EN LA MIRA
“EL FRACASO EN
SIRIA, ES INEVITABLE”
Cómo el acuerdo entre Moscú y Washington ha llevado a que los neocolonistas europeos e Israel vean frustrados definitivamente sus planes en Siria
Por Javier B.
Dall y Danny Smith
Como hemos venido viendo desde hace cuatro años y en
especial a lo largo del año que se está yendo, los planes por destruir a Siria
y al eje de la resistencia árabe-islámica han caído en el fracaso más absoluto.
A pesar de que los combates continúan y el “Daesh” realiza asombrosas
operaciones de contraofensiva contra las fuerzas patrióticas árabes sirias y
sigue aplastando al de por sí desarticulado ejército iraquí, la suerte parece estar echada y pronto no
habrá lugar para que los grupos mercenarios que operan en Siria puedan hallar
refugio.
Los esfuerzos por sostener la infraestructura de los
mercenarios que los medios occidentales venden como “rebeldes” y con categorías
arbitrarias como “moderados” o “no moderados”, han perdido la poca credibilidad
que pudieron haber tenido en algún breve momento del 2015. Con las pruebas a la
vista sobre su artificial origen y que
han venido siendo puestas sobre la mesa no solo por la intervención rusa sino también por la infatigable voluntad de lucha de los
sirios, el proyecto de un rediseño del
Medio Oriente a molde de los intereses geoestratégicos de Washington y su
aliado Israel, ha sido herido de muerte.
Las esperanzas de que Rusia se apartaría del medio
mediante la aplicación de una batería de sanciones económicas, también se han
esfumado, causando por el contrario una reacción adversa.
Más allá de las superficiales y maquilladas noticias de
los grandes medios conservadores anglosajones, que son levantadas y mucho mas
retocadas por los medios conservadores argentinos, la mirada en torno a la situación política que hay de trasfondo en las cruentas luchas entre
las fuerzas sirias y los mercenarios, los dos grandes actores en éste tablero,
han llegado a un acuerdo en cual, ninguno de los asociados –incluyendo a
Israel- tienen peso para torcerlo.
Tal como lo han señalado varios investigadores, en
especial del periodista francés Therry Meyssan (1) en uno de sus últimos
artículos, el mundo ha cambiado mucho en los últimos años y lo que gobiernos imperialistas como Francia, Gran
Bretaña y del golfo creían lograr en unos meses, se ha convertido en una
empresa imposible. Precisamente en este análisis, se hace una reseña clara de cómo
fue la evolución de las tratativas entre Washington y Moscú desde el 2012 en
momentos que mediante el acuerdo celebrado en Ginebra, fue saboteado por los Halcones
del Pentágono y el sector de los neoconservadores, actores
que su vez estaban sintonizados con la entonces
secretaria Hillary Clinton quien
a su vez y junto a la Francia de Sarcozy impulsaban el llamado grupo Amigos
de Siria, nada más ni nada menos que un rejunte de arribistas políticos sirios
que buscaban acceder al poder con el apoyo de Washington.
Hillary Clinton en una de las reuniones de los Amigos de Siria |
Tampoco había que olvidar el papel de Tel Aviv, que fue
pillada en determinados momentos de esta tragedia, operando para darle una
ventaja táctica a los grupos mercenarios. Desde la infiltración de comandos en
las costas portuarias, la proporción de armas, hasta ataques aéreos nocturnos
sobre Damasco, son un resumen de las implicancias que había venido teniendo Israel en su participación en todo este dantesco
complot, sin dejar de mencionar, su “humanitaria” cooperación sanitaria con los
mercenarios de “Al Nusra”.
Pero y pese a todos estos engranajes orientados a
desarmar a la república árabe Siria como entidad nacional, el gobierno de
Bashar Al Assad con un muy importante apoyo de la población y por la resistencia de unas fuerzas armadas
compuestas por un 70% de efectivos sunitas –algo que había venido siendo
ocultado por occidente- que recibieron el apoyo incondicional de la resistencia chiita de Hesbolla y por
supuesto de combatientes iraníes, lograron frenar a los mercenarios que hoy se
baten en retirada a zonas desérticas. A la par de ello, la potencial
intervención política y militar de Rusia que logró establecer parámetros de
negociación con EEUU quien a su vez, con el apoyo de otras potencias de la OTAN
e Israel busco intensamente sabotear cada intento de establecer la paz; tal vez
uno de los más siniestros fue la masacre de “Al Gouta” en donde se determinó
que “había una tercera fuerza” interviniendo en la contienda.
Tras estos sabotajes, los acuerdos habían quedado casi
congelados y los desencuentros entre Moscú y Washington parecían interminables.
Al ir complicándose la situación de los grupos mercenarios en Siria tras la
intervención rusa y el derribo del avión SU-25 por aviones turcos, las
conversaciones entre estadounidenses y rusos se han intensificado. Y los motivos de ello son claros, ya que ha
quedado expuesto a la vista del público que “la Coalición internacional” no había estado haciendo nada por erradicar
al “Daesh”. Es por esta inconveniencia, que La Casa Blanca ha optado por buscar
el camino de un dialogo bilateral sin que los terceros involucrados en la
contienda, influyan tanto en lo político como mediante la perpetración de actos
o hechos –sabotajes, asesinatos, atentados- que traten de romper éste
estado de dialogo entre Washington y Moscú.
Tras la reunión del 15 de diciembre 2015 entre el
secretario de estado John Kerry y el canciller ruso Sergüei Lavrov la Alta
Comisión de la oposición siria expidió las resoluciones 2253 y 2254, por las
que sintéticamente se prohíbe el financiamiento a los grupos como “Al Qaeda” y
el “Daesh” propendiendo a resolver
definitivamente la cuestión siria. En este sentido, Rusia ha adoptado medidas
para coordinar esfuerzos con grupos opositores sirios, que están dispuestos a
expulsar a las bandas mercenarias que responden a otros intereses y que tienen
sustento en el exterior. Esto ha representado una muestra de buena voluntad
tanto de Damasco como de Moscú dejando lugar a grupos que respeten la
integridad nacional y la sobrevivencia de Siria como un estado soberano, para
que participen en la lucha contra franquicias foráneas y falsas.
Esto viene a demostrar que este conflicto, ha sido
generado con propósitos claramente políticos y usando la monumental maquinaria
propagandística occidental, financiada por los petrodólares de los reinos del Golfo y de un
circuito financiero internacional sionista, que dejó libre circulación a las
operaciones bancarias de estas transacciones negras, se uso la máscara del
“extremismo islámico” encarnado en el “ISIS” o llamado por los iraquíes “Daesh”
para justificar todo este sangriento festival de muerte, a costa de los
ciudadanos de la región. De esta manera, el denominado “Daesh” no es más que, el resultado del programa de
contrainsurgencia alternativo al “Al Qaeda-Iraq”(2), compuesto por asesinos de
varios lugares de la región, creado por
los funcionarios estadounidenses como el
general David Petraeus, Coronel James Coffman y el embajador en Bagdad John
Negroponte allá por el 2005, cuando a un año y medio de estar ocupando Iraq, la
situación para sus tropas se había vuelto insoportable.
Gral. David Petreaus |
Tanto “Al Qaeda-Iraq” como el “Daesh” fueron parte de un
programa de inteligencia estadounidense en el cual cooperaron muy gustosamente
agencias como el MI-6 y el Mossad israelí, que actuando por su lado con
especial intensión de provocar el choque entre las comunidades chiita y sunita,
sembraron el caos y la confusión.
Aquellos actores y sus artimañas habían tratado de cortar
todas las tratativas para un alto al fuego en Siria y lograr por todos los
medios, el derrocamiento del Bashar Al Assad y la implantación de un gobierno
absolutamente débil y lo más extremista posible. Con una situación semejante,
las justificaciones para que Washington arribara a toda marcha sobre el
territorio sirio bajo las excusas de que “Siria se había convertido en un
santuario terrorista” era una cantinela
previsible. Sobre esto mismo no hay que olvidar el desembarco de tropas y
vehículos blindados que realizó EEUU en
Jordania en el 2013 que Washington argumentó como forma de proteger la posible
infiltración de “yihadistas” al reino hachemita.
Ni que hablar de la congratulación de Tel Aviv y del
sionismo mesiánico militante que sin,
dudarlo avanzarían mucho más allá de los Altos del Golán, apropiándose de los
ricos recursos energéticos y de las valiosas reservas de agua potable con la cual, Tel Aviv alimentaría
a los afamados “Kibbutz”.
Más allá de la presencia de la aviación rusa y de la
instalación de varios sistemas de defensa antiaérea SS-400, los israelíes y sus
socios franceses –especialmente- ven frenadas sus incursiones aéreas por
las estrictas medidas que La Casa Blanca ha tomado para detener cualquier acción que complique las
conversaciones con el Kremlin que en apariencias y según algunas fuentes, han fructificado
para que en resumidas cuentas y para pesar de
Tel Aviv, la República árabe de Siria sobreviva.
1-
RED VOLTAIRE.org. “Del comunicado de Ginebra a
la resolución 2254”. Por Therry Meyssan. http://www.voltairenet.org/article189698.html
2-
PENSAMIENTO ESTRATÉGICO y POLÍTICO. “Criminal
se busca”. http://pensamientoestraegico.blogspot.com.ar/2015/10/internacional-criminal-sebusca-el.html