miércoles, 13 de mayo de 2020


“ESPERANDO EL PICO”
Los casi sesenta días de un confinamiento obligatorio que han arruinado a la ya famélica economía argentina al parecer no son suficientes y se hace necesario implementar nuevos argumentos para que esta situación no se corte ¿Cuánto más se paralizara al país?


Por Charles H. Slim
En Argentina el impacto económico que ha causado el confinamiento obligatorio de la población por la pandemia de COVID-19, augura una severa crisis luego de salir de la actual. Pero más allá de las exageraciones mediaticas y los comentarios de los expertos en “Todología” que pululan por la TV capitalina tratando de crear una psicosis que retroalimente el control ciudadano mutuo a favor del estado, la existencia del virus es real.

Hay un persistente –y deliberado- mensaje de que “aún no ha llegado lo peor” por medio del cual se trata de inmovilizar aún más la ya deprimida economía del país que comienza a evidenciar consecuencias irremisibles. Y pese a que las estadísticas no acompañan a las crónicas de terror que vocean los medios, el esfuerzo no cede. La tan nombrada “circulación del virus” que –según las mismas cifras publicadas- no mata más que lo que demuestra la estadística de muertos por accidentes automovilísticos, es la excusa para continuar paralizando el deteriorado sistema productivo que sin dudas, terminara siendo exterminado ¿A quiénes creen que beneficia esto?
El COVID-19 demuestra ser letal contra organismos inmunodeprimidos que se hallan en sectores bien determinados de la población lo que hace presumir una selectividad muy peculiar y nada natural en el comportamiento de este virus, entonces ¿Acaso es un virus genéticamente programado? Como sea, en las últimas horas el mismo ministro de salud argentino Gines Gonzalez, ante estas caprichosas características, ha explicitado su incertidumbre ante lo que puede suceder en un plazo inmediato.

Ello ya causando sus primeras consecuencias sobre la salud mental de una buena parte de la población.  Como era previsible, la economía ha sufrido un golpe fatal y la devaluación de la moneda producto del aumento del dólar revela un descontrol en el aumento de precios. Sumado a ello, la inconsecuencia gubernamental en obligar a la población a permanecer confinada, que les impide ganarse el sustento, le sigue cobrando e incluso, creando más impuestos para mantener a la clase política –además de haberse aumentado sus dietas- que se enquista en un estado que no ha reducido sus gastos.

Pero a pesar de ello, esto recién comienza y peor aún, lo que esta por venir será bastante duro de procesar. El gobierno no ha contado toda  la verdad sobre de que se trata el COVID-19 y ello es el gran peligro para la seguridad sanitaria. Para tapar esta omisión las autoridades políticas y sanitarias argentinas (con la OMS a la cabeza) han convertido la situación en un folklore mediático de “buenos y malos” (quienes cumplen y no la cuarentena), de “guerreros” (los médicos) en una cruzada contra una entidad maligna (el virus), que se asemeja a una novela dramática. Suficientes elementos de ésta mitología, que bien amplificados y masificados por los medios adeptos al Establishment global, persiguen asustar a la población de a pie y sembrar en ella la culpa en cada uno de sus miembros. 

El poder político siempre se ha sustentado en los medios y periodistas de oportunidad quienes a su vez, han cooperado con gusto ya de ello –obviamente- obtienen reditos. En las actuales circunstancias se ha incorporado un tercer actor como son los médicos o más precisamente los “virólogos” quienes son presentados  como los sabios de la verdad revelada o al menos, eso es lo que los medios pretenden vender.

Pero la sociedad global es un poco más lista de lo que lo fue en otras épocas. Para mal de los poderes establecidos (incluyendo a  la Corporación de medios) y de los actuales actores que protagonizan la novela de la “pandemia”, no existen en el grado deseado la apatía y el conformismo de esas masas informes e ignorantes –del Hombre masa- del siglo pasado que podían arrastrarse con liderazgos nefastos de los “ismos” (Socialismo, Comunismo, Capitalismo, Sionismo) paridos por la filosofía política europea en los siglos XIX y XX (Ortega y Gasset).

Suponemos que en Argentina también hay un amplio espectro de voluntades criticas –por fuera de la feria negocial de los medios Corporativos- que no se tragan las argucias de su gobierno y del circo de medios que les sostienen.

En nombre de un virus que por las formas de informar, tiene una letalidad infalible, se ha obligado a los ciudadanos argentinos a ceder sus derechos civiles y patrimoniales sin una explicación clara y amplia sobre de que se trata y como se extendió el COVID-19 ¿Hay alguien en Argentina que este a la altura de estas  circunstancias?  No lo creo ya que el gobierno responde a los mismos intereses trasnacionales que Mauricio Macri inserto en el país durante sus cuatro años de gobierno. Los discursos y las poses de Fernández son solo imposturas y "acting" para el público.

De este modo no es raro ver como ningún medio debate a profundidad de dónde vino esta pandemia y cuál es su fuente real. Mucho menos, que finalidades persigue político-económico y quiénes son los beneficiarios de esta política de confinamiento indefinido.

En los medios argentinos no se nombran y mucho menos se desarrollan  temáticas que puedan complicar sus intereses. Aquí no ningún periodista o “politólogo” explicara al aire que son los “Cinco ojos”[1] y cuáles son sus tareas de alcance global o que papel juegan las trasnacionales como Gilead Science[2] y los “Think Tank” neoconservadores como la American Enterprise Institute (AEI) y la New Atlantic Initiative (NAI) en el desarrollo de estas políticas aislacionistas que trearan beneficios a y solo a las grandes corporaciones financieras ligadas al Big Pharma.

Para distraer, los medios se centran en lo local y además del temor, también buscan convencer  sobre soluciones aportadas por  personajes provenientes del exterior. El caso de Bill Gates y su Fundación es uno de ellos.

Tratar de excusar las actividades y comentarios de Bill Gates como el producto de la “predicción”, es tomar por idiotas a las poblaciones del mundo. Gates además de no ser un filántropo como lo describen los obsecuentes que nunca faltan por estos lugares, es un eugenista que mediante Naciones Unidas, promueve el aborto y la reducción poblacional mediante planes de vacunación.  El “Evento 201” referido a una  simulación sobre una situación como la actual realizado en 2019 a puertas cerradas en la Fundación Gates, ha dejado muchas preguntas sin responder.

Su vinculación con los programas de investigación gubernamental como DARPA[3] son inquietantes ya que en algunos de ellos (con financiamiento federal)  se refieren precisamente a la implantación de nanotecnología mediante vacunas en cada habitante del planeta con finalidades de ejercer un control total ¿Acaso en Argentina existe algun estudio científico sobre estos desarrollos? Olvidense. Además que sus estructuras de defensa son inexistentes, todos aquí están comprados.

El cuento de la “sopa de murciélago de Wuhan” (divulgado por CNN y medios afines al Departamento de Estado) ya no convence a nadie y es por ello que ya no se usa para tratar de culpar al gobierno chino de esta pandemia. Agregado a esto, tampoco convencen las predicciones del virólogo británico Neil Ferguson de Imperial College que además de estar repletas de errores e imprecisiones muy bien documentadas, ha sido el modelo adoptado por la mayoría de los países europeos  incluyendo a la Argentina. Si estos gobiernos siguen guiándose por este modelo, es claro que con seguridad habrá un gran daño a las economías nacionales de los países que lo implementan.

Desde hace unos días, los médicos del sistema están haciendo incapie en que “la pandemia aún no ha llegado” intentando reforzar la psicosis colectiva que sostenga el confinamiento obligatorio y justifique la aberración constitucional de la suma del poder público en cabeza del presidente Fernández.

Incluso se ha estado denunciando que muchos de los fallecidos que se agregan a las listas de estadísticas de muertos por COVID-19, fallecieron de otras causas.  Y como ello se ha estado ventilando por diversos medios alternativos, el miedo al “pico que esta por venir” o repetitivos comentarios como “lo peor aún está por llegar”, es fundamental para sostener el poder estatal de facto que impida la libre circulación.

Si esto no era suficiente, la pretensión de imponer un Software en los teléfonos celulares para hacer un “Tracking” de la posición geográfica de cada ciudadano bajo la excusa de conocer su situación de salud, es una medida claramente invasiva de la libertad y la intimidad de cada persona que no se aligera con la supuesta temporalidad de esta recopilación de datos. Y aunque este espionaje ya se venía realizando con aplicaciones y tecnologías importadas de Israel, aquello sería avalar estos delitos contra la intimidad.
  




[1] Organización que refiere a una alianza de inteligencia global compuesta por Australia, New Zelanda, Gran Bretaña, Canadá y EEUU
[2] Trasnacional farmaceutica cuyo president es el ex Secretario de Estado Donald Rumself
[3] Defense Advanced Research Projects Agency. En español “Agencias de Proyectos de Investigación Avanzados de Defensa”.

sábado, 9 de mayo de 2020


“FALL DOWN AT CARACAS”
El fracaso de una incursión subversiva contra la soberanía y el gobierno de Venezuela vuelven a poner sobre el tapete los métodos nada democráticos de Washington y sus aliados

Por Charles H. Slim
Pese a la pandemia, los negocios sucios continúan. Como dijo alguien, el COVID 19 esta siendo utilizado como un arma contra varios países en especial contra Venezuela, y ¿Quién cree usted que lo esta haciendo? Esta de más tener que mencionarlo ya que es bien sabido que para Washington el asunto “Venezuela” es una cuestión que desde la llegada de Hugo César Chávez al poder en febrero de 1999 ha roto el cráneo a los estrategas del Pentágono y por supuesto, ha frustrado en varias ocasiones a los maquinadores de la CIA y de sus aliados.

En realidad para ese entonces, la administración Clinton estaba de salida en medio de un bochornoso escándalo sexual que nadie olvidaba y la entrante administración de George W. Bush y Dick Cheney (ligada al sector neocon) estaba más compenetrada en poner en marcha sus tétricos planes (PNAC)[1] para el Oriente Medio y Asia que ver lo que sucedia en el patio trasero del Caribe y Sudamérica. Algo grande estaba por pasar y Washington descuido o no advirtió el alcance del proceso revolucionario que se estaba gestando en Venezuela.

En ese entonces el Departamento de Estado y sus agencias de inteligencia concluyeron que la “revolución bolivariana” no era un asunto que  tuviera una importancia relevante, decidiendo que lo liquidarían más tarde. Fue sin dudas el primer error de cálculo que pudieron cometer.

A lo largo de la vida de la revolución bolivariana los intentos de Washington por crear el caos y la inestabilidad cayeron en el fracaso. El fallido golpe de estado en abril de 2002 que pretendía elimar a Hugo César Chávez fue el inicio de esos intentos (incluyendo por supuesto una continua guerra psicológica) y al mismo tiempo la consolidación en el poder del carismático liderazgo de Chávez.

Para cuando Washington volteo para mirar hacia la región ya era tarde. Incluso pese a contar con traidores subvencionados elegantemente denominados por los Mass Media como “opositores” y el apoyo de un sector de los medios locales (ligados a las épocas de la corrupción política de Andrés Perez), no lograron cohesionar una fuerza política coherente y creíble para enfrentar al Socialismo del siglo XXI.

El 3 de mayo en horas de la madrugada, un grupo de 23 hombres muy bien armados a bordo de lanchas con motores fuera de borda intentaron penetrar por el mar, en la región de Macuto, La Guaira y Aragua en el norte del territorio venezolano. Según informaron las fuentes en Caracas, el movimiento de estos hombres llamo la atención a los lugareños y pescadores quienes habrían notificado a las autoridades las cuales sin dudarlo un momento se movilizaron para investigar. El resultado fue un enfrentamiento armado que causo bajas entre los miembros de este grupo irregular y el arresto de otros más.

Previo a caer en desgracia, los comandantes de estos grupos llamaron con desesperación a su “Cuartel general” fuera del área de operaciones con la evidente intensión pedir apoyo pero como quedo claro, los abandonaron a su suerte.

Doblegados los agresores, las autoridades comenzaron a identificar a los prisioneros detectando entre ellos al ex mayor Antonio Saquea Torres y Víctor Alejandro Pimienta Salazar  ex miembros de la GNB[2] (y participes en la intentona del 30 de abril de 2019) quienes se hallaban refugiados en Colombia, dejando en claro quienes estaban detrás de la agresión.

Un modelo similar a las incautadas en Venezuela
También al pesquisar la información, el equipo (Teléfonos satelitales) y las armas que traían consigo, determinaron que su accionar formaba parte de un plan más amplio que contaba con un  apoyo logístico de EEUU y de Colombia. Otras pruebas tangibles de esta injerencia se vio en la incautación de camionetas pintadas de negro con ametralladoras semipesadas montadas en la parte posterior similares a las que usaron los mercenarios en Libia en 2010 y las que usaban “ISIS” en Iraq y Siria. Estos vehículos también desde hace años se han estado utilizando por las bandas narco en México, revelando en sus diseños, blindaje y las armas que montan, la sospechada cooperación o intermediación de ex agentes estadounidenses.

La incursión estaba enmarcada en la denominada “Operación Gedeon”[3] y la misma sería llevada a cabo por mercenarios extranjeros y militares desertores venezolanos con la evidente finalidad de asesinar al presidente Nicolás Maduro y a su vice Diosdado Cabello. Más precisiones sobre ello salieron del testimonio de uno de los mercenarios capturados, un ex miembro del “Grupo 10°”[4] de las fuerzas especiales estadounidense de nombre Airam Seth Berry quien confesó ante las autoridades del gobierno  bolivariano que su misión era secuestrar al presidente Maduro quien sería sacado por el aeropuerto de “La Carlota” desde un avión que llegaría desde EEUU.

Según los antecedentes de los mercenarios estadounidenses capturados, todos ellos habían participado en Afganistán e Iraq, teatros en donde este tipo de operaciones sucias se volvieron una cosa común.

El nombre escogido para la misión deja lugar a varias suspicacias que señalan la influencia de otros actores más comprometidos detrás de esta intentona. Más precisamente, la injerencia israelí seria una de ellas que (además de repetida) se trasluciría con un apoyo tecnológico en la provisión de los sofisticados equipos de comunicaciones digitales con red de internet encubierta.

Las reacciones internacionales no se hicieron esperar. El gobierno chino a través de su portavoz  la Ministra de Relaciones de Exteriores Hua Chunying advirtió que China no aceptara ninguna intervención de EEUU en la soberanía de otros países. Desde Moscú se observa con atención el curso de los acontecimientos y hasta el momento no ha habido declaraciones oficiales sobre el evento.  Ello no significa que Rusia no este preocupado por esta agresión contra Venezuela y aunque algunos analistas consideren que el apoyo ruso se halla condicionado por la distancia, no parecen advertir los recursos militares estratégicos con los cuales el Kremlin puede contrabalancear la situación. 

Al mismo tiempo, desde la Casa Blanca el presidente Donald Trump se desmarco del evento alegando que "Yo no mandaría un pequeño grupo. No, no no. Sería un ejército", aseguró en su Twitter tratando de restarle importancia a la intentona y a las acusaciones de haber sido el artífice de éste intento de invasión. Igualmente las declaraciones de los mercenarios capturados aseguran todo lo contrario y han puesto en el centro de la tormenta a toda su administración. Hasta el momento no se ha oído ninguna posición oficial de la OEA ni de Naciones Unidas.

Según las fuentes, este grupo era parte de una fuerza más amplia que se estaba preparando desde territorio colombiano dirigida por miembros de las Fuerzas especiales norteamericanas. Las pruebas de esto fueron capturadas en las redadas efectuadas por las autoridades en territorio venezolano. Un Vídeo que muestra a dos hombres (que se ven arriba), uno estadounidense (Goudreau) y un venezolano (Quintero) declarando el inicio de la “Operación Gedeon “, evidencio  la existencia de un plan más extenso que habría estado compuesto por 17 grupos armados que cuentan con la complicidad del pretendido presidente provisional Juan Gerardo Guaildo y de su estratega Juan José Rendón quienes contrataron a los mercenarios de la empresa SILVERCORP para la tarea.

Queda claro que la empresa es una fachada que encubre la participación del gobierno estadounidense y seguramente de otras agencias estatales de otros gobiernos, una táctica legal harto utilizada para desligarse de las responsabilidades políticas que ello pudieran conllevar.

Una vez más la “democracia” estadounidense tratando de convencer mediante el sigilo a fuerza de balas y muerte, una costumbre que los políticos anglosajones no pueden corregir.

La puesta en marcha de esta operación no fue motivada por meros intereses políticos o filosóficos (como los medios tratan de argumentar). En realidad si nos ponemos a pensar ¿Cuál de todas las intervenciones estadounidenses han sido positivas o con finalidades altruistas?  Ante todo, cuando se lleva adelante uno de estos planes se hacen cálculos de costos-beneficios y es allí cuando los burócratas en Washington dan luz verde a este tipo de empresas claramente ilegales.

Firmas de Guaildo y Goudreau en el Contrato para la Operación Gedeon
Las épocas en que Washington podía eliminar a gente que molestaba o incluso remover gobiernos sin ser puesto en evidencia ante la opinión pública (gracias al ocultamiento de los medios), se han terminado. Ello no significa que no lo sigan haciendo, solo han cambiado las formas y los medios de como lograrlo. Fue la invasión de Iraq de 2003, la bisagra sobre de cómo hacer frente a una guerra asimétrica e impopular sin pagar costos políticos.

Igualmente y aunque Washington subcontrató todo tipo de servicios para dicho fin, en especial los vinculados a la ejecución de operaciones sucias (Terrorismo, secuestros, asesinatos y desapariciones) que dirigía la CIA (con la discreta cooperación del MI-6 y el Mossad) y sus colegas de la inteligencia militar, no lograron ganar la guerra.  

Lo que si lograron fue perfeccionar sus tácticas para llevar adelante  programas de “Contrainsurgencia”[5] y el terror controlado contra una población ocupada, tal como ya lo venían ensayando desde hacía décadas los israelíes.

Dentro de este siniestro programa diseñado por el General David Petraeus[6], estuvieron implicados entre otros recursos, la funcionalidad de grupos privados de seguridad (BLACKWATER; Xe y otras), quienes –junto a otros grupos irregulares- fueron elementos tácticos centrales para tratar de contrarestar a la resistencia a la ocupación. Fue durante su comandancia entre 2007 a 2008 que hizo su aparición el Islamic State of Iraq (ISI) un embuste –que formaba parte de La Base[7]- que vino a reemplazar al desarticulado “Al Qaeda-Iraq” que se focalizaba más en asesinar a iraquíes que a combatir los invasores. Fue así que cuando los mismos iraquíes comenzaron a masificar su absoluta incredulidad sobre la veracidad de esta organización, se produjo la conveniente eliminación de ésta franquicia mediante el certero asesinato del misterioso jordano Abu Muzab Al Zarqawi en 2006.

Una estrategia similar ha estado tratándose de implementar con poco éxito para Venezuela. Tal como lo filtraron algunas fuentes, Guaildo y su gente celebraron un contrato con la empresa de seguridad privada “SILVERCORP” que emplea mercenarios estadounidenses entre los cuales, muy seguramente hay agentes de la CIA que sirven de intermediarios para coordinar las operaciones con las políticas de Washington.  

El precio a pagar por esta contratación se fijo con un porcentaje de la explotación petrolera que se concretaría una vez que, eliminado Maduro, Guaildo tomase el poder ¿No se parece a lo que ocurrio con Iraq en 2003?
La dimensión de lo que se pretendían ejecutar, demostró que la empresa revestía una importancia tal que hacía necesario el involucramiento directo de importantes empresarios de SILVERCORP y fue por ello que se algunos de sus más importantes miembros siguieran de cerca la operación.

Quien se puso a la cabeza de las operaciones de esta empresa criminal fue nada menos que su CEO Jordan Goudreau, un ex miembro de los “Boinas Verdes” estadounidenses quien (además de estar buscado por tráfico de armas en EEUU) en uno de los videos incautados aparece hablando junto a Juan José Rendón quien se presento como el representante del “Alto Comisionado para Asuntos Estratégicos y Crisis” del grupo de Guaildo. En el mismo documento aseguran haber dado comienzo a la operación Gedeon.

Las gestiones para concretar esta intentona viene desde hace al menos un año, cuando Guaildo y un puñado de miltares venezolanos disidentes, junto a los medios informativos y periodistas alineados a Washington, fracasaron en su intento de manipular a la población venezolana difundiendo un falso apoyo de las FFAA para sacar al presidente Maduro. Unos meses después de ese fracaso, contactaron a Goudreau quien puso a disposición su empresa para entrenar a venezolanos en campamentos secretos en Colombia.

Entre los mercenarios provistos por SILVERCORP se encontranan ex miembros de las fuerzas especiales “Delta”, “Rangers” y “Boinas Verdes”, algunos de ellos incluso trabajaron de guardaespaldas en la Casa Blanca para Donald Trump dejando en evidencia hasta donde llegan las implicancias del gobierno estadounidense. Para tratar de frenar este escándalo ya han comenzado a descalificar al mismo Jordan Goudreau asegurando que sufriría de una “incapacidad total” producto de heridas en combate.

Si usted cree que  SILVERCOPRP y Guaildo actuaron solos, usted peca de crédulo. Más allá de que Trump, el Departamento de Estado y el Departamento de Defensa han negado su injerencia, muchos no terminan por creerlo. Incluso algunos no dudarían en señalar a la CIA como uno de los principales implicados en respaldar estas operaciones, pero en realidad hay otras agencias extranjeras implicadas detrás de la especialista en golpes de estado. Tal como lo delata el nombre de la operación, la injerencia israelí se vislumbra detrás de varios elementos y pistas que se han incautado.

Solo hay que ver como evolucionaran los acontecimientos para sacar conclusiones certeras sobre hasta donde llegan las implicancias de Washington y de sus socios


[1] Project for the New American Century o PNAC fundado por Robert kagan y William Kristol
[2] Guardia Nacional Bolivariana
[3] Es un término hebreo, un nombre de “Varón” vinculado a los guerreros que aparece en el Libro de Jueces de La Biblia.
[4] Este grupo fue uno de los implicados en el entrenamiento de grupos irregulares en Iraq destinados a la Contrainsurgencia.
[5] El uso de este término no era al azar ya que se trataba de justificar la instauración del gobierno Provisional de Paul Bremer y al mismo tiempo contrarestar el uso de “resistencia” que describía la posición de EEUU y sus aliados como invasores.
[6] Considerado como uno de los mejores Generales de EEUU, fue nombrado commo Jefe Director de la CIA en 2011
[7] La Base en árabe “Al Qaeda” era un programa creado por la CIA en 1979 que recluto agentes árabes sauditas para iniciar tareas de inurgencia dentro de Afganistán.

lunes, 4 de mayo de 2020


“FLATTENED ECONOMY"
Who will pay the costs of the economic breakdown?



By Charles H. Slim
It goes without saying that after you get out of this state of "isolation" that has destroyed the production systems of most countries on earth, there will come a black and more conflictive time in which the strongest and most Pressure resources will be able to impose their conditions (including total control) to try to revive their own economies without scruple of having to satiate themselves with the natural and strategic resources of other countries.

The North American case is from a book. No one can deny that in the last thirty years up to this part, the US as a nation state and in association with private corporations from various fields of the economy (Defense, Oil, Construction, Services, etc.) have fattened their profits and monopolized resources energy from third countries due to brutal armed interventions against their sovereignties and the consequent result of misery, instability and death of the intervened settlers.

Although his "Think Tanks" make laudable argumentative efforts to try to revive some of the old glories of American politics, his own miseries are so many that they cover those attempts. It should not be forgotten that neither Democrats nor Republicans have given the world something with nothing in return. The Americans did not free Europe from the "Nazi threat" alone. Nor did they help the Europeans to rebuild their cities without a juicy and even usurious consideration (Marshall Plan) and the claim that they "defeated Communism" is also highly debatable, that is false. Closer in time, its invasions based on fraudulent information were not motivated by "spreading democracy" or "freeing the peoples from the threat of terrorism"; just go to those places and see what they have left.

That is why in the current crisis, the US will not do anything if there is no reward behind that serves to try to reactivate the catastrophic economic-financial situation that lies behind the pandemic.

While governments subordinate to the directives of this other government of virologists and epidemiologists who perpetuate the crisis with their reports of panic, the centers of power prepare their structures (especially the AI) to change the paradigm of social life, free movement of citizens, long-distance travel and production that is framed by a gigantic, extensive and sophisticated control system.

Now, in the midst of this gigantic health crisis that is causing human casualties in its own territory as no war has ever done before and destroying its production and trade system like no enemy bombardment has ever done within borders, what do you think will happen when bureaucrats in Washington need more resources to rebuild their already fictitious economy that has stopped more than 25 million workers? Are Trump and his supporters within the Establishment planning a new war?

Michigan armed people
The miniature example of what will happen has already been seen in the state of Michigan, where hundreds of men and women armed with semi-automatic assault rifles (of all calibers and brands) took the state legislature demanding that the quarantine be lifted. prevents working. For Donald Trump it was about "good people who love their country"; for the critics of these expressions, "one more sample of what the US has inside its own house." For those who do not know. White supremacist armed gangs and extreme right-wing extremists linked to ultramontane sects have a long and bloody history within the country. Does anyone remember what happened in Oklahoma in 1995? 

iraqis people in Faluja 2004
The images were not far from those we saw in Iraq when the resistance was taking over buildings from the invaders.

This at the same time feeds back the excuses of the argumentators of the need to strengthen internal security with the establishment of programs to intervene invasive communications of privacy, checkpoints of the National Guard and the army so that "the Constitution is respected." Undoubtedly, it is part of the sinister game that the American political institutions have used to the point of exhaustion and that is now emerging within borders.

Despite the massive media terror campaign that is spreading globally -and very particularly in Argentina- many have strongly criticized that the real deaths caused by COVID-19 are not what the media has been spreading.
Even that the statistics shown are manipulated to achieve that effect of fear among the population. One of the critical voices that support these positions comes from the American doctor Annie Bukacek who has bluntly denounced that the figures have been deliberately inflated.

The sanitary measures suggested by the WHO and which have caused the abrupt brake on the global economy pose between choosing "get infected and die from COVID-19" or "lose your job". The dilemma offered by this discourse and which is amplified by the media is certainly misleading and its first intention is to discipline the population masses, even at the cost of their rights.

But the controversy does not come only from adverse political sectors to continue with this hidden state of exception. The reasons for not believing in this "catastrophism" so well amplified by television screens are supported by broad sectors of the scientific and medical field that have obviously been silenced by the Western Establishment.

There is a pleiad of doctors and infectologists who have been ignored and vetoed from the mass media for criticizing and even labeling the measures being taken as "Dangerous and grotesque". The case of Dr. Sucharit Bhakdi, a specialist in microbiology, professor at the Johannes Gutenberg University in Mainz and director of the Institute for Microbiology and Medical Hygiene and one of the most cited research scientists in the history of Germany, has pointed out measures against the COVID-19 as: "grotesque, absurd and very dangerous ... The life expectancy of millions is being shortened," he assured.

Similarly, Dr. Wolgfam Wodarg, a specialist in pulmonology, politician and former president of the Parliamentary Assembly of the Council of Europe, went further and has denounced the avidity of some scientists and laboratories to make money with fear, along with the complacency of sectors of politics.

These testimonies and many others reveal a deliberate creation of this state of terror that guarantees productive immobility, the state of collective suspicion that dissociates relations between people and that will lead to the breakdown of the global economy that at the same time will undoubtedly bring, the establishment of a new Status Quo by the hand of a group of financial powers who will condition the lives of citizens with the implementation of new and extraordinary measures.

In the case of the Southern Cone, some governments have taken extreme paths and have ignored the existence of the Coronavirus causing a massive spread of infections that does not automatically mean the death of the infected person. The case of Brazil is central and despite the fact that President Bolsonaro resisted from the beginning quarantining the entire population (which entailed stopping the country), the pressure of the productive sectors and the same need of the inhabitants of the lower class led for an important part of its population to lean towards supporting the production process as much as possible.

From the media -like the Argentines without knowing that reality- it did not take long to question and blame these resolutions. When Bolsonaro could not be ridiculed further, they passed the crude and direct injury that certainly does not affect the mood of the Rio de Janeiro president, coincidentally and with regard to Argentina, he is on the opposite side of this position. His government has been an attached and self-sacrificing compliance with each of the measures that have come down from the WHO and that are interpreted and mediated by sensationalist doctors and journalists dedicated to maintaining the catastrophic atmosphere that so many rating points give.

The obsequence for these places reaches such a point that the Alberto Fernández government would be monitoring communications and network posts to combat the "fake News", something credible after the installation during the Macri era of listening and interception equipment on Israeli line. Perhaps the real concern is about the abusive and inconsistent policies being seen with the increases in the subsistence allowances of its officials, the creation of more taxes and the imposition of priceless fines for citizens who do not have a job ... what a democracy!

But, if we pay attention to what virologists and dissident experts have pointed out about the policy of a permanent quarantine, it is not understood why policies of a selective quarantine have not been adopted that protect vulnerable subjects (elderly, young people with heart problems, etc. ) and promote the continuity of the production chain that, in addition to supporting the economy, will maintain the mental health of those who are immobilized.

It is clear that the measures suggested by virologists such as Ferguson and that the WHO adopted as an indisputable word, will destroy the economy of many countries and with it, other tragedies will be unleashed that will undoubtedly cause many more deaths and in a cruel way, driven by survival.
Undoubtedly, this is a new chapter of the plan to establish a global Control of the entire population, which under the excuses of this oversized situation, would be much more invaded by the state as it had been tolerating it since 2001 with the argument of the fight against Terrorism.

martes, 28 de abril de 2020


“BEIJING WILL PAY
There appears to be a general US plan to open a judicial front against the Chinese Communist Party (CCP) for alleged responsibility for the current pandemic. Other brilliant ideas of Trump?


By Charles H Slim
In previous weeks we saw how a New York law firm headed by media lawyer Larry Klayman, made noise in the media boasting to file a billion-dollar lawsuit for the alleged malicious spread of the COVID 19 virus (as a biological weapon) against the Communist Party of the People's Republic of China before the stages of the International Criminal Court (ICC).

The argumentative basis to sustain this company is based on the aforementioned "confidential sources" of intelligence (which, as in the case of Iraq, are unverifiable) that ensure that the Coronavirus came from a laboratory outside Wuhan and based on that theory, the neoconservative sectors of Washington speak of the "Wuhan Virus". Likewise, and despite these accusations, the chronology of the events guarantees the correct behavior of China in the fight against this outbreak. Although the plaintiffs purport to argue that China was negligent in failing to contain the virus and that they did not timely inform Washington, the facts demonstrate otherwise.

Beyond the fact that the lawsuit demonstrates the hypocrisy of the American political and judicial system that has customarily refused to accept the jurisdiction and jurisdiction of international courts such as the International Criminal Court itself, we pointed out at that time the partial vision and the weak arguments that Klayman presented in his complaint[1], pretending to victimize the United States for a situation from which he had come -secretly- participating for decades behind the scenes of his citizenship.

These collective initiatives join others filed by the states of Texas, Florida, California and Nevada brought before the federal courts. The chances of success of the four lawsuits filed seem remote due to the existence of the 1976 Foreign Sovereignty Immunity Law that prevents a lawsuit against foreign states from being heard in federal courts.
Despite the legislation that prevents the prosecution of a foreign state in the federal courts without its consent, Klayman and the attorneys general of each state try to open the instance alleging that international Treaties and Conventions have been violated and that the pandemic has its origin in a "terrorist attack".

From what we are seeing at this point, in the face of the failure of trade sanctions and the counterproductive “appearance” of the Coronavirus within the United States, the strategy to try to contain China will from this moment pass through the judicial lanes and for what you see, it will be faced as it has been done with its military campaigns against a hostile country, using a Coalition.

In recent days it has been known that Washington's expectations will be joined by Australia, an accustomed colleague in the dirty business of intervention (backed by liberal internationalism) against other countries that could well be brought before the international stage by an infinity of War crimes and crimes against humanity that he helped to carry out in his participation against Iraq in 2003 and his subsequent tasks during the occupation. Has Sidney contemplated appearing before the International Criminal Court to testify about his participation in the massacres against the Iraqis? Or even how would it proceed if the Baghdad government filed a war crimes and humanity suit before the International Criminal Court?

Joined to this company is the proposal for the lawsuit of the attorney general of the state of Missouri Erick Schmitt, who with the same emphatic tone and with some improvements in the arguments, calls for justice for the supposed and malicious intention of spreading the Coronavirus that, in addition to The contagion of almost a million people and the killing of more than 50,000 Americans has caused the bankruptcy of several companies, unemployment and a possible economic depression.

Just as the current Coronavirus, predecessor CoV agents (are a family of RNA viruses) had been developed and patented by virologists from US biological warfare laboratories, the so-called "Spanish Flu" of 1918 and 1919 was far from originating in the Iberian Peninsula as the media repeat that Plague actually had its origin in Kansas, USA, but Spain did not make any demand.

The current US public internal debt reaches 24 trillion dollars, making it clear that the Federal Reserve has been creating money per meter as if it were toilet paper and many Americans are asking who is supervising this? Well no one. When this is over, the last person interested in investigating thoroughly how the current pandemic occurred and its consequences on the health of the population is the same Donald Trump and his partners behind the dirty business.

On the latter, the White House has been maneuvering against the clock to try to explain to the American public "why" the United States is suffering from the health catastrophe as it is being suffered especially by the most unfortunate sectors of the population. After Trump's delusional advice on how to fight the Coronavirus by taking dangerous treatments with "disinfectant injections" and swallowing ultraviolet light, the Establishment in Washington was urgently faced with some smarter communications strategy. To do this, they are trying to mitigate the president's messages to the public with the direct assistance of White House Communications Director Hope Hicks, who until two years ago worked for none other than FOX emporium.

Baldwin Trump 
Equally and beyond personal talents such as that of Hicks and any team of reporters for consumption by the public, very little can be hidden from the mismanagement of the internal situation, much less serves to try to direct the blame Beijing. Not even Alec Baldwin could have done better by imitating the President's stupidities in his SNL parodies.

Another issue that Trump has not been able to handle and that he would like to blame on the Chinese is the economic and financial consequences that have led to the bankruptcy of thousands of small and medium-sized companies as a result of the closure of commercial imports and exports.

This has caused an avalanche of bailout requests for many companies that may well be on the way, with hundreds of millions of dollars going to private banks, speculative corporations, and speculative business finance capitals in the hands of guys like Sheldon Adelson, Jamie Dimon, Warren Buffet and Goldman Sachs.

Small and medium-sized companies are staying on the road as a result of that "speculative democracy" that identifies the American style where the most powerful tread on the smallest. Very few people criticize this customary maneuver of speculation by the most powerful financial actors who, by creating financial “bubbles”, end up sacrificing those who keep the country's economy alive. In summary, the only ones that will be rescued with those trillions of dollars will be those belonging to that "Plutocracy" that rules from "Wall Street". Some calculations say that the unemployment rate can reach 30%, leaving the depression of 1929 small.

It is clear that this is a new maneuver, a desperate one to cushion the damage control caused by the lousy government measures of President Trump and his person in charge of managing the pandemic, vice ultramontane Mike Pence, who apparently despite his incessant prayers together to the evangelical pastors and rabbis of the pro-Israeli extreme right, they did not succeed in defeating the evil that the "COVID-19" embodies.

Apparently the same World Health Organization (WHO) is also being targeted as President Trump seems to want to hold the organization as a secondary actor, accusing him of not having given in time or delayed clear reports on the origin of the virus. This also aims to cover the omission of the memoranda sent by the trade representatives from China months before the pandemic broke out. For this, Trump has withheld the funds for the organization with which he is applying blackmail tactics similar to those of the mafia; very democratic! don't you think so? A proposal to open a judicial front is supported by the Australian[2] government, which supports the thesis that the WHO delayed the announcement of the spread of the virus as a political favor to Beijin.

We are undoubtedly before a great smokescreen that, using the federal justice system and with the aim of using the international one, Trump and the US Establishment tried to cover the traces that have appeared on the role of the United States in the production of pathogens of War on its vast network of secret military installations around the world. Can you be so candid to believe that Washington is seeking the truth?