UN CONFLICTO ETNOGRAFICO
¿Por qué el conflicto asimétrico entre Israel y los palestinos es
eminentemente político?
Por
Pepe Beru
Lejos de las cámaras de los medios occidentales o más bien, censuradas
por las políticas editoriales notoriamente tendenciosas, las imágenes de
brutalidad de los bombardeos israelíes, aún en vísperas de la navidad
cristiana, no ha logrado rendir a la resistencia árabe palestina que indistintamente
de la confesionalidad de sus miembros, literalmente combate con tenacidad a los
invasores desde debajo de los escombros.
Es ahí
cuando los aviones se han ido, los hombres armados con sus “AK-47” y sus
letales lanzacohetes anti tanque “Yassin 105” salen a cazar a los intrusos que
infructuosamente tratan de cubrirse en sus vehículos blindados, tras sus
tanques “Merkaba” y los esqueletos de edificios que han sido demolidos por sus
bombardeos.
No es una
sorpresa que entre muchos de los efectivos de las FDI hallan extranjeros.
Israel es un estado creado en 1948 por judíos europeos y con una población en
su mayor parte de judíos que nacieron en otros países ¿Qué novedad implicaría
entonces la presencia de estos componentes extranjeros entre los que hoy
combaten en Gaza?
La novedad
o más bien lo que nunca se ha dicho nada en occidente es que muchos musulmanes
y cristianos descendientes de las familias palestinas expulsadas o simplemente
exterminadas durante la “Nakba” o a posterior tras la guerra de 1967, tienen
muchos motivos para hoy acudir a defender a su gente quienes realmente están
amenazados de ser exterminados. Los hechos están a la vista y pese al intento
por distorsionarlos, la gente no es estúpida. Israel no solo priva de agua,
comida, de medicamentos y masacra a los habitantes de Gaza, también ha estado
atentando contra los lugares santos palestinos en Jerusalen tanto musulmanes
como cristianos.
Los medios
en occidente y en particular los argentinos, callan esto. Y es que estos tienen
un acostumbrado prejuicio contra los árabes-palestinos (particularmente contra
el Islam) y han solido ignorarlos cuando hablan de lo que sucede. Tratar de
criminalizar a la resistencia palestina es la estrategia comunicacional más
conocida y extendida que Tel Aviv practica intentando centrar en “Hamas”, todos
los males con alcance global.
Los
expertos israelíes y sus colegas sionistas en desinformación en todo el
hemisferio han tratado siguen tratando de colgarle a “Hamas” el mote de
“terrorismo islámico”, una treta sucia que desde 2001 uso Washington (por medio
de sus programas secretos “Al Qaeda” y el “ISIS”) para avanzar sobre el Oriente
Medio y que Tel Aviv usa como una de sus armas de contrainteligencia.
En lo que
viene ocurriendo en la Franja de Gaza, la cantidad de curiosas anécdotas sobre
la variopinta presencia de combatientes también alcanza al bando palestino. En
momentos que se libraban encarnizadas escaramuzas en “Al-Qasasib” al norte de
Gaza, un combatiente de la facción marxista FPLP de la resistencia palestina
pudo advertir que a pocos metros de donde se hallaban atrincherados escuchaba
voces en un idioma familiar, que no era otro que el español con acento
argentino.
Pero ¿Cómo
se dio cuenta de esto? Porque él también es de origen argentino y hace ya diez
años que vive en Gaza donde tras casarse con una joven musulmana y tener cuatro
hijos, han sufrido junto a todos los gazaties, el horror y el sufrimiento a manos
de la ocupación sionista. Su dolor personal pasa por la pérdida de dos de sus
pequeños hijos tras los bombardeos israelíes en 2022 y fue allí que tomó la
decisión de pasar a la acción. Afortunadamente logró que su mujer, sus dos
hijos y parte de la familia de ella cruzara por Rafah al Sinaí.
Este
argentino que llamaremos “Hernán”, por estos momentos en que nos cuenta su
historia se halla operando junto a una brigada de hombres del FPLP y de “Al
Quds” en el núcleo de Gaza City, impidiendo que los israelíes puedan afincarse
con seguridad. Con su Kaláshnikov “AK-74” en su mano derecha y un “M16” terciado
en su espalda trofeo capturado a las FDI, nos encontramos a resguardo de los
Drones israelíes que peinan Gaza en un zulo subterráneo de algún lugar de “Juhr
Al-Deek” en el centro de la Franja. Allí nos relata cómo ha descubierto una
cantidad importante de “mercenarios” argentinos que están operando para Israel.
Sobre esto
nos comenta diciendo “Podemos verlos sin que ellos nos vean y a veces estamos
tan cerca que ni se lo imaginan. No todos son mercenarios. Hay otros que llevan
el uniforme oficial y el armamento de las FDI es decir, esos son jóvenes judíos
que seguramente se enrolaron en Buenos Aires como voluntarios y de allí los
enviaron. Los mercenarios incluso no todos son judíos y es posible que la
mayoría sean ex miembros de alguna fuerza militar”. Ante la diferenciación que
hizo le pregunte ¿Qué diferencia visible hay entre ambos grupos? A lo que
respondió “Los mercenarios tienen otros equipos, usan armas propias y usan
otros uniformes e incluso sus movimientos son más independientes. También la
edad los diferencia. Los mercenarios tienen entre 30 y 40 años o incluso más. Pero
ambos, los mercenarios y los FDI están disparando y matando a los civiles sin
contemplaciones”.
En un
momento habla de las tácticas que están usando los israelíes diciendo “Estos cobardes
cuando hallan una boca de túnel o un pasadizo suelen enviar perros adiestrados
con cámaras o explosivos los cuales anulamos exitosamente”.
Sacando a
los mercenarios que van por el dinero, los soldados judíos reclutados en Argentina
(y en todo Sudamérica) y los combatientes árabes y aquellos que tienen la
sangre de los palestinos desarraigados por la ocupación sionista, está poniendo
sobre la mesa una realidad que tal vez los estrategas israelíes y sus ideólogos
en occidente no han contemplado y ella es la etnicidad que ha tomado el
conflicto y por lo que parece, se irá profundizando con el paso del tiempo.
Israel y
sus partidarios han hecho de la colonización un arma demográfica para ir
apropiándose de territorios palestinos. Los Kibutz del sur y los asentamientos linderos
a Gaza fueron antes terrenos palestinos en donde hubo aldeas y poblados que
fueron robados por los sionistas con lo cual ¿Qué soberanía puede clamar Tel
Aviv? Ahora el mundo es testigo como Netanyahu y sus partidarios está tratando
de sumar a esa política, la de la erradicación física de la población árabe
para reemplazarla con nuevas hordas de colonos que no son otra cosa que peones
de la política sionista.
No solo los
sionistas que el estado de Israel y Washington puedan reclutar van a entrar a
combatir por apropiarse de Gaza, también los árabes y descendientes de aquellos
palestinos, refugiados en otras latitudes que sienten el llamado de la sangre lo
harán para evitar una segunda catástrofe (Nakba) ante un peligro cierto e
inminente, que con los más de 26.000 civiles palestinos asesinados no es otro
que la exterminación de la población palestina.