sábado, 13 de julio de 2024

POR EL RESBALADIZO CAMINO A LA OTAN

¿Cómo podría la Argentina aspirar a entrar a la organización atlántica, cuáles serían las condiciones y quiénes tienen la última palabra para permitirlo?

 

Por Javier B. Dal

La estridente personalidad y explosivo carácter del actual presidente argentino sin dudas son parte de su fórmula de gobierno y a diferencia de sus predecesores ha logrado embrujar a una buena parte de los argentinos haciendo lo que ningún político había hecho antes y eso es, hacer lo que dijo que iba a hacer. Si bien ello se puede interpretar como algo muy promisorio en realidad y por lo que se esta viviendo en la economía doméstica, las personas de la calle lo están resintiendo de manera muy severa.

Pero aunque ello (hacer lo que dijo) pareciera ser una cualidad sobresaliente en realidad, se oculta otra cosa. Estamos sin dudas frente a una estratagema que sirve para enmascarar otros planes mucho más peligrosos e inconfesables para el futuro del país.

A diferencia del senil Biden en EEUU, Milei no tiene red de contención. En EEUU se sabe que no son los presidentes quienes manejan el país, si así fuera Biden hace tiempo lo habría enviado al abismo. El estado profundo es una realidad nebulosa pero muy presente en la toma de decisiones de los gobiernos y en la Argentina también esta presente.

El estado profundo es una dimensionalidad paralela, un reflejo del tamaño del estado bajo el que se cobija. Si vemos al estado de la Unión deduciremos la complejidad y vasta extensión de su estado profundo.

Por supuesto que el estado profundo argentino tiene otras facetas y beneficiarios y ha ido modelándose con el paso de las décadas y hoy estaría reconfigurándose de acuerdo a las circunstancias.

Milei solo es un fusible, el muñeco de alta voz que el estado profundo ha puesto en ese lugar para beneficiar sus intereses. Tal vez y a diferencia de lo que pasa en los EEUU, el componente estrictamente nacional como es la industria armamentística y el lobby no existe en Argentina o tiene muy poca incidencia, o si la tiene, están siempre apoyados sobre los poderes externos.

En Argentina se habla más de “círculo rojo” que de estado profundo siendo por ello sinónimos.

Quienes están por encima de los gobiernos en Argentina se vinculan más bien al campo empresarial (incluidos los sindicatos)-político-financiero y de su lobby para captar inversiones extranjeras. Estos son los que conforman el “Deep State” aquí, pero ello se estaría ampliando con el actual gobierno dado que hay ciertas medidas que Milei estaría (en beneficio de intereses externos) implementando que se dirigen a crear nuevos beneficios y ampliar las incumbencias a la cloaca nacional.

Milei dice estar contra la casta política lo que pareciera significar, estar contra parte del componente del “círculo rojo”, pero lo que en realidad está haciendo es construir una nueva casta o mejor dicho, reemplazar a la casta vieja abriéndole la puerta a otra casta de componentes foráneos  y de su predilección ideológica para insertarla en el país que con el paso del tiempo lleguen a tener preponderancia en los asuntos de estado (como se trata de hacer con la instauración de juicios en ausencia) como vemos en EEUU, o lo vimos últimamente con las elecciones en Francia y Reino Unido.

Aquí es donde entran sus convicciones personales que calzan perfectamente con los intereses que están comenzando a operar dentro del país no para traer ventajas económicas en medio de una calamidad continua en la que los argentinos de a pie viven sometidos desde hace décadas sino, para desplegar sus estructuras tendientes a impulsar y proteger sus propios intereses que a su vez serán fomentados por estos sectores del “estado profundo” nacional.

Una de las tácticas para que esos intereses vayan colándose dentro del estado es el uso de fundaciones y ONG que bajo fines altruistas esconden una agenda geopolítica de los países de donde proceden. Y no hay dudas que las medidas de Milei están siendo muy funcionales para que estas tácticas funcionen en medio de una crisis que no termina y la creciente desesperación en la población. 

Su carácter es proporcionalmente similar a su fanatismo ideológico-religioso y ello quedo ejemplificado con su cercanía con el líder ucraniano Volodymyr Zelensky por el solo hecho de ser judío sin distinguir el trasfondo político y geopolítico al que representa. Lo mismo tras su visita a Israel donde expreso su incondicional apoyo a las acciones que el régimen de Netanyahu lleva a cabo contra la población palestina que se traduce en el apoyo del estado argentino.

Referente a esto último, la injerencia de Israel en el área de fabricaciones militares y de asuntos castrenses en Argentina ya han dejado de ser meras tratativas y posiblemente más pronto que tarde la industria nacional este fabricando municiones y ciertos componentes para surtir tanto a las FDI como a las agotadas existencias del ejército ucraniano. Esto representaría una peligrosa posición para la Argentina y al mismo tiempo una gran ventaja para los poderes hemisféricos, aliados de estos y muy avocados en seguir sosteniendo tanto al régimen supremacista liderado por Netanyahu como al régimen neonazi de Zelensky.

No hay dudas que uno de las intenciones de Milei y que su fashionista ministro de defensa comparte es ingresar a la OTAN. Habría que ver si esa posibilidad se ha discutido en la cumbre opaca que tuvo lugar en Washington.

Este pensamiento y forma de conducirse del presidente argentino agrada de sobremanera a los atlantistas aún si en el fondo, lo detestan por sus presumidas lecciones en economía de las que se jacta. Milei representa para Washington y la OTAN un importante activo político en la región ya que, necesitan contrapesar la penetración china y hacerse de un punto seguro de repliegue estratégico si las cosas pudieran salir mal con la Federación de Rusia.

Tal vez Milei y su hermana no lo sepan o quizá no lo crean así, pero para los poderes atlantistas son meros recursos desechables.  

  

jueves, 11 de julio de 2024

 

GUERRA PSICOLÓGICA Y MAL TRABAJO

¿Qué fue lo que realmente sucedió en el hospital pediátrico de Kiev?

 

Por Dany Smith

Aunque en Bruselas se resistan a la idea y en Washington los neoconservadores rechinen sus dientes, la guerra en Ucrania está en sus fases finales ¿Cómo puedo estar tan seguro de eso? Pues, tras las acusaciones sin pruebas sobre el supuesto deliberado bombardeo ruso del 8 de julio pasado con misiles hipersónicos a un hospital para niños en Kiev ya toma visos delirantes.

No es la primera vez que el régimen de Kiev acusa a las fuerzas rusas de supuestos ataques contra instalaciones civiles sensibles como escuelas, hospitales y mercados quedando al poco tiempo desmentidos tras corroborarse que habían sido ellos mismos quienes, por torpeza en su trabajo o de forma deliberada (una bandera falsa) mataban a sus propios ciudadanos.

Esta clase de armados siempre van seguidos de una ampulosa proclama anti rusa y en especial dirigida contra Vladimir Putin difundida por los medios en los cuales muchas veces aprovechan a insultarlo por farsantes-periodistas que impostando conmoverse por estos hechos, cierran la boca por masacres indescriptibles y deleznables como las que comete a diario Israel bajo las ordenes de Benjamín Netanyahu.

Dice el dicho “no acorrales a una rata porque hará cualquier cosa para defenderse”. Eso es lo que está haciendo la junta de Volodymyr Zelensky que con el asesoramiento de expertos occidentales, hará cualquier cosa para tratar de dar vuelta una inminente Untergang des Dritten Reiches. 

A las acusaciones directas canalizadas por las Corporaciones de medios en occidente, parte de las unidades rusofobas de combate psicológico le han sumado a sus acostumbrados libretos hollywoodenses componentes documentales en apariencias muy convincentes. Uno de ellos, es un video captado por un supuesto observador causal en un edificio de Kiev quien con su celular capta el momento exacto y en un perfecto encuadramiento, como un supuesto misil hipersónico ruso pasa por delante y golpea un edificio del frente. Si no fuese por el notable montaje que supone esa filmación y la desinformación que lo acompaña en la descripción, cualquier director en Hollywood ya estaría contratando a ese magnifico camarógrafo supuestamente ucraniano.

A pesar del embuste que supone la maniobra, los medios del hemisferio y obviamente los argentinos de la capital[1] no tardaron en reproducir el video y sus comentarios para avalar las acusaciones respaldadas desde Washington y la UE. Pero ¿En realidad eso que se ve en el video es un misil hipersónico ruso?

Como me comento alguien con mucho sentido de la ironía, “ahora la OTAN tiene una varita mágica para convertir un misil estadounidense en un misil hipersónico Kinzhal ruso”. Al parecer y como lo han constatado fuentes independientes en el lugar, lo que cayó sobre el hospital pediátrico en Kiev no fue un Kinzhal sino un misil antiaéreo SLAMRAAM de fabricación…estadounidense.

Vaya vaya!, al parecer y no es nuevo que los medios occidentales traten de engañar a la opinión pública con gazapos similares. No es la primera vez que la Corporación de los Mass Media y sus repetidores en el hemisferio tratan de endilgarle a Rusia masacres que en realidad han sido obra del mal trabajo de las fuerzas neonazis de Zelensky o en casos más oscuros, lo han cometido a propósito bajo la modalidad de operación de Falsa Bandera.

Hay una gran diferencia entre un misil hipersónico ruso y un misil antiaéreo occidental ¿Una diferencia tan solo? Su peso, velocidad y cabeza explosiva son imposibles de equiparar. Si es así ¿Qué es lo que en realidad sucedió?

El mal trabajo de los operadores de la defensa antiaérea ucraniana ha quedado repetidamente registrado y los casos en los que misiles de los sistemas BUK 9K37 y SAM 5V55K de la era soviética han golpeado edificios en Kiev o caídos en países vecinos (caso de Przewodow, Polonia) son bien conocidos. A estas fallas humanas se le suma la antigüedad del software de la era soviética. En el caso del hospital pediátrico las inconsistencias que surgen entre la acusación y la filmación que los propagandistas presentan como prueba contra Rusia los deja en evidencia.

Es posible que los operadores de este sistema estadounidense no estuvieran suficientemente capacitados o, incluso los operadores hayan sido oficiales de la OTAN quienes comprobaron la imposibilidad de interceptar a un Kinzhal. La secuencia de la imagen que tratan de mostrar un Kinzahl, si hubiera sido realmente esa clase de misil, no solo no lo hubieran visto venir sino que la explosión que habría causado al impactar además de devastadora, habría afectado al mismo operador del teléfono que filmaba.  

 

miércoles, 10 de julio de 2024

 

HACIA UN SISTEMA DE SEGURIDAD MULTIPOLAR

¿Cuáles son las motivaciones y también los beneficios para la estabilidad global de una iniciativa de defensa multilateral como la que plantea el presidente ruso Vladimir Putin?

 

Por Charles H. Slim

Sin dudas que quienes inspiraron a Joe Biden para continuar con las ambiciones de extender la menguante hegemonía estadounidense mediante la estructura de la OTAN, vieron tras la invasión rusa de febrero del 2022 la oportunidad de oro para acelerar en ese plan. El problema fue y eso ya quedo bien claro, es que la organización atlántica no es tan organizada y mucho menos coherente en sus objetivos.

A estas alturas de las circunstancias la intentona de hacerse de Ucrania mediante el régimen títere de Zelensky ha fracasado y salvo que Washington siga con sus jugarretas sucias, solo le queda el camino de las negociaciones. La reciente visita del mandatario húngaro Viktor Orban a Kiev y su cordial recibimiento es una prueba muy gráfica de ello.

Igualmente, el daño ya fue causado y la desconfianza que la injerencia estadounidense ha creado a ambos lados y en particular entre Eurasia y la UE no se remediara en mucho tiempo. Además, EEUU (valiéndose de sus vasallos europeos) se encargará mediante sus juegos sucios (como el chantaje financiero, la subversión y el terrorismo) de que esa desconfianza se perpetúe en el tiempo.

Moscú no va caer en la misma trampa dos veces con lo cual, si Kiev quiere negociar, el gobierno ruso deberá cerciorarse de que no lo haga para ganar tiempo -con la complicidad de Alemania, EEUU y Francia- y rearmarse como ya lo hizo aprovechando los acuerdos de Minsk. Es posible que Putin y su gabinete hayan llegado a preguntarse ¿Qué podremos hacer para evitar eso?

La Federación de Rusia saben muy bien de esto y es por ello que más allá de las apariencias, hay que construir un sistema de seguridad moderno que vaya más allá de lo militar (incluyendo la alimentaria, sanitaria y psicológica), estratégicamente inteligente y acorde al formato del multilateralismo que poco a poco va tomando cuerpo con el crecimiento de los BRICS+.

En la actualidad, el concepto de seguridad estratégica no alcanza con tanques, aviones y flotas poderosas, se hace imprescindible establecer un control soberano sobre el ciberespacio con desarrollos informáticos propios y novedosos ya que es un área de movilidad de recursos e información incalculables. Sin dudas Rusia está varios pasos adelante en esto con la ventaja extra de la experiencia inigualable adquirida en los campos de Ucrania.

Las conversaciones entre Vladimir Putin y el Xi Jinping avanzan a estrechar la cooperación en este tema. Tras el encuentro que ambos mandatarios tuvieron en Kazajstán en el marco de la cumbre de la Organización de Cooperación de Shangai (OCS), esas conversaciones reforzaron los objetivos comunes. Los crecientes movimientos de la OTAN en el Asia-Pacífico y en especial sobre el Mar Meridional hace que China tome muy enserio el interés de conformar un nuevo sistema de seguridad que seguramente tendrá como otros pilares estratégicos a Corea del Norte en la península coreana, a Irán en la zona del Golfo Pérsico, a Sudáfrica al sur del continente africano y a países latinoamericanos como Brasil, Venezuela, Cuba, Nicaragua y cualquier otro estado regional que busque salirse del circulo vicioso de Washington.

La proyección de este sistema apuntara sin dudas a ser superador del OTSC y por supuesto del formato de la OTAN. Obviamente que su funcionalidad inmediata tendrá por asegurar y fortalecer el espacio geográfico Euroasiático, con la posibilidad de extenderse hasta cubrir al resto de países -sin importar su posición geográfica- adherentes al pensamiento de un desarrollo multilateral que quieran estar al margen de los compromisos y políticas que conlleva la hegemonía angloestadounidense.

De este modo los estados con esta orientación tendrán garantizada la libertad de comerciar y de ser de su interés, relacionarse en paridad con el occidente colectivo evitando de ese modo ser cooptados para seguir sus lineamientos político-económico y comerciales y mucho menos, los geopolíticos. 

Nunca como desde el comienzo de este siglo, la seguridad ha sido tan necesaria como vital para garantizar la soberanía de las naciones. La descarada y agresiva política exterior de ciertos estados justifica que parte de los presupuestos estaduales se dirijan a incrementar y modernizar sus defensas. Es cierto que la seguridad no se limita solamente al área militar pero en lo referente a custodiar los intereses estratégicos (recursos naturales, energéticos, rutas comerciales), esta materia sigue siendo la punta de lanza para concretarla.

El presidente ruso Vladimir Putin lo entendió apenas fue designado por Boris Yeltsin para sucederle y tras su abandono del gobierno, aquel pudo poner en práctica de forma paciente y paso a paso una política de reestructuración y modernización del gigantesco ejército soviético que además de inoperante estaba infestado de corrupción.

El tiempo y las circunstancias le han dado con creces la razón a Putin. De no haber procedido así otra sería la realidad. La actual situación de Ucrania ratifica esto y una victoria definitiva rubricara políticamente su decisión. Mientras en países como Argentina que tiene mucho por proteger, una política semejante habría sido blanco de obstrucciones políticas y protestas de ciertos sectores sociales (que esconden negociados), Putin puso por encima de los intereses sectoriales y de los oligarcas (aún los más ruidosos) a Rusia. A la conocida frialdad de Putin, el tiempo ha demostrado que también era consecuente, hábil y persistente en la concreción de sus planes con lo cual, si la Federación de Rusia no se ha desintegrado tras la crisis económico-social de pos-era soviética, las guerras independentistas alimentadas por las agencias de inteligencia atlantistas y menos aún con las sanciones unilaterales del occidente colectivo, ha sido gracias al plan desarrollado por Putin.

Sin dudas que el actual proyecto de un sistema de defensa multilateral ha surgido de su mente y se halla basado sobre las capacidades tecnológicas de la industria rusa. Al mismo tiempo y con la cooperación de su socio estratégico chino, este sistema podrá ser impulsado para que se ponga en marcha en lo inmediato.

 

 

 

 

martes, 9 de julio de 2024

 

LÁGRIMAS DE KOKODRILLO

¿Por qué los gobiernos argentinos de los últimos 40 años y en particular la llamada “casta política” de los últimos 20 tienen un cero en Real politik?

 

Por Javier B. Dal

No, no. La caligrafía del título de este articulo no ha sido escrito erróneamente. Solo aguarde a ver cómo se desarrolla y verá el por qué del mismo.

Ciertamente que si hoy la Argentina está más entregada que nunca, indica que las supuestas fuerzas nacionales y populares que existían hasta el 10 de diciembre pasado, fueron eliminadas por una feroz invasión, o se han retirado para luchar desde la clandestinidad o fueron abducidas por platos voladores. Queda claro el sarcasmo ya que cualquiera de esas posibilidades, en Argentina, es francamente ridícula.

En la última semana se conoció que los Kelpers están avanzando en su proyecto para la explotación de yacimientos petrolíferos en la cuenca norte de las islas Malvinas y aguas circundantes encomendándole la tarea a la empresa israelo-estadounidense NAVITAS PETROLEOUM con lo cual, habría que preguntarles a los “nacionales y populares” K que estuvieron por casi 20 años en el poder ¿Qué hicieron para contra restar lo que desde hace décadas se venía advirtiendo?

Recordemos que las islas del atlántico sur se hallan usurpadas por Gran Bretaña y desde 1982 base estratégica de la OTAN con lo cual ponemos en contexto estas actividades.

Por supuesto que los Milei están satisfechos con esta situación ¿Qué se puede esperar de un tipo como el presidente Javier Milei que diga que se siente identificado con Churchill, Reagan y Thatcher?; reconozcamos su honestidad intelectual al menos. Una cosa es clara y es que su gobierno no levantara un dedo para reclamar por estas explotaciones, aunque también seamos realistas, poco le importará a Downing Street 10. El problema viene por otro lado y se debe ver en quiénes debilitaron tanto al país para que hoy en las islas, empresas estadounidenses e israelíes trabajen de forma mancomunada para un magnifico negocio sin hacerse un problema por lo que pueda decirse desde Buenos Aires.

Desde el demagogo Néstor Kirchner pasando por su histriónica, archidemagoga mujer y también ex mandataria CFK, incluyendo al gobierno proto sionista de Mauricio Macri y el insulso Alberto Fernández, todos y cada uno en su medida además de robarse todo el efectivo posible de las arcas del estado, deshicieron las áreas estratégicas y de defensa innegablemente necesarias para garantizar la intangibilidad de los recursos estratégicos. Por cierto ¿Qué sucedió con el caso del submarino “ARA San Juan” y sus 44 tripulantes? Casualmente en esos momentos, en las islas se hallaban trabajando para los británicos ingenieros israelíes para montar un sistema anti misiles.

No se preocupen por buscar respuestas. Ni los supuestos revoltosos de la izquierda, ni los melancólicos setentistas de Montoneros y mucho menos los anglófilos del PRO y CAMBIEMOS hicieron algo por ello. Unos por señera ineptitud, los otros por cobardía política y los últimos por simpatías ideológicas no se van a poner de culo contra Tel Aviv y sus empresas de armamentos muy metidas dentro de la venta de repuestos y modificaciones para viejas piezas de museo de sus FFAA en especial de la Fuerza Aérea argentina.

La comodidad ha sido la clave de esta clase política. Su quietismo responde solo a una intensión por sobrevivir en la función pública y mantener sus negociados. Cada sector arrimo agua a su molino y lo que menos les ha interesado (y no les sigue interesando) es el bien común de la nación. Veamos sino lo que hacen otras naciones para proteger sus intereses estratégicos de las geopolíticas voraces y bestiales que no dudan en pisotear la legalidad internacional para hacerse de los recursos y hasta territorios de países más débiles. Mientras esta casta sigue mirándose el ombligo creyendo que son “estadounidenses del sur”, el sur global va entrando a la nueva dimensión geopolítica multilateral que ofrecen los BRICS+

Olvidemos la infame era menemista en la cual estas áreas fueron rematadas y gentilmente entregadas -con el consentimiento y otros su silencio- a la OTAN ¿O acaso se olvidan del señor Miguel Ángel Toma proponiendo disolver las FFAA para que la seguridad nacional y obviamente todo lo que se refiere a los intereses estratégicos quedará a cargo de esta organización?

El concepto de seguridad estratégica ha estado fuera del vocabulario (y en el caso de algunos de su conocimiento) de esta casta por cuatro décadas.

¿Qué hicieron para reformar y mejorar la defensa estratégica los gobiernos de Kirchner y su mujer Cristina Fernández (CFK)?; ¿Qué hicieron los anglófilos de Macri o los energúmenos del baboso Alberto Fernández? Supongamos que realmente cada uno de estos bloques políticos creían en sus ideologías y en honor a ellas, hubieran procedido a reconfigurar la seguridad estratégica de acuerdo a sus preferencias. Supongamos que Kirchner se hubiera inclinado hacia oriente, habría emulado a Chávez y trabado profundas relaciones con Rusia y China y que a su muerte, su mujer CFK pudo muy bien profundizar para desmantelar toda la infraestructura corroída de FM poniendo a los chinos y rusos a cargo ¿Por qué no lo hizo? Muy simple. Nunca tuvo semejante idea en su cabeza porque ante todo, estaban los negocios y además, no quería molestar a Washington. Para ella como para todo político argentino, los dólares son mucho más atractivos que una idea revolucionaria.

Hoy la realidad es más tenebrosa que la que el mismo Juan Domingo Perón pudo prever con sus proféticas palabras al decir “el siglo XXI no hallara unidos o dominados”. Argentina ni siguiera es un país dominado por la fuerza o la astucia del imperialismo angloestadounidense. Es un país desarmado y regalado por sus propios dirigentes y todo ello, consentido por una población abúlica y cómoda que prefiere ver pasar de manera pasiva el carro de la historia.

La descarada actividad petrolífera que los kelpers comenzaran con la asistencia israelo-estadounidense y consentida por un gobierno anglofilo-sionista en Buenos Aires, es parte de esa consecuencia. Una vez más, Argentina -que de constante gira en crisis financieras- verá impávida cómo miles de millones de dólares de esa explotación irán a los bancos en Londres y New York. Ciento de millones de dólares de esa actividad a su vez irán a las arcas isleñas y con ello los argentinos podrán ver como al poco tiempo esos isleños, ni siquiera necesitarán de Londres para protegerse.   

 

 

lunes, 8 de julio de 2024

 

MAS PRECISIONES SOBRE LA TORMENTA DEL DESIERTO

El aún no explicado papel del grupo ALFIL I en la guerra del Golfo Pérsico de 1991

 

Por el Dr. Carlos H. Castia

A
treinta y tres años de la guerra en el Golfo Pérsico en la cual, la Armada Argentina participo en el bando de la Coalición multinacional Aliada liderada por EEUU, surgen a la luz nuevos elementos que informan de manera clara y sin ambigüedades cual fue el involucramiento del país en la llamada “Tormenta del Desierto”.

Viene siendo una lucha sin cuartel la búsqueda de informes claros y completos por parte del estado sobre la participación del grupo de tareas GT.88 que tras zarpar de la base naval de Puerto Belgrano el 25 de septiembre de 1990, operó entre el 17 de enero al 28 de febrero de 1991 dentro de las aguas del Golfo Pérsico con el nombre táctico “ALFIL 1” en apoyo a las fuerzas navales de batalla que lanzaban constantes ataques aéreos sobre Kuwait e Iraq.

A presente día todos aquellos que participaron en las hostilidades, me refiero a los tripulantes de las unidades navales, destructor “ARA Alte. Brown” y la corbeta “ARA Spiro” han sido desconocidos en sus esfuerzos y las calidades que los mismos se desprenden para obtener los derechos correspondientes a esa veteranía. Sobre el papel del grupo argentino en la estructura de las operaciones bélicas, aún sigue siendo una gran nebulosa que se está tratando de aclarar.

En este caso, la desinformación ha sido la regla. Estos más de 500 hombres ni fueron “cascos azules” ni menos estuvieron en misión de paz por el simple hecho de que la “Tormenta del Desierto” fue una guerra abierta que se extendió desde el 17 de enero al 28 de febrero de 1991 causando miles de muertos, otros tantos miles de lisiados y una destrucción muy discutida y estudiada sobre la infraestructura civil iraquí.

A nivel institucional, el silencio viene siendo la regla más común. El estado argentino se ha desentendido de estos hombres precisamente mezclando aquella errónea información referida a una “misión de paz” con un notable silencio a requerimientos administrativos e incluso judiciales para que fundamente y de cuenta sobre el alcance e involucramiento de sus buques durante toda la campaña bélica.

A contrario de lo que cada gobierno y sus respectivos jefes de la Armada a lo largo de estas tres décadas han tratado de argumentar, una sucinta revisión sobre cuales fueron los parámetros geográficos en los que se desenvolvió aquella guerra, pone blanco sobre negro en lo referente a las implicancias del grupo ALFIL I y la importancia táctica que revistió en las operaciones.

Primero. El grupo llego a la zona antes de iniciarse las hostilidades y lo hizo para plegarse a una coalición multinacional armada para, en primera instancia, cumplir con el bloqueo impuesto por Naciones Unidas y tras el vencimiento del ultimátum, participar de las operaciones bélicas bajo el marco de la Tormenta del Desierto.

Segundo. Ese plegamiento fue recibido y asignado a las tareas que iba a cumplir por encargo del Comando a cargo del Centro de Coordinación y Comunicaciones, en este caso a cargo de la Armada de los EEUU (NAVCENT) encargado de coordinar el despliegue de la fuerza naval de todo el Teatro de Operaciones que iba desde el Mar Rojo hasta el Golfo Pérsico y sus correspondientes sub teatros. Precisamente el grupo ALFIL I estuvo asignado al sub teatro más implicado en las operaciones que abarcaba el litoral marítimo de Arabia Saudita, Kuwait e Iraq y el cual tuvo un papel central en la estrategia de bombardeos y la cobertura aérea a las fuerzas terrestres.

Tercero. La Argentina en ningún momento argumentó restricciones políticas o de otra materia para intervenir dado que hubo casos de algunos de los partícipes como Bulgaria, Checoslovaquia, Corea del sur, Japón y Polonia que si lo hicieron y contribuyeron con puntuales objetivos sin querer ser involucrados en las operaciones. Al contrario, los buques argentinos, junto a otras unidades navales (como las canadienses y australianas) prestaron cobertura, apoyo logístico y de combate a los grupos de batalla que operaban desde el Golfo hacia tierra, sujetos por igual a las contingencias (ataques aéreos, misiles balísticos o minas navales) de una guerra abierta.

Cuarto. El grupo ALFIL I desde el mismo momento que cruzó el Canal de Suez, entró al denominado “Teatro General de Operaciones” que se extendía desde EEUU hasta todo el Oriente Medio y que se activó desde el 17 de enero de 1991 y por el cual legitimaba acciones en cualquier punto de esa extensión geográfica. Al parecer los gobiernos argentinos nunca han dado detalles sobre esto ya que ello determina una posición específica y un compromiso político que se reforzaría con su activa participación en el bando de la Coalición multinacional. Pero por si acaso quedaran dudas, según el despliegue de fuerzas navales para operar en las hostilidades, el grupo argentino operó durante toda la campaña bélica en uno de los sub teatros designados como fueron las aguas del Golfo Pérsico.

Dentro de estas áreas designadas, los buques argentinos llevaron adelante tareas de custodia armada de la ruta logística para asegurar el Transporte Marítimo-Estratégico diseñada por el Almirante estadounidense Pagonis para aprovisionar (de combustible, víveres, agua potable, munición, armamento, personal etcetc) a las fuerzas navales de ataque compuestas por los grupos de portaaviones y a las terrestres que debían desalojar el emirato ocupado.

La protección de esta ruta fue vital para concretar las operaciones ya que de haber sido interrumpida pudo haber obstaculizado el éxito de la campaña militar.

Es por ello que la sugerida independencia táctica en el desarrollo de las operaciones por parte del grupo ALFIL I hablando de que en ese entonces respondía a su comando en Buenos Aires, además de absurdo, no refleja la realidad y mucho menos la viabilidad en las circunstancias en las que se hallaban operando los buques. Esa irrealidad queda patente no solo por las interferencias (y confusión) que ello habría propiciado con el NAVCENT, sino también por la carencia de medios técnicos y comunicación (satelital y cifrado) propios para mantener contacto en tiempo real entre el grupo y Buenos Aires.

Incluso más. Hay dentro de los pobres argumentos de las autoridades argentinas un gran vacío lógico que lleva a preguntar ¿Cómo coordinaban entonces las operaciones aeronavales que llevaban a cabo con las otras armadas? Eso se hacía mediante las llamadas “Conferencias en Dhahram” que eran reuniones a las que acudían los comandantes de todas las flotas implicadas para precisamente, coordinar las operaciones y movimientos con el NAVCENT ¿Por qué los comandantes del grupo ALFIL I iban a ser la excepción? Un dato sobre esto es que, no había avión o helicóptero que no estuviera autorizado a volar sin el permiso de este comando naval y es por eso, que los helicópteros “Alouette III” embarcados en el destructor “Alte. Brown” no iban a estar exentos a esta regla.

Como consta en el organigrama de mando estratégico para la Tormenta del Desierto, los jefes de cada arma occidental (Fuerza Aérea, Armada y Ejército) estuvieron a cargo de altos oficiales estadounidenses y en el caso de las fuerzas navales su coordinación en última instancia estuvo en manos del Almirante estadounidense Stanley Arthur entonces ¿Cuál fue la independencia táctica que algunos alegan?