoy sacude a Eurasia y en este sentido podemos preguntarles ¿Qué carajos saben de la historia y la etnografía del Donbass y la lucha de sus habitantes para sobrevivir a manos de un régimen integrista?

Vemos como desde los medios conservadores se habla religiosamente de la “invasión rusa” relegando del discurso todos los antecedentes y la evolución política de Ucrania bajo el influjo de Washington y Bruselas.

Para estos charlatanes autoproclamados como “liberales republicanos” y cruzados por la democracia, su fidelidad a este discurso va más allá del fetiche democrático con el que se reconocen con EEUU; su lealtad paga sus impuestos y sus estilos de vida. Son como los simples y utilizables mercenarios que sin cesar el Pentágono, la CIA y el Ministerio de Defensa británico reclutan (especialmente extremistas de ultraderecha y neonazis europeos) y envían a la picadora de carne en el este de Ucrania ¿Van por la democracia, la libertad o la patria?

Cuando un equipo de la empresa de noticias TN viajo a Ucrania a finales del mes de diciembre pasado llegando al frente en una parte de la localidad de Zaporiye, pudieron descubrir que entre la tropa de soldados de las FAU había mercenarios extranjeros y entre ellos tres argentinos quienes manteniendo el anonimato mandaron saludos a sus familias en Argentina. Como era de esperar, estos tres retirados del ejército argentino compartían el bando con otros mercenarios extranjeros, muchos de ellos estadounidenses y británicos con lo cual muchos se preguntan ¿Qué haces peleando codo a codo con nuestros enemigos?

Para los desmemoriados es importante hacerles una breve pero puntual revisión histórica de dónde estuvimos en cierto momento de nuestra historia y a donde pretendemos ir. El 1982 Argentina lucho una guerra desigual contra Gran Bretaña y la OTAN y los efectos jurídicos de negociaciones humillantes pactadas a la sombra de la clandestinidad y muy lejos de que la población argentina supiera de que se trataba, el gobierno de Carlos S. Menem cedió su soberanía nacional en los Tratados de Madrid de 1989 y 1990 los cuales deben saber, aún siguen vigentes y marcando a fuego la situación del país.

Tal vez la decisión de cada uno de estos hombres no tercie en estos escrupulosos antecedentes históricos y mucho menos les importe que esos “casacas rojas” de alma (como John Harding y otros que ya no la pueden contar) con los cuales comparten armas muchos de ellos fueron parte de las fuerzas armadas de “Su majestad” imperial que mato a sus camaradas, dignos ciudadanos argentinos que derramaron su sangre para que la causa por la que pelearon no quede en el olvido.

La inconsecuencia es comparable como la de los mercenarios israelíes que cooperan en las sombras con estadounidenses, británicos y canadienses proveyéndoles equipo y entrenamiento a las milicias ultranacionalistas y nazi ucranianas como “Azov” y “Aidar” ¿Eso es una casualidad? Para nada, solo es un episodio más en las turbias relaciones de estos actores y de toda la catarata de basura que se cierne en lo que sucede en Ucrania y tal vez la más destacada en este escenario sea un judío askenazi como Zelensky que entronado como presidente, es protegido por bandas nazi ¿Alguna explicación para esto?

Solo se trata de relaciones que siempre estuvieron allí y que hoy salen a la luz por la velocidad, multiplicidad y masividad de los medios que una persona dispone para ventilarlos.

El gobierno estadounidense mediante la USAID y la Subsecretaría de Estado para Asuntos Europeos y Eurasiáticos presta públicamente su apoyo político a estos grupos integristas tal como se vio en el evento convocado el 25 de febrero por Samantha Power y Karen Donfried en el Monumento a Lincoln ¿Qué tienen en común Abraham Lincoln con el neonazi Stepan Bandera? Por qué deberíamos asombrarnos de estas cuestiones cuando Hillary Clinton en 2012 se reunía con los jefes yihadistas entre los cuales estaban los de “Al Qaeda” en Libia o contemporáneamente en 2013, el senador John Mc Cain se reunía con los cabecillas que asolaban Siria entre ellos quien sería conocido como el jefe del ISIS, “Abu Bakr Al Bagdadi”.  Aunque en occidente y en particular en Argentina escondan bajo la alfombra estas graves inconsecuencias, ya es un asunto conocido vergonzoso y molesto que muchos cuestionan a Tel Aviv por estas complicidades.

Como hemos estado viendo, el régimen de Zelensky se sustenta por el dinero que el occidente colectivo envía. Lo mismo sus mercenarios tanto los armados como los mediáticos, todos ellos prestan sus servicios por dinero no por la libertad ni la democracia y son pagados en efectivo con ese mismo dinero que sacan de los impuestos de sus ciudadanos a quienes les hacen pagar con la inflación y una crisis energética por este jueguito geopolítico ¿Qué tienen para decir los filósofos del artificio pro-angloestadounindese?

Para los mercenarios argentinos, una paga de 900 hasta 3000 dólares mensuales es un botín jugoso claro, si logran sobrevivir, pero igualmente no alcanza ni en lo más mínimo para justificar pelear del lado de quienes mantienen ocupadas las islas del atlántico sur. Pero considerando todas las opacidades del bando al que le prestan sus brazos y su aparente simpatía ideológica por aquellos, no hay duda de que ellos están bien donde están.