martes, 23 de septiembre de 2025

 

REVERSIONANDO EXCUSAS Y ARGUMENTOS

¿Qué tan precisa y confiable es la cobertura de los medios argentinos sobre lo que Israel está haciendo en Gaza? Cuando los hechos aplastan al relato

 

Por Javier B. Dal

A nadie le quedan dudas de que lo que Israel esta llevando a cabo en toda la franja de Gaza es un genocidio y que tiene como fin último, desalojar a toda la población árabe-palestina y reocuparla con colonos judíos importados desde occidente y en especial de países como EEUU, Argentina, Brasil y la UE. Por estas horas dos Divisiones de las FDI, la 98º y la 162º con miles de hombres (muchos mercenarios), cobertura aérea y apoyados con docenas de vehículos blindados están arrasando todo a su paso. La venganza de los supremacistas judíos está en el pináculo de su monstruosidad.

Y es tan evidente todo esto que los expertos del departamento de relaciones públicas y sus cerebros de la inteligencia israelí tratan de que este crimen de masas ante la imposibilidad de justificarlo, pueda ser matizado con relatos artificiosos a tal punto que vaya perdiendo el impacto en la psique de quienes lo ven.

Para ello la siempre presente y útil colaboración de los medios “amigos” (es decir los que se apegan al guion) es imprescindible para trasmitir una realidad alterna y diluida que calme las ansias y hasta las controversias que arrecian contra los partidarios pro-israelies alrededor del mundo. En ese plan el gobierno de Netanyahu no ha escatimado en enviar emisarios e invitaciones a los medios que el Mossad (previamente) califica de “amistosos” para llevarlos con todo pago para que vean las bondades que las FDI están ejecutando en Gaza.

Como no podía ser de otro modo en la Argentina del gobierno de los hermanitos Milei no iba estar al margen y fue por ello que hay algunos periodistas acreditados de medios como “Radio Rivadavia”, “TN”, “LN+” y otros notablemente comprometidos con la “causa” de Israel, que ya están retrasmitiendo desde un lugar seguro y bien controlados por los israelíes, una versión muy lavada y al mismo tiempo asquerosamente insultante no solo para las miles de familiares que han visto morir a sus familiares y amigos sino también, para la inteligencia de quienes son cotidianamente informados de la crudeza de lo que realmente sucede.

La militancia sionista en estos medios es tan explicita que hasta un ciego puede verla. Pero ese no es el problema, sino el intento de colar sus puntos de vista altamente ideologizados y estas inconsecuencias como la verdad revelada.

Uno de los puntos que están tratando de maquillar es el referente a la ayuda humanitaria diciendo que los camiones ingresan cargados de alimentos y medicamentos tratando de desmentir el bloqueo y los saqueos que las fuerzas regulares e irregulares israelíes estuvieron realizando creando una hambruna atroz que se halla bien documentada.

Igualmente, en este país hay una buena parte de sus habitantes que están bien despiertos de la intencionalidad y la lealtad que tienen estos editorialistas pro-israelies para con el estado de Israel. Incluso no es nada nuevo ver esto principalmente en Buenos Aires, sede en donde se asientan los principales centros de actividades y difusión de los intereses sionistas del país.

Y es que estos mismos medios y varios de sus periodistas, vienen siguiendo esta línea tuerta y parcializada en la cual los palestinos no existen, utilizando de forma maliciosa y con un claro sesgo deliberado, la palabra terrorista para hablar de los palestinos e incluso, como sucede con algunos -que como dice el dicho- siendo más papistas que el papa, se atreven a decir que la bandera palestina es, “la de Hamas”.  

Esto tampoco es una sorpresa ya que hace tiempo que desde esas tribunas y otros actores de la intelectualidad rioplatense se ha instalado una retórica islamófoba y de un odio a los árabes que ha pretendido justificarse con los atentados de 1992 y 1994 que dicho sea de paso y más allá de lo que artificiosamente resolvió su justicia federal (antes de que asumiera Milei), no hay pruebas precisas y concretas que determinen lo que a la embajada de Israel en Buenos Aires esperaba escuchar.   

Por estas horas algunos de estos corresponsales son llevados al borde la franja en donde y bajo la estricta vigilancia militar israelí (y del Shin Bet) informan o relatan lo que sus anfitriones le autorizan a decir. Ninguno de estos “periodistas” ha cruzado ni mucho menos han ingresado -y no los dejarían hacerlo- a lo profundo de Gaza no solo por el peligro que representa sino porque, hay muchas cosas que a Netanyahu y a su gobierno no le conviene que vean estos amigos.  Así no verán los hospitales bombardeados (como “Al Shifa” y “Al Nasser”), las mezquitas demolidas, los daños a la iglesia católica de la “Sagrada Familia” o los colegios dinamitados por los zapadores de las FDI como parte del plan de borrado de la identidad palestina.

Hay un alto grado de credulidad -para no decir parcialidad- en estos empleados de medios ya que no hay otra forma de calificar su conformismo (salvo que lo hagan por afinidad ideológica como algunos innombrales) para no querer ir más allá de lo que los guías israelíes les permiten incursionar. Tal vez sea mejor para su integridad física y no porque la amenace como lo remarcan con énfasis muchos de estos exponentes en Buenos Aires “el terrorismo de Hamas”.

La lista de “neutralizados” por poner en riesgo los intereses del estado de Israel y del mismo Netanyahu es extensa y prueba de ello son los más de 270 periodistas que desde octubre del 2023 han sido asesinados por cubrir la brutalidad sionista o incluso, fastidiar sus personales intereses en Washington (como sucedió con el asesinato de Charlie Kirk). Sobre esto un dato a tener en cuenta y que estos simplones medios argentinos no dicen es que, hoy el régimen de Netanyahu tras amedrentar a Donald Trump ya se aseguró por medio de uno de sus partidarios (como lo es el multimillonario CEO de medios) Larry Ellison de tomar el control del algoritmo de “Tik Tok” para que todas las imágenes y emisiones de lo que sucede dentro de Gaza o incluso en toda la Palestina ocupada no puedan ser vistas ni compartidas por la juventud en EEUU.

Semejante maniobra, ejecutada al amparo de la oscuridad en la que arreglan estos asuntos del poder y que en el pasado gozaban del misterio absoluto que les daba su clandestinidad ya no es ignorada por los estadounidenses. En Argentina los sionistas no necesitan ser tan agudos para presionar ya que, aquí los políticos se convencen con una bolsa de dinero.

Es curioso que la sagacidad de la que se jactan muchos de estos exponentes del periodismo brilla por su ausencia al momento de analizar esta clase de datos tan importantes como sensiblemente trascendentes para la libertad de expresión global. En realidad no asombra ¿Cuándo han hablado de Julian Assange o del asesinato a sangre fría de la periodista Shairin Abu Akle?

Los argentinos que aún consumen las noticias de esta clase de medios tal vez puedan contentar sus obtusas visiones pero, es seguro que no se las creen. No olvidemos que existe en la idiosincrasia argentina un consabido pensamiento gris y errático por el cual, por miedo a ver y saber la verdad, omiten comprometerse hasta no estar seguros de quien es el ganador.

 

sábado, 20 de septiembre de 2025

AN ENGLISH ALIEN THROWING UP IN NEW YORK

The political and social decline of the United States goes hand in hand with a noticeable decline in the common sense of its leaders. How will this affect the United Kingdom?

 

By Sir Charlattam 

Oh dear, the US is no longer even a shadow of what it once was. Getting to J.F. Kennedy Airport is starting to feel like a real journey, as if it were an obstacle course. My years of service have taught me to observe, intuit and realise when a place and its atmosphere are hostile.

It is true that the controls and paranoia are not the same as what I experienced in Berlin during the Cold War or at the checkpoints of the British collaborators of the UVF in Belfast. But despite the distance and time, the make-up and manners, the government informers, who I assume are from the HSD and the FBI, are watching those who come and go, regardless of whether they are English or from other friendly nations.

As the days passed, I was able to corroborate this. As is now a ritual, I met up with my contacts in a typical Italian restaurant where we can exchange views on how things are evolving on both sides of the ocean. Obviously, I shared Starmer's bizarre policy and his cronies' commitment to fabricating a casus belli against Russia, playing with peace and, in that plan, their underhanded cooperation with the White House, but what I was most interested in knowing was whether my perception was exaggerated or not.

It was Tommy, an old American colleague who used to work as a liaison in Turkey, who painted me a picture of the increasingly radicalised internal situation in the US and how it was being fuelled from Washington DC. The murder of ultra-conservative activist Charlie Kirk has unleashed a flood of suspicion involving important Zionist contacts in the US (such as Bill Ackman) and paranoia which, added to the Epstein scandal that is coming to the surface like shit, has triggered a witch hunt ordered by Donald Trump himself, which has even reached members of the House of Representatives.

The Trump administration has militarised many cities and is trying to do the same with the minds of citizens, and in that sense, political and social violence is functional to that policy. It is so obvious that there is no need for interpretation.

Trump has not only questioned one of the foundations and values that made this country great, he has simply nullified freedom of expression in any area that leads to critical thinking. Criticising or expressing any suspicion about the federal administration or any of its decisions is now reason enough for the government's dogs to come after you, says one of my colleagues. The cancellation of Jimmy Kimmel's television programme is only the most visible example of what is happening here.

Just as Trump was arriving in London to present his conditions to Keir Starmer, mass protests against his visit reflected the British people's reluctance to endure new US impositions that will undoubtedly end up being paid for by those at the bottom. We all know, from Brixton in east London to the Black Country to Greenwich in the south, that Trump's promises end up costing others, and in this case, those others will be the British people. 

Returning here, the economic, social and political situation could not be more heated. At all times, federal agencies, especially the HSD, are on the lookout for what they consider to be enemies of the government, who, without warning and wherever they may be, are taken by storm by militarised forces who shamelessly drag them away like a sack of potatoes to take them away in one of their armoured vans.

The security apparatus that supports Trump's policies and his MAGA movement labels its internal enemies, the most prominent being leftists (ANTIFA), illegal foreigners, including Europeans who don't give a damn about their bloody policies, and pro-Palestinian groups who, for doing their academic and outreach work to raise awareness of the horrific situation, are labelled - to the delight of Netanyahu and Co. - as conspirators. Of course, this didn't start yesterday. Compulsory deportations, the transfer of handcuffed people and the imprisonment of ‘suspected illegal immigrants’ in places such as Guantanamo, which bring back terrible memories for America's already blurred image, are not going to return to the country again. 

This repressive policy, in the best style (but much more elegant and sophisticated) of African dictatorships, covers the entire spectrum of government. One of my colleagues, after agreeing with us, illustrates how far the government intends to go by saying: ‘If there is anyone who reflects in detail what Trump has in mind and wants to see it carried out, it is Secretary Marco Rubio, whom the government may give the power to review and cancel the passports of those they deem undesirable.’

If I said that this seemed like an African dictatorship, I stand corrected and would rather describe it as typical of the German STASI during the Erich Honecker era, which was so effective at gathering intelligence that even in the early 1980s—when the CIA was still experimenting—they managed to compile databases with the DNA of citizens suspected of being dissidents or of suspicious behaviour after having touched glasses, coins and containers in a public place.

But today it is not communist or Arab nationalist agencies (now defunct) that practise these archaic methods of invading citizens' privacy and freedom. Today, it is American and British agencies, with the close involvement of Israeli agencies, that cross and snoop on activities and dare to analyse what someone thinks and posts on their social networks, determining whether they are an enemy to be targeted.

  

viernes, 19 de septiembre de 2025

 

                                            GAZA

¿Por qué el genocidio que aún se sigue ejecutando con total impunidad en la franja y que hoy se lleva a cabo milimétricamente en la ciudad de Gaza es el tiro de gracia para la legalidad internacional?

 

Por Charles H. Slim

Por estas horas solo los palestinos y los valientes trabajadores humanitarios que han decidido quedarse pese a las amenazas del carnicero de Tel Aviv, saben lo que es el infierno. Durante horas, días enteros los aviones, los obuses y los misiles israelíes han bombardeado cada sector de la ciudad de Gaza matando en el acto y por aplastamiento de los escombros a cientos de inocentes entre ellos a muchos más niños y mujeres.

El ultranacionalismo sionista da rienda suelta a su sed de sangre y como lo hicieron sus homónimos europeos del fascismo y el nazismo de la primera parte del siglo XX, van a la conquista de espacio vital ajeno en este caso, de los palestinos.

Ciento de miles de civiles tratan de huir a pie, con carros o incluso bicicletas, obligados por el fuego deliberado de los tanques y tiradores israelíes que en varias oportunidades han sido pillados sonriendo al ver el dolor de sus presas. Muchos gazatíes huyen como pueden y lo hacen en estado de debilidad tras meses sin comida y agua e incluso con heridas que no han podido ser tratadas por los constantes ataques (de sus colonos y mercenarios) israelíes a los camiones con medicinas y comida. Atrás dejan sus casas o incluso los restos de lo que quedaba de ellas y que los sionistas ambicionaran apoderarse tras el final de la limpieza. Una verdadera carnicería se esta llevando a cabo a plena luz del día y frente a cientos de dispositivos que captan en tiempo real como las bombas de las FDI van cayendo tras de sí como una forma de arrear a esa marea humana empujándola al sur.

No hace falta intuir que no hay un lugar seguro en Gaza y mucho menos cuando el agresor tiene la intención de buscar y matar cuantas personas se le crucen.

La impotencia es total y con ella la indignación por un organismo ciertamente inútil como Naciones Unidas que no ha hecho nada -más allá de sacrificar a muchos de sus empleados- por frenar este genocidio a cielo abierto. Las familias enteras asesinadas (como era la familia Zaqout de 43 miembros), las desaparecidas de quienes no sabemos nada y los lisiados incluyendo entre ellos a personal de la UWNRA ya no tienen remedio pese, a que este mismo organismo burocrático supo ser muy veloz y contundente para impulsar medidas tan discutibles como de dudosa imparcialidad como fueron las intervenciones sobre Iraq en 1991, 2003 y las reprobables acciones cohonestadas con la OTAN contra Yugoslavia en 1999.

Los extremistas judíos en su mayoría de origen askenazi (europeos) están envalentonados por la política del gabinete supremacista liderado por Netanyahu que se frotan las manos a la espera de arrasar Gaza para seguramente volverla en un gran negocio inmobiliario. Igualmente y aunque las FDI cuentan con un apoyo ilimitado de la logística y abastecimiento de material militar estadounidense ya saben que ni sus tanques “Merkaba” les aseguran salir indemnes de las emboscadas de la resistencia.

Entre tanto y ante las condenas de la mayoría de los gobiernos europeos (tardías y nada creíbles), Netanyahu y sus principales ministros acuden una vez más a la retórica del antisemitismo cuando en realidad son ellos, Netanyahu y Cia quienes con este horrendo genocidio y contra toda la legislación internacional, han cometido uno de los crímenes antisemitas más abominables precisamente, contra un pueblo semita como es el palestino (descendiente de Sem, hijo de Noe), que será recordado en la historia como una vergüenza en la historia del judaísmo.

Pero mientras esta tragedia humana se agudiza, los planes del gabinete sionista y de sus aliados en los gobiernos de occidente (en especial en EEUU y Gran Bretaña) se centran en ver cómo lograr en menor tiempo posible la captura de Gaza asegurándose de asesinar a cualquier sobreviviente.

El cuadro no solo es trágico sino francamente siniestro, tanto que no es posible disfrazarlo con nada. Es más, los medios en occidente, consecuentes y conocidos colaboradores del sionismo no han podido hacer el esperado control de daños que se esperaba de ellos. La imposibilidad de tapar los hechos y mucho menos explicarlos, rompe con una estrategia discursiva que desde 1948 ha estado basada en mentiras, encubrimientos y deformaciones deliberadas de la realidad. Las otroras jactanciosas excusas apelando a ser víctimas del mal y de ser perseguidos porque son “el pueblo elegido”, el “antisemitismo”. el “holocausto” y toda una variedad de argumentaciones tiznadas de falacias hoy ya no cuajan y solo les quedan el silencio o meras rumiaciones que les deja al desnudo en su propia inconsecuencia.

En EEUU los mismos estadounidenses de a pie y una parte importante de la intelectualidad judía ya son conscientes que tienen un gobierno o más bien un sistema político que se halla cooptado por el ideario sionista tanto en la política interna como en la exterior que -por el cabildeo directo e indirecto- brega por intereses propios del estado de Israel representado por grupos como AIPAC, ZOA, la LIGA ANTIDIFAMACIÓN o JSTREET  entre los más influyentes, que han terminado por convertir al estado de la unión en un operador automático, en especial de y solo por el interés geopolítico-estratégico-mesiánico de Israel.  Incluso se han incluido a estas filas los cristianos sionistas (como son los de CUFI) que más que verdaderos cristianos y practicantes de las enseñanzas de Cristo, son la representación de una versión retorcida y política del evangelio.

Pero a pesar de toda esta batería de organizaciones y redes que consumen y se sostienen con miles de millones de dólares provenientes de las donaciones (incluidas las de origen negro), no pueden tapar la sistemática criminalidad del estado de Israel. Tal vez Netanyahu y sus partidarios tanto en Israel como en este lado del hemisferio crean que lograrán su objetivo sin pagar costo alguno, entonces preguntemos ¿Realmente creen que no pagaran por semejante atrocidad?

miércoles, 17 de septiembre de 2025

 

DE LAS MASAS

AL INDIVIDUO

¿Cómo sería la vida política con un individuo realmente consciente de formar parte de todo lo que le rodea?

 

Por Charles H. Slim

En lo que va de la historia política, la participación de las personas del común ha ido variando atendiendo a los sistemas de gobierno contemporáneos. El hombre ha ido pasando por diferentes estadios de participación en la vida política que van desde el simple súbdito en las monarquías absolutas hasta el simple ciudadano que seducido por el colectivismo se veía arrastrado por las masas difuminándose su individualidad. Ortega y Gasset en sus obras describió al “hombre masa” como ese que diluye su personalidad en la masa renunciando a su individualidad. Un ejemplo histórico de esto fueron los procesos revolucionarios de los siglos XIX y XX con los fenómenos ideológicos del fascismo y el comunismo y que desde el individualismo metodológico se explicaría como fenómenos sociales a partir de acciones y motivaciones de individuos en sociedad.

Eso ha cambiado y hoy podemos advertir que ese fenómeno de absorción del individuo en las masas no solo ya no existe sino que, es el individuo el que ha tomado consciencia de su propia individualidad ante los intentos de ser arrastrado por una masa boba y amorfa. Para algunos eso es una muestra de egoísmo e insensibilidad o incluso, apatía, para quienes apoyamos el poder del individuo como eje a partir del cual se desarrolla el cosmos en la vida política suscita una incógnita sobre los alcances que ello tendrá en los procesos políticos y geopolíticos.

Este individuo no hay que confundirlo con el “libertario” o estas variantes ideológicas en boga que no son más que una máscara remozada para cubrir las mismas convencionalidades político-partidarias.

En este nuevo paradigma la personalidad del sujeto comienza a poner en duda no solamente al estado, sino también comienza a desplazar al sistema discursivo de la política tradicional imbuido de místicas y relatos fantasmagóricos por medio de los cuales, buscan captar mediante la emocionalidad precisamente a la masa que les oye. Es algo más que un individualismo político ya que él es a la vez todos indistintamente de credos y etnias.

El individuo como tal desplaza a los líderes políticos, religiosos y a los charlatanes de toda clase e incluso, les cuestiona por la vía de la razón y de la credibilidad dejándoles en evidencia ante esa masa que por credulidad, conformismo o simple interés les sigue el juego.

Este nuevo individuo que no significa que sea un mero individualista, que se queda en la faceta meramente moral de su actuar aislándose del mundo que le rodea, tiene empatía y supera las superficialidades que separan a los individuos haciendo real que las diferencias no han sido para separar sino para que se reconozcan unos a otros. Es un sujeto con plena consciencia de pertenecer a toda la unidad humana de la realidad que le rodea. No necesita administradores ni líderes que le “protejan” o “reconozcan derechos” ni mucho menos, que le compulsen a reconocerlos en los demás. Porque no es egoísta está lejos de la corrupción y en particular de la política partidaria. Por el contrario, su actuar como individuo va más allá impregnando e influyendo en su círculo que va ampliándose a medida que ese individuo, es consecuente no con sus dichos sino con su propia forma de conducirse ante los demás.  

Este individuo no teme porque no busca la imposición ni pasar por encima de sus semejantes. Aunque parezca un conformista y hasta un apático, no lo es y por el contrario, sus características lo vuelve altamente comprometido con la realidad. No le mueven intereses desmedidos y egoístas ya que es consciente de que ello redunda en su contra. Obviamente esto lo vuelve poco atractivo y hasta peligroso para el poder establecido y para quienes se sirven de él ya que no es manipulable y es impermeable a los ideologismos.

Pero también hay un lado negativo en este nuevo enfoque y que no escapa a la condición humana. Así como hay un individuo consciente de pertenencia a una unidad en la relación con la realidad humana y todos los aspectos que ella implica, hay otro que también en esa individualidad ataca al sistema imperante y usa la violencia como una forma de expresión de su carácter sin darse cuenta que realmente se está agrediendo a sí mismo.

El sentido que le da a su forma de conducirse y las acciones que ejecuta no deberían chocar con las del resto de los individuos de la sociedad en que se desarrolla siempre y cuando sean armónicas y orientadas por el respeto mutuo. Ciertamente como dice Max Weber, no es un sujeto pasivo del poder pero, a diferencia de lo que también dice, no debe imponer su voluntad para establecer relaciones sociales sino, asimilarse e integrarse en una fusión que no dejará lugar a las diferencias y antagonismos.

Hoy vemos como este individuo utiliza las redes sociales y el internet como vehículo no ya para tragar la información y los puntos de vista que producen y procesan entes fríos e indiferentes como son las empresas de medios y los noticieros, sino para interactuar y hasta contra restar visiones claramente adulteradas que buscan arrear a la opinión pública por los senderos brumosos del poder político-económico establecido.

En este nuevo individuo el carácter reposado y su compromiso por el cambio surgen de sí mismo estableciendo lazos sin necesidad de las chuecas muletas del poder.  

lunes, 15 de septiembre de 2025

 

THE NEW MANCHURIAN EPISODE

What has the murder of Charlie Kirk meant, and who stands to gain from it?

 

By Sidney Hey

The United States has a long history of political plots and assassinations that have targeted none other than its own presidents, demonstrating that beyond the much-touted word ‘democracy’ lies a dark and terribly brutal reality hidden in the so-called ‘deep state’.

The murder of young Charlie Kirk, a conservative activist and promoter of the values that forged his country, is not only vile, but also surrounded by circumstances that are very worrying, not only for opaque institutions, but also for the true freedom and security of Americans themselves.  

Kirk was born and raised in Arlington, which made him as American as apple pie. His murder was undoubtedly not an act of madness by a deranged individual or a ‘lone wolf’. There is an encrypted message in this crime, and it has both a sender and a recipient. Now, who wanted to send this message? This question has different answers depending on who is answering it. For conservative sectors and even those close to the government (MAGA), the possibilities range from an act by the left directing accusations at pro-abortion and transgender Democrats to some Islamist terrorist group or foreign invaders.

On the other hand, we will have to wait for the evidence that is being gathered to be processed and determine whether the alleged perpetrator is really the shooter or just a scapegoat. Within this sector, there are also those who are more closely linked to independent sectors who sense that the clues being presented to the media and the official account of how this happened have a very strange smell about them.

There are many reasons why we should be suspicious of the official version. History and similar precedents in American political life provide ample evidence for this. From the assassination of Lincoln to the attempt on Donald Trump himself in the middle of the election campaign, no one can say that nothing has happened here. The conspiracy is not out there and it is not a simple cliché, it is deep within the system itself.

Charlie Kirk was a staunch conservative activist who invited others to express their views in genuine public debates. Unlike conventional politicians and Trump himself, he never changed his discourse, and that is where we will surely find the motive and the masterminds behind the attack.

With a clearly neoconservative political discourse (aligned with Zionism), he defended all of his country's aggressions and invasions around the world. But unlike the extremists and fanatics of his own ilk, he allowed public debate in university lecture halls at a time when speech had become an act of aggression, labelled as ‘hate speech’ and the era of cancellation. He truly upheld and respected the right to free speech, which today in the West is monitored and scrutinised by government agencies hunting down dissidents.

In fact, these agencies, both local and their allies (such as Israel), have made journalists and researchers prime targets for elimination in an attempt to silence truths such as the genocide in Palestine today, making it clear that the IDF and its intelligence agencies have been carrying out these crimes since long before October 2023. Let us not forget the circumstances and implications of a Zionist faction within the CIA that was behind the assassination of John F. Kennedy in 1963.

This crime perpetrated against Kirk is an attack on freedom of expression, one of many that since 2001 and from within the American political establishment have been carried out against independent voices, regardless of their discourse, as long as it disturbs or calls into question their narratives.

Whether Charlie Kirk was right or wrong, he spoke honestly and did so from his convictions, which he had grown up with and was willing to pass on to his family and those who listened to him. But his straightforwardness is not compatible with state policy, and that is where a ‘good guy,’ as Trump would say, becomes a nuisance that must be eliminated. And that is where we should begin to scrutinise: What was Charlie Kirk saying in his latest talks that could have caused offence? Or even more worryingly, how sharp and revealing was his view of the current government's policies that it was making the rest of the citizens think? 

If we analyse the speeches and debates since the beginning of the Trump administration, we can see how he became an inconvenience for the broken promises and double standards we have seen.

Citizens of the world, and especially Americans, must not be fooled by the spectacle staged by news networks and the discourse of ‘experts’ who focus on the shooter and his possible implications. The alleged shooter who was immediately exposed to the media may be nothing more than a scapegoat to convince citizens and close the case judicially. American history already tells us that this is a big scam to divert attention from the real conspirators. Today, the possibilities for fabricating and staging a scene are as possible as they are unusual. Pre-selecting a simple mentally deficient person who has been previously manipulated and even providing him with a rifle that does not work, so that he can then appear in photos and videos already directed by his employers, is not only very possible but also very useful for covering up the real gunmen. That is why, to a certain extent, we should ask ourselves: Is this a new case of the Manchurian Candidate?