DEFENSA Y SEGURIDAD
“DEFENSA POLIVALENTE”
Como proveer una defensa eficaz y moderna con inversiones modestas que pueden conjurar peligros muy actuales y costosos a largo plazo tomando en cuenta experiencias reales.
Por
Pepe Beru
Aunque la guerra
sea una cuestión desagradable para cualquiera, es una realidad que cada día
avanza en todos los continentes y para peor, ha mutado en sus formas y
dimensiones. Pretender que mirando para otro lado se conjuraran los peligros de
una amenaza militar externa, es una actitud tan infantil como irresponsable con
las generaciones que vendrán. Y no solo en temas como la defensa y sus recursos
existe este peligro latente; en Argentina estamos viendo cómo años de
imprevisión, de desfalco y corrupción han llevado a que dineros que se hallaban
destinados a la compra de equipamiento aéreo idóneo para el combate de
incendios forestales, fuera a parar a los bolsillos de altos, medianos y
pequeños funcionarios de un estado corroído por ineficacia y la corrupción.
La
realidad de la geopolítica internacional nos da varios ejemplos de ello y sería
útil para este tipo de gobiernos que tomaran nota.
Las
experiencias en Iraq y Siria han demostrado que un ejército mal equipado y
desmotivado, es presa fácil de cualquier grupo de mercenarios bien armados,
entrenados, equipados y con una iniciativa meramente pecuniaria. Aunque hay una gran diferencia entre la
situación de Iraq con la de Siria, lo cierto es que en el aspecto meramente
militar, ambos presentaban falencias que facilitaron la penetración de esta
novedosa forma de “intervención” externa.
El
caso de Iraq es el más lamentable. Desde que los norteamericanos invadieron el
país y tras desarticular las fuerzas armadas, “entrenaron y armaron” al “nuevo”
ejército iraquí, poniendo énfasis en
formar cuerpos represivos, pistoleros bien equipados y unidades móviles con sus
“Humvis” que les daba una cobertura de fuego con una ametralladora semi pesada.
MI-24D de la era soviética |
Hasta
la llegada del “ISIS” en 2014 el denominado “ejército iraquí” no era más que un
conjunto de batallones con vehículos blindados medianos que no llevaban
cañones. Su Fuerza aérea fue literalmente botada a la basura o fue blanco de
negociados por parte de oficiales de la “coalición” quienes durante la
ocupación se encargaron de vender piezas, repuestos y aparatos enteros en el
mercado negro.
Simplemente
Iraq estaba indefensa. Sus fuerzas
armadas no eran tales, solo eran bandas de pistoleros encargados de aterrorizar
y eliminar a los disidentes del gobierno colaboracionista, pero nada más. Pero
si algo importante que le quitaron los norteamericanos a los iraquíes fue su
flota de helicópteros MI-MI-24D que en la época de Saddam Hussein, representó la
más poderosa de la región.
Cuando
el “Daesh” realiza su cruce masivo por toda la frontera noroeste del país lo
único que podía hacer el régimen colaboracionista era ver desde sus Drones como flotas de camionetas
“Toyota” cruzaban por el desierto del “Sham”
sin más poder que el de solicitarle a los norteamericanos –con su
base en la Zona Verde en Bagdad- que remitieran uno de sus Drones de ataque
para que lanzaran un par de misiles “Hell-fire” que solo alcanzaban a una o dos
camionetas dejando que el pelotón de otras veinte siguieran su camino.
MI-25 |
Esto
siguió hasta casi finales del 2014 cuando, entre purgas y acusaciones cruzadas
en Bagdad que le costó el puesto a Nouri Al Maliki, el parlamento iraquí
decidió que había que buscar otras alternativas para defender a su país ya que
los “americanos” simplemente los habían estafado y poco o nada estaban haciendo
para ayudarles. Incluso vieron muy sospechoso que miles de “Humvis” que habían
sido provistos por el Pentágono unos meses antes, cayeran regalados (con llaves
incluidas) en las manos de ese grupo.
Los
partidos chiitas nacionalistas como el liderado por Moqtadar Al Sadr, buscaron
la ayuda iraní pero bajo ciertas condiciones. Desde los sectores nacionalistas
se postulo contactar directamente con Moscú para que comenzara a surtir
helicópteros de ataque de última generación, como una forma de compensar las
negativas de Washington a que pudieran acceder a su propia fuerza aérea.
KA-52/Alligator |
La
elección de que fuesen helicópteros rusos los que había que adquirir para
combatir al “Daesh”, se fundaba en el exitoso desempeño que habían venido
mostrando desde que aparatos como el MI-25 y los MI-28 ingresaron a las
operaciones en Siria, los cuales fueron elementos definidores de batallas
contra grupos terrestres muy bien armados.
Incluso
cuando el MI-24 llego a Siria para reemplazara sus viejos hermanos de la era
soviética MI-MI 24D, surgieron versiones allá por diciembre del 2014 que Moscú
remitiría una escuadra de los temibles helicópteros “KA-52-Alligator”, que
fueron vistos en operaciones desde el inicio del 2016 con muy buenos resultados
(Sputniknews. https://mundo.sputniknews.com/orientemedio/201701161066257706-mi-28-ka-52-operacion/).
Este formidable producto de la industria
aeroespacial rusa causó pavor entre las agrupaciones mercenarias, incluso en
aquellas en las que tenían misiles térmicos provistos por los canales
provenientes de Jordania y Turquía.
Precisamente
una de las sorpresas de estos ingenios fue, que podían sortear con notable
éxito, los misiles portátiles que tenían algunos de éstos grupos. Además de
ello, su diseño y sofisticado blindaje le permite el acercamiento a su blanco
con una notable seguridad contra paredes de fuego de baterías antiaéreas de
cuatro tubos como las que poseen los grupos como “Al Nusra” y el “Daesh”.
Su
maniobrabilidad y su potencia de fuego lo vuelve un factor de peso psicológico
sobre el enemigo que, al escuchar el rugido de sus turbinas muchas veces causa
el desbande sin que haga necesario que la infantería deba hacer frente a un
combate.
MI-28 |
Pero
no solamente aparatos de ataque como éste helicóptero han marcado la diferencia
en el terreno. El uso de MI-MI 24D sirios remodelados y reequipados por los
ingenieros rusos ha mostrado que pese a ser modelos antiguos, podían aportar
una faz táctica cualitativa sobre infantería bien pertrechada. Prestando apoyo
en acciones ofensivas, también son muy buenos equipos de defensa y cobertura
para rescates pudiendo absorber una gran cantidad de fuego en corredores
estrechos que se hallan flanqueados por tiradores en tierra.
Argentina
lo único similar a esto es el avión “IA-58/ Pucará”, con motores dos potentes a
hélice, muy buen blindaje y armamento pesado que cumpliría con la tarea de
proporcionar fuego de apoyo a la infantería en tierra. Pudiendo operar desde pistas cortas y
rudimentarias, ha sido una de las alternativas para reemplazar a un helicóptero
artillado aunque, no pueden equipararse en capacidades. Si bien hoy revisten en servicio unos pocos
ante la mutabilidad y movilidad de las amenazas actuales, su operatividad sería
nula ante las contra medidas que actualmente un solo hombre puede usar en su
contra.
En
lo inmediato Argentina debería prever la adquisición de helicópteros como el
MI-24 y otras variedades muy interesantes (Sputniknews. https://mundo.sputniknews.com/foto/20140618160477817/)
que además de la potencia de fuego
provee estabilidad, maniobrabilidad y buena autonomía para tareas de vigilancia
pasiva, rescate e interceptación dando solución al problema de la falta de un
elemento polivalente que pueda compensar las carencias de una casi inexistente
fuerza aérea.