jueves, 23 de junio de 2016

EN LA MIRA



“PROMESAS DE MAS CAOS”

Cómo el supuesto cambio de gobierno en Washington no lo será tanto



Por Charles H. Slim
La frustración y el odio acumulado en los sectores más recalcitrantes del sionismo y el neocon en EEUU por el fracaso de Obama por destruir a Siria, está reorientándose a fortalecer con el mayor entusiasmo,  a la única figura política que puede asegurar una intervención militar más amplia y directa contra el país árabe y ella es la senadora Hillary Clinton. Sin dudas la candidata avenida en impulsora de los derechos de las lesbianas y otras organizaciones gay estadounidenses, tiene –contrariamente a lo esperado- las mejores calificaciones para aspirar a la Casa Blanca, es decir, cuenta con el apoyo serio de las principales organizaciones y Lobbies judío-americanos que conocen muy bien hasta donde puede ir la senadora neoyorquina.

Suena muy extraño y hasta disonante, que organizaciones tan reaccionarias como ligadas al conservadurismo estadounidense, presten tan buena acogida a la ex secretario de estado que aprovecho ese puesto, entre otras cuestiones, para dar impulso a nivel internacional al reconocimiento de los derechos de la comunidad LGTB para buscar en otros países, la colaboración de estos sectores y de esa manera, con la ONU como telón de fondo, usarlos para fines que solo importaran a fin de cuentas a los intereses de  Washington. Sino recordemos lo que causó en aquel frío y calculador conservador político como Dick Cheney quien no pestaño un segundo en consentir las masacres más infames y las torturas más siniestras contra miles de personas,  se vio abochornado cuando se hizo público el lesbianismo de su hija. Para éste claro exponente de los “Halcones” que no falta un domingo a misa, es más importante el qué dirán que otra cosa.

Estos son los elementos que maneja la elite estadounidense y en especial los llamados “Halcones liberales” para reimpulsar sus operaciones contra Siria y reactivar los planes conjuntos con Israel para lanzar una campaña militar devastadora contra Irán que será el preludio de una nueva etapa del intervencionismo exterior. Sobre esto último hay que señalar, que apenas unos días atrás, el servicio de inteligencia iraní desmanteló una supuesta red del “ISIS” dentro del país que se preparaba para realizar varios atentados.  En el pasado cercano las autoridades iraníes habían logrado desmantelar redes de saboteadores y asesinos pagados por el Mossad israelí por lo que no sería de extrañar que esto responda al mismo origen.

Por lo pronto se están haciendo los arreglos internos y mientras la parodia de Donald Trump sigue rodando en los medios, ya se sabe en los más influyentes círculos políticos y militares de Washington que la próxima presidente será sin dudas Hillary Clinton. Por lo pronto el gobierno saliente sigue “haciendo como” y aparentando que lucha contra el “Daesh” y sus extensiones sirias, que presionadas por las operaciones de Rusia, penden de un hilo para no ser exterminadas.

Este es uno de los temas preponderantes por los que Hillary Clinton debe ganar ya que, para éstos  “Halcones” en los que se agrupan demócratas, republicanos y los Lobbies sionistas, se hallan interesados por beneficiar el expansionismo de Israel a costa del caos en Siria e Iraq que entre otros beneficios traerá una bonanza para la Corporación de la Industria Armamentística estadounidense en la que muchos israelíes participan con grandes beneficios.

Antes de que se desarrollen las “elecciones”  y se conozcan públicamente las políticas de la nueva mandataria, se están llevando a cabo los preparativos que desde hace mucho se hallan planificados por los conocidos “Think Tanks”  que además de planificar políticas en las más diversas áreas del gobierno, han fijado estrategias clave para extender la guerra y enfocarla sobre el gobierno sirio. Simplemente, todo está arreglado de antemano.

Así de simple y siniestra es la fórmula de trabajo del Departamento de Estado y de las agencias federales norteamericanas demostrando, que además de que personalizar los fracasos y crímenes en funcionarios políticos como Bush, Rumsfeld o militares como Petreaus o Rodríguez o los jefes de las decenas de agencias federales de inteligencia es un embuste que busca tapar una estructura criminal de agresión y sometimiento por lo cual,    no hay nada nuevo bajo el sol.

Hillary Clinton es la esperanza para estos sectores siniestros, que además de pretender dar el tiro de gracia contra Siria, buscaran  ejecutar la tan anhelada operación militar contra Irán la cual ven urgente ante los evidentes cambios políticos que se vienen dando dentro del país chiita y que parecen marcar el regreso de Ahmadinejad junto a una política de desconfianza hacia occidente.  Sobre esto y tan solo hace horas de que se escribía este artículo,  se conocía como unidades especiales de varios países de la OTAN –que vienen entrenando a los yihadistas en Jordania-, se preparaban para entrar a Siria no para ayudar al gobierno, sino para derrocarlo.

Asimismo y al mismo tiempo en los EEUU hay una profunda división entre los que se han hartado de los políticos tradicionales como lo es Hillary Clinton y los que les apoyan por el simple hecho de que son una garantía para sus negocios. Los primeros se hallan representados por el “populismo” de un excéntrico como es el millonario Trump, quien a pesar de sus estridencias es un salvaje escupidor de algunas verdades que además de dolorosas, son políticamente incorrectas.

Hillary Clinton, mucho más veterana en las lides de la política y conocedora del arte del embuste verbal, es el candidato, a la vista de los poderes que manejan la política profunda de los Estados Unidos,  más razonable y preparada para encarar el nuevo mapa geopolítico que sin lugar a dudas promete más conflictos y un seguro choque militar con Rusia y China que se ve muy probable con las maniobras provocativas de la flota de la OTAN en el Mar Negro, en el Báltico y en el Mar Meridional de la China.

Estas predicciones de caos vienen acompañadas por una pésima situación económica interna que no pudo ser conjurada por las medidas de Obama (v. Red Voltaire.org. “La economía de Estados Unidos no logra salir del bache”. http://www.voltairenet.org/article192482.html ), que según algunos analistas además de poder acrecentar las tendencias recesivas, hacen necesario una guerra para poner en marcha el progreso a costa del negocio armamentista que seguramente se cobrará con  la muerte de varios cientos de miles de inocentes en todo el globo.

Si esto se materializa, obviamente no pude haber un personaje como Trump en el salón Oval ya que se trata de un negocio riesgoso que requiere de la frialdad  y la astucia de un espécimen como Clinton aunque además es cierto de aclarar, que cuenta con el apoyo vital de los poderosos lobbies sionistas que operan en el Congreso.

Pero que tenemos del otro lado; allí  está una  abogada neoyorkina, ex  primera dama y ex funcionaria como Hillary Clinton que sin dudas, ha demostrado su tenebrosa inteligencia en acción. A pesar que la propaganda mediática ha popularizado por todos los medios como que los demócratas son los suaves de la política estadounidense, los que se preocupan por los derechos humanos y velan para que allí donde haya arbitrariedades contra la vida de los pueblos, allí estaría el desinteresado demócrata, eso ha quedado evidenciado que es tan falso como la inocencia de la aspirante a la Casa Blanca.  

La señora Hillary Clinton es tan o más nefasta que el tonto de Trump, que a su lado es eso, un simple tonto y un principiante en el arte de jugar sucio. A pesar que arrastra desde hace varios años las sospechas de haber ordenado el asesinato de un potencial testigo de los negociados que llevaba su marido Bill en la gobernación de Arkansas que se vinculaban a muy sucios negocios y de los asuntos sucios en Libia, parece tener las espaldas cubiertas por fuertes influencias.

Ha sido una muy continua aduladora del estado de Israel y del movimiento sionista, arrancando de sus partidarios jugosos apoyos económicos para su campaña electoral. Como suele decir el dicho, basta esperar el paso del tiempo para ver lo que hay bajo la superficie. Y eso es lo que se puede ver de Hillary, quien tras ocupar la Secretaría de Estado por designación de su par Obama entre 2009 a 2013,  dejo un extenso prontuario delictivo que –si actúa la justicia- debería bajarse de la candidatura con sus manos esposadas.

Sin dudas que su máscara se cayó tras su incursión en el asunto de Libia en los que cuestiones negras sobre contactos con elementos de la CIA que a su vez organizaban a grupos de “Al Qaeda” contra las autoridades libias y el asesinato del embajador estadounidense en Bengazi en 2012 que habría estado ligado a las operaciones negras que ella estaba al corriente. Tras haberse interceptado los mensajes de su correo electrónico que demostraba estas sucias implicancias que salpican al mismo gobierno de Barak Obama , la señora senadora por el estado de New York ha venido esquivando con muy buena suerte, los obstáculos de la administración de justicia que, a la vista de los graves cargos que penden sobre ella (“Red Voltaire.org. “¿Quién protege a Hillary Clinton?”  http://www.voltairenet.org/article192237.html) hace tiempo debería estar entre rejas.

Solo para ilustrar sobre la gravedad de los cargos que penden sobre la señora senadora, nombramos solo algunos como, la obstrucción a la justicia que viola la Sección 1410 y la Obstrucción al desarrollo de las investigaciones criminales que viola la Sección 1511, que claramente se ven operados por el ejercicio indebido de presiones y de influencias políticas en los círculos más oscuros del poder estadounidense.  Otros cargos como la negligencia con información y documentos clasificados que violan la Sección 1924 y el Perjurio tras haber declarado falsamente ante un juez federal  haber cumplido con obligaciones que en realidad no había cumplido, lo que viola la Sección 798 del Código estadounidense. 

Muchos en Estados Unidos están sospechando que a Hillary le están dando una muy buena mano para que el largo brazo de la ley no la alcance pero, son varios los políticos honestos y organizaciones civiles que velan por la transparencia de los actos de gobierno que están detrás para que los amigos que se cubren en la oscuridad del poder, no consigan la impunidad de una criminal de guante blanco.


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