ACCIONES BAJO CUBIERTA

La oleada de ataques y sabotajes a depósitos y vías de transporte de armas para Kiev en países de Europa del este ¿Son el inicio de una oleada más extensa que pueden incluso llegar a EEUU?

 

Por Javier B. Dal

Ataques y sabotajes contra almacenes, convoyes y edificios con armas de la OTAN se han registrado en Bulgaria, Rumania y Polonia. Estos extraños episodios que ya venían sucediendo de forma dispersa en el interior de Ucrania y en regiones limítrofes de estos países, comenzaron a ser mucho más graves desde el 15 de agosto. Los incendios causados con explosivos improvisados han causado pérdidas millonarias en equipos militares como Drones, miras y pertrechos destinados a Kiev.

Quienes sean los saboteadores, saben muy bien lo que hacen ya que en cada uno de estos episodios han destruido equipamiento por una decena de millones de dólares.

La particularidad de estos hechos puede verse con la audacia de cómo se llevaron a cabo ya que cada una de las instalaciones atacadas, tenían vigilancia.

En Polonia incluso se registraron acciones aún más osadas. Grupos de partisanos atacaron convoyes de camiones en momentos que transportaban armas y equipos de la OTAN a una base polaca. Fuentes reservadas han informado que en esta operación los atacantes emboscaron a los transportes con apoyo de fuego semiautomático, demostrando una organización y planificación muy bien ensayada. Sobre esto ningún medio en occidente y mucho menos en Argentina, se ha pronunciado.

Las especulaciones sobre sus autores son varias. Según los servicios de inteligencia de Bulgaria, Rumania y Polonia sospechan de posibles células de ucranianos disidentes pro-rusos o incluso, de grupos profesionales del GRU ruso, aunque esto último sería muy riesgoso para Moscú. Una que a pocos se les pasa por la cabeza es que alguna de estas operaciones haya sido orquestada por la propia inteligencia occidental siguiendo un propósito mayor como sería, descubrir una red de saboteadores rusos operando dentro de la zona bajo control de la OTAN.

Ninguna tesis puede ser descartada, lo que si esta claro es que fuere quienes sean los autores, le están devolviendo a Washington DC y a Bruselas, con la misma moneda. Así y cuando con total descaro se atrevieron a volar los gasoductos del Báltico o el puente de Kerch para luego hacerse los desentendidos con comunicados cínicos ¿Por qué los rusos no van a hacer lo mismo?

En el mismo sentido Rusia también se puede justificar tras corroborarse que hay empresas privadas PMC estadounidenses operando de forma directa con personal y equipo en Kursk, algo que coloca oficialmente a Washington en la categoría de agresor. A propósito de todo esto y sobre estatus de estos tipos que operan veladamente para el gobierno, además que no serán reconocidos si caen en desgracia, serán directamente eliminados ya que legalmente no son combatientes.

Como sea, para Washington DC esto es un verdadero problema que intentan tapar ante la opinión pública. Ocultarlos de la difusión de los medios y en especial de aquellos que les sirven de amplificadores es crucial. Pero incluso, con este silencio mediático no pueden disfrazar la realidad de lo que viene ocurriendo en la región. Estos ataques no son nuevos. Ya desde hace tiempo que se venían registrando actos de sabotaje a puntos de asistencia militar destinada a Kiev en estos países y en especial en Bulgaria.

A partir de la masificación de estos actos sobre otros territorios de sus aliados atlantistas y en los cuales opera la CIA y sus correspondientes delegados locales, los burócratas en Washington y también en Londres sin dudas comenzaran a caer en cuentas que ha llegado el momento de pagar con creces por los ataques terroristas y asesinatos que ellos mismo llevaron a cabo y continúan llevando a cabo en territorio ruso.

A todo esto tampoco debemos dejar de lado las costosas pérdidas que los ataques que Rusia realiza con sus misiles Khinzal y Kalbir contra depósitos con armamento de la OTAN y las redes ferroviarias en Ucrania. En las últimas horas la región de Sumy fronteriza con Kursk ha estado sometida a devastadores y precisos bombardeos dirigidos sobre concentración de tropas y vehículos acorazados que conforman la retaguardia de los asaltantes en Kursk.

Sobre esto último y sacando la propaganda radiada desde Kiev y el ficcionado triunfalismo desde los medios angloestadounidenses, está siendo un motivo de seria preocupación para los estrategas atlantistas quienes aparentemente confiaban en poder afianzarse en el terreno y sostener rutas de abastecimiento desde Sumy. Con los últimos destructivos ataques con misiles hipersónicos (imposible de interceptar) y Drones kamikaze contra los sistemas HIMARS, los lanzadores múltiples de origen estadounidense y los STORM-SHADOW británicos, la OTAN estaría considerando que tan importante puede ser apoyar esta incursión mientras las fuerzas rusas avanzan rápidamente desde el este.  

Tal vez estas acciones se limiten a estos países de la periferia de Ucrania, tal vez se vayan extendiendo a Europa occidental donde la OTAN y en particular EEUU tiene sus más importantes activos estratégicos. Si los jerarcas angloestadounidenses insisten en seguir jugando a quien se aparta primero del camino, tal vez luego deban lamentar más y costosas pérdidas. Alemania e Italia son dos importantes puntos desde donde los estadounidenses mueven sus piezas con lo cual ¿Qué sucedería si esos lugares dejan de ser seguros para sus fines?